Pista de aterrizaje
Fátima Djarra Sani: “No debemos juzgar a nuestras madres y abuelas”

Nació en 1968 en la Guinea Portuguesa que Amílcar Cabral y su partido liberaron en 1974 para convertir en Guinea-Bisáu. Ha vivido 31 años en África, seis en América y 15 en Europa. Habla mandinga, fula, papel, criollo, portugués, francés y español. Dedica su vida a la prevención de las violencias contra las mujeres.

Fatima Djarra Entrevista.
Fatima Djarra. Ione Arzoz
26 mar 2020 06:30

Nació en 1968 en la Guinea Portuguesa que Amílcar Cabral y su partido liberaron en 1974 para convertir en Guinea-Bisáu. Aprendió a leer y escribir en casa de una vecina y con la oposición de su padre, que murió cuando era una niña. Posteriormente estuvo en un internado, financiado por los países que habían apoyado la independencia de la colonia. Estudió ingeniería civil en Cuba con una beca del Gobierno. Ha vivido 31 años en África, seis en América y 15 en Europa. Habla mandinga, fula, papel, criollo, portugués, francés y español. Le gustan la música tradicional, el fado y Salif Keita. Dedica su vida a la prevención de las violencias contra las mujeres.

¿Cómo fue tu niñez?
Éramos un familia humilde, muy pobre, pero nos llegaba para comer. Mi tío pescador y mi tío camionero nos ayudaron. Soy la mayor, por lo que a los siete años ya cocinaba, limpiaba, iba a por agua y me ocupaba de mis cuatro hermanas pequeñas y de mi hermano. Siempre me ha gustado cuidar de otras personas y no depender de ningún hombre. Aprendí a leer gracias a mi carácter y, desde muy pequeña, levanté la voz cuando veía algo injusto.

Jugaste a fútbol en la adolescencia.
Empecé en un campeonato de los barrios de la capital y pasé por distintos equipos. Mi madre se enteró cuando el entrenador le pidió un permiso especial para jugar contra Senegal.

¿Eras buena?
Era mediocentro. No se me daba mal, tenía carácter en el campo.
Aquello acabó cuando te fuiste a estudiar la carrera a Cuba.
Sí, aunque allí jugué varios campeonatos. Pero lo más importante es que a Cuba le debo entender quién era yo.

¿Por qué?
Porque venía de un país de miseria y analfabetismo. Mi propia familia rechazaba mis ideas. Y allí vi que hombres y mujeres iban juntos a la escuela, a la zafra, a trabajar. Vi la igualdad. Y que mi voluntad de no ser menos que ningún hombre, tenía un sentido. Ahora, con el paso del tiempo y después de muchos años viviendo en Europa, voy, poco a poco, reencontrándome con África.

¿El pasado siempre vuelve?
Europa me ha dado mucho. Mi hijo es todo un pamplonica, pero creo que la sociedad occidental está enferma de individualismo. El final de la vida de mi madre me ayudó a visualizarlo. Le diagnosticaron un cáncer y, en cuanto pudimos, nos la trajimos a Bilbao. Pero, después del tratamiento, volvió a su tierra y, cuando finalmente murió, las distintas partes de su extensa familia conseguimos ponernos de acuerdo para despedirla.

¿Cómo fue?
Creo que lo logramos porque prevaleció el sentimiento de comunidad, algo que me cuesta más encontrar en Europa. Mi madre pertenecía a una etnia animista, aunque se casó con un musulmán que tenía una parte de parientes católicos. Tuvimos que hablar mucho para ponernos de acuerdo. Primero hicimos la ceremonia musulmana. Después los animistas hicieron su ritual y, por último, los católicos celebraron una misa de funeral de cuerpo presente.

Pero esa misma comunidad alienta o consiente el maltrato a las mujeres.
Sí, incluso va a la guerra.

¿Qué guerra?
Los once meses de la horrible guerra civil de 1998 en la que pasamos tanto miedo y en la que murieron miles de personas. Pero esa realidad esta cambiando. Cuando yo trabajé como técnica en la construcción en Guinea era la única, y ya empieza a haber mujeres en los sectores masculinos.

¿Y con respecto a la educación sexual?
Ahora hay leyes contra la ablación en muchos países y, poco a poco, cada vez hay más mujeres empoderadas en África que se rebelan ante la violencia contra sus cuerpos. Pertenezco a organizaciones que llevan años con campañas de información y de sensibilización aquí, con mujeres y hombres migrantes y, también, en Guinea.

Parece una tarea complicada.
No es fácil discutir con gente a la que quieres, que muchas veces son mujeres, y poniendo en cuestión tradiciones que se remontan a generaciones anteriores. No debemos juzgar a nuestras madres, tías y abuelas. Tampoco es sencillo repartir condones o informar sobre la copa menstrual en Bisáu. Aunque hay mucho desconocimiento, el deseo de ser libre suele imponerse.

Archivado en: Pista de aterrizaje
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Culturas
Izaskun Mata Coloma, agitadora cultural “Estoy entre Alejandro Sanz y Evaristo”
En sus genes hay fusilados de la Guerra Civil, huelgas del metal en Tubacex, trabajadoras en fábricas de telas, orfelinatos, amas de casa, limpiadoras y camareras. Fue jugadora de fútbol y regentó una taberna. Organiza y participa en slams, y tiene un grupo de poesía musical con su hermana.
Pista de aterrizaje
Fátima Ait-Benali, inmigrante marroquí “Al final ganamos, vivimos donde queremos”
Turquía, Grecia, Albania... Tres años de travesía, penurias y adversidades. De vivir en la calle, de jugarse la vida a cada paso. Otro horizonte, un futuro. Fátima Ait-Benali dejó atrás su ciudad natal, Tan-Tan, en el sur de Marruecos, y en marzo de 2019 culminó su cruel periplo en Bilbao.
Pista de aterrizaje
Edurne Lekunberri Urmeneta, maestra “Buscamos un dolmen”
Euskaldunberri venida al mundo en 1976, su abuelo paterno fue el último vascoparlante de Ilurdotz.
Eléctricas
Oligopolio eléctrico Sánchez no admite responsabilidades en el apagón mientras sus socios piden nacionalizar la red eléctrica
El presidente del Gobierno señala a los “operadores privados”, entre ellos Red Eléctrica, cuyos últimos dos presidentes vienen del PSOE y cuyo principal accionista es el Estado, con el 20%, seguido por el 5% de Amancio Ortega.
Antimilitarismo
Rearme El gasto militar mundial se dispara
El gasto militar en el planeta aumentó en 2024 un 9,4% respecto a 2023, lo que supone el mayor incremento interanual desde la Guerra Fría.
Pobreza energética
Energía Apagón crónico: lugares donde no volverá la luz, a pesar de la restauración del sistema eléctrico
Miles de personas en el Estado español viven día a día apagones y falta de suministro en lugares como Cañada Real (Madrid), la Zona Norte de la ciudad de Granada o los asentamientos de jornaleras y jornaleros migrantes en Huelva y Almería
Galicia
Galicia La Xunta aprobó la celulosa de Altri argumentando que su chimenea de 75 metros sería “icónica”
El Informe de Patrimonio Cultural, favorable a la multinacional, se emitió en base a dos encargos externos, contratados y pagados por la empresa al ex presidente y al actual tesorero de Icomos-España.
Electricidad
Apagón Pedro Sánchez: los protocolos de emergencia siguen activos y se abrirá una investigación
El presidente del Gobierno ha comparecido ante los medios de comunicación tras presidir la reunión del Consejo de Ministros para explicar las cuestiones abordadas en relación con la crisis eléctrica.

Últimas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.
Opinión
Opinión Provoquemos la próxima interrupción
Lo que nos resta es gobernar el apagón que habrá de venir, ser la causa colectiva de las próximas interrupciones, aquellas que lleven al fin de este mundo desbocado y sin sentido.
Energía
Energía El gran apagón de abril | El suministro de energía se recupera al 99%
Pedro Sánchez explica que se produjo una “pérdida” del 60% de la electricidad a las 12:33h: “15 gigavatios se han perdido súbitamente del sistema en apenas 5 segundos. Aproximadamente el 60% del sistema eléctrico”.
Energía
Energía La ley marca permisos retribuidos para situaciones como el apagón eléctrico
El Estatuto de los Trabajadores, en su artículo 37.3, protege a la plantilla cuando no es posible llegar a su puesto de trabajo o desarrollar con normalidad su tarea en situaciones como no tener electricidad durante horas.
Electricidad
Apagón ¿Qué le puedo reclamar a la empresa eléctrica y al seguro tras el apagón?
Tras el incidente con la electricidad de este lunes 28 de abril, los consumidores deben conocer qué pueden reclamar a las compañías de la luz o a sus seguros.
València
València La jueza de la dana acorrala al relato político de Mazón
El president viaja a Estados Unidos la semana en la que el PP europeo celebra su congreso en València y no acudirá a la multitudinaria romería de Santa Faz.
Más noticias
Crisis climática
Informe Las diez empresas más contaminantes del país son responsables de un quinto de las emisiones españolas
Repsol mantiene el podio gris de empresa más contaminante que le arrebató a Endesa en 2020. Completan el top 10 de compañías más emisoras energéticas, cementeras y siderúrgicas, que copan entre ellas el 56% de las emisiones del mercado de carbono.
El Salto Radio
El Salto Radio Desmantelando E2 I El racismo institucional y sus grietas
Las redes de apoyo mutuo y la actitud de compartir privilegios son herramientas imprescindibles para combatir los impactos del racismo estructural.
Comunidad de Madrid
Energía El apagón en Madrid, en imágenes
En Madrid, la gran urbe ha permanecido incrédula al pasar de las horas, entre rescates en el Metro, en el Cercanías y en ascensores, donde han quedado atrapadas algunas personas.

Recomendadas

Senegal
Migraciones El mito de la migración ordenada: la denegación de visados por el Consulado de España en Dakar
Maltrato institucional. Estas dos palabras son las más escuchadas cuando se pregunta a personas descontentas con el Consulado de España en Dakar. Cada vez más personas denuncian denegación de visados que no consideran justificados.
Guinea-Bissau
Internacional Guinea-Bissau arranca una ola de represión tras el sabotaje popular de una mina de arena en un parque natural
Una acción liderada por las mujeres del pueblo de Varela provocó un incendio en la bomba de extracción de la mina de arena pesada. El Gobierno ha llevado a cabo la detención de 16 personas, entre las que se encuentran líderes locales.
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña y Ourense compraron material policial a Israel por medio millón de euros en solo cuatro años
El alcalde ourensano, Gonzalo P. Jácome, adjudicó un contrato por 70.000 euros días después del siete de octubre. Abel Caballero firmó otro de más de 200.000 euros y la alcaldesa de A Coruña siguió la estela con un contrato de 170.000 euros.