Justicia
Los países agresores, contra la activación del crimen de agresión en la Corte Penal Internacional

Varios países presionan para que los Estados miembro de la Corte Penal Internacional, reunidos estos días en Nueva York, no activen, o lo hagan de manera muy restringida, el crimen de agresión, que va dirigido a los líderes responsables de atacar y agredir militarmente a otros países.

Iraq guerra
Soldados estadounidenses en Iraq.
@glamarlo
9 dic 2017 07:39
La Corte Penal Internacional (CPI) mantiene en Nueva York, entre el 4 y el 14 de diciembre, su decimosexta asamblea anual, en la que participan los 123 países que han firmado y ratificado el Estatuto de Roma que dio origen a este tribunal. Pero entre los 27 puntos de la amplia agenda que se abordará en este encuentro de diez días hay uno que destaca sobre los demás por las presiones que existen para que no salga adelante o lo haga lo más desvirtuado posible. Se trata del punto 19: “Activación de la jurisdicción de la CPI sobre el crimen de agresión”.

“Ha sido un proceso muy largo y estamos en la fase final, y aunque todavía hay algunos problemas, soy bastante optimista, pues en una reunión mantenida entre las partes interesadas, todas las delegaciones están de acuerdo en activarlo, y esa base es muy importante, pero todavía hay diferentes opiniones sobre la interpretación de una parte muy específica del régimen jurídico”, explica a El Salto Stefan Barriga, representante permanente adjunto de Liechtenstein ante las Naciones Unidas y presente en las negociaciones sobre el crimen de agresión desde el año 2003.

Hace años que varios países, principalmente los que forman parte del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido), han echado el freno a la activación de las competencias de la CPI sobre este crimen hasta estar seguros de que no se verán afectados por él, y es que el crimen de agresión implica, desde su definición en 2010, “el uso de la fuerza armada por un Estado contra la soberanía, la integridad territorial o la independencia política de otro Estado, o en cualquier otra forma incompatible con la Carta de las Naciones Unidas”. Por tanto, está considerado un “crimen de líderes”, ya que “una persona comete un ‘crimen de agresión’ cuando, estando en condiciones de controlar o dirigir efectivamente la acción política o militar de un Estado, dicha persona planifica, prepara, inicia o realiza un acto de agresión que por sus características, gravedad y escala constituya una violación manifiesta de la Carta de las Naciones Unidas”. Se trata, como lo definió el catedrático de Derecho Internacional Remiro Brotons, del crimen de “la crême de la crême, incluidos, junto a las autoridades oficiales o institucionales, los representantes de los poderes fácticos”.

Cuando nació la Corte Penal Internacional en 2002, en aplicación del Estatuto de Roma aprobado tres años antes, lo hizo con el mandato de juzgar cuatro tipos de crímenes: el genocidio, los crímenes de lesa humanidad, los crímenes de guerra y el crimen de agresión. Sin embargo, debido al desacuerdo entre los países miembro sobre la definición de este crimen, las competencias de la Corte Penal Internacional para juzgarlo quedaron en suspenso temporalmente. Y este suspenso temporal se extiende hasta hoy, a pesar de que el crimen de agresión fue finalmente definido y la jurisdicción de la corte establecida en el encuentro de Kampala (Uganda) de 2010 de modificación del Estatuto de Roma, donde los 111 países miembro en aquel momento acordaron su activación “lo más pronto posible”. Ese “lo más pronto posible” quedó fijado en la fecha del 1 de enero de 2017. Pero a día de hoy solo 34 los países miembro han ratificado estas enmiendas, y es necesaria una mayoría de dos tercios (84 países) para que se activen las competencias de la CPI sobre este crimen.

Entre los actos considerados agresiones en esta definición se incluyen la invasión o ataque por las Fuerzas Armadas de un Estado del territorio de otro, la ocupación militar o anexión del territorio de otro Estado, el bombardeo o el empleo de las armas contra otro Estado, el bloqueo de los puertos o costas de un Estado por las Fuerzas Armadas de otro, la utilización del territorio de un país por parte de otro para atacar a un tercer país, el envío de grupos paramilitares a otro país para llevar a cabo actos armados o la prolongación por la fuerza de la presencia militar de un Estado en otro tras la finalización del acuerdo entre ambos. Es decir, se trataría de poder juzgar, por fin, a los países responsables de lanzar las guerras y agresiones militares.

Unas competencias desvirtuadas

“La decisión final adoptada en Kampala parece estar inspirada en el miedo; en el miedo a no lograr el consenso, en el miedo a que los Estados vean peligrar un régimen jurisdiccional inspirado en su consentimiento”, escribía la doctora en Derecho Internacional Público Carmen Quesada Alcalá. Debido a la presión ejercida en las últimas décadas por los países que forman parte del Consejo de Seguridad de la ONU y otros Estados, las competencias del CPI a la hora de juzgar el crimen de agresión se hallan mucho más restringidas que con los demás crímenes.

Por ejemplo, el fiscal solo podrá presentar casos de agresión ante el tribunal si estos casos han sido remitidos por el Consejo de Seguridad o, en caso contrario, siguiendo un largo procedimiento, aunque los países del Consejo de Seguridad siempre tendrán la opción de invocar el artículo 16, que les permite suspender los procedimientos de la Corte durante un año si consideran que suponen “una amenaza a la paz y a la seguridad internacional”.

Casualmente, de los cinco países que forman parte del Consejo de Seguridad, las tres grandes potencias (Estados Unidos, China y Rusia) ni siquiera son miembros del Estatuto de Roma y la CPI, y las otras dos, Francia y Reino Unido, siguen sin ratificar las enmiendas de Kampala que permitirán la activación de las competencias de la corte sobre este crimen. Todas ellas apostaron en los últimos años por que el Consejo de Seguridad sea el único organismo con competencias sobre el crimen de agresión.

Además, mientras que los responsables de crímenes de guerra, genocidio y crímenes contra la humanidad pueden ser juzgados por este tribunal internacional aunque no pertenezcan a un Estado miembro siempre que hayan cometido esos crímenes en el territorio de un Estado que sí lo sea, el crimen de agresión se ha limitado para que los Estados que no han ratificado el Estatuto de Roma no puedan ser juzgados si el crimen ha sido cometido por los nacionales de ese Estado o en su territorio. “El papel de Estados Unidos fue muy importante en Kampala, tenían la mayor delegación aunque no son Estado parte del Estatuto de Roma. Su posición, al igual que la de Rusia, China y otros países, fue muy fuerte para que se excluyera a los Estados no parte de la jurisdicción del tribunal, y lo lograron”, dice Stefan Barriga.

Así, Estados Unidos, que nunca llegó a ratificar el Estatuto de Roma, no podría ser juzgado por el tribunal. Sin embargo, este país, que sí participa como observador en las conversaciones del organismo, apoya la actual cruzada de Francia y Reino Unido para limitar la jurisdicción de la corte y presiona para que su activación no perjudique sus intereses, y es que teme, según algunas fuentes, que la activación se lo pondría más difícil para encontrar socios de coalición para llevar a cabo acciones militares.

Por último, las enmiendas de Kampala también prevén que un Estado miembro del Estatuto de Roma acusado de agresión podrá evitar que se lo juzgue tan solo presentando, siempre que lo haga previamente a la agresión, un escrito ante la Secretaría del tribunal rechazando la competencia del mismo, lo que se ha conocido como cláusula opt out.

En el último año, Reino Unido y Francia, apoyados por Canadá, Japón y Noruega, pidieron “mayor claridad” sobre la jurisdicción y la aplicación de este crimen por parte de la CPI antes de tomar una decisión sobre su apoyo a la activación, y es que quieren asegurarse de que sus dirigentes no podrán ser perseguidos por la CPI basándose en este crimen. Todos estos países se han negado a ratificar de momento las enmiendas de Kampala, aunque todavía no queda claro si, al haber ratificado el Estatuto de Roma, este se aplicaría o no sobre ellos. Este es el mayor punto de controversia en las discusiones que se desarrollan estos días en Nueva York.

Aunque los países puedan utilizar la cláusula opt out, “esta cláusula es complicada a nivel político; Francia o Reino Unido no quieren utilizar el opt out porque políticamente no tiene buena pinta, no quieren mostrarse como Estados malos, no quieren que parezca que no asumen los principios internacionales”, añade Barriga. Por ello, estos países presionan por otra interpretación del texto, y es que sostienen que aquellos países que no ratifiquen las enmiendas de Kampala no deben verse afectados por ellas. “Francia y Reino Unido dicen que no es necesario el opt out porque si no han ratificado las enmiendas la Corte no tiene jurisdicción. En el Estatuto de Roma pone que, en lo que se refiere a enmiendas que entran en vigor, la Corte no puede ejercer su jurisdicción sobre los Estados que no las hayan ratificado, pero nuestra posición es que esto no se aplica al crimen de agresión, porque este crimen ya figuraba en el Estatuto de Roma en 1998”, y por tanto es de aplicación a todos los Estados miembro, explica Stefan Barriga.

¿Por qué se oponen Reino Unido o Francia?

El 15 de noviembre, el periódico The Guardian publicaba que “el Gobierno británico está haciendo lobby para bloquear la activación del crimen de agresión por la CPI, según activistas, en un intento por proteger a Tony Blair [ex primer ministro] y otros políticos británicos del riesgo de una futura persecución”. A principios de este año, un exgeneral iraquí denunció a Blair ante un tribunal británico por crimen de agresión por su participación en la invasión de Iraq en 2003. Sin embargo, en agosto el juez rechazó las acusaciones con el claro argumento de que no existe este crimen en la legislación británica.

También Francia quiere proteger a sus líderes y exlíderes de la activación del crimen de agresión. A primeros de octubre, una quincena de asociaciones y movimientos africanos presentaba una denuncia ante la CPI contra Nicolas Sarkozy por el asesinato de Gadafi en 2011 en Libia. Aunque la denuncia no se basa en el crimen de agresión, sino en el de guerra, esta podría ser la primera de una serie de denuncias por la participación de los líderes franceses en los ataques a Libia, bombardeos sobre Siria o diferentes agresiones e intervenciones militares en África.

Aunque el crimen de agresión sea activado en la asamblea de la CPI que se está celebrando en Nueva York, no veremos a Blair, Bush o Aznar sentados en el banquillo como responsables de crímenes de agresión en la guerra de Iraq, por ejemplo, ni a Sarkozy por su participación en la guerra de Libia, ya que no se ha previsto la retroactividad de las acusaciones. En caso de que se active, está por ver si los actuales o futuros líderes de las grandes potencias occidentales se llegarán a sentar en el banquillo por agresiones presentes o futuras. “Las enmiendas no son una revolución, pero sí son un paso jurídico, un avance, porque sí pueden imaginarse situaciones en las que se puede juzgar el crimen de agresión, en los casos remitidos por el Consejo de Seguridad o en un conflicto entre Estados miembro, pero es verdad que no vamos a ver juzgados muchos casos de agresión”, reconoce Barriga.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Violencia machista
Teresa Peramato “Tenemos que reflexionar sobre si el mutuo acuerdo garantiza la integridad de niños y madres”
La fiscal de Sala de la Fiscalía de Violencia sobre la Mujer insiste siempre en que sin protección para las madres no hay protección para los hijos, y al revés. Peramato reflexiona sobre el asesinato de dos niñas por su padre en Almería.
Justicia
Agresión sexual La Audiencia de Barcelona acuerda la libertad de Dani Alves a cambio de una fianza del 1,82% de su patrimonio
La fianza es de un millón de euros. La decisión no ha sido unánime, uno de los tres magistrados prefería mantener al condenado en prisión, hasta que se resuelvan los recursos de su caso.
LGTBIAQ+
CARTA A VARIOS ORGANISMOS Colectivos piden que se investigue la acción organizada de policías y militares para defraudar la ley trans
La Federación Plataforma Trans y Euforia Familias Trans-Aliadas han enviado cartas a diferentes organismos por el supuesto cambio registral de sexo de 37 integrantes de Fuerzas y Cuerpo de Seguridad que podría ser fraudulento.
José Martínez Carmona
11/12/2017 10:04

Resumiendo: Se trata de PODER a secas. El Consejo de Seguridad, es decir, la causa principal de la inseguridad reinante, tiene la llave. Los Estados agresores definen el concepto de "agresión" a su gusto. La justicia yace por los suelos bañada en sangre lavada con uranio, coltán, petroleo...y metralla. El gato juega con el ratón antes de comérselo...¡RATONES DE TODOS LOS PAÍSES, UNÁMONOS!

1
0
jorgenial
10/12/2017 0:58

Gracias por el artículo.

5
0
Economía
En primera persona Instrucciones por si encuentras muerta a tu suegra
Todo el que está en el mundillo sabe que el sector funerario vive casi un duopolio de facto y lo máximo que se está dispuesto a hacer es poner una multa de vez en cuando. Cuando alguien llama a una, ni se imagina al entramado que está llamando.
Educación pública
Iglesia Semana Santa: negocios, procesiones en colegios, inmatriculaciones y fervor
Más allá de la expresión cultural, la Semana Santa tiene una esfera económica que genera millones de euros y otra social que le sirve a la Iglesia Católica para legitimar sus privilegios dentro del Estado español.
Industria
Transición industrial Mecaner, un cierre injusto o cuatro alternativas con mirada ecosocial para mantener la fábrica de Urduliz
ESK y LAB han presentado el ‘Plan de Transición Ecosocial’ que ha elaborado la cooperativa Garúa como una herramienta para la búsqueda de soluciones al ERE propuesto por la multinacional Stellantis.
Venga, circula
Venga, circula Un paso, luego otro
Llega un día en el que vemos con claridad algo que solíamos observar en los demás pero que nunca —prometíamos— nos sucedería a nosotros.
Sexualidad
Consultorio de sexualidad ¿Qué tengo si me diagnostican Síndrome de Ovario Poliquístico?
Afecta a entre un 7 y un 13% de las mujeres en edad reproductiva, y el 70% están sin diagnosticar. Pero, ¿qué es el SOP y como podemos apaciguar sus síntomas?
Palestina
Palestina Viaje al fondo del horror
El fotoperiodista Javier Bauluz cubrió la primera Intifada, la primera gran rebelión del pueblo palestino desde la creación del estado israelí.
Ocupación israelí
Opinión Las palestinas también existen
La morbilidad femenina, el conjunto de enfermedades, factores de riesgo y motivos de consulta recurrentes en las mujeres que merecen una atención específica, tiene múltiples ejes de discriminación: no es lo mismo en Suecia que en Palestina.
Argentina
Argentina Myriam Bregman: “El de Milei es un típico gobierno neoliberal con recetas ortodoxas clásicas”
Quien fuera candidata de la izquierda a la presidencia en las elecciones en las que Milei salió victorioso, evalúa las consecuencias del gobierno de La Libertad Avanza y las respuestas que están dando los distintos actores políticos.

Últimas

Ocupación israelí
Palestina El Salto te ofrece una camiseta para apoyar económicamente a la UNRWA
No cesamos de buscar nuevas vías para visibilizar un mayoritario clamor social que pide un alto el fuego al que apenas se da cabida en el discurso mediático convencional. Todos los beneficios de esta campaña irán destinados a la UNRWA.
Maternidad
Maternidades Reaprender la espera
El tiempo de gestación es largo y va a un ritmo distinto al que acostumbras: el ritmo natural al que desarrolla una playa, un monte, un océano. Y no estamos ya habituados a darle la mano a la pausa.
Momus Operandi
Momus operandi Todo es una narración
Nos dicen que las mentiras son la única realidad. Que aprendamos a mentirnos, que nos engañemos, que no nos importa la salud, ni los derechos laborales, ni las violencias estructurales.
Accidentes laborales
Accidentes laborales Detenidos tres empresarios en Galicia tras la muerte de un migrante que trabajaba sin equipo de protección
El joven de 28 años, que estaba empleado con un contrato irregular, falleció el 26 de febrero tras precipitarse desde una carretilla elevadora sin la protección necesaria para esa labor.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda La PAH València clama por el derecho a una vivienda digna: “¿Duermen tranquilos?”
Centenares de personas protestan frente al palacio de la Generalitat para exigir que se haga efectivo el derecho a la vivienda ante la insoportable alza de los precios.
Sidecar
Sidecar Crisis intratable en la República Democrática del Congo
Una y otra vez los actores externos han fracasado a la hora de contener la escalada de violencia en la República Democrática del Congo.
Deportes
Rugby femenino +35 Las Milnoh Granada, un club de rugby femenino +35 creado y gestionado por mujeres
32 mujeres nacidas en mil novecientos y pico, federadas en un equipo que les ha dado un espacio propio, sentido de pertenencia, una tribu donde “yo soy porque somos”

Recomendadas

Ríos
Radiografía fluvial de España La tierra que no amaba sus ríos
Los ríos ibéricos agonizan. Casi la mitad de las masas de agua está en mal estado. Presas, sobreexplotación, contaminación y crisis climática son sus principales amenazas, con la agroindustria como mayor agresora.
Memoria histórica
Marc Solanes “Mi bisabuela luchó en el frente y fue considerada una mala madre, pero lo hizo por sus hijas”
En ‘Las niñas de Elna’ (Pollen, 2024) el periodista reconstruye la historia de las mujeres de su familia resolviendo enigmas para resignificar la imagen de la mujer en la historia.
Euskal Herria
Korrika Correr a favor del euskera cruzando fronteras
La Korrika es el mayor evento de Euskal Herria. En la última edición de esta carrera de más de 2.500 kilómetros ha participado un tercio de la población vasca.
Cine
María Alché y Benjamín Naishtat “El cine puede proponer imágenes y reflexionar, y por eso Milei necesita destruirlo”
María Alché y Benjamín Naishtat dirigen ‘Puan’, una película optimista y amarga, entre la comedia y el cine social, que ofrece nuevas lecturas tras los primeros cien días de gobierno de Milei en Argentina.