Migración
Barcos desobedientes, discursos beligerantes y continuidad en las políticas migratorias

La rebelión de las ONG de salvamento en el mar marca una última etapa en el afianzamiento del Mediterráneo como una necrofrontera. Mientras, en la reconfiguración de la Unión Europea, nada parece augurar un cambio en las políticas migratorias. 

Rescate Mediterráneo 5
Rescatados desembarcando en el puerto siciliano. Olmo Calvo
6 jul 2019 06:30

El jueves 4 de julio la red internacional de vigilancia en el Mediterráneo, Alarm Phone, alertaba del naufragio, el día anterior, de un barco cerca de Zarzis, en Túnez. La organización reproducía el aviso de uno de sus integrantes, voluntario de la Media Luna Roja en el país magrebí: cinco supervivientes habrían sido rescatados por la marina tunecina, mientras el resto del pasaje, más de 80 personas, habría desaparecido en el mar. “¡Europa y sus fronteras matan!”, cerraba Alarm Phone su comunicado en twitter.

Más suerte tuvieron las 54 personas que el buque Alex, perteneciente a la organización italiana Mediterranea Saving Humans, rescató ese mismo día. El barco se dirigió hacia aguas italianas a pesar de que que Matteo Salvini hiciera la advertencia de rigor en sus redes sociales: conminando al barco de la organización  —cuyo primer buque, el Mare Joniolleva retenido desde abril aludiendo razones técnicas— a llevar a las personas migrantes a Túnez. Los integrantes de Mediterranea Saving Humans son llamados peyorativamente por la derecha italiana “Piratas de los centros sociales” por su relación con los movimientos.También fue publicado el jueves un informe trimestral de Alarm Phone que daba cuenta de los incidentes registrados por esta red, que integra activistas al norte y sur del Mediterráneo. Según sus datos, entre el 18 de marzo y el 30 de junio, la organización habría hecho seguimiento de 24 barcos en dificultades en el Mediterráneo Central. De ellos, nueve fueron devueltos a Libia, siete dirigidos a Malta, y cuatro a Italia. Túnez habría interceptado a uno. De otros tres no se tienen noticias.
Pese a las hostilidades de los gobiernos europeos hacia su actividad, las ONG de salvamento continúan presentes en lo que se conoce como zona SAR
Como demostró Mediterranea Saving Humans el jueves y antes que ellos el Sea Watch 3, el análisis de Alarm Phone concluye que, pese a las hostilidades de los gobiernos europeos hacia su actividad, las ONG de salvamento continúan presentes en lo que se conoce como zona SAR (zona de salvamento y rescate) de Libia. Mientras, Europa centra sus esfuerzos de vigilancia en impedir que los migrantes salgan de las aguas libias. A través de la operación militar Eunavfor Med/Sophia, aviones europeos sobrevuelan el Mediterráneo con la misión de comunicar a las naves libias la ubicación de los barcos y garantizar que estos sean devueltos al territorio de este país.El pasado miércoles un bombardeo acababa con la vida de al menos 44 migrantes en el centro de detención de Tajura, cerca de Trípoli, en lo que la ONU ha calificado como un posible crimen de guerra. El país ha visto recrudecido el conflicto que enfrenta al gobierno de Fayez Al-Sarraj —reconocido por la Comunidad Internacional— con las tropas del Ejército Nacional Libio-LNA, mano armada de Khalifa Haftar, el ex coronel del ejército Libio de Muamar el Gadafi que controla de facto el Este del país y desde abril mantiene una ofensiva contra Trípoli.

Las organizaciones de derechos humanos llevan desde entonces insistiendo en el peligro que el conflicto implica para las personas migrantes internadas en los centros de detención. La Comisión Europea comunicó el mismo miércoles, mediante nota de prensa, que destinaría 61,5 millones de euros al Fondo Europeo de Emergencia para África, comprometiéndose de esta manera a financiar “nuevas acciones relativas a la migración para proteger a las personas vulnerables y potenciar la resiliencia de las comunidades de acogida en el Norte de África”.

Libia
No se trata de llegar a Europa sino de escapar de Libia

El 3 de abril el buque Alan Kurdi rescataba 64 personas 20 millas norte de la costa de Libia. La autora de este artículo estaba en ese barco. Esta es una reconstrucción de la situación en Libia basada en los testimonios de las personas rescatadas.

Mientras el dinero de la Unión Europea fluye hacia la externalización de las fronteras los barcos de rescate no consideran Libia un puerto seguro. Por ello Carola Rackete desobedeció el pasado 12 de junio a los guardacostas libios cuando le indicaron retornar a ese país, dirigiéndose hacia Lampedusa. Allí esperó 17 días el permiso para atracar en Italia, hasta que al final, el 29 de junio, decidió desobedecer.

Insurrección en el mar, continuidad en las políticas

Durante esta primera semana de julio, de hecho, las portadas de los medios han sido tomadas por la historia de esta joven capitana de 31 años, detenida cuando llegó a la isla italiana. Las redes sociales se llenaron con mensajes que exigían su liberación, algo que sucedió tres días después, pues la jueza de Agrigento que debía valorar el arresto de esta ciudadana alemana, desestimó los cargos de resistencia y violencia contra una nave de guerra, argumentando que Rackete había actuado correctamente priorizando los derechos humanos de las personas rescatadas.

El relato de rescate, desobediencia y llegada a puerto seguro, convirtió a Rackete en un símbolo frente a otro símbolo: el de los puertos cerrados como política migratoria que encarna el ministro de interior italiano Matteo Salvini. Si del lado de Rackete se ha escorado una buena parte de la opinión pública —apoyos concretados no solo en la oleada de simpatía sino en la aportación de casi un millón de euros, recaudados a través de las redes sociales, para su defensa legal—, los insultos proferidos contra su persona en el momento de su detención, y la necesidad de esconderse tras su liberación por las amenazas recibidas, dan cuenta, sin embargo, de que muchos italianos están en el lado de Salvini. La Lega fue respaldada en las pasadas elecciones europeas con un 34,3% de los votos, siendo el partido más votado a pesar (o quizás, gracias) a su política migratoria y su retórica beligerante. 

Frontera sur
“Espero que te violen”: racismo y misoginia tras el arresto de Carola

El arresto de la capitana del Sea Watch 3 se producía entre abucheos machistas, xenófobos y racistas como “espero que te violen cuatro negros”, “gitana”, “primero los italianos”, “ponedle las esposas”. Cabe preguntarnos de dónde surge este odio.

Así, en esta pugna, se escenificaban dos discursos que se enfrentan en una Europa cuya política migratoria ha profundizado en los últimos años en la externalización de las fronteras, mientras se refuerza en el plano ideológico el relato de la falta de lugar para nuevas personas migrantes. Lo primero se ha materializado en acuerdos bilaterales como el acuerdo con Turquía firmado en marzo de 2016, o en el crecimiento exponencial de los recursos dedicados a la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex). A este respecto, la Comisión Europea publicaba a principios de junio sus presupuestos para 2020 en los que reservaba 420,6 millones de euros para Frontex. Un 34,6 % más que 2019.Respecto al ámbito de a ideología, va aparejado con el auge de la derecha nacionalista, cada vez con más presencia en las instituciones europeas. Sin ir más lejos, en las elecciones europeas del pasado 26 de mayo ascendieron los liderazgos nacionalistas conocidos por su retórica antinmigración. Además forman parte de tres grupos distintos de los que integran el nuevo Parlamento Europeo.Fidesz, del húngaro Víktor Orban, estaría en el grupo de los populares europeos, y en espacios de mayor homogeneidad ideológica estarían el grupo Identidad y Democracia, donde se encuentran los pesos pesados de la Lega de Salvini y la Agrupación Nacional de Marine Le Pen, junto con Alternativa por Alemania. Por último, se debe anotar la presencia del grupo de Conservadores y Reformistas europeos, con un peso particular del polaco Ley y Justicia, pero donde también están Vox, Hermanos de Italia o los Demócratas de Suecia.
A pesar de que los resultados de la extrema derecha estuvieran por debajo de sus altas expectativas, su capacidad de normalizar discursos anti-inmigración acaba por definir las políticas
Si bien, tras las elecciones europeas se habló de cierto alivio por los resultados de la extrema derecha (por debajo de sus altas expectativas), su capacidad de marcar línea política y normalizar discursos anti inmigración tiene peso en las políticas migratorias. Otra muestra simbólica de ello: si apenas llegado al gobierno Pedro Sánchez se enfrentó a Salvini, permitiendo que el Aquarius llegara a aguas españolas, un año después, y según denunciaban integrantes de la ONG Open Arms, el presidente amenazaba a su barco de rescate con 900.000 euros de multa. Culminaba así un semestre de tensión en el que el gobierno ha forzado a los barcos a la inoperancia, reteniéndoles en puerto. Una política migratoria que poco difiere a la de Salvini en la práctica.El flamante presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, miembro del Partido Democrático italiano, ha sido presentado, de hecho, como contrapunto de Salvini. El partido del que proviene Sassoli tiene sin embargo en su haber la ley Minitti-Orlando de 2017 por la que se multiplicaban los centros de detención de inmigrantes y se aceleraban las expulsiones, razones por las cuales la iniciativa fue duramente criticada por las organizaciones de derechos humanos italianas. En el discurso tras su asignación al cargo, Sassoli apuntaba a una revisión del Reglamento de Dublín y una mayor solidaridad y coordinación entre estados. Pronunciado el pasado 3 de julio, la crisis humanitaria del Mediterráneo estuvo ausente de su intervención. Quien sí tuvo palabras para los barcos de rescate, apostando porque el Parlamento Europeo diese cobertura legal a quienes están siendo perseguidos judicialmente por “salvar vidas”, fue la candidata a la presidencia de la Eurocámara, Sira Rego, de Unidas Podemos, dentro del grupo de la Izquierda Unitaria Europea (GUE-NGL), quien denunció “la justificación de las violaciones de los derechos humanos tras un argumento de seguridad tramposo”. Que este grupo minoritario —el quinto de la Eurocámara— se quedase en 38 escaños, perdiendo 14 respecto a las elecciones de 2014, da cuenta del lugar marginal al que se ha relegado este tipo de discursos en el ámbito comunitario.Precisamente, más allá del enfrentamiento con Matteo Salvini, Óscar Camps —fundador de la organización Open Arms que también decidió volver a sus labores de rescate aún sin contar con permiso para ello— afirmaba el pasado sábado 29 de junio durante una entrevista para la Cadena Ser: “La complicidad pasiva de los presidentes de los 28 gobiernos de la Unión Europea no ha dejado otra alternativa”.
Fronteras
Neoliberalismo y migración: una visión desde África

Entre 2010 y 2017, la migración de África a la UE aumentó un 7%. En el mismo período el crecimiento de los inmigrantes europeos en África ha aumentado en un 19%. Y sin embargo, no hemos visto a los africanos quejarse de la migración europea.

A los tribunales

No todas las organizaciones de rescate han optado por la desobediencia: Salvamento Marítimo Humanitario, organización de la cual depende el bloqueado buque Aita Mari, anunciaba a principios de semana que no optaría por la desobediencia sino por denunciar judicialmente a quienes impidan que puedan sumarse a las labores de salvamento humanitario. El martes 2 de julio, en el Tribunal Europeo de Justicia, el Frontex se sentaba en el banquillo por primera vez para afrontar la acusación por falta de transparencia por parte de dos activistas. Solo un mes antes, el 3 de junio, un grupo de abogados denunciaba a la Unión Europea ante la Corte Penal Internacional (CPI) por sus políticas migratorias en el Mediterráneo que, según argumentaban, podrían haber resultado en “crímenes de lesa humanidad”. Ayer se sabía que la misma capitana Rackete está preparando una demanda contra Matteo Salvini por difamación.

Según reportaba el 28 de junio la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), a través de su proyecto Missing Migrants, entre en el 2014 y 2018 más de 17.900 personas fallecieron o desaparecieron en el mar Mediterráneo. Solo uno de cada tres cuerpos fue recuperado. En las mismas fechas el colectivo Caminando Fronteras denunciaba en su informe Vida en la Necrofrontera la muerte de 1.020 personas entre 2018 y el primer cuatrimestre de 2019 en las rutas del Estrecho, mar de Alborán y Canarias.

Eurocentrismo del discurso migratorio

Mientras las cuestiones migratorias y de refugio siguen representando un eje central del debate europeo, dominado por una narrativa que versa sobre la incapacidad de los países comunitarios de dar entrada a más población migrante y refugiada, en su informe Tendencias Globales del Desplazamiento Forzado del 19 de junio ACNUR recordaba que la mayoría de los 70,8 millones de desplazados forzosos viven en países pobres.

“La libertad de una mujer alemana ha despertado más atención y solidaridad que la tragedia de miles de personas migrantes ahogadas en el Mediterráneo

Por otro lado, las muestras masivas de apoyo a Carola Rackete han despertado otras reflexiones relativas al desplazamiento de la solidaridad desde los refugiados a las personas europeas que participan en operaciones de rescate. “La libertad de una mujer alemana ha despertado más atención y solidaridad que la tragedia de miles de personas migrantes ahogadas en el Mediterráneo. Vivimos en un mundo racista donde la vida de las personas blancas sigue siendo el centro”, valoraba en este sentido el Sindicato de Manteros de Madrid desde sus redes sociales.

En el informe publicado por Alarm Phone se insistía por su parte en que son numerosos los barcos de inmigrantes que han llegado por su cuenta a las costas italianas y maltesas sin que esto haya sido reflejado en los medios, y valora que en muchos casos han sido las propias personas migrantes en los barcos quienes han organizado la resistencia consiguiendo no ser devueltos a Libia. Por su parte, Caminando Fronteras recuerda que los migrantes ante todo, son sujetos políticos. “La memoria y discursos de las personas migrantes deben de encontrarse en el centro de toda acción ya que construyen la única realidad subversiva fuera de los marcos de la hegemonía del necropoder”, defiende ese colectivo.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

El Salto Radio
El Salto Radio Convivencia de Berrocal II: Comunidad de acogida
Volvemos a la Convivencia Rural de Berrocal y, esta semana nos detenemos en la historia de dos familias, una palestina y otra israelí, que nos muestran que la convivencia es posible. Además, tecnosuelos y música. Creemos que merece la pena escuchar.
Investigación
Investigación Varios refuxiados denuncian á ONG Rescate Internacional por explotación laboral e agresión sexual
A Garda Civil investiga o centro de Mondariz-Balneario tras varias denuncias por parte de voluntarios migrantes que aseguran traballar sen contrato a cambio de 50 euros semanais. A ONG xestiona 1.700 prazas do programa estatal de acollida.
Galicia
Investigación Varios refugiados denuncian a la ONG Rescate Internacional por explotación laboral y agresión sexual
La Guardia Civil investiga al centro de Mondariz-Balneario tras varias denuncias por parte de voluntarios migrantes que aseguran trabajar sin contrato a cambio de 50 euros semanales. La ONG gestiona 1.700 plazas del programa estatal de acogida.
#37852
31/7/2019 16:47

No se admiten comentarios insultantes, amenazantes, machistas, homófobos, racistas o discriminatorios de cualquier tipo. Tampoco se permite la publicación de datos personales de terceros.

0
0
#36717
7/7/2019 11:38

El hambre no tiene nombre, aparte de las guerras y las enfermedades, Dios se olvidó de los africanos, sus países son muy ricos en recursos naturales, pero ellos son pobres, no hay fronteras ni nadie les parará, Salvini era comunista supongo con principios, no le fue bien, cambio, y ahora le va bien gracias a la emigración, su objetivo lo consiguió, nada hará, los ingenuos italianos creen que hará algo y le votan, igual hacen los de VOX y otros parecidos.

1
1
Baleares
Un modelo insostenible El rechazo a la turistificación se expande en Canarias, Baleares y Barcelona
Tras la masiva manifestación en las Islas Canarias del pasado mayo, Palma de Mallorca, Barcelona y San Sebastián salen este 15 de junio a la calle contra un modelo de turismo desmedido insostenible para el territorio y sus habitantes.
Oriente Medio
Oriente Medio Decenas de muertos en una noche de sirenas y misiles cruzados entre Israel e Irán
Después del ataque israelí contra la infraestructura energética y militar iraní, cientos de misiles iraníes atraviesan el cielo israelí e impactan en Tel Aviv, Bat Yam, Tamra y Haifa.
Galicia
Galicia Activistas bloquean una planta de Altri en Portugal y avisan de que frenarán su expansión en Galicia
El grupo atrancó con cadenas y soldadura las entradas de la planta de Celbi en Leirosa, en la mayor acción directa hasta el momento contra la expansión de la multinacional papelera en territorio gallego: “O povo é quem para Altri”.
Crónica
Justicia En la sala de un juicio a una madre protectora
Esta es una crónica de un juicio a una mujer que pidió medidas por sospechar de abusos sexuales a su hija en el domicilio paterno sin que ninguna institución moviera un dedo y, un mes después, cogió un vuelo a su país para intentar protegerla.
Violencia machista
El Estado que revictimiza Violencia institucional: “Si lo hubiera sabido antes, no hubiera denunciado nunca”
Rocío ha sufrido violencia psicológica, física y sexual por parte de su expareja. Y también violencia institucional en todas las puertas de la red de recursos institucionales que ha ido atravesando.
Editorial
Editorial Justicia irracional
Por acción o por omisión, las instituciones violentan a las mujeres. Se llama violencia institucional.
Relato
Relato Rendirse
A mi pesar me tocaba compartir mesa con aquellos documentos y, como estaba de los primeros (no lo habría imaginado al llegar), ya no conseguía quedar por encima, con lo que me gusta.
Madrid
Movimiento republicano Miles de personas claman en Madrid contra la monarquía y por la República
En el 11 aniversario de la proclamación de Felipe VI, una marcha unitaria reclama que este reinado sea el último de España.
Rap
Rap Los Chikos del Maíz: “La música urbana está llena de fachas y votantes de Vox”
Tras un fin de gira accidentado, Toni y Nega dan una tregua indefinida a su proyecto con dos conciertos en Madrid. Horas antes de llenar la sala en la primera cita, visitan la redacción de El Salto.
Río Arriba
Río Arriba Luis González Reyes: “Vivimos en un mundo en la que la escasez es un elemento central”
Primera entrevista del programa Río Arriba en formato podcast y vídeo donde hablamos de las nuevas guerras neocoloniales por recursos en la era de Trump y Putin, de la escasez, del decrecimiento y el colapsismo.

Últimas

Ocupación israelí
Movilizaciones Un centenar de organizaciones de 26 países denuncian a la empresa vasca CAF y su tren del apartheid
Más de 50 localidades salen a la calle este fin de semana para señalar a la empresa que construyó el tranvía que conecta Jerusalén con territorio ocupados y exigir el fin del genocidio en Gaza.
La vida y ya
La vida y ya Un rato de cada lunes
Pero, lo más coincidente ha sido, expresado de distintas maneras, su agradecimiento hacia ese lugar. Su lugar elegido.
Ocupación israelí
Ocupación Israelí La policía egipcia impide con violencia la marcha internacional a Gaza
La marcha de 4.000 personas a Gaza es reprimida por la policía del régimen de Al-Sisi. La organización pide a las embajadas que reaccionen y protejan a sus ciudadanos.
Galicia
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar a Altri
Queremos investigar a los responsables políticos y empresariales del que podría ser el mayor atentado ambiental de la historia reciente de Galicia.
Que no te lo cuenten
El Salto Radio De océanos y detenciones
VV.AA.
La acidificación del agua marina supera sus límites mientras Israel aborda la Flotilla por la Libertad.
Más noticias
Análisis
Análisis del CIS La calma antes de la tormenta: la dimisión de Santos Cerdán como punto de inflexión
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha muerto pocas horas después de nacer por la dimisión de Santos Cerdán, aunque sirve como foto fija de un escenario que favorece a la derecha.
Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.

Recomendadas

Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.
Derecho a la vivienda
Jaime Palomera “La vivienda necesita una revolución”
Investigador y uno de los fundadores del Sindicat de Llogateres, Jaime Palomera presenta ‘El secuestro de la vivienda’, un libro sobre el juego amañado en el que los propietarios son cada vez más ricos y los inquilinos cada vez más pobres.
Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Brasil
Extrema derecha Arte en tiempos de fascismo: cuando enseñar a Goya y Rubens le cuesta el puesto a un profesor
Una clase de Historia en la escuela municipal en una localidad del Estado de São Paulo desemboca en acusaciones contra el profesor y una campaña de difamaciones que encabeza el concejal de educación de la zona, de la extrema derecha bolsonarista.