Mujeres africanas unidas contra los microcréditos, la estafa a las más pobres

Ser mujer, pobre y africana. Son los tres requisitos preferidos por los buitres de los microcréditos que, con la excusa de combatir la pobreza y con el beneplácito de organismos como Naciones Unidas (PNUD), USAID o el Banco Europeo de Inversiones (BEI), las estafan, las endeudan y las arruinan.

Mujeres africanas unidas contra los microcréditos
Microcréditos, una trampa para las mujeres africanas
29 ago 2017 17:23

Sus víctimas han sufrido amenazas e incluso cárcel, como en Mali; han perdido a sus familias, han caído en la prostitución o se han suicidado, como en Marruecos; o se han sobreendeudado para no morir por no poder pagar una cesárea, como en Congo Brazzaville. Pero las mujeres africanas de distintos países se están liberando, juntas, de la esclavitud de las microfinanzas. Tuvimos la oportunidad de conocer y entrevistar a Fatima Zahra, de Marruecos; Amelie, de Congo Brazzaville; Emilie, de Benin; y Fatimata, de Mali, en el transcurso de la Asamblea Mundial del Comité Por la Abolición de las Deudas Ilegítimas (CADTM), que tuvo lugar en abril en Túnez. Nos contaron sus experiencias.

Fatimata Boundy es una profesora jubilada de Mali. Asegura que en su país hay decenas de mujeres encarceladas por no poder hacer frente a las deudas provocadas por microcréditos de unos 150.000 francos CFA (unos 228 euros). Son mujeres que se dedican a la actividad informal, al pequeño comercio, al mercado ambulante, etc. En el momento en que no pueden devolver los intereses abusivos, son presionadas, retirados sus bienes e incluso detenidas. Los juicios aún no se han producido. “Hemos pedido solidaridad internacional. Habrá un encuentro de mujeres en Mali en 2017”, asegura Fatimata.

El de Mali se producirá después de la caravana internacional reivindicativa de mujeres contra los microcréditos que se celebró en Ouarzazate (Marruecos) en 2014. Fatimata participó en ella y pudo escuchar los testimonios de las víctimas marroquíes. “Una mujer, por culpa de las deudas, perdió su trabajo, a su marido y su único hijo se fue a la aventura. Me puse en su lugar y me llené de dolor. Ese día lloré”, relata.

Fatima Zahra: “La banca internacional tiene intereses estratégicos entre Norte y Sur. La pobreza es su mercado”

Fatima Zahra, estudiante marroquí de francés, de 30 años, explica que los agentes de las microfinanzas despachan microcréditos a mujeres que no saben leer ni escribir a intereses que pueden alcanzar el 45%. Como garantía, van a sus casas para ver si tienen algo de valor. Cuando ya no pueden pagar, vuelven a sus casas y les obligan a vender sus bienes. “Algunas mujeres se han prostituido. Otras se han suicidado. O han escapado de sus casas por la humillación y pierden a sus familias. Sus problemas con los microcréditos se trasladan a sus hijos, que dejan de estudiar para ayudar a sus madres a pagarlos. Incluso han llegado a ofrecer préstamos a niños en el instituto. Provocan problemas psicológicos y sociales”, explica.

Con 12 instituciones y más de un millón de clientes activos con una exposición de 500 millones de euros, el sector de las microfinanzas en Marruecos es el más dinámico de la región MENA (Oriente Medio y Norte de África), según Jaïda (Fondo de Financiación de Organismos de Microfinanzas en Marruecos). Su web informa sin pudor de que “la tasa de interés está liberalizada”.

Las instituciones locales de microfinanzas están amparadas por el régimen dictatorial, el Majzén, financiadas por el sector financiero marroquí (Bank-Al-Maghrib) o CDG (Caisse de Dépôt et de Gestion) y extranjero y subvencionadas por organizaciones internacionales como el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Agencia de USA para el Desarrollo Internacional (USAID), el Banco Europeo de Inversiones (BEI), o la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).

Por ejemplo, entre los accionistas fundadores de Jaïda figuran entidades presuntamente dedicadas al desarrollo alemanas, como la KfW (banco de desarrollo alemán) y francesas, como la CDC (Caisse de Dépôts et Consignations) y la AFD (Agencia Francesa de Desarrollo). A menudo, detrás de estas instituciones de microcréditos hay importantes personalidades nacionales o internacionales. La asociación de microcréditos INMAA está vinculada a la ONG AMSED y a PlanetFinance, del ‘capo’ Jacques Attali, fundador de Acción contra el Hambre, mientras que Al Amana ha tenido como presidente de honor a Driss Jettu, ex primer ministro de Marruecos con Mohamed VI.

Las mujeres africanas y la esclavitud de los microcréditos. Eduardo Luzzatti.

“La banca internacional tiene intereses estratégicos en el contexto global político y económico entre Norte y Sur. La pobreza es su mercado”, asegura Fatima Zahra. En su opinión, el movimiento de asociaciones de víctimas de los microcréditos es muy importante para “mujeres que han sido capaces de liberarse de todos los dogmas patriarcales, salir a la calle a luchar contra las políticas neoliberales y dejar de pagar. También para rebelarse contra la austeridad que imponen el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), auténticos responsables. No hemos ganado todas las batallas, pero seguimos”.

“Las mujeres, o se endeudan con microcréditos para recibir asistencia sanitaria, o mueren porque no pueden pagar una cesárea”

Amélie Kiyindou, representante farmacéutica de Congo Brazzaville, explica cómo su país aceptó el Programa para los Países Pobres Muy Endeudados (PPME) del FMI y el BM y cómo no invirtió en programas de salud, de modo que las mujeres, o se endeudan con microcréditos para poder recibir asistencia sanitaria, o mueren porque no pueden pagar una cesárea. “Los microcréditos se presentan como una vía para que las mujeres salgan de la pobreza, pero en realidad los intereses les obligan a devolver más de lo que ganan, de modo que encadenan un préstamo con otro. Las que somos conscientes de estas nefastas consecuencias lo que hacemos es informar sobre los riesgos del círculo vicioso del endeudamiento”, añade. Es curioso cómo el FMI promueve conferencias que llevan por título “Finanzas para todos: Promoviendo la inclusión financiera en África Central” y que animan a mujeres pilares de sus familias a caer en las garras de las microfinanzas.

“El FMI y el BM han sobreendeudado mi país. Ahora la misma austeridad se ha instalado en el Norte”

Émilie Atchaka, campesina de Benín, ha encontrado una salida autogestionaria a las necesidades de financiación de las mujeres de su comunidad. Tras los draconianos programas de ajuste estructurales que impuso el FMI a su país desde 1989, su marido perdió el trabajo. Madre de cuatro hijos, tuvo que ser ella la que llevara dinero a casa. Basándose en un sistema de colecta tradicional en África llamado tontina, creó el Círculo de Autopromoción para un Desarrollo Duradero (CADD), “nuestro propio banco de mujeres”, con intereses bajos “que se destinan a formación”. “Nosotras hemos creado esta alternativa porque el Gobierno no ha asumido su responsabilidad”, sostiene.

Émilie cuenta que la desfachatez de las empresas de microcréditos llega al punto de anunciar a través de la radio los nombres de sus morosas. Para ella, “todo esto nos lleva a mucha reflexión. El FMI y el BM han sobreendeudado mi país. Sus programas de ajuste estructural han hecho que las mujeres contraten los microcréditos, que están financiados por la banca mundial. Es una herramienta que arruina a las mujeres, las conduce al sobreendeudamiento y al empobrecimiento. No tienen nada de social, sólo de aprovechamiento. Ahora la misma austeridad se ha instalado en el Norte. Una austeridad que no hace desarrollar nada. Todos los pueblos tienen que tener mucho cuidado con estas instituciones de microcréditos, que son las migajas de la banca mundial. Hay que hacer un seguimiento estricto a esas instituciones y eliminarlas”.

www.femeninorural.com

Cargando valoraciones...
Comentar
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Cargando relacionadas...

Siria
Israel da un paso más en la desestabilización de Oriente Medio y ataca Damasco
Tras varias horas de bombardeos al sur de Siria con la excusa de defender a la comunidad drusa, a la que Israel considera aliada, el ejército isarelí ha atacado la capital del país, Damasco.
Justicia
La justicia española ordena a Juana Rivas que entregue a su hijo menor al padre para su regreso a Italia
Un juzgado de Granada desestima la oposición de Juana Rivas al decreto de la justicia italiana y le ordena que disponga el regreso de su hijo menor a la residencia de su padre en Italia para el próximo martes 22 de julio.
Economía
Montoro, el ministro de los recortes del gobierno del PP, imputado por presunto tráfico de leyes
Un juzgado de Tarragona levanta el secreto de sumario de un caso que involucra a la cúpula de Hacienda de los años de Mariano Rajoy al frente del Gobierno.
El Salto n.79
La celulosa o la vida: periodismo situado y lucha social para frenar un ecocidio
El jueves 17 de julio os esperamos en el CS “A Nubeira” de Vigo para presentar el último número de la revista El Salto.
Aborto
Gritos de “asesina” y citación en comisaría: así es abortar cuando te acosan grupos antielección
A finales de junio, una mujer fue increpada al entrar en la clínica a la que acudió para someterse a una IVE. Su caso no es una excepción. La reforma aprobada en 2022 para castigar estas conductas no ha frenado los hostigamientos.
Madrid
Victoria inquilina: la Justicia reconoce como abusivas seis de siete cláusulas del fondo buitre Nestar
Rotunda victoria del Sindicato de Inquilinos de Madrid y las casi mil familias en huelga de alquileres contra el tercer mayor casero de España, el fondo de inversión Nestar-Azora.
Siria
La justicia, el gran reto de la transición siria
Con más de 100.000 personas desaparecidas y decenas de miles de muertos, la población siria busca justicia mientras el país echa a andar.
Opinión
Racismo en Torre Pacheco
Con todos ustedes: España
Os vengo a presentar a vuestra España racista, esa que no habéis querido ver y lleváis ignorando demasiado tiempo.
Opinión
Lecciones de Torre Pacheco. Combatir el racismo desde la fuerza de clase
El combate contra el racismo no es un combate que se vaya a resolver mediante un ejercicio de intelectualismo moral, se resolverá en la lucha de clases y ese choque marcará la próxima década en Europa.

Últimas

Comunidad El Salto
El Salto estrena nueva página: una web como una casa
Después de un año de trabajo, lanzamos en julio la nueva web de El Salto, con un nuevo diseño, pero, sobre todo, con una nueva Zona Socias llena de ventajas para las personas que hacen posible El Salto con su apoyo.
México
Si México fuera verde: niñas madres, leyes muertas y la lucha por decidir
La viralización de la información sobre partos infantiles revela la realidad de una violencia ignorada en un marco legislativo que obliga a actuar
Murcia
La Fiscalía de Murcia investigará si el presidente de Vox Murcia ha incurrido en delitos de odio
El órgano judicial responde a las denuncias de PSOE, Izquierda Unida y Podemos que apuntan a José Ángel Antelo como instigador de las razzias que se están llevando a cabo en Torre Pacheco.
Opinión
Superman y el ‘reset’ de los superhéroes en crisis
‘Superman’ no es una película de Costa-Gavras, pero ya las declaraciones de Gunn durante la promoción, destacando que es la historia de “un inmigrante”, soliviantaron al trumpismo.
Comunidad de Madrid
Los bomberos forestales madrileños inician una huelga de un mes
Cerca de 80 trabajadores se han encerrado en la sede de Tragsa a la que acusan de no negociar mejoras laborales y ante la “desidia” de la Comunidad de Madrid.
Más noticias
Opinión
Lo de Torre Pacheco tiene un nombre: terrorismo supremacista blanco
Lo que está pasando en la localidad de Murcia es responsabilidad de una narrativa supremacista blanca alimentada por políticas migratorias racistas y por la criminalización y estigmatización que sufren las poblaciones migrantes y racializadas.
Opinión
Integración, valores europeos, y otros grandes chistes racistas
El poder ha sabido rentabilizar bien las migraciones: se explota su fuerza de trabajo para engordar las sacas del capital, se explota su alteridad para que la gente no piense en la desposesión que sufren por culpa de este régimen de la avaricia.
Economía
¿Cómo funciona el mecanismo de defensa que Europa podría activar contra los aranceles de Trump?
Varios gobiernos europeos apuestan y presionan a la Comisión Europea para que active el Instrumento contra la coerción económica contra las amenazas estadounidenses.

Recomendadas

Arte contemporáneo
Palabras contra el poder: la vigencia radical de Barbara Kruger
La primera retrospectiva completa de Barbara Kruger en España presenta los distintos formatos y soportes con los que ha trabajado en las últimas cinco décadas: ‘paste-up’, instalaciones de vídeo, obras en LED y vinilos murales.
Málaga
Málaga, el punto de inversión para los fondos israelíes a pie de playa
Diversos fondos de origen israelí están presentes en proyectos urbanísticos de Málaga influyendo en la turistificación de la provincia mientras se enriquecen con la ocupación de Palestina
Feminismos
Patricia Reguero
“Mis relatos están escritos al lado de otras, arropada por la escucha de otras”
Patricia Reguero Ríos, redactora de El Salto, presenta ‘Todo lo que pasó el día que me mordió mi hija’ (La Imprenta, 2025), un conjunto de relatos que desde lo individual apelan a lo colectivo y que se devoran con una mezcla entre ansiedad y placer.
LGTBIAQ+
Mana Muscarsel
“La amistad da más juego para salir de la lógica de la familia porque tiene menos reglas"
La autora y psicóloga argentina pone en valor la amistad frente a los modelos relacionales centrados en la pareja y la familia. Tampoco le interesa la familia elegida: “Marca una línea muy clara entre lo que pertenece y lo que no”.
Comentarios

Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.

Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!

Cargando comentarios...