Voces: Horas de guerra, minutos de paz

Emilio Polo nos regala unos textos de su libro Horas de guerra, minutos de paz, que aborda con la precisión de un alfiler ardiendo el conflicto en Colombia, y la esencia del ser humano. Acompañados por los poderosísimos dibujos de Bastardilla, estos relatos se instalan en algún lugar de nuestra conciencia, para no dejarnos dormir.
Bastardilla_Toribio_Cauca
Bastardilla Mural en Toribío Cauca
Politólogo y profesor universitario, perteneciente a Paz con Dignidad
20 dic 2018 07:41

Pareciera que en un microrrelato no pudieran caber muchas cosas. ¡Son tan breves! Sin embargo, Emilio Polo consigue en su libro Horas de guerra, minutos de paz, publicado por Paz con Dignidad, OMAL y Libros en Acción, que en cada cuatro líneas nazcan, vivan y, terriblemente, mueran, muchas personas que creemos ver, que conocemos, solo por cómo respiran entre esas cincuenta palabras. Sus relatos tienen la raíz en Colombia, aunque a veces nos parece que pudieran estar enraizados más adentro, en cualquier tierra en la que exista el corazón de un soldado, de un alto mando. Y, a la vez, en el pecho de cualquier mujer luchadora, pequeña, resistente, con miedo y con indignación.

Así es también como imaginamos a la ilustradora Bastardilla, artista callejera colombiana. Consigue que nos topemos en cualquier esquina de nuestra ciudad, en cualquier margen del libro, con la realidad de frente, compleja, cruel, bella. Pareciera que tanto Emilio Polo como ella hubieran estado dejándose empapar por el conflicto, por la tristeza, por la violencia de una paz incompleta y hubieran dejado brotar todo ese caudal cada quien a su forma. Y su forma es este libro incómodo, por la amargura que contagia, pero es que la realidad es amarga y es imprescindible afrontarla: con algo de esperanza, con esos minutos de paz, con la vida como arma.

"Profe, no me gustan las injusticias, ni la

desigualdad, ni la opresión, ¿por eso soy

terrorista?"."No, tranquila, tú lo que

            eres es feminista".

                           ***

"Padre, hemos perdido, nos tenemos que

ir"."No hijo, nos han echado porque no

        hemos ganado", se decían

             los campesinos.

                            ***

Le duele la espalda a la mujer nasa. Las

piedras que carga por no ser blanca, por

        no ser hombre y por haber sido

empobrecida ya no le caben en el morral.

                            ***

"Hay que tener permiso para matar,

respetemos el Derecho Internacional

Humanitario", les dijo el coronel a los

            soldados antes de iniciar

                    la ofensiva.

                            ***

Colombia, me gusta todo de ti,

                pero tú, no.

                            ***

En la mística, al inicio de la jornada de la

Escuela de Formación Regional, una niña

campesina muy joven tomó una semilla y

    dijo: "Yo voy a sembrar rebeldía para

                    cosechar victoria"

                            ***

        "Profe, al capitalismo no se lo puede

        reformar o gestionar para hacerlo

redistributivo. Es responsable del sistema

múltiple de opresiones en la mayor parte

    del mundo actual. Asesina a personas y

       destruye ecosistemas. Nos llevará a la

extinción. El capitalismo mata", me decía

    la viejita de la tienda comunitaria

            y que al hablar tan bien

                    se expresaba.

                            ***

Carla tiene seis años. Está orgullosa de

sus orígenes africanos. Lo demuestra

cuando canta, baila o en la manera en la

que lleva el pelo. Carla no entendió por

    qué su profesora la reprendió tan

severamente cuando, para hacer el

dibujo, utilizó la pintura de color negro.

La maestra había dejado bien claro que

        para realizar la tarea debían usar

                la pintura color piel.

                            ***

    "Tomar la palabra no es fácil para

    quien ha sufrido tanto, para a quien

    le han quitado todo, hasta las ganas

de hablar", decía la anciana que alzó la voz

    en la reunión donde casi todos

                     eran hombres.

                        **********

Emilio Polo Garrón, Horas de guerra, minutos de paz, Libros en Acción

http://www.bastardilla.org/

        


Sobre este blog
Saltamontes es un espacio ecofeminista para la difusión y el diálogo en torno al buen vivir. Que vivamos bien todas y todos y en cualquier lugar del mundo, se entiende. También es un espacio para reflexionar acerca de la naturaleza, sus límites y el modo en que nos relacionamos con nuestro entorno. Aquí encontrarás textos sobre economía, extractivismo, consumo, ciencia y hasta cine. Artículos sobre lugares desde donde se fortalece cada día el capitalismo, que son muchos, y sobre lugares desde donde se construyen alternativas, que cada vez son más. Queremos dialogar desde el ecofeminismo, porque pensamos que es necesario anteponer el cuidado de lo vivo a la lógica ecocida que nos coloniza cada día.
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