Memoria histórica
¿Qué es lo que hay que recordar para no repetir qué?

La socióloga Elizabeth Jelin y el historiador Ricard Vinyes publican ‘Cómo será el pasado. Una conversación sobre el giro memorial’ (Ned Ediciones), un diálogo ameno y valiente entre dos voces ineludibles para comprender los debates sociales y políticos en torno a la memoria colectiva.
Museo Junior de la Resistencia de Amsterdam
Detalle del Museo Junior de la Resistencia (Amsterdam) FUENTE: www.verzetsmuseum.org
6 may 2021 06:30

En uno de los más sobrecogedores fragmentos de la película documental Shoah (Claude Lanzmann, 1985), el realizador francés pide a Abraham Bomba que cuente cómo sucedió, cómo acabó siendo uno de los peluqueros del campo de Treblinka. La escena tiene lugar en una peluquería de Tel Aviv que el director ha alquilado para filmar la entrevista. Bomba, que por entonces ya estaba jubilado, ofrece su testimonio de superviviente del Holocausto mientras corta el pelo a un cliente. Reflejado en el espejo de la barbería, observamos al grupo de parroquianos que escucha atento el relato —más bien mecánico— de una experiencia inimaginable. El rumor del abrir y cerrar de tijeras marca el ritmo de la acción y rellena los huecos que dejan los pesados silencios del peluquero. Habla de su trabajo en el interior mismo de las cámaras de gas, cortando el pelo a mujeres que desconocían su destino fatal. Mujeres que, a menudo, eran vecinas y amigas de su Czestochowa natal.

Abraham Bomba tiene un nudo en la garganta que el espectador, incómodo, puede sentir al tragar

En un determinado momento, Bomba cuenta que un compañero peluquero, buen amigo suyo, ve entrar a su mujer y hermana en la cámara de gas. La voz del barbero de Treblinka se quiebra, el plano se acorta y vemos que el testigo oculta su rostro tras un paño azul durante unos segundos. Lanzmann no aparece en escena, pero oímos su voz: “Continúe, Abe. Debe hacerlo”. “Es demasiado horrible. No prolongue esto, por favor”, replica el peluquero mientras niega con la cabeza. “Por favor. Tenemos que hacerlo. Usted lo sabe”. Bomba asegura que no va a ser capaz de hacerlo. “Se lo ruego”, insiste Lanzmann. “Le dije que hoy sería muy duro”. Abraham Bomba tiene un nudo en la garganta que el espectador, incómodo, puede sentir al tragar. El testigo hará de tripas corazón. Concluirá su testimonio por el deber que se ha impuesto.

La potencia del testimonio de Bomba, la voz que le exige recordar y, en definitiva, el impresionante film de Lanzmann —que muy pronto se convertirá en una película-evento, en términos de Nancy Berthier— responden al paradigma moral del “deber de memoria”: hay que recordar para que nunca más se vuelva a repetir el horror.

Este mandato de recordar, como un acto casi religioso, cuenta con antecedentes diversos y poderosos

El concepto de deber de memoria tomó relevancia en Europa tras la producción literaria de los testigos del Holocausto después de la Segunda Guerra Mundial (los relatos de Primo Levi, Elie Wiesel, Jean Améry o Robert Antelme), pero no se instauró como modelo memorial canónico hasta las décadas de los setenta y ochenta. No obstante, el peso de este mandato de recordar como un acto casi religioso cuenta con antecedentes diversos y poderosos: desde el Zajor bíblico (Acuérdate, en hebreo) al imperativo categórico de Adorno (que Auschwitz no se repita) o incluso el archiconocido aforismo de Santayana de principios del siglo pasado (aquellos que no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo).

El giro memorial

Aunque pueda sonar contradictorio, la memoria acumula su propia historia. Los sentidos e interpretaciones del pasado se van transformando con el tiempo y varían según el escenario (geográfico, pero sobre todo político, social, cultural). No es lo mismo recordar hoy que ayer. Por eso merece la pena preguntarse por cómo será el pasado mañana (o mejor, cómo queremos que sea): la memoria es un patrimonio común.

“Considero ese estilo de pensamiento dañino [se refiere a la cualidad preventiva de la memoria que prescribe la cita de Santayana] por la expectativa que levanta, y porque ha contribuido a consolidar memoria y olvido como dilemas existenciales, cuando son realidades políticas. Es mucho más sensata, históricamente, la advertencia de Levi: si ha sucedido, puede volver a suceder. Yo añado: con o sin memoria”. Se lo dice el historiador Ricard Vinyes (‘El estado y la memoria’, ‘Asalto a la memoria. Impunidades y reconciliaciones, símbolos y éticas’) a la socióloga Elizabeth Jelin (‘Los trabajos de la memoria’, ‘La lucha por el pasado. Cómo construimos la memoria social’) en ‘Cómo será el pasado. Una conversación sobre el giro memorial’ (Ned Ediciones, 2021), un libro avalado por el trabajo intelectual y el compromiso político de sus autores, que viene a sumarse a otros encuentros —editoriales y más allá— en los que han participado juntos de una u otra manera, como el ‘Diccionario de la Memoria Colectiva’ (Gedisa, 2018).

Vinyes alerta de los peligros de la judicialización de la memoria, condicionada siempre por el tiempo presente

Para Vinyes, el giro memorial actual responde a la tendencia por entender la memoria, no como un deber con capacidades profilácticas o preventivas, sino como un derecho civil que ha de salvaguardar todo modelo garantista mediante políticas públicas de memoria: “Es el reconocimiento de ese derecho lo que (...) genera en la administración pública un deber, el de garantizar el ejercicio de ese derecho a la ciudadanía, el derecho de acceder por igual no sólo al pasado, sino a las representaciones del pasado, para designar lo ejemplar del pasado”. Aunque aboga por gestionar la memoria como un patrimonio público, ético y democrático, alerta de los peligros de la judicialización de esas representaciones, condicionadas siempre por el tiempo presente. Así, pone los ejemplos de la Ley Gayssot (1990) —destinada a reprimir todo propósito racista, antisemita o xenófobo— y la Ley Taubira (2001) —en reconocimiento de la trata de esclavos y la esclavitud como crimen contra la humanidad— en Francia, la Ley de Amnistía (1977) y Ley de Memoria Histórica (2007) en España o la normativa polaca de 2018, que prohíbe mencionar la complicidad polaca con el nazismo: “Las leyes memoriales establecen relatos administrativos derivados de intereses administrativos, los que sean, y son peligrosas porque bajo la apariencia de verdad cortan el debate y estabulan la memoria”.

En esa misma línea, Elizabeth Jelin advierte de la tentación de fetichizar ciertos relatos monocordes del pasado que terminan ocultando la diversidad y el conflicto. En una visita al Museo de la Resistencia en Amsterdam descubre que los estudiantes holandeses, hijos de inmigrantes, que visitan el lugar, no se ven representados en ninguno de los tres relatos (complejos) que narran los dilemas de un país bajo la ocupación nazi: colaborar, resistir o sobrevivir. Lo que en su momento fue un esfuerzo por incluir diversas sensibilidades y tomas de posición, es hoy un relato excluyente.

En relación a las víctimas, siempre asociadas a la memoria, Jelin pone sobre la mesa otro derecho: el silencio (“El testimonio puede ser sanador; puede también convertirse en un ejercicio de revictimización”) y plantea preguntas inquietantes: “¿Se han construido democracias mejores [en las sociedades en las que hubo políticas y reclamaciones de memoria]?”, “¿qué del pasado hay que promover como recuerdo para qué objetivo del futuro?”, “¿qué es lo que hay que recordar para no repetir qué?”. La respuesta está implícita, claro: lo que hemos de recordar es la buena memoria; es decir… la mía.

Contra la memoria-monumento

En poco más de cien páginas el texto condensa, en forma de diálogo, un panorama rico en preocupaciones y críticas a lugares comunes acerca de la gestión de la memoria pública, sobre la que ambos autores han profundizado en sus maduras trayectorias académicas y políticas. A lo largo del intercambio van aflorando asuntos como las disputas de poder para apropiarse de los sentidos del pasado, su legitimidad en la esfera pública, los procesos de institucionalización de la víctima (su sacralización y su revictimización), las leyes de memoria, la crítica a la crítica del “Régimen del 78”, el mandato de recordar como supuesta garantía de prevención y redención o el cuestionamiento del papel del museo o del turismo.

Se citan ejemplos como Villa Grimaldi (Santiago de Chile), el Museo Memorial del Holocausto (Washington), el Parque de la Memoria o la ESMA (Buenos Aires), el Memorial de Caen (Normandía), el Valle de los Caídos, la prisión de Tuol Sleng en Camboya o el osario de Sedlec, en la República Checa, “cuya recomendación publicitaria en la guía virtual se halla acompañada de un comentario sorprendente aunque revelador (hilarante, en realidad): There were no horrors committed here – it is an ossuary. Creepy, but irresistibly beautiful”. Es un ejemplo de tanatoturismo, esa inquietante fascinación del turista por visitar lugares asociados con la muerte, la tragedia y el trauma (y el interés económico que dicho negocio suscita). También discuten sobre las dudas que provocan los discursos de la paz y los derechos humanos que acaban por enmascarar impunidades, como el caso del Museo de la Paz de Hiroshima (que “ha utilizado la paz para blanquear las responsabilidades de las élites japonesas conservadoras”) o “el uso del discurso de los DDHH que hicieron Ríos Montt y los militares guatemaltecos mientras cometían un verdadero genocidio”.

El tanatoturismo, esa inquietante fascinación del turista por visitar lugares asociados con la muerte

Todo debate sobre la memoria implica hablar de identidades colectivas y contradicciones identitarias que llaman la atención de los autores. Discuten sobre instituciones como la Unión Europea e iniciativas como la Casa de la Historia Europea, inaugurada en 2018, que tiene por objetivo demostrar que la nación europea existe (y para ello cuenta con doce millones de euros anuales, tras un coste inicial de 77 millones).

Cualquiera que se interese por los usos políticos del pasado reconocerá el esfuerzo de los que departen por deshacer el canon memorial implantado desde la segunda guerra mundial, compartiendo un buen número de ejemplos prácticos tomados de uno y otro lado del Atlántico, y posicionándose ante la monumentalización de la memoria, ante la memoria como cerradura; porque cualquier representación y apropiación permanente de la memoria puede ser un peligroso punto y final identitario.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

La Colmena
La Colmena Los curas de Fregenal y el antídoto anticlerical
Un ejemplo de anticlericalismo militante en la Extremadura de finales del siglo XIX a propósito de la disputa por los enterramientos civiles en Fregenal de la Sierra.
Extremadura
Censura Reinauguración en Torre de Miguel Sesmero de una escultura censurada por PP y Vox en Losar de la Vera
Este viernes 25 de abril la Asociación 25 de marzo colocará ‘Crearte La Vera’, la escultura de Carlos Díaz de homenaje a la clase trabajadora, en un sitio público de Torre de Miguel Sesmero (Badajoz).
Opinión
Opinión Contextos de la guerra en Ucrania
El historiador Antonio Fernández Ortiz repasa la relación entre Occidente, la Revolución Rusa y distintos proyectos de construcción nacional.
Antimilitarismo
Rearme El gasto militar mundial se dispara
El gasto militar en el planeta aumentó en 2024 un 9,4% respecto a 2023, lo que supone el mayor incremento interanual desde la Guerra Fría.
Eléctricas
Sistémica eléctrico Del lobby nuclear a la burbuja de las renovables: comienza la pugna por encontrar al culpable del apagón
Un crecimiento desmedido de las renovables guiado por intereses corporativos y una red eléctrica que no ha sido actualizada a la nueva realidad energética son algunas de las causas señaladas del apagón del 28 de abril.
Electricidad
Apagón Pedro Sánchez: los protocolos de emergencia siguen activos y se abrirá una investigación
El presidente del Gobierno ha comparecido ante los medios de comunicación tras presidir la reunión del Consejo de Ministros para explicar las cuestiones abordadas en relación con la crisis eléctrica.
Energía
Energía El gran apagón de abril | El suministro de energía se recupera al 99%
Pedro Sánchez explica que se produjo una “pérdida” del 60% de la electricidad a las 12:33h: “15 gigavatios se han perdido súbitamente del sistema en apenas 5 segundos. Aproximadamente el 60% del sistema eléctrico”.
Pobreza energética
Energía Apagón crónico: lugares donde no volverá la luz, a pesar de la restauración del sistema eléctrico
Miles de personas en el Estado español viven día a día apagones y falta de suministro en lugares como Cañada Real (Madrid), la Zona Norte de la ciudad de Granada o los asentamientos de jornaleras y jornaleros migrantes en Huelva y Almería
Opinión
Opinión Provoquemos la próxima interrupción
Lo que nos resta es gobernar el apagón que habrá de venir, ser la causa colectiva de las próximas interrupciones, aquellas que lleven al fin de este mundo desbocado y sin sentido.
Energía
Energía La ley marca permisos retribuidos para situaciones como el apagón eléctrico
El Estatuto de los Trabajadores, en su artículo 37.3, protege a la plantilla cuando no es posible llegar a su puesto de trabajo o desarrollar con normalidad su tarea en situaciones como no tener electricidad durante horas.
Electricidad
Apagón ¿Qué le puedo reclamar a la empresa eléctrica y al seguro tras el apagón?
Tras el incidente con la electricidad de este lunes 28 de abril, los consumidores deben conocer qué pueden reclamar a las compañías de la luz o a sus seguros.

Últimas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.
València
València La jueza de la dana acorrala al relato político de Mazón
El president viaja a Estados Unidos la semana en la que el PP europeo celebra su congreso en València y no acudirá a la multitudinaria romería de Santa Faz.
Crisis climática
Informe Las diez empresas más contaminantes del país son responsables de un quinto de las emisiones españolas
Repsol mantiene el podio gris de empresa más contaminante que le arrebató a Endesa en 2020. Completan el top 10 de compañías más emisoras energéticas, cementeras y siderúrgicas, que copan entre ellas el 56% de las emisiones del mercado de carbono.
El Salto Radio
El Salto Radio Desmantelando E2 I El racismo institucional y sus grietas
Las redes de apoyo mutuo y la actitud de compartir privilegios son herramientas imprescindibles para combatir los impactos del racismo estructural.
Comunidad de Madrid
Energía El apagón en Madrid, en imágenes
En Madrid, la gran urbe ha permanecido incrédula al pasar de las horas, entre rescates en el Metro, en el Cercanías y en ascensores, donde han quedado atrapadas algunas personas.
Opinión
Opinión La luz de lo público durante el gran apagón
El fundido del sistema eléctrico ahonda en las grandes preocupaciones del siglo XXI. También en el diagnóstico fundamental de necesidad de refuerzo de los servicios públicos.
Más noticias
Economía
Inflación El IPC baja al 2,2% en abril y el PIB crece un 0,6% en el primer trimestre
La economía crece una décima menos que el último trimestre de 2024 y la inflación subyacente sube cuatro décimas hasta el 2,4%.
Opinión
Opinión La hostilidad del fin del mundo
Me da por pensar qué tal vez estoy haciendo algo mal, que tal vez tuve que aprovechar las cuatro horas atrapado en un coche para grabar un documental o un reel sobre la necesidad de parar.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Arranca el segundo día de huelga en la educación madrileña
Hoy están llamados a la jornada de protesta en los ciclos de Infantil, Primaria, Secundaria, FP y Educación Especial. Se planea una nueva fecha para la manifestación conjunta con universidad que no pudo celebrarse ayer por el apagón.

Recomendadas

Senegal
Migraciones El mito de la migración ordenada: la denegación de visados por el Consulado de España en Dakar
Maltrato institucional. Estas dos palabras son las más escuchadas cuando se pregunta a personas descontentas con el Consulado de España en Dakar. Cada vez más personas denuncian denegación de visados que no consideran justificados.
Guinea-Bissau
Internacional Guinea-Bissau arranca una ola de represión tras el sabotaje popular de una mina de arena en un parque natural
Una acción liderada por las mujeres del pueblo de Varela provocó un incendio en la bomba de extracción de la mina de arena pesada. El Gobierno ha llevado a cabo la detención de 16 personas, entre las que se encuentran líderes locales.
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña y Ourense compraron material policial a Israel por medio millón de euros en solo cuatro años
El alcalde ourensano, Gonzalo P. Jácome, adjudicó un contrato por 70.000 euros días después del siete de octubre. Abel Caballero firmó otro de más de 200.000 euros y la alcaldesa de A Coruña siguió la estela con un contrato de 170.000 euros.