Juicio del 1 de Octubre
La objeción de conciencia de las testigos frente al Tribunal Supremo

¿Puede una testigo ejercer una objeción de conciencia en un juicio? ¿Está obligada a contestar a preguntas si le produce un perjuicio moral? ¿Cómo afecta la presencia de un partido de extrema derecha en un juicio a los y las testigos?

Eulàlia Reguant Tribunal Supremo
Eulàlia Reguant en su declaración testifical en el Tribunal Supremo
Abogado penalista de Red Jurídica
26 mar 2019 13:00

Frente a la extrema derecha, frente a un partido machista y xenófobo, no aceptaré contestar a las preguntas”. Esta contundente frase fue proferida por Eulàlia Reguant el pasado 27 de febrero, en la sala de vistas del Tribunal Supremo. Sucedió en el marco del Juicio por el 1 de octubre, justo en el momento en el que el Presidente de la Sala de lo Penal, Manuel Marchena, le dio la palabra a Vox para que interrogara a la testigo.

La reacción del tribunal no fue de sorpresa, puesto que minutos antes, Antonio Baños había manifestado algo similar: “comprendo perfectamente, pero por dignidad democrática y antifascista me niego a contestar, a reconocer y a ser interrogado por Vox; no así, si me permite, por las otras partes, a las cuales contestaría con sumo gusto”.

El magistrado Marchena se despidió de ambos testigos advirtiéndoles de las posibles consecuencias penales de sus acciones (“tenemos que dejar constancia de su negativa y deducir testimonio ante el Juzgado de Guardia por las posibles – que no lo sé – pero posibles responsabilidades penales en que haya podido incurrir”, le dijo a Reguant) y se negó a que el resto de partes pudieran formular preguntas (con el posible perjuicio que ello pudiera acarrear a las mismas).

Sin embargo, días después, los dos testigos recibieron notificaciones judiciales por procedimientos que no eran de naturaleza penal: la Sala había decidido incoar un expediente sancionador e imponerles sendas multas de 2.500 euros.

En el aspecto técnico, estas sanciones no se habían acordado siguiendo el procedimiento reglado previsto para la “corrección” de testigos (utilizando la terminología de la Ley Orgánica del Poder Judicial). Y es que la legislación prevé que, para poder “corregir” (o multar) a un testigo, se le ha de comunicar in situ el inicio del expediente sancionador, se le ha de dar audiencia y escuchar los argumentos que quiera esgrimir y se le ha de notificar en el acto la decisión del tribunal. Por ello, al prescindir el acuerdo de sus normas procedimentales esenciales, el acuerdo ha de devenir nulo.

En el plano de fondo, resulta más que cuestionable que la conducta de los testigos mereciera sanción alguna. Y es que la Ley Orgánica del Poder Judicial prevé la “corrección” de testigos cuando falten al respeto “a jueces, fiscales, secretarios judiciales y resto del personal al servicio de la Administración de Justicia”, lo cual no sucedió en este supuesto. Únicamente manifestaron su deseo de no contestar a preguntas de la acusación popular, pero no faltaron a la consideración de ningún miembro de la Administración de Justicia.

Ambos actuaron por una suerte de objeción de conciencia, un sentimiento de deber moral de rehuir del papel que está jugando la acusación popular en este caso. Se trata, en definitiva, de un acto de desobediencia civil, a lo que John Rawls definió como un “acto público no violento, consciente y político, contrario a la ley, cometido habitualmente con el propósito de ocasionar un cambio en la ley o en los programas de gobierno”.

Los positivistas jurídicos más estrictos defienden a ultranza la literalidad de la Ley sin más matices e interpretaciones. En consecuencia, desde su punto de vista, sólo cabría imponer una pena o sanción por vulnerarla. Pero pensadoras como Hannah Arendt opinan que la desobediencia civil se puede ver amparada en el ejercicio de tres derechos fundamentales: la libertad de conciencia (desde un punto de vista moral, se combate una ley injusta), la libertad de expresión (al realizar una acción de denuncia) y el derecho a la participación política (con su acción, se busca mejorar la Ley).

Y, a propósito del primero de ellos (la libertad de conciencia), en el caso de Reguant y Baños, se podría decir que les ampara el artículo 418 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que establece que “ningún testigo podrá ser obligado a declarar acerca de una pregunta cuya contestación pueda perjudicar material o moralmente y de una manera directa e importante, ya a la persona, ya a la fortuna de alguno de los parientes que se refiere el artículo 416”.

Evidentemente, tal y como ambos expresaron (“por dignidad democrática y antifascista” en el caso de Antonio Baños y “frente a un partido machista y xenófobo” en el de Eulàlia Reguant), interactuar con el representante de un partido que cumple todas estas características les provocaría un innegable perjuicio moral. Tanto es así que ambos han preferido no contestar sus preguntas “asumiendo las consecuencias” (en sus propias palabras) que someterse a un interrogatorio formulado por dicha parte.

Lo que ha evidenciado la postura de los dos testigos es que, si no se hubiera permitido a Vox abusar de la acusación popular para hacer de altavoz de su ideario político (el cual, por cierto, es contrario en gran medida a buena parte de los tratados internacionales en materia de derechos humanos suscritos por el Estado español por su postura de discriminación hacia mujeres, personas LGTBi+, personas trans y migrantes), las partes podrían haber escuchado sus testimonios. Y es que nuestro ordenamiento, que es de los pocos que prevé la figura de la acusación popular, prohíbe el uso torticero de esta institución con fines electoralistas y no de justicia, ni de interés general; un uso que, una vez acreditado en el procedimiento debe comportar su corrección mediante la expulsión del procedimiento. Esto es lo que solicitó hace unas semanas la Comisión de Defensa del Ilustre Colegio de la Abogacía de Barcelona, cuando pidió que se apartara de la acusación popular a Vox, porque entendía que su objetivo era “visibilizar su programa político”.

Y no sería la primera vez que se hiciera algo así. Por ejemplo, en el 2010, el mismo Tribunal Supremo apartó de la querella contra Garzón a la Falange Española de las JONS, tras negarse a modificar su escrito de acusación “demasiado valorativo”.

Hacer lo mismo en el marco del actual procedimiento sería una medida idónea para reforzar el compromiso de la Justicia con los principios de igualdad, no-discriminación y defensa de las oprimidas. Y no requeriría de que personas comprometidas con estos valores tuvieran que incurrir en actos de desobediencia civil para salvaguardarlos.

Sobre este blog
Este es un blog coordinado por la cooperativa jurídica madrileña Red Jurídica, con colaboraciones ocasionales de profesionales del mundo jurídico de distintas partes del Estado, en el que intentamos explicar, desde una perspectiva crítica, la actualidad jurídica
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Análisis
Análisis Inmigración, trenes e ilusiones de soberanía
El mayor beneficiario de la situación política en Catalunya sigue siendo el PSC, que ve cómo la definitiva irrupción demoscópica de Aliança Catalana reduce el campo de los principales partidos del independentismo.
Análisis
Análisis El independentismo en la Cataluña posprocés
El entierro del procés ha tenido muy pocas plañideras. Si algo evidenciará la próxima Diada será el fantasma de la división, la fragmentación y las peleas internas dentro del independentismo.
Justicia
Justicia García Castellón cierra el caso con el que quiso asociar el terrorismo con el movimiento independentista
Un error del magistrado ha provocado que él mismo se haya visto abocado a cerrar la causa por la que se quería evitar que Carles Puigdemont y otros líderes del Procés se acogieran a la Ley de Amnistía.
Sobre este blog
Este es un blog coordinado por la cooperativa jurídica madrileña Red Jurídica, con colaboraciones ocasionales de profesionales del mundo jurídico de distintas partes del Estado, en el que intentamos explicar, desde una perspectiva crítica, la actualidad jurídica
Ver todas las entradas
Baleares
Un modelo insostenible El rechazo a la turistificación se expande en Canarias, Baleares y Barcelona
Tras la masiva manifestación en las Islas Canarias del pasado mayo, Palma de Mallorca, Barcelona y San Sebastián salen este 15 de junio a la calle contra un modelo de turismo desmedido insostenible para el territorio y sus habitantes.
Oriente Medio
Oriente Medio Decenas de muertos en una noche de sirenas e intercambio de misiles entre Israel e Irán
Después del ataque israelí contra la infraestructura energética y militar iraní, cientos de misiles iraníes atraviesan el cielo israelí e impactan en Tel Aviv, Bat Yam, Tamra y Haifa.
Rap
Rap Los Chikos del Maíz: “La música urbana está llena de fachas y votantes de Vox”
Tras un fin de gira accidentado, Toni y Nega dan una tregua indefinida a su proyecto con dos conciertos en Madrid. Horas antes de llenar la sala en la primera cita, visitan la redacción de El Salto.
Violencia machista
El Estado que revictimiza Violencia institucional: “Si lo hubiera sabido antes, no hubiera denunciado nunca”
Rocío ha sufrido violencia psicológica, física y sexual por parte de su expareja. Y también violencia institucional en todas las puertas de la red de recursos institucionales que ha ido atravesando.
Crónica
Justicia En la sala de un juicio a una madre protectora
Esta es una crónica de un juicio a una mujer que pidió medidas por sospechar de abusos sexuales a su hija en el domicilio paterno sin que ninguna institución moviera un dedo y, un mes después, cogió un vuelo a su país para intentar protegerla.
Editorial
Editorial Justicia irracional
Por acción o por omisión, las instituciones pueden violentar a las mujeres. Se llama violencia institucional.
Ocupación israelí
Movilizaciones Un centenar de organizaciones de 26 países denuncian a la empresa vasca CAF y su tren del apartheid
Más de 50 localidades salen a la calle este fin de semana para señalar a la empresa que construyó el tranvía que conecta Jerusalén con territorio ocupados y exigir el fin del genocidio en Gaza.
Ocupación israelí
Ocupación Israelí La policía egipcia impide con violencia la marcha internacional a Gaza
La marcha de 4.000 personas a Gaza es reprimida por la policía del régimen de Al-Sisi. La organización pide a las embajadas que reaccionen y protejan a sus ciudadanos.
Río Arriba
Río Arriba Luis González Reyes: “Vivimos en un mundo en la que la escasez es un elemento central”
Primera entrevista del programa Río Arriba en formato podcast y vídeo donde hablamos de las nuevas guerras neocoloniales por recursos en la era de Trump y Putin, de la escasez, del decrecimiento y el colapsismo.

Últimas

Que no te lo cuenten
El Salto Radio De océanos y detenciones
VV.AA.
La acidificación del agua marina supera sus límites mientras Israel aborda la Flotilla por la Libertad.
Análisis
Análisis del CIS La calma antes de la tormenta: la dimisión de Santos Cerdán como punto de inflexión
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha muerto pocas horas después de nacer por la dimisión de Santos Cerdán, aunque sirve como foto fija de un escenario que favorece a la derecha.
Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.
Más noticias
Estados Unidos
Estados Unidos “No Kings”: más de 2.000 manifestaciones en EEUU para protestar contra la deriva autoritaria de Trump
Con el nombre de movimiento No Kings (sin reyes), millones de personas están convocadas a manifestarse en todo el país este sábado y enfrentar el desfile militar organizado por Trump el día de su 79 cumpleaños.
Galicia
TSXG Peritos en el juicio contra la Xunta: la contaminación del embalse de As Conchas es “extremadamente peligrosa”
Siete vecinos, la Asociación de vecinos de As Conchas y la organización de consumidores CECU han demandado a varias administraciones gallegas por presunta mala gestión de una contaminación derivada del exceso de macrogranjas en la comarca de A Limia.

Recomendadas

Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.
Derecho a la vivienda
Jaime Palomera “La vivienda necesita una revolución”
Investigador y uno de los fundadores del Sindicat de Llogateres, Jaime Palomera presenta ‘El secuestro de la vivienda’, un libro sobre el juego amañado en el que los propietarios son cada vez más ricos y los inquilinos cada vez más pobres.
Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Brasil
Extrema derecha Arte en tiempos de fascismo: cuando enseñar a Goya y Rubens le cuesta el puesto a un profesor
Una clase de Historia en la escuela municipal en una localidad del Estado de São Paulo desemboca en acusaciones contra el profesor y una campaña de difamaciones que encabeza el concejal de educación de la zona, de la extrema derecha bolsonarista.