We can't find the internet
Attempting to reconnect
Something went wrong!
Hang in there while we get back on track
Queridas Majestades: (¡jo, qué mal suena esto!) A pesar de que mi experiencia con vosotros nunca fue muy buena, especialmente durante mi infancia —nunca me trajisteis ni la bicicleta, ni el scalextric, ni el tren eléctrico... eso sí, ¡montones de calzoncillos!—, vuelvo a escribiros después de muchos años con una petición. ¿No podríais abdicar de vuestras coronas para ver si cunde el ejemplo y así otros se dan por aludidos? Me encantan las sagas, especialmente en el cine o en la tele, pero no las de las casas reales, y hay una por aquí que ya la padecemos desde hace demasiadas temporadas, más aún que Goenkale.
Para los niños no sería un problema ya que Olentzero les traería sus regalos y, además, los podrían disfrutar desde el principio de las navidades, sin tener que esperar hasta el 6 de enero, justo cuando se les acaban las vacaciones. Si no es posible, traedme una guillotina y ya haré yo algo con ella, ¡pero que no os vean meterla en mi casa! Por cierto, si no me lo podéis conceder, por favor, volved a traerme calzoncillos. ¡Ahora que soy mayor he descubierto lo caros que son!
Ya que os escribo, aprovecho también para deciros que, para luchar contra el racismo, está muy bien que uno de vosotros sea negro —bueno, afroasiático— pero también sería importante apoyar el feminismo. Supongo que vosotros lo veréis de otra manera porque sois de hace 21 siglos, de hecho muchos de los juguetes que repartís son algo sexistas. A pesar de ello, ¿no os animaríais a incluir a una mujer en vuestro talde? Igual Gaspar está ya algo cansado y no le importaría jubilarse...
Cambiando de tema, si vais a pasar por La Moncloa, no le dejéis un regalo a Rajoy, que ya se encarga el PNV, y muy bueno, votando en el Congreso a favor de sus presupuestos cuando amaine el temporal de Catalunya. Además, Rajoy no lo ha hecho muy bien este año, y no lo digo solo por el 155. Eso sí, no le traigáis carbón, que es capaz de quemarlo para producir electricidad y ya hay demasiada contaminación por CO2. Mejor unas placas solares, o si no, una urna. Él lo entenderá.
Para que veáis que yo pido, pero también ofrezco, en la entrada de casa os dejaré unas tijeras y un peine de tipo hipster para que os arregléis las barbas. Ahora es lo que se lleva.
Y acabo con una reflexión: no sé por qué durante la infancia los padres se empeñan en hacernos creer en la existencia de cosas que no existen, como el Ratoncito Pérez o que, al final, el bien siempre vencerá sobre el mal... cuando con el paso del tiempo acabaremos descubriendo, quieras que no, que todo eso es falso. Algo así sucede con los Reyes Magos: ellos no existen, pero los reyes manguis sí. Pero bueno, esa ya es otra historia, que cada una crea lo que quiera. Yo, por si acaso, os escribo, que seguro que tengo más posibilidades de acertar que los que juegan a la Lotería.
¡Suerte con los muros que tendréis que atravesar, como el de EE UU con México, el de Israel con Palestina, o el de España con Marruecos! ¡Y hasta pronto!
Firmado: alguien que ha sido muy bueno durante todo el año, pero que ya se está empezando a cansar. ○