Laboral
El sindicalismo hoy y el modelo de relaciones laborales

La disolución del conflicto conforma los parámetros del sindicalismo hoy: sindicalismo autodenominado sindicalismo de clase; este sindicalismo abandonó su conciencia de clase (crítica, militante, ética, comprometida con la realidad social y la naturaleza); sindicalismo incapaz de representar el conflicto; sindicalismo muy alejado (antes y ahora) de los problemas y los retos que suponen una amenaza para la vida.

capitalismo y trabajo
Gabinete de Estudios Confederal de la CGT
1 sep 2019 22:02

El modelo actual de relaciones laborales (RR.LL.), sufre una drástica ruptura con el modelo de derechos de la época anterior a la última década del siglo XX. Es un modelo enfermo de neoliberalismo y vacío de Derechos Fundamentales (DD.FF.), lo cual es coherente con la lógica del capitalismo terminal, para mantener una cierta tasa de ganancia del capital.

Las crisis económicas, políticas, tanto las del Estado español como las globales, desde 1977 (Pactos de la Moncloa y Transición, que no ruptura con el régimen), son resueltas las salidas de las mismas (crisis), con intervenciones directas del Estado y el legislativo (para nada la mano invisible tiene que ver), en el corazón de las relaciones laborales (Derechos) y en la cartera de las personas asalariadas (rentas salariales, pensiones y prestaciones).

El argumento empleado en estas intervenciones es netamente ideológico: la rigidez de los mercados laborales, tanto privados como públicos, estrangulan, frenan e impiden el crecimiento de la economía y la libre competencia

Estas intervenciones se realizan de forma jurídica (el Estado de derecho ejecuta) desde 1977, Pactos de la Moncloa (moderación salarial –congelación- y políticas de redistribución del gasto público); años 1984/1985, liberalización y desregulación del contrato de trabajo, siendo el temporal y prescindible el “contrato ordinario” que se impone; año 1994, gran Reforma Laboral, donde se produce un repliegue de la intervención estatal tanto a nivel cuantitativo, haciendo desaparecer diferentes formas reglamentarias, como la de no intervención en los ERE y Modificaciones Sustanciales de Trabajo, como cualitativo al eliminar la imperatividad de numerosos aspectos de la regulación salarial, que a partir de ahora podrían ser empeorados según la correlación de fuerzas entre el capital y el trabajo; año 1997, que instaura un nuevo contrato de fomento de empleo, abarata el despido y fija una nueva causa para despidos individuales y colectivos por razones de competitividad; años 2000, 2006, 2010, 2012 y 2013, refuerzan la desregulación en la contratación, los despidos individuales y colectivos y en las condiciones de trabajo, así como se recortan las prestaciones de desempleo y el universo al cual llegan y se reforma "de muerte” el sistema público de pensiones.

Los finales de los años 90 del siglo pasado constitucionalizan y consagran la liberalización del mercado de trabajo, a través de nuevas formas de gestión de la mano de obra, especialmente la denominada descentralización productiva, que externaliza riesgos laborales y sociales a las contratas y subcontratas, cuando no a los cientos de miles de falsos autónomos y es desde ese momento que la libertad absoluta del capital se constituye como único principio de vida.

La gran crisis-estafa aparecida en el 2008 conlleva un pacto de Estado de la clase política y las oligarquías financieras e industriales, para asegurar que quienes han sido la causa de la gran estafa financiera y del ladrillo sean quienes se mantengan impunes y sus beneficios no se vean mermados: se reforma el artículo 135 de la CE y aseguran el pago de la deuda (principal e intereses) a sus tenedores, es decir la Banca y los Fondos, previo endeudamiento del Estado que asume hasta más de 60.000 millones directos en deuda europea y hasta 300.000 millones indirectos para avalar deuda privada.

Empleos, ERE en los mercados privados y en los públicos (Ayuntamientos, Diputaciones, Comunidades, Estado…), el personal laboral también se ve afectado por esta medida extintiva; la sociedad a través del robo directo del gasto público en sanidad, educación, desempleo, dependencia, cultura… se convierte en pagadora de dicha deuda ilegítima e ilegal y se profundiza -aún más- en las privatizaciones de todo lo público.

La flexibilidad ha inspirado todo el modelo de RR.LL. desde hace ya más de 33 años. Este es el modelo actual, el cual tiene vocación de ser estructural, es decir normalizado, donde su arma más poderosa reside en la disolución del carácter colectivo del conflicto, logrando meter en la cabeza y en las prácticas de las personas asalariadas, la lógica individual (buscar cada uno/a, sus máximos beneficios), sin cooperaciones voluntarias (solidaridad), de manera social (colectiva), sino exclusivamente a través de competir.

La cultura y educación (por la práctica) que se inserta en el pensamiento y en la subjetividad de las clases asalariadas nos lleva dar por “normal” el modelo de explotación y sobreexplotación del capitalismo hoy, entre otros factores y/o causas, porque esta clase obrera de país rico renuncia al internacionalismo, preocupándose solo del “cómo vivíamos aquí”, lo cual podría haber tenido arreglo, mientras permanecieron los niveles de subsistencia, pero alcanzado niveles de país rico, dicha renuncia a pensar en los otros y otras, los de fuera, llega a crear una sociedad cerco, con dos situaciones contrapuestas y ligadas: un adentro más que confortable y un afuera inhumanamente inhóspito.

Esto sucede ante la ceguera persistente, o mejor, el no querer fijar la mirada en ese capitalismo productivista, desarrollista y depredador, que arrasa el planeta y a la humanidad, mientras seguíamos (seguimos) con nuestros niveles de consumo

Ahora, se tiene conciencia que si se quiere trabajar (conseguir un empleo, cualquiera), se tiene que aceptar las desigualdades salariales y de derechos que comporta la precariedad; es decir, la persona asalariada ha transmutado del consentimiento en la producción a la complicidad con el proceso de acumulación capitalista, impidiendo de esta manera un planteamiento colectivo de ruptura y, en consecuencia, imposibilitando la solución del problema porque se es causa y parte del mismo.

Esta disolución del conflicto conforma los parámetros del sindicalismo hoy

Sindicalismo autodenominado “sindicalismo de clase”, cuando la clase social, la clase obrera (a la que dice representar), hoy sólo es una realidad histórica, pues ésta renunció al conflicto social, es decir al “alma mater” de su carácter de clase.

Este sindicalismo abandonó su conciencia de clase (crítica, militante, ética, compromiso con la realidad social y la naturaleza…) y la búsqueda del paraíso hoy queda reducida al perímetro estrecho de unas rentas que le permitan sobrevivir.

Sindicalismo incapaz de representar el conflicto, no sólo por la ausencia de conflicto colectivo, sino por no entender que el conflicto se ha desplazado al plano individual (precariado, no-trabajador/a…) y ahí, es el capitalismo quien juega en casa y gana por goleada.

Sindicalismo que, desde la década de los 90 del siglo pasado, admitió las nuevas formas de gestión de la mano de obra (descentralización productiva y externalización de riesgos empresariales), otorgando carta de naturaleza a la normalidad social (estructural) de las nuevas formas de trabajos y no-trabajos salariados, atípicos y fisurados, donde la individualización del conflicto impide el conflicto colectivo y la solidaridad de clase.

Las actuales formas de empleo (plataformas, digitalización, robotización, teletrabajo, etc.) comportan en sí mismas la ausencia de relaciones colectivas, es decir, han perdido una identidad colectiva consustancial al conflicto y, en consecuencia, el sindicato como representador del conflicto ha desaparecido.

El sindicalismo, hoy, ha estado y está muy alejado de los problemas y los retos que supusieron y suponen (aún más agudizados y acuciantes) una amenaza para la Vida (tal como la conocemos), y no digamos ya para una VIDA DIGNA para todos y todas, sin desigualdades, sin miserias, sin horror, sin hambrunas… Sus consentimientos y el abrazar la "modernidad" (crecimiento ilimitado al cual denominan “progreso”), donde el productivismo, el desarrollismo y la libre competencia se ha constituido como el motor de la historia.

Y el deterioro es aún mayor, pues transciende lo laboral para insertarse en el terreno moral y de comportamiento, pues este sindicalismo se preocupa y se sigue preocupando o haciéndose las preguntas de “los cuantos” olvidándose –conscientemente, pienso- de “los qués”, pues productivismo, competitividad, flexibilidad, desigualdades, son parte del mismo paquete y además indisoluble, luego no se puede –no podemos y menos aún, debemos- desear lo uno y lo otro.

Aquí radica un problema fundamental del sindicalismo y demás gentes, pues les (nos) imposibilita el enfrentamiento y el combate contra las consecuencias de esos criterios superiores (desarrollismo, productivismo, etc.) por los cuales se rige esta sociedad, en el plano material, al ser presos de una preocupación exclusiva por lo material.

Cuando hablamos -o definimos- de que nos encontramos en una fase terminal del capitalismo, no podemos dejar de pensar, ver y analizar que detrás se encuentra y nos encontramos en una fase terminal de nuestra civilización, que colapsará con el más que probable colapso del capitalismo.

Desde siempre mantenemos y hemos mantenido el rechazo a que el capitalismo tenga solución o en él se encuentren elementos aún salvables que ayuden a la solución del problema. Lo que nos preocupa y debiera preocupar seriamente es si tenemos o existe solución en el afuera, porque simplemente no existe ese afuera. El capitalismo ha invadido todo.

El relato sindical ha perdido (como diría el clásico: "a pulso se lo han ganado") toda la potencia transformadora, al no haber evolucionado (por convencimiento, pienso yo) de un pensamiento desarrollista y productivista -que les sirvió para la época del pacto social en los países ricos y la época del capitalismo del Estado de bienestar-, a un pensamiento que no sólo cuestione las nuevas formas de gestión de la mano de obra (como mercancía y desnuda de derechos), sino que incorpore un pensamiento radical rupturista (para llevarlo al corazón del sistema capitalista) que sea decrecentista, feminista e internacionalista, a la vez que tendríamos que trabajar en torno a la idea del común y a realizaciones que lo adelanten.

(Nota al pie: Agradecimiento de manera especial a Chema Berro, militante y activista de la CGT de Navarra, el cual dialogó con el artículo y compartimos las “preocupaciones” desde un escepticismo radical, pero que al mismo tiempo no nos inhabilita para seguir pensando y actuando).

Sobre este blog
Alkimia es un espacio de reflexión donde miembros o personas afines al Anarcosindicalismo dan su punto de vista sobre temas de interés general. En una sociedad en la que los medios de desinformación moldean la realidad al antojo de los poderes económicos y políticos, cualquier nueva vía de contrainformación se hace necesaria para lograr que se pueda conocer la realidad de la vida cotidiana de las personas a la vez que pueda servir para su transformación.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Laboral
Secretos de un Organizador Exitoso Busca líderes naturales
Cada lugar de trabajo tiene líderes informales que no han sido elegidos ni designados. Simplemente lo son y tienen influencia entre sus compañeros de trabajo.
Laboral
Laboral “Se buscan figurantes para una película a cambio de la merienda”
El sindicato CGT denuncia ante Inspección de Trabajo a una productora cinematográfica por ofrecer trabajo de figurante en la película ‘Corredora’ a cambio de una merienda.
Granada
Granada Trabajadores del ‘sorteo de Oro’ de la Cruz Roja denuncian “salvajes condiciones de trabajo”
CGT señala ante Inspección de Trabajo fraude de ley en los contratos, que les obliga a hacer horas extras para llegar a los mínimos de ventas que pide la ONG y no ser despedidos antes de acabar la campaña.
nacional-bolchevique ledesmista-duginista-fusarista
4/9/2019 18:38

El problema es cuando, al final del artículo, se pretende un sindicalismo más ''feminista''. La izquierda liberasta no es más que la izquierda capitalista; tiene que titar al traste todos los valores liberales, leer a Alexander Dugin y a Diego Fusaro, que dan las herramientas necesarias para combatir de verdad al capitalismo, abrazar el patriotismo, no en el sentido reaccionario, sino revolucionario, usando el patriotismo como arma revolucionaria (la más eficaz que existe, y así lo demostraron las revoluciones socialistas anticolonialistas) contra el capitalismo. Ahora me llamarán algunos ''facha, nazi, rojipardo, hereje, a la hoguera blablabla'', pero es la realidad, la izquierda liberasta occidental no ha realizado ni una sola revolución, cada vez que ahonda en los valores liberales, cae más bajo en el pozo sin fondo de su fracaso, asustando a sus potenciales votantes, quienes necesitan la patria como protección contra el capitalismo internacional (''los ricos son los únicos que pueden permitirse el lujo de no tener patria'' - Ramiro Ledesma) y confundiendo el internacionalismo proletario con cosmopolitismo (''Es necesario desarrollar la idea que conjuga un sano nacionalismo, correctamente entendido, con el internacionalismo proletario. El internacionalismo proletario debe apoyarse en este nacionalismo de cada país [...]. Entre el nacionalismo correctamente entendido y el internacionalismo proletario no existe y no puede existir contradicción alguna. El cosmopolitismo sin patria, que niega el sentimiento nacional y la idea de patria, no tiene nada en común con el internacionalismo proletario.'' - Georgi Dimitrov).

1
2
#39068
5/9/2019 10:11

Típico falangista que no sabe ni dónde tiene el brazo derecho.

1
0
#39039
3/9/2019 22:14

Ya... pero nosotros, sindicalistas fuera de los Sindicatos de Estado, ¿cómo enfrentamos esta realidad? porque todo Esto, la Cosa, la Emancipación, va finalmente de cambiar las cosas, no solo de interpretarlas.

4
2
Sobre este blog
Alkimia es un espacio de reflexión donde miembros o personas afines al Anarcosindicalismo dan su punto de vista sobre temas de interés general. En una sociedad en la que los medios de desinformación moldean la realidad al antojo de los poderes económicos y políticos, cualquier nueva vía de contrainformación se hace necesaria para lograr que se pueda conocer la realidad de la vida cotidiana de las personas a la vez que pueda servir para su transformación.
Ver todas las entradas
Extrema derecha
Extrema derecha Llámalo X: cómo y por qué las élites tecnológicas cabalgan la ola del posfascismo
Los “broligarcas” de las grandes tecnológicas han tomado el relevo de las masas de desamparados del primer trumpismo para llevar las ideas de extrema derecha y antiilustradas a un nuevo estadio.
Polonia
Polonia Las elecciones presidenciales en Polonia deciden el futuro de la coalición de gobierno de Donald Tusk
Trzaskowski, el ganador de la primera vuelta, tiene por delante la complicada misión de asegurarse los antiguos votantes de los candidatos de izquierdas y a la vez ser competitivo entre votantes de la extrema derecha.
Literatura
Edurne Portela y José Ovejero “Nuestras protagonistas hicieron historia, pero no están representadas en ella”
En ‘Una belleza terrible’, Edurne Portela y José Ovejero novelan a cuatro manos la historia de un puñado de mujeres y hombres que pusieron sus vidas al servicio de la revolución.
Servicios públicos
Servicios Públicos La lección de Olaf Palme, las ayudas para la compra de gafas y el transporte gratuito
La frase del político sueco, “un servicio para pobres siempre será un pobre servicio”, vuelve a estar de actualidad a cuenta del debate sobre la universalización de las ayudas públicas.
La vida y ya
La vida y ya La risa
Una vez me dijo que para ella la risa era una forma de imaginarse de otra manera, que siempre conseguía imaginar una vida mejor en los momentos en los que se reía.
Palestina
Genocidio Israel fuerza el cierre del último hospital operativo del norte de Gaza
El centro médico situado en el campo de refugiados de Jabalia llevaba prestando atención médica desde el inicio de la campaña genocida a pesar de los ataques israelíes. Este jueves, un ultimátum del ejército sionista obligó a desalojar el edificio.
Fútbol a este lado
Fútbol a este lado Última primavera en Smack City
En 1985, el Liverpool perdió con la Juventus una final jugada prácticamente al tiempo que se recogían casi 40 cadáveres, la mayoría italianos, en las gradas de Heysel. Ese año, sus vecinos del Everton ganaron la liga inglesa y la Recopa de Europa.
Comunidad de Madrid
Antipsiquiatría El Orgullo Loco marcha en Madrid contra la violencia “de la psiquiatría y el resto de las instituciones”
“La abolición del trabajo asalariado permitiría crear otros espacios desde los que gestionar los sufrimientos”, opina una integrante de la organización que aboga por eliminar la psiquiatría y psicología y despatologizar la conducta humana.

Últimas

Hazlo Posible
Hazlo posible Un año de investigaciones en El Salto: más impacto y visitas que nunca
En el último año El Salto ha publicado decenas de trabajos de investigación, con más impacto y visitas que nunca: desde la exclusiva de los festivales de KKR a la foto manipulada de Mazón, pasando por los agentes infiltrados en colectivos sociales.
Colombia
Colombia Petro se la juega en las calles ante el boicot en el palacio
El paro nacional en apoyo al Gobierno es el último capítulo de una escalada de tensión entre el bloque que lidera Gustavo Petro y los poderes fácticos que obstaculizan la agenda de cambios del primer presidente progresista de la historia de Colombia.
Partido Popular
Partidos políticos Feijóo deja en su congreso la puerta abierta a Vox y busca un pico de crispación antes del verano
El presidente del PP ha hecho saber a los suyos que no quiere ni hablar de pactos electorales para quedar con las manos libres. La ponencia ideológica será solo sobre trazos gruesos, con la migración como nuevo eje.
Que no te lo cuenten
El Salto Radio De manifestaciones y juicios
VV.AA.
Miles de personas desfilan por las calles de Valencia y las plataformas ambientalistas extremeñas claman contra el proyecto minero.
Palestina
Cisjordania Las sanciones europeas contra colonos israelíes, sin impacto en Cisjordania
Mientras el mundo mira hacia Gaza, Israel y los grupos de colonos violentos que residen en Cisjordania están haciendo lo mismo de siempre pero a un ritmo más elevado que nunca.
Psicoactivos
Psicodélicos Iglesias psiquedélicas en Estados Unidos: las contradicciones constitucionales del trumpismo ácido
La nueva administración estadounidense está más abierta a contribuir al renacimiento psicodélico, pero las iglesias que utilizan este tipo de sustancias siguen encontrándose en una zona alegal.
Más noticias
Residencias de mayores
Comunidad de Madrid Un segundo proceso judicial amplía los altos cargos de Ayuso imputados por las muertes en residencias
Además de los responsables de los protocolos excluyentes, un juzgado de Leganés añade al director del SUMMA 112, Pablo Busca Ostolaza, y a una geriatra de enlace por primera vez, entre otros investigados.
Contigo empezó todo
Contigo Empezó Todo La saga de los Archs en las luchas de Barcelona
Manuel Archs muere fusilado a finales del siglo XIX. 30 años después, su hijo Ramón se pone al frente de la defensa armada de los sindicatos.
Crisis climática
Crisis climática La crisis climática ha añadido un mes de temperaturas extremas a España en el último año
En el periodo de un año desde mayo de 2024, en el Estado español se han vivido 48 jornadas de calor extremo, que se reducirían a 18 sin la influencia del cambio climático, según un informe.

Recomendadas

Cine
Lucía Delgado y Tábata Cerezo “Las escenas de intimidad van mucho más allá del sexo”
Lucía y Tábata son coordnadoras de intimidad, es decir, se ponen al servicio de una historia audiovisual para acordar, delimitar, construir escenas que pueden suponer situaciones de especial vulnerabilidad a los actores y actrices.
Chile
Chile Daniel Jadue: “4,8 millones han creído en una Constitución que es la que la mayoría del pueblo chileno quiere”
El exalcalde de la localidad chilena de Recoleta se encuentra actualmente en arresto domiciliario por un contencioso con las farmacéuticas. Desde su Ayuntamiento puso en marcha una experiencia pionera: las farmacias populares.
Andalucía
Sanidad pública El colapso sanitario desborda la atención a la salud mental en Andalucía
La Junta de Andalucía no ha aprobado aún el Plan para la Salud mental en una comunidad con dos suicidios diarios y más de un millón de personas que consumen benzodiacepinas de forma crónica
Palestina
Genocidio La ONG anti-UNRWA lanzada por exespías y marines de EEUU siembra el caos en el reparto de alimentos en Gaza
La Fundación Humanitaria de Gaza (GHF) creada a comienzos de este año y vinculada a agentes del ejército y la inteligencia estadounidense ha sido acusada de desaparecer a una persona y disparar a quienes estaban esperando ayuda.