Política
Feijóo, el PPdeG y la hegemonía

Está claro que Feijóo es el mayordomo político de las élites económicas, pero la izquierda parece conformarse con ser la aristocracia cultural de unas subalternas eternamente regañadas.

Feijoo
30 jun 2020 09:40

¿Por qué gana la derecha?”. Este es el título de un vídeo de 2012 en el que Xosé Manuel Beiras explicaba a Pablo Iglesias, en La Tuerka, las razones de las victorias electorales del PP. Pero también es un excelente resumen de la teoría de la dominación que forma parte de la filosofía espontánea de la izquierda gallega. Según Beiras, la sociedad estaría dividida entre una minoría activa de ciudadanos ejercientes y desalienados y una mayoría pasiva de ciudadanos no ejercientes (excepto para votar) y sometidos a la alienación través de la mercadotecnia, a la manipulación y a los poderes mediáticos. Poniendo de ejemplo el caso del Prestige y la escasa traducción política del descontento en las elecciones, Beiras subraya cómo los “segmentos activos, lúcidos y que piensan en términos críticos” no son capaces así de operar grandes transformaciones. Como culminación de este argumento, el líder nacionalista encuentra actualmente impensables los cambios sociales importantes a través de elecciones.

Esta filosofía espontánea de la dominación es una de las herencias fosilizadas de la vulgata leninista, la de la noción de “ideología” como engaño, ilusión, estafa u ocultación que habría que desvelar (la desafortunada metáfora del “rey desnudo” que se está usando en esta campaña). Pero también tiene que ver con el inconsciente profesoral de buena parte de los cuadros y dirigentes del nacionalismo gallego. En este sentido, Bourdieu hablaba de la “vanidad” de las tomas de posición políticas “que consisten en esperar una verdadera transformación de las relaciones de dominación” como “fruto de la predicación racional y la educación o, como a veces piensan de forma ilusa los maestros, de una amplia logoterapia colectiva cuya organización correspondería a los intelectuales”.

Ninguna “revelación”, incluso aunque sea en el programa de Jordi Évole, va a ser decisiva para erosionar la hegemonía de un partido al que la gente no vota precisamente porque piense que es impermeable a la corrupción

Tal concepción de la dominación acaba produciendo consecuencias graves: la primera, una relación paternalista con los subalternos, éticamente intolerable y políticamente nefasta (cuyo corolario son los ya tradicionales insultos a las clases sociales que se pretende defender —los dinosauros que amaban a los meteoritos, las ciudades en descomposición, el pueblo suicida, etc...—, explicitados cuando los resultados electorales son frustrantes) y que, además, nos inhabilita para dar cuenta de las verdaderas causas que hacen “razonable” que la gente común vote a un partido neoliberal como el PPdeG. Naturalmente, el poder miente y manipula en su interés todo lo que puede, pero ninguna “revelación”, incluso aunque sea en el programa de Jordi Évole, va a ser decisiva para erosionar la hegemonía de un partido al que la gente no vota precisamente porque piense que es impermeable a la corrupción.

Con esta pobre artillería conceptual la izquierda no parece tener mucho que hacer al enfrentarse con una cultura política, la del PPdeG, fundada por un hombre como Fraga que en la década de los 50 ya citaba a Gramsci para las batallas culturales del nuevo franquismo proestadounidense y que, en el proceso autonómico, inició uno de los ejemplos más impresionantes de revolución pasiva. También Feijóo está demostrando ser un discípulo más que solvente, que sabe partir del sentido común popular para direccionarlo hacia sus intereses neoliberales, que continúa practicando con éxito eso que el comunista sardo llamaba “transformismo” y que sabe, sobre todo, que las identidades políticas no vienen predefinidas por las relaciones económicas objectivas sino que se construyen y se disputan en las batallas culturales, en ese terreno ambiguo por excelencia que es lo nacional-popular.

Llamarle fascista puede ser moralmente muy reconfortable, pero el adjectivo oculta mucho más de lo que ayuda a comprender. Esta es una de las lecciones básicas de Stuart Hall, quien en su libro El largo camino de la renovación. El thatcherismo y la crisis de la izquierda analiza el proyecto hegemónico thatcherista, que cualifica de “populismo autoritario” y que tiene muchos puntos en común con el del populismo conservador gallego. Para el teórico jamaicano, “su éxito y su efectividad no residen en su capacidad para embaucar a un pueblo ignorante, sino en la forma en que se dirige a problemas y experiencias reales y vividas, a contradicciones reales y cómo, además, es capaz de representarlas dentro de una lógica discursiva que las alinea sistemáticamente con las políticas y estrategias de clase de la derecha”.

Está claro que Feijóo es el mayordomo político de las élites económicas, pero la izquierda parece conformarse con ser la aristocracia cultural de unas subalternas eternamente regañadas, que no solo son las que más padecen el estigma étnico y las desigualdades de clase sino que además tienen que ver como son continuamente (en cada gesto) suspendidas en exámenes espontáneos de conciencia nacional o de clase.

Archivado en: Galicia Política
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Opinión
Política y religión El alcalde, el embutido, la Constitución y el president
No sé cómo voy a explicar a mis familiares jóvenes la Constitución, las CC.AA., la Diputación y sus diputados detrás de santos.
Francia
Francia El Gobierno de Francia, a la deriva tras la caída de Barnier en una moción de censura
La moción de censura impulsada por la Francia Insumisa sale adelante con 311 votos a favor. Barnier presenta su dimisión en el Palacio del Elíseo en el que ha sido el Ejecutivo con menor duración de la historia.
Literatura
Durangoko Azoka Zeren zain zaudete, irakurleok?
Urtero bezala, abenduko zubian, Durangoko Azoka. Nobedadez, eragilez zein komertzialez josita.
#64370
1/7/2020 8:48

Muy buen análisis, enhorabuena

0
0
#64349
30/6/2020 17:52

Lo que es evidente es que la batalla cultural es una herramienta fundamental del espectro ideológico y es la que la izquierda más descuidada hemos dejado. Elementos como el cine, medios de comunicación, series, música, etc, deben de ser utilizados como armas contrahegemonicas, con la que romper esos mitos liberales del esfuerzo individual, emprendimiento y avaricia.
Sin ellos, no es posible generar un cambio efectivo en la correlación de fuerzas que posibilite tal transformación social

2
0
Pensamiento
Sarah Jaffe “En realidad tenemos que hacer menos. E impedir que algunas cosas sucedan”
La escritora y periodista Sarah Jaffe aborda el desengaño cotidiano al que nos aboca el mundo laboral e investiga cómo, a pesar de todo, las personas se organizan colectivamente en sus empleos para que “trabajar apeste menos”.
Ocupación israelí
Palestina Vivir en alerta: la resistencia palestina frente la ocupación israelí
La cruda realidad de las feministas palestinas que, ante la represión y las detenciones arbitrarias, continúan su lucha por la libertad, la justicia y los derechos humanos.
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Análisis
Análisis El independentismo se reorganiza, pero ¿sigue siendo independentista?
Los partidos independentistas han sufrido la crisis del procés y el posprocés, y todavía no la han resuelto, sino, a lo sumo, la han aplazado. El PSC aparece como el ganador de una carrera con corredores agotados.
Madrid
Ciudades Fake Madrid, un paseo por los hitos del simulacro
Un recorrido por los grandes éxitos de la conversión de Madrid en una ciudad irreal.
Opinión
Opinión Sobrevivir pagando en el Álvaro Cunqueiro
Una de las victorias ideológicas del PP de Feijóo en Galicia ha sido hacernos creer que pagar por servicios esenciales en los hospitales durante el cuidado de nuestros enfermos es lo natural, que no hay otra manera de abordarlo, pero es mentira.

Últimas

Palestina
Eyad Yousef “No cuentes lo que queremos ser, cuenta lo que nunca hemos dejado de ser: un pueblo que quiere la paz"
Eyad Yousef es profesor en la Universidad de Birzeit, Cisjordania, y comparte su experiencia en una universidad que “representa el pluralismo y la libertad que tanto anhela la sociedad palestina”
Siria
Oriente Próximo Israel impone hechos consumados sobre Siria para condicionar la transición según sus intereses
“Está escrito que el futuro de Jerusalén es expandirse hasta Damasco”, dijo este octubre el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, uno de los exponentes ultras del Ejecutivo.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Un tercio de los asesinatos de periodistas en 2024 fueron obra del ejército de Israel
Reporteros Sin Fronteras documenta la muerte de 18 periodistas en Palestina y Líbano este año “asesinados deliberadamente por hacer su trabajo” y habla de una “masacre sin precedentes” de profesionales del periodismo.
Crisis energética
Análisis Los aerogeneradores no son molinos, son gigantes
El megaproyecto eólico del Clúster Maestrazgo, punta de lanza del capitalismo verde, destruirá un área natural de alrededor de 1325 campos de fútbol.
Ecofeminismo
COP29 La brecha de género en las Cumbres del Clima
VV.AA.
Las cumbres del clima no están aisladas del resto de espacios políticos y también están atravesados por las dinámicas patriarcales, pero ¿en qué lo notamos? ¿cómo abordan las negociaciones climáticas las políticas de género?
Más noticias
Galicia
Galicia Activistas de Greenpeace instalan ‘una celulosa’ en la sede de la Xunta en protesta contra Altri
Los ecologistas han realizado una acción en la sede del Gobierno gallego de Alfonso Rueda para animar a gallegos y gallegas a asistir a la manifestación de este domingo en la Praza do Obradoiro, en Santiago de Compostela.
Comunidad de Madrid
Educación pública El Gobierno de Ayuso recula y aplaza hasta junio los despidos masivos en Educación
Integradoras sociales, enfermeras, educadoras, auxiliares y otros perfiles de personal laboral se enfrentaban a la incertidumbre de ser cesados en plenas vacaciones de Navidad.

Recomendadas

Fronteras
Túnez Túnez endurece la represión contra las ONG de ayuda a las personas migrantes
Mientras el presidente Kaïs Saied se prodiga en discursos racistas, el estado persigue a las entidades solidarias con quienes llegan al país, bajo el silencio cómplice de la Unión Europea.
Galicia
Economía ¿Quién lidera el negocio del eucalipto en Galicia al que Altri quiere sumarse?
El estallido social que ha producido el intento de la multinacional Altri y la Xunta de instalar una nueva celulosa en Galicia abre la necesidad de poner el foco en el sector forestal, donde se encuentran algunas de las mayores fortunas del Estado.
Siria
Rojava El rompecabezas sirio que estalló en Alepo
El nuevo escenario sirio se ha gestado bajo la intervención implacable de Turquía, patrocinadora del Ejercito Nacional Sirio y otros grupos yihadistas que libran la guerra de Erdogan contra el pueblo kurdo.