Editorial
La muerte silenciosa

La riqueza de las pensiones no escapará a la rapiña de los saqueadores sin una voz enérgica y duradera, al igual que los miles de mayores que van a morir por haber respirado amianto solo serán resarcidos como merecen si exigen con firmeza lo que les corresponde.

Concentracion Amianto
Concentración de ASVIAMIE el 25 de noviembre de 2016 en Donostia para denunciar la ocultación del reconocimiento de enfermedad laboral por amianto. Foto: CCOO Olaberria
26 ene 2018 20:57

En los próximos años, miles de trabajadores enfermarán y morirán a consecuencia del mesotelioma maligno. Hace décadas que los estudios científicos han dejado claro que este raro cáncer se produce por inhalación de amianto (también conocido como asbesto). Nadie en el mundo lo pone en cuestión. Dicho mineral fue usado ampliamente a lo largo del siglo XX en las industrias de la construcción, naval, siderurgia, química, o textil —por citar solo algunas de las más importantes— debido a sus propiedades químicas y mecánicas, y a su bajo coste de extracción.

Entre 2000 y 2015 provocó 5.345 fallecimientos en el Estado español. La propia Unión Europea habla de una epidemia que en los próximos años podría arrojar medio millón de muertos en el continente. Las condiciones estructurales del problema hacen inevitable este escenario tétrico: millones de operarios que trabajaron con escasas medidas de seguridad en fábricas con directivos sin escrúpulos —y que estuvieron expuestos al silicato durante años—, un periodo de latencia de la patología que puede prolongarse durante décadas, y una legislación de enfermedades profesionales que históricamente ha sido papel mojado a la hora de conceder indemnizaciones. Miles de obreros se han ido a la tumba sin que las administraciones o las instancias judiciales tradujeran a dinero el perjuicio provocado por una mala praxis empresarial generalizada.

ASVIAMIE, la asociación vasca de víctimas del amianto, está dando apoyo a las demandas de los familiares en los tribunales contra corporaciones como Uralita (Lasarte), Babcock Wilcox (Sestao) o Victorio Luzuriaga (Tafalla), pero ha habido reparaciones razonables en contadas ocasiones.

Corren, pues, malos tiempos para las generaciones que han tributado durante los últimos cincuenta años. Sobre sus espaldas se sostiene el desclasamiento de sus hijas y nietos, y se cierne la amenaza de los recortes a sus pensiones, derechos contributivos que generaron durante sus largos itinerarios laborales. Nadie niega que el disfrute de la jubilación sea una conquista irrenunciable. El problema de ese horizonte de ocio y tranquilidad, deseado por millones de personas, es que el núcleo de las clases pasivas se antoja cada vez más central en la tormenta económica y social en curso.

Las pensiones están en el punto de mira de los saqueadores y esa riqueza del común difícilmente escapará a la rapiña sin una voz enérgica y duradera. Igualmente, los centenares de miles de mayores que van a morir por haber respirado amianto, solo serán resarcidos como merecen si exigen con firmeza lo que les corresponde. Por otra parte, y desde la perspectiva de la gente mayor —que por norma sabe distinguir perfectamente las cosas importantes de la vida de las que no lo son—, ¿hay forma más apasionante de transitar por esos años que sentir, una vez más, el calor de la fraternidad y de la solidaridad que alimenta la lucha por el reparto de la riqueza?

Archivado en: Editorial Editorial
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Editorial
Editorial Farsa fiscal, gobierno del capital
En Euskadi, las exenciones fiscales y las reformas dirigidas a “atraer inversiones” no son más que eufemismos para la elusión fiscal de los más ricos.
Editorial
Editorial Desechables
El ascenso de la extrema derecha en Europa resta protagonismo a un fenómeno menos aireado pero incluso más grave: el camino de los partidos conservadores y socialdemócratas hacia posiciones ultra.
Editorial
Acuerdos abertzales La vida sigue igual
EH Bildu ha tendido su mano a los jeltzales y hablan de “una nueva política de colaboración” que consistiría en un pacto entre abertzales.
Oriente Próximo
Oriente próximo La diáspora kurda ante la caída de Bashar al-Assad
Siria enfrenta el fin de un régimen que durante décadas pareció inquebrantable. Desde la diáspora, la esperanza contenida de quien ha vivido demasiadas traiciones y promesas incumplidas.
Ley de Seguridad Ciudadana
Congreso de los diputados Reforma de la Ley Mordaza: ¿esta vez sí se puede?
Una de las mayores deudas de toda la izquierda del Estado español parece que está a punto de saldarse.
Análisis
Análisis El independentismo se reorganiza, pero ¿sigue siendo independentista?
Los partidos independentistas han sufrido la crisis del procés y el posprocés, y todavía no la han resuelto, sino, a lo sumo, la han aplazado. El PSC aparece como el ganador de una carrera con corredores agotados.
Literatura
Gustavo Faverón Patriau “Quizá la novela sea ahora mismo más relevante que nunca”
El escritor peruano Gustavo Faverón Patriau quería narrar en su nueva novela la historia de un boxeador que no sabía boxear pero tumbaba a sus rivales recitándoles al oído versos de César Vallejo. ‘Minimosca’ acabó siendo un cuentacuentos inagotable.
Galicia
Memoria histórica Así fue como el Patronato de Protección a la Mujer transformó Galicia en un convento de clausura
Las mujeres que cayeron en las redes del Patronato iniciaron un periplo de encierro, humillaciones, abusos y explotación que es desconocido para la mayor parte de la población. Queda hoy en la impunidad de un silencio que tenemos el deber de romper.
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Derecho a la vivienda
Vivienda El Sindicato de Vivienda de Euskal Herria propone la “expropiación de pisos turísticos”
Ponen en el punto de mira los intereses del sector inmobiliario y tachan de “falsas” a todas las medidas propuestas por los partidos políticos como la Ley de Vivienda.
Opinión
Tribuna Todas las razones para decir ‘Altri non’
Aquí van unos cuantos motivos para juntarnos este domingo en Compostela y dejar clara nuestra postura frente a un expolio que nos están tratando de imponer disfrazado de progreso, pero que sólo trae beneficio económico a unos cuantos indeseables.
Palestina
Eyad Yousef “No cuentes lo que queremos ser, cuenta lo que nunca hemos dejado de ser: un pueblo que quiere la paz"
Eyad Yousef es profesor en la Universidad de Birzeit, Cisjordania, y comparte su experiencia en una universidad que “representa el pluralismo y la libertad que tanto anhela la sociedad palestina”

Últimas

Relato
Relato Descubrirse las manos
Descubres tus manos: el palmar y el dorso, la posibilidad futura de la pinza atrapacosas, dos miembros que te vinculan al chimpancé y al lémur. Aprendes su mecanismo.
Música
Música Un coro para homenajear las luchas obreras: “La canción protesta del pasado es historia viva”
El coro de canción protesta de Madrid nació para rescatar del pasado las tonadas de la lucha obrera y ponerlas al servicio de distintos activismos en el presente.
Opinión
Opinión Sobrevivir pagando en el Álvaro Cunqueiro
Una de las victorias ideológicas del PP de Feijóo en Galicia ha sido hacernos creer que pagar por servicios esenciales en los hospitales durante el cuidado de nuestros enfermos es lo natural, que no hay otra manera de abordarlo, pero es mentira.
Siria
Oriente Próximo Israel impone hechos consumados sobre Siria para condicionar la transición según sus intereses
“Está escrito que el futuro de Jerusalén es expandirse hasta Damasco”, dijo este octubre el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, uno de los exponentes ultras del Ejecutivo.

Recomendadas

Pensamiento
Sarah Jaffe “En realidad tenemos que hacer menos. E impedir que algunas cosas sucedan”
La escritora y periodista Sarah Jaffe aborda el desengaño cotidiano al que nos aboca el mundo laboral e investiga cómo, a pesar de todo, las personas se organizan colectivamente en sus empleos para que “trabajar apeste menos”.
Ocupación israelí
Palestina Vivir en alerta: la resistencia palestina frente la ocupación israelí
La cruda realidad de las feministas palestinas que, ante la represión y las detenciones arbitrarias, continúan su lucha por la libertad, la justicia y los derechos humanos.
Madrid
Ciudades Fake Madrid, un paseo por los hitos del simulacro
Un recorrido por los grandes éxitos de la conversión de Madrid en una ciudad irreal.