15 mar 2018 07:31

El día 8 de Marzo lo que vivimos fue la cristalización de los análisis y estrategias que las mujeres*, de la mano del movimiento feminista, han llevado a cabo durante los últimos años.

En esta era de patriarcado neoliberal descentralizado, la lucha feminista es local y está globalmente coordinada. No hay nada mejor ante la unidad del patriarcado diversificado que la pluralidad del feminismo unido. El capitalismo financiero amplia el sector servicios, que, a diferencia del industrial, contribuye a la dispersión de la clase trabajadora, dejando al descubierto la necesidad de una lucha descentralizada, de reforzar una articulación multidimensional y de crear una confrontación asimétrica. El conflicto se expande, se ensancha, llega a todos lados: a las casas, las familias, los puestos de trabajo, las calles, los medios, los sindicatos, las empresas, los bares, las noches, las escuelas, los institutos, el comercio, las fronteras, el cielo y el infierno.

De todas formas, para saber a dónde vamos es importante recordar de dónde venimos, sobre todo en un sistema que nos prohíbe tener nuestra propia historia y genealogía. Es imprescindible recordar que nuestras abuelas, y en muchos casos nuestras madres, no tenían derecho a una cuenta corriente, a un convenio o a cobrar según los mejores convenios, a que el trabajo reproductivo, de cuidado y doméstico tuviera el estatus de “trabajo”, a ir a la universidad, a tener propiedades, a abortar o a divorciarse. Todo los derechos y capacidades colectivas obtenidas se han conseguido mediante la lucha, como muy bien nos han mostrado las trabajadoras de las residencias de Bizkaia. Al hecho de que, por ser mujeres, cobremos menos, trabajemos más, apenas gobernemos ni dirijamos nada, no tengamos nuestros planes industriales ni tecnológicos y el estado use lo que producimos para reproducir nuestra opresión, se le llama guerra contra las mujeres, no violencia contra las mujeres. Y hay que nombrarlo así, porque el término “guerra” implica violencia estructurada y estratégica, implica también que hay resistencia (muy importante) y que la intención de dominación es sistémica. Con el término de “guerra” pierde importancia la intención o el buenismo de hombres particulares y su posición de dominación o privilegio cobra relevancia. No es una guerra entre identidades, sino una guerra desequilibrada entre sujetos políticos dominadores y sujetos dominados.

Quienes quieran convertir esa guerra en concilio entre diferentes no son aliados, son los hermanos cotorros e izquierdistas de los que proclaman la convivencia pacífica entre la clase capitalista y la clase trabajadora. Y por eso el día 8 de Marzo gritábamos “Viva la lucha feminista” y no “Viva la pedagogía humanista”.

El capitalismo patriarcal ha cambiado el patriarcado feudal, porque además de mercantilizar y financiarizar las vidas, la dominación se lleva a cabo mediante mecanismos disciplinarios y biopolíticos asimétricos, que mediatizan la necropolítica patriarcal y la convierten en invisible en ciertos espacios mediante el pomposo discurso de la igualdad anecdótica y el antagonismo poliédrico y agonístico. Por eso se gritaba “Viva la lucha feminista” y no “Viva la equidad entre personas distintas”.

La pedagogía es siempre compañera potencial, pero nunca suficiente. Por eso crearon las mujeres anarquistas y comunistas del siglo XIX y XX grupos de lucha no mixtos. Por eso pusieron las sufragistas bombas a la propiedad privada de los señores. Por eso quemaban tiendas y se encadenaban a las instituciones. Por eso gritaban “Rise up, women, for the fight is hard and long” (“Levantate mujer que la lucha es dura y larga”).

Hay mucho que hacer a partir de ahora, autocrítica incluida. Pero como dice el poema, la frente alta, la mente clara y ninguna pista al enemigo.

A partir de ahora el proceso de deslegitimación y des-patriarcalización cogerá velocidad. Quienes digan que la revolución o la transformación política se ha de hacer con la complicidad, el permiso o la aceptación de los sujetos opresores o que solo hay un único sujeto (y eje) opresor, empezarán a perder autoridad y legitimidad. Igualmente la perderán aquellos que nos quieren convencer de que el empoderamiento que las mujeres hemos logrado desde la creación de las polis griegas se ha realizado mediante pedagogía y simpatía; o de que el tránsito del derecho romano y el derecho eclesiástico al constitucionalismo moderno se ha hecho dentro de la ley.
Y por eso gritábamos una y otra vez “Altxa emakumea, hautsi zure kateak….eta haien marko diskurtsiboa” (“Levántate mujer, rompe las cadenas… y su marco discursivo”).

A partir de ahora, nosotras decidiremos qué es pedagogía, qué antagonismo, qué es cuidar y qué epistemología patriarcal. El género y el sexo no son identidades culturales, son relaciones jerárquicas de poder político y económico. Nosotras definiremos qué es una clase, en base a nuestros objetivos. Nosotras decidiremos qué es democracia, en base a nuestras estrategias. Nosotras decidiremos qué es una huelga y qué índices y criterios usar, que para algo somos más de la mitad de la población. La lucha feminista tiene estrategias y tácticas plurales y diversas, contradictorias pero compatibles. Nosotras definimos qué es contradicción y qué compatibilidad. Quién es aliado y quién reproductor y engrasador del sistema, quién es cómplice y quien se niega a dejar sus privilegios a un lado para seguir siendo protagonista, en la política, en los medios, en la economía y en las redes sociales, donde la hemorragia verbal de los autodenominados aliados es muestra clara de su androcentrismo clínico.

Las mujeres*, de la mano del movimiento feminista, decidirá las pautas y el diseño del proceso constituyente que nos llevará a una República Feminista. Y con ese mismo objetivo han empezado a multiplicarse, por todos lados, los grupos no mixtos de mujeres: en los sindicatos, partidos, movimientos sociales, sector servicios, institutos, barrios y pueblos. Queremos gobernar (nuestros cuerpos y nuestra sociedad), y para ello es necesario poder de decisión, para lo cual es imprescindible conseguir derecho a veto, lo cual a su vez ha creado (y creará aún más) confrontación. Y por eso gritábamos “Viva la lucha, la lucha feminista”.

La misoginia estructurada de la televisión pública (y privada), los medios y la publicidad, el arte, la ciencia y el curriculum escolar no son más que la imagen histérica de las machocracias actuales. Mucho más invisible y discreta es la absoluta falta de voluntad de los hombres que copan las empresas, las instituciones y todo tipo de asociaciones, de apoyar y financiar el proceso de des-patriarcalización. El presupuesto de las políticas de igualdad y los recortes en los servicios públicos, la educación y la sanidad, no son un descuido, son las armas clásicas del patriarcado en la guerra contra las mujeres. Ahora, ya lo sabéis todos.

Quienes crean que la emancipación se puede lograr sin confrontación, que la politización es un regalo de la moral universalista y que la revolución, y por tanto, la creación de nuevos sujetos políticos ocurrirá mediante el cambio voluntario de la conciencia de los sujetos opresores, que se preparen.

Jatorrizkoa euskaraz BERRIAn

Sobre este blog
Espacio colectivo para contradecirse sobre politica. Eso sí, con ritmo y poesía #POLIRIKA
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

8 de marzo
8 de marzo Los feminismos andaluces llenan las calles un 8M marcado por el apoyo al pueblo palestino
Decenas de miles de mujeres se movilizan en las convocatorias del 8M de los feminismos diversos centrados en denunciar el genocidio en Palestina y la defensa de los derechos de las mujeres trans
Represión
Euskal Herria Denon Bizitzak Erdigunean Donostia celebra un guateque para pagar las multas de la huelga feminista general
El goteo de multas ha empezado esta semana. La primera asciende a 800 euros, 400 con pronto pago. El 30 de noviembre hubo 24 identificadas y 5 detenidas solo en la capital guipuzcoana.
Huelga feminista
Paro general de 24 horas 8 de marzo de 2024
Se explicará el sentido del cartel 8M 2024, dibujo único y artesanal cuyo lema es: LIBERA TU ENERGÍA VITAL PRIMIGENIA
José Martínez Carmona
15/3/2018 15:29

"El capitalismo financiero amplía el sector servicios..." ¿sólo contra la mujer explotada o contra los explotados en general? ¿Quien impone el poder del capital en el mercado de trabajo? ¿el sujeto genérico abstracto, (explotador y explotado), o el sujeto económico detentador del capital (y por ende del poder político)? Pero, el dominio del capitalista (o la capitalista) ¿se ejerce equitativamente contra las trabajadoras y los trabajadores...? No; al hombre se le concede una parte mayor del salario, alimentando el ego del macho y dividiendo al sujeto explotado por sus tendencias sexuales, categorías, gremios, sectores, raza, etnia... y, mediante la proliferación de ONG subvencionadas, por sus actividades e inquietudes sociales para atomizar las luchas con el clásico divide y vencerás. Es verdad que el 8M ha demostrado gráficamente que "el conflicto se expande, se ensancha..., pero ¿"llega a todos lados"? Mi impresión es que el amplio sector del pueblo excluido (o casi) del mercado del trabajo y del consumo no se ha visibilizado.
Nos recuerda el artículo que "es importante recordar de donde venimos..., la lucha de nuestras abuelas y madres que lucharon por unos derechos QUE NO TENÍAN..., y se enumeran unos cuantos, desde el derecho a abrir una cuenta corriente hasta el derecho al divorcio. Algunos de esos derechos CONSEGUIDOS (¿?), tan esenciales como "el derecho al trabajo" a una vivienda digna, a una sanidad universal y gratuita, a una pensión digna, son letra muerta pudriéndose en el articulado de una legislación ORGÁNICA que nada a sus anchas sembrando la sociedad, a manos llenas, de contratos precarios y pensiones de miseria. Hay que reconocer que las mujeres de las llamadas clases medias estaban en la calle, lo que no deja de ser positivo, ahora bien, existe para quien quiera verla una grieta entre las que se benefician de un trabajo estable (o se han beneficiado y lo han perdido), cuya lucha tiende a consolidar su status o recuperarlo, y las que han salido a la calle a luchar contra EL SISTEMA CAPITALISTA, que lleva en sus genes, por lógica de clase, la generación del MACHISMO. No reconocer esa grieta y esa ausencia del sector más alienado y desculturizado, para intentar colmatarla, e ignorar el intento del sistema de capitalizar un movimiento extirpándole toda connotación ideológica de clase, no beneficiaría al MOVIMIENTO FEMINISTA.

1
0
#10679
15/3/2018 10:58

Reescribiendo la historia... ¿Derecho a un convenio la abuelas? ¿y los abuelos sí? ¡Hola!... Había una cosa, a lo mejor ya os da igual y tal que se llamaba Dictadura Fascista Nacional Católica, nadie tenía derecho a un convenio (los sindicatos eran verticales), no había derecho de reunión (para nadie) y la pena de muerte para disidentes se aplicaba sólo a hombres. Esto cada día da más asco

1
1
Sobre este blog
Espacio colectivo para contradecirse sobre politica. Eso sí, con ritmo y poesía #POLIRIKA
Ver todas las entradas
Lawfare
Justicia a la derecha Pedro Sánchez no está solo: estos son los precedentes a su caso de ‘lawfare’
El presidente del Gobierno aseguraba en su carta que el suyo era un caso de lawfare “sin precedentes”. Lo cierto es que esta estrategia de judicializar la vida política se ha enraizado durante los últimos años.
Lawfare
Guerra judicial Las izquierdas brindan el apoyo unánime a Sánchez que él les negó durante la era del ‘lawfare’
Todos los partidos con representación en el Parlamento y ubicados a la izquierda del PSOE, también los soberanismos, han mostrado sus posiciones públicas en solidaridad con el acoso mediático y judicial contra el presidente del Gobierno.
Política
Lawfare ¿Qué decisiones puede tomar Pedro Sánchez tras amagar con dimitir?
Tras el anuncio del presidente, se abren varias posibilidades que no se resolverán hasta el lunes: ¿Una moción de confianza? ¿La convocatoria de elecciones? ¿Un cambio de marco? ¿Dimitir y dar el salto a la presidencia del Consejo Europeo?
Opinión
Opinión Cuando la mierda nos come
El panorama mediático se ha convertido en una amalgama de espacios a cada cual más insano. Basura fabricada por gabinetes ultras, aceptada por jueces afines y amplificada por pseudomedios de propaganda regados con dinero público. Hay que pararlo.
Medios de comunicación
Opinión ¿Y qué esperabas, Pedro?
Los gobiernos de derechas llevan años alimentando con dinero público a sus medios afines que esparcen bulos y manipulan sin que el Gobierno haya hecho nada para evitarlo.
Sanidad pública
Ribera Salud Hospital del Vinalopó: el último rehén de la privatización del PP valenciano
La vuelta del PP al gobierno valenciano ha supuesto un balón de oxígeno para la principal beneficiaria de la privatización sanitaria, que mantendrá la concesión de Elx-Crevillent a pesar del malestar social.

Últimas

El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Antifascismo
Antifascismo en Roma 25 de Abril, día de 'La Liberazione'
El movimiento antifascista celebra el fin de la ocupación nazi con una demostración de poder en las calles de Roma.
Más noticias
Portugal
Portugal Cuando los campesinos portugueses tomaron la tierra… y la contrarrevolución se la despojó a tiros
Tras el 25 de abril de 1974 una ola de ocupaciones agrícolas impulsó en Portugal una profunda reforma agraria que los gobiernos socialistas y conservadores tardarían más de una década en desmontar.
El Salto Twitch
El Salto Twitch La Catana 2x06, comunicación política y campaña
Nos preguntamos cómo la carta de Pedro Sánchez atraviesa un momento político y electoral que se estira desde las generales, pasando por elecciones gallegas y vascas, para cristalizar en unas catalanas y europeas que van a marcar nuestro imaginario.
Derechos Humanos
Libertades y derechos Amnistía Internacional acusa al Estado de no investigar casos graves de violación de los derechos humanos
El informe anual de esta organización de derechos humanos denuncia “la persistente falta de rendición de cuentas por las violaciones de derechos humanos cometidas por el Estado español”.
Portugal
Memoria histórica 50 años del 25 de abril: la reforma agraria
Cuando se cumple medio siglo de la Revolución de los Claveles este catedrático y corresponsal de prensa en Portugal entre 1974 y 1975 relata una de las caras menos conocidas de este proceso histórico: la reforma agraria.
Medio ambiente
Minas en Andalucía La sinrazón de los vertidos mineros al Guadalquivir
Se cumplen 26 años del vertido minero desde la Mina de Aznalcollar al Río Guadiamar en abril de 1998. Ahora, los nuevos proyectos de vertidos mineros desde las minas Cobre-Las Cruces y Aznalcóllar-Los Frailes vuelven a poner en peligro la zona al no haber tenido en cuenta las características del lugar.

Recomendadas

Derechos reproductivos
Luciana Peker y Cristina Fallarás “El aborto se ha apartado del relato feminista porque genera consenso”
Las periodistas Cristina Fallarás y Luciana Peker forman parte del grupo motor de una campaña europea que quiere blindar el derecho al aborto mediante una iniciativa ciudadana que necesita un millón de firmas para llegar a ser debatida.
Música
Música Aprendiendo filosofía con el punk patatero de La Polla Records
Los cáusticos esputos lanzados por Evaristo en las canciones de La Polla Records contenían materia adecuada para hablar de filosofía política en el instituto. Así lo entiende el profesor Tomás García Azkonobieta, autor de ‘La filosofía es La Polla’.
Pensamiento
Kristen Ghodsee “Necesitamos soluciones que podamos llevar a cabo sin la ayuda del Estado”
Esta escritora y etnógrafa estadounidense explora experiencias utópicas del pasado y del presente en su último libro ‘Utopías cotidianas’ (Capitán Swing, 2024).