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Comercio
En defensa de la economía de nuestro barrio
Comerciantes, hosteleros y vecinas del Casco Viejo de Bilbao se movilizan para denunciar al Ayuntamiento y su ciudad para las multinacionales que margina los intereses de los pequeños establecimientos. Hacen reivindicaciones concretas como ayudas y subvenciones directas.
El viernes, 5 de junio, las vecinas y vecinos del Casco Viejo de Bilbao nos reunimos para reivindicar y defender al pequeño comercio y hostelería, frente a las políticas públicas insuficientes que plantea el Ayuntamiento para paliar las consecuencias devastadoras que ha dejado la crisis sanitaria, que inevitablemente se ha convertido en crisis económica y social.
“Sos Alde Zaharra llevamos años denunciando el modelo de turistificación y gentrificación que se impone desde el Ayuntamiento a favor de las grandes multinacionales y que merma las posibilidades de los y las pequeñas comerciantes”
Desde Sos Alde Zaharra, llevamos años denunciando el modelo de ciudad que se potencia y se impone desde el Ayuntamiento, donde la economía basada en la turistificación y gentrificación, vela a favor de las grandes multinacionales y merma las posibilidades de los y las pequeñas comerciantes, anulándolas y obligándolas a desaparecer en muchos casos. Asimismo, el incremento del precio de la vivienda es el reflejo de como muchas de las personas que vivían en el barrio han sido expulsadas, debido a estas políticas que facilitan la permanencia de grandes inversores, frente a la de los vecinos y vecinas que, debido al encarecimiento de los alquileres, se ven obligadas a marcharse.
Alquiler
La ruina de los alquileres en Euskal Herria
Este estado de alarma ha sido una lupa de lo que ya venía pasando hace tiempo, agrandando y haciendo visible lo que, en muchos casos, se mantiene invisibilizado y recae sobre la persona de forma individual, siendo una tarea que debe ser gestionada de forma colectiva. Un claro ejemplo de ello son los gastos que implica tener un pequeño comercio que sea sostenible con el entorno, que respete los derechos y los tiempos de las personas que trabajan en él, que tengan condiciones dignas donde la vida pueda acontecerse más allá del trabajo. Dignos objetivos que se convierten en una tarea especialmente dificil, debido al ahogo que suponen los gastos frente a los ingresos, potenciado por el abandono de parte de las instituciones publicas. En este tiempo que nos acontece, muchos comercios nos encontramos con ingresos nulos, frente a gastos que corren y siguen sumando.
"La crisis del 2008 y la economía basada en el turismo han conllevado el cierre de 170 pequeños comercios en los últimos 10 años”
Ante esto, 90 comerciantes y hosteleras del barrio, junto con las vecinas y vecinos, hemos hecho una declaración en defensa de la economía de nuestro barrio, ya que “en los últimos años, franquicias y grandes multinacionales han expulsado a pequeños comercios del barrio. La crisis del 2008 y la economía basada en el turismo, han conllevado el cierre de 170 pequeños comercios en los últimos 10 años”
Las medidas de aislamiento para hacer frente a la crisis sanitaria han obligado al suspenso de la actividad laboral. Ante esta nueva crisis económica que ya está afectando a los pequeños comercios del barrio, hemos detectado que al menos doce no han podido reabrir sus puertas, “e intuimos que más comercios se verán obligados a cerrar. Tere Olaizola Azumendi, comerciante de Buztin artean, hace hincapié en la importancia de generar identidad a través de la acción de consumir en el medio local y que las instituciones públicas lo posibiliten. “Cuando consumimos en el pequeño comercio, estamos contribuyendo a generar barrios y ciudades con identidad propia, además de hacer circular el capital, y conseguir que repercuta en nuestra economía“, declara. Así mismo, considera que ”para que sobrevivamos, necesitamos que las políticas de nuestras instituciones públicas sean contundentes, que se estudien nuestras necesidades y se escuchen nuestras peticiones, adecuando las ayudas a las diversas circunstancias, sin generalidades”. Imanol Carretero Gomez, comerciante del Casco Viejo en Optica Mal de Ojo, afirma que “al pequeño comercio se le llama comercio de cercanía por la sencilla razón de que aporta un trato cercano de una persona cercana. Es crucial, que todas las instituciones las apoyen y fomenten el consumo en este tipo de locales, para que se refuerce el barrio y la unicidad de la ciudad como tal.”
“Con muchas persianas bajadas, ¿qué respuesta van a dar las instituciones públicas? ¿Qué medidas proponen?“, se preguntan, ya que ”las medidas anunciadas hasta la fecha han creado un estado de incertidumbre e insatisfacción entre las y los comerciantes, así como en las vecinas y vecinos que quieren seguir consumiendo en sus pequeños comercios cercanos”.
Comercio
En defensa de lo pequeño
Asimismo, desde SOS ALDE ZAHARRA junto con las y los comerciantes y hosteleros, denunciamos que “en el pleno de Bilbao del pasado 28 de mayo, el gobierno municipal planteó que el “Plan Aurrera” sería suficiente para paliar las consecuencias económicas que el cierre ha conllevado. Por tanto, solo se proponen medidas como bonos, que no se sabe cuándo llegarán, además de flexibilizar el número de terrazas y ofrecer nuevas licencias o reducir algunas tasas. Pero no se recogen ayudas para casos como pago de alquiler del establecimiento, la merma de la facturación o el gasto por aprovisionamiento de género”.
Consideramos que “el Ayuntamiento mantuvo que las ayudas destinadas desde el Gobierno vasco serán suficientes para paliar la crisis. Además, tuvo la desfachatez de afirmar que la mayoría de los comerciantes de Bilbao creemos que las ayudas directas no son necesarias, eso sí, sin demostrar las fuentes en qué se basa para realizar tal afirmación”.
“Las dificultades que muchas comerciantes y hosteleras del barrio estamos teniendo para reactivar nuestro negocio las vamos a tener que solventar individualmente, ya que no se va a dar ningún tipo de ayuda directa”
Lo que queda claro en palabras textuales de los y las comerciantes es “que las dificultades que muchas comerciantes y hosteleras del barrio estamos teniendo para reactivar nuestro negocio las vamos a tener que solventar individualmente, ya que no se va a dar ningún tipo de ayuda directa a los pequeños negocios. Una vez más, y siendo uno de los sectores más golpeados de la crisis, nos encontramos solas frente a una realidad social llena de incertidumbre”. Ante esta situación, en nuestra declaración exigimos:
- Que se estudie con máxima urgencia las necesidades más apremiantes de los pequeños comercios y establecimientos de hostelería del barrio.
- Conceder subvenciones directas para gastos generados durante la alarma sanitaria: renta, género, gastos corrientes.
- Que las ayudas sean para todos/as y que la escasez no lleve a competir entre los y las comerciantes (complementariedad con otras ayudas).
- Que el ayuntamiento, de una vez por todas apueste por una economía basada en las pequeñas tiendas, talleres y bares. Ya que, este modelo económico es de vital importancia para el desarrollo y bienestar de nuestro barrio, haciéndolo más humano y sostenible.
De esta forma, “exigimos que se tengan en cuenta los postulados anteriormente mencionados a la hora de implementar medidas públicas de apoyo al comercio y, por tanto, se diseñen ayudas que respondan tanto a las necesidades reales del pequeño comercio y hostelería, como a las necesidades del vecindario que apuesta por un comercio cercano y sostenible que potencie la economía circular".