Teatro
‘Carrer Robadors’, una obra hecha por blancos para blancos

El Grec, en su naif voluntad de abrirse a África e ilustrar las situaciones de las personas migrantes, basándose en un libro de un escritor francés, nos ha expoliado lo único que nos quedaba: contar nuestras propias historias.
Una escena de la obra ‘Carrer Robadors’, dirigida por Julio Manrique a partir de la novela de Mathias Enard
Una escena de la obra ‘Carrer Robadors’, dirigida por Julio Manrique a partir de la novela de Mathias Enard. Foto: Grec Festival.
13 jul 2021 06:00

“El Grec, hermanado con África”, ostenta la propaganda del festival. Una descripción muy prometedora de la obra Carrer Robadors, dirigida por Julio Manrique a partir de una novela de Mathias Enard: “El protagonista como exponente de esos migrantes que se dejan la vida, demasiadas veces de forma literal, por llegar a suelo europeo en busca de un futuro [...] Una serie de actores y actrices jóvenes, parte de ellos de origen árabe”.

Empieza la obra. El actor principal, Guillem Balart, hace de chaval marroquí. Los actores de origen árabe tienen papeles secundarios y cambiantes, mientras el protagonista blanco —que hace de marroquí— tiene un papel central e inamovible. Aparece la primera mujer marroquí. Lleva el hijab. Dos hombres hablan de su culo, de su sujetador rojo… Ella no habla. Hacen bromas baratas sobre nosotros, nuestras luchas, nuestras vivencias, nuestros cuerpos. Bromas sin matices, superficiales. El público ríe. Y así es como narran una historia repleta de personajes estereotipados, explotando al máximo los clichés racistas y machistas. Hombres terroristas, mujeres sumisas, silenciadas...

Los mismos estereotipos de siempre, pero desde el buenismo de cuota. Y es que el racismo no se esfuerza ni para ser creativo. Una clara performance de la otredad, un Ellos frente a un Nosotros. Ellos, los que dan oportunidades a los jóvenes. Nosotros, los que usurpamos vidas. Ellos, los que aman y aprecian. Nosotros, los padres que echan de casa a un hijo por amar. Ellos, los cultos e intelectuales. Nosotros, los catetos que perseguimos y censuramos el conocimiento. Ellos, los revolucionarios incisivos. Nosotros, los de la fe inflexible y acrítica. Un rebaño de retrógradas...

Lo que realmente me enerva es intentar entender de qué forma querían hablar de inmigración y no mencionar el racismo, aunque fuera una pincelada

Y podría seguir así todo el artículo hablando de cómo han construido una identidad del Nosotros contrastada con el Ellos. Pero este no es el tema que ahora nos atañe. Lo que realmente me enerva es intentar entender de qué forma querían hablar de inmigración y no mencionar el racismo, aunque fuera una pincelada. Me hubiera conformado. Supongo. Siendo mujer musulmana inmigrante, me siento especialmente interpelada ante estas narrativas islamófobas. Y no puedo seguir sin más. La rabia me corroe. Hay tantas historias que se podrían haber expuesto en la obra… Y, sin embargo, se ha apostado por seguir con la misma retórica del terrorismo. Pero supongo que exponer las historias de las personas migrantes exige dos capacidades esenciales: escuchar y ceder espacios. Y no nos engañemos, aquí en Europa, escuchar cuesta lo suyo, de ceder espacios ya ni hablamos.

Volviendo al tema central de mi crítica: las múltiples realidades de las personas migrantes negligidas por la obra. Siendo yo un sujeto racializado, me da incluso vergüenza denunciar aquí, en este contexto, que mi eterno estatus de marroquí con NIE no me permite votar, un derecho básico, por cierto. Ni hablar de que me es sistemáticamente vetado presentarme a las oposiciones para Psicóloga Interna Residente, considerándolo demasiado privilegio para una hija de inmigrantes, valga la ironía. Me da vergüenza porque si queremos exponer la vida de las personas inmigrantes, así en general, y de las que habitan la calle Robadors, en particular, hay que dar visibilidad a otras historias. Me toca callar.

Sin embargo, toca hablar a los compañeros que están siendo literalmente perseguidos por la policía, las identificaciones por perfil racial, el acoso y persecución de los vendedores ambulantes. Toca hablar a las mujeres víctimas de trata con fines de explotación sexual encadenadas en la calle Robadors. Toca hablar de una sociedad que exige a estas mujeres ir a denunciar a su proxeneta a la Comisaría de la Policía Nacional, los guardianes de la ley de extranjería, los mismos que llenan las oficinas donde se les deniega el NIE.

Toca hablar de un sistema que se mantiene a base de represión y violencia, que se expresa mediante una inhumana Ley de extranjería. Una ley que exige a las personas migrantes conseguir un contrato a jornada completa de mínimo un año entre otras fantasías, para poder acceder a una residencia legal. Misión imposible.

Con todas estas latentes violencias estructurales ejercidas por las biopolíticas del sistema Estado, permitidas e incluso normalizadas por la mayoría, no es de extrañar que las pocas iniciativas que pretenden acoger al Otro y dar visibilidad a sus luchas acaben reproduciendo una visión sesgada e incluso satanizada sobre Nosotros. Acaban hablando de Nosotros sin Nosotros. Usando nuestros cuerpos racializados para llenar su cuota de diversidad. Una diversidad tan efímera como el papel otorgado a la mujer con hijab en la obra.

No es raro que la obra acabe incrustando más la utopía de la Europa grandiosa omnipotente frente a una África infernal, de la que, “pobrecitos”, todos huyen desesperados. El toque de paternalismo que nunca falte

No es raro que la obra acabe incrustando más la utopía de la Europa grandiosa omnipotente frente a una África infernal, de la que, “pobrecitos”, todos huyen desesperados. El toque de paternalismo que nunca falte. No me cabe en la cabeza de qué forma esta obra pretende “aportar luz sobre la situación y las motivaciones de los migrantes”, según describen en el programa del Grec. Ocultando, sin embargo, con tanta indiferencia la realidad de estos. Deviniendo un ejercicio de violencia racista per se.

El Grec, en su naif voluntad de abrirse a África e ilustrar las situaciones de las personas migrantes, basándose en un libro de un escritor francés, nos ha expoliado lo único que nos quedaba: contar nuestras propias historias

Lo que sí veo muy clara es la relación directa que hay entre estos relatos del musulmán terrorista y el asesinato de Younez Bilal en Murcia el mes pasado por ser marroquí. Estas narrativas del odio camufladas en el buenismo supremacista de la izquierda son la base del iceberg que sostienen los discursos políticos del odio. Permitir estos discursos en un espacio con tanta trascendencia mediática —como es uno de los festivales más importantes del país— es una clara legitimación a los ataques de odio y xenofobia. No nos extrañe entonces que el Grec, en su naif voluntad de abrirse a África e ilustrar las situaciones de las personas migrantes, basándose en un libro de un escritor francés, nos haya expoliado lo único que nos quedaba: contar nuestras propias historias.

Archivado en: Opinión Teatro
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Racismo
Racismo Gitanas a Escena: “Nuestra Lisístrata Montoya lucha contra el racismo”
Coco Reyes (directora y actriz) y Susana Muñoz (actriz) invitan a acudir al Teatro Bellas Artes de Madrid a ver su apropiación del mito feminista de la Grecia clásica escenificado por ocho mujeres gitanas.
Culturas
Bob Pop “Mis poemas son unas croquetas sabrosas y no congeladas”
Escritor y vedete intelectual, acaba de publicar ‘De cuerpo presente’, un poemario donde responde 27 años y un diagnóstico de esclerosis múltiple después a sus miedos ante la enfermedad en la juventud.
Anna Serra
9/9/2021 9:23

Vi la obra en la inauguración del Grec y (sin ánimo de desvalorizar el trabajo de los actores y actrices y todxs lxs trabajadorxs involucradxs) me horrorizé. Gracias por esta crítica, creo que es muy acertada. La obra es racista, paternalista y machista y me dió verguenza ajena ver que una producción cultural de este calibre y supuestamente "rompedora" estuviera tan llena de tópicos. Lamentable.

0
0
Magusa
14/7/2021 18:49

Por los argumentos de la autora, la obra es de lo más mediocre, por no decir mala, y para ella es "para blancos", es decir, para idiotas. ¡Como si en la creación artística magrebí no abundaran los clichés sobre la emigración! Como si no existieran buenos textos sobre la cuestión de autores franceses, españoles, marroquíes, tunecinos o argelinos. Pero la mediocridad está tan extendida que acaba contagiando a quien mete a todo el mundo, a todos los blancos, en el mismo saco.

0
0
Andros
14/7/2021 10:26

Un poco decepcionado con el colectivo este de Afroféminas y su posición sobre Cuba. O sea, el único país que se cuestiona su racismo, hace algo para combatirlo y avanza, aunque sea un poco, para erradicarlo y salen la wokería de turno a sumarse a una campaña de astroturfing. Criterio, cero. Digo poco decepcionado porque ya vi que promocionaba mucho tema coach y una actitud muy estadounidense. Mal.

0
0
Makoki
13/7/2021 12:39

Pues creo que estamos de suerte porque todavía podemos saber lo que realmente piensa la élite catalana, más allá de estudiados discursos, del postureo buenista o de las entrevistas-masajes en los medios públicos (de la TV3 hasta l'ARA). De vez en cuando se "filtra" algo como esta obra, se les "escapa" y extrañados se preguntan "Que hem fet malament?". Ellos que llevan ensimismados en su ombligo casi una década, vanagloriándose de su lengua y cultura (como si el resto no tuviera también otra), que "volen acollir" siempre y cuando puedan poner una frontera en el Ebro, que se han quedado afónicos cantando Els Segadors o el Virolai, que son "gent de pau" mientras anuncian en la televisión pública cursos paramilitares para el futuro ejército catalán. Sí, se preguntan "Qué hem fet malament?", y tras terminar la frase la sentenciarán con otra: "No es volen integrar" y tan panchos, así podrán seguir con sus banderitas en los balcones de l'Eixample, quejarse de lo mucho que les oprime el estado español y desfilar orgullosos el 11S como nación oprimida.
Y el problema no es la obra de teatro, es la forma de ser y pensar del sector dirigente que no sólo escribe teatro, también dirige institutos públicos, conselleries como la de Benestar i Familia y medios de comunicación públicos. Gente que confunde integración con subordinación, y no les va mal, siguen gobernando.
Por cierto, si la obra fuera sobre la inmigración andaluza, a ti te habrían tachado de "españolaza" por tu artículo y lo habría hecho gente de este propio periódico.
Salut

3
1
Tunigu
13/7/2021 11:37

Tal vez este sea un buen ejemplo de cómo eso que llamamos cultura, que anida en nosotrxs en forma de memoria, con lo que nos identificamos porque nos presenta ante nosotrxs mismxs como mejores y pertenecientes a un colectivo superior, no se anula fácilmente. Hasta el XIX Barcelona era un hervidero de esclavitud, fuente de buena parte del capital originario, de la desigualdad y el "mérito" . Ese espíritu comerciante, ese modo "elegante" de ser burgués, el aristócrata burgués, la máxima aspiración Ilustrada representada por cierto republicanismo catalán como el de la RBU -viva la RBU, pero por posibilismo no por ser lo más deseable -, si no se tiene un poco de cuidado emerge donde menos se lo espera. Cosas de las Naciones y las Patrias, supongo. Conste que no hay juicio de valor, las creencias son autoevidentes y de inmenso valor psicológico, es decir, inconscientes. Por ello es tan difícil removerlas.
Ayuda mutua, igualdad, todo para todas.

0
0
Laboral
Laboral Yolanda Díaz asegura que el Gobierno tramitará el indulto a las Seis de la Suiza
La ministra de Trabajo reconoce sentirse “escandalizada” tras la reunión con las sindicalistas condenadas y asegura que no va a “aceptar retrocesos” en los derechos laborales
Laboral
Laboral Reivindicar los derechos laborales en microempresas, el reto de los sindicatos
Nuevas estrategias hacen frente a realidades como las de los falsos autónomos o los puestos en remoto, mientras el PP quiere restringir aún más los comités de empresa.
Palestina
Palestina Albanese presenta su informe ante la ONU: “Gaza es el escenario de un crimen”
El Consejo de Derechos Humanos atiende al reporte sobre el lucro de empresas y bancos en el actual genocidio de Gaza. The Guardian califica de “posible crimen de guerra” el ataque contra una cafetería en la que murieron 39 personas.
Política
Política Feijóo radicaliza al Partido Popular en medio del terremoto Cerdán con la vista puesta en las elecciones
Miguel Tellado será el nuevo secretario general del partido. Un movimiento con el que Feijóo consigue el control casi absoluto del PP y le come espacio del discurso ultra a Vox, pero que lo aleja de eventuales pactos con PNV y Junts.
Galicia
Galicia Galicia elige el rumbo de la lucha contra Altri en las elecciones a la directiva de la plataforma Ulloa Viva
Vecinos y vecinas de la comarca más afectada presentan dos listas separadas tras no llegar a una propuesta de consenso. Por un lado concurre una candidatura continuista y, por el otro, una alternativa que se acerca más al nacionalismo institucional.
En el margen
En el margen Aisetou Kajakeh: “Nosotras no estamos rompiendo techos de cristal, sino sorteando muros”
Esta socióloga española asegura que las asociaciones gambianas en España mantienen un vínculo directo con el lugar de origen, lo que hace que nunca pierdan la conexión con las raíces.
Madrid
Madrid Vecinas de Tribulete 7 presentan demanda colectiva por acoso inmobiliario contra Elix Rental Housing
Es la primera demanda colectiva que se presenta en España contra una socimi. El inquilinato quiere conservar sus hogares e impedir que se desarrolle el plan de pisos turísticos que pretende el propietario.

Últimas

Comunidad de Madrid
Sanidad Pública Cae el techo de la entrada principal del Hospital Isabel Zendal
El hospital de pandemias, inaugurado por Isabel Díaz Ayuso en 2020 y que generó unos sobrecostes del triple de lo presupuestado en su construcción, ha visto cómo se desplomaba el techo de entrada.
Opinión
Opinión Espejismo España
La descomposición del Gobierno de coalición es un reflejo de la expansión de la ola ultraderechista, pero no implica que los movimientos de transformación no puedan organizarse para contrarrestar esa amenaza.
Naciones Unidas (ONU)
Cumbre de la ONU ¿Quién teme una arquitectura de la deuda justa?
Aunque muchos Estados habían presionado para que se establecieran compromisos de reformas estructurales ambiciosas, el texto final revisado del 'Compromiso de Sevilla' las eliminó o diluyó. La sección sobre deuda no es una excepción.
Córdoba
Turismo El número de pisos turísticos en Córdoba se reduce a los tres meses de la moratoria para nuevas licencias
Otras normas tratan de limitar la proliferación de las viviendas de uso turístico por la ciudad. Un portavoz de Stop Desahucios predice que estos pisos se trasladarán a los barrios no afectados por la moratoria.
Naciones Unidas (ONU)
Genocidio El Informe Albanese denuncia ante la ONU a las empresas que se han lucrado del exterminio en Gaza
La relatora presenta un informe al Consejo de Derechos Humanos en el que detalla la responsabilidad de decenas de empresas en las políticas de ocupación, apartheid y genocidio que está llevando a cabo Israel en Palestina.
Crisis climática
Datos El junio más cálido jamás registrado cierra con 330 fallecimientos por calor
103 personas han muerto en los primeros tres días de la ola de calor, según las estimaciones. Los datos de la Aemet señalan al pasado mes como el junio más caluroso; ha pulverizado la máxima anterior por 0,8 grados de diferencia.
Oriente Medio
Oriente Medio La plantilla de EFE en Oriente Medio denuncia salarios por debajo de los mil euros
La delegación, formada por 24 personas, anuncia paros en sus funciones al verse reducida más de un 25% su nómina sin opción a negociar.

Recomendadas

Salud mental
Laura Martín López-Andrade “La psiquiatría es una profesión potencialmente muy peligrosa”
La psiquiatra granadina defiende desde Málaga otro tipo de psiquiatría que huye de los diagnósticos y de la jerarquía y cambia la palabra tratamiento por acompañamiento.
Alquiler
Racismo y alquileres Siete de cada diez migrantes se ve en la necesidad de vivir de alquiler frente al 14% de los hogares españoles
“El precio del prejuicio” es el título del más reciente estudio del Instituto de Investigación Urbana de Barcelona, IDRA, en el que disecciona la relación entre las personas migrantes y su acceso a la vivienda.
Malasia
Malasia Durian, la fruta fétida que triunfa en Asia
El durian es tan maloliente que su consumo está prohibido en interiores, pero la popularidad de esta fruta, considerada un superalimento, no deja de aumentar en China y en el resto de Asia.