Palestina
Abu Dis: la capital de los balones perdidos

Un cortometraje de producción española mezcla fútbol e ironía para mostrar las consecuencias del muro israelí en Abu Dis, la capital sugerida por Donald Trump para un futuro “Estado Palestino”.

The ball against the wall
Fotograma del cortometraje, The ball against the wall, coproducción de Mukta y Distrito Pachanga
28 feb 2020 06:19

Rami empuña el cuchillo con determinación y comienza a sajar el troncho de carne de cordero. Es época de exámenes y los estudiantes inundan su puesto de kebabs, situado frente a la Universidad Al-Quds, probablemente la más prestigiosa de toda Palestina. Un año atrás, el 12 de febrero de 2019, fuerzas israelíes rodearon la Universidad en horario lectivo y lanzaron bombas de gas lacrimógeno y granadas aturdidoras. Cositas de la ocupación, que lo mismo te da como te quita.

“Mira, ¿ves la cúpula dorada?” Rami señala la mezquita Al Aqsa, cuya traducción sería “la más lejana”, aunque paradójicamente esté aquí al lado. Menos de dos kilómetros separan Jerusalén de Abu Dis, este pueblito cercenado por la mitad. “Antes tardábamos solo diez minutos, y muchos estudiantes venían a pie desde Jerusalén, pero ahora…” Ahora tienen que ir por Ramallah, hacer la cola, mostrar carnet, cruzar dedos, pasar el control militar, pillar sitio en el microbús y llegar a clase, corriendo el riesgo de no poder regresar a Jerusalén.

En la televisión pasan imágenes de Donald Trump junto a Benjamin Netanyahu presentando el nuevo Plan de Paz para la región. Calificado como “El Acuerdo del Siglo”, nadie ha especificado a qué siglo se refieren

Muchas personas han dejado los estudios. Sobran motivos e ironías en esta historia. La universidad se llama igual que el barrio árabe de Jerusalén, Al Quds, que significa “La Santa”, quizás por tener tanta paciencia. Una cualidad inherente al hecho de ser palestina. Aquí ya nada sorprende. En la televisión pasan imágenes de Donald Trump junto a Benjamin Netanyahu presentando el nuevo Plan de Paz para la región. Calificado como “El Acuerdo del Siglo”, nadie ha especificado a qué siglo se refieren. Si es del XXI, francamente, no hay esperanza. Si es del pasado, todo puede ser; el nivel está bajísimo.

Rami se quita el sudor de la frente con un trapo de cocina que pide eutanasia y por su mente parecen rondar mil ideas y sentimientos: cuán surrealista es que se presente este plan sin haberlo consensuado con los representantes palestinos, algo que ya sucedió en 1917 cuando nadie les pidió opinión sobre la Declaración Balfour, a través de la cual el Gobierno británico autorizaba la creación de un “hogar nacional” para los judíos en Palestina; hoy Israel.

Han pasado 103 años desde la Declaración de Balfour, los mismos que tenía Kirk Douglas al morir unos días atrás. Será que Espartaco nunca permitiría tal humillación sabiendo lo injusto que es para Palestina quedarse sin frontera con Jordania, sin las tierra ya ocupadas por más de 400.000 colonos judíos, y sin soberanía militar ni aérea ni vocal, al quitarles el derecho a alzar la voz contra las incursiones de los carros blindados y los buldóceres que tanto miedo le meten aquí a la madrugada.

Rami se ríe cuando Trump propone Abu Dis como posible capital del Estado Palestino. Sabe que ellos nunca abandonaran Jerusalén. También sabe que Netanyahu tiene elecciones legislativas en marzo, que Trump tiene presidenciales en noviembre, y que ningún lobby palestino va a financiar sus campañas. Pedirles justicia sería confiar en milagros, y mira que a 500 metros de aquí está la cueva donde supuestamente Jesús resucitó a Lázaro, pero claro, queda al otro lado del muro, y no es fácil creer en lo que no se ve.

“Abu Dis es todo gris. Nos han quitado el sol”, suelta Rami, que no camufla las palabras, las vive. El muro es un eclipse de cemento

“Abu Dis es todo gris. Nos han quitado el sol” —suelta Rami, que no camufla las palabras, las vive. El muro es un eclipse de cemento. Grafitis, alambres de espino y montones de basura quemándose a cielo abierto. Calle abajo aparece un viejo campo de fútbol reconvertido en descampado. Solo le sobreviven el poste de una portería y las ganas de jugar.

“Antes era uno de los campos más populares de Palestina; el equipo de Abu Dis era muy bueno, incluso ganó la copa un par de veces contra el Ramallah United. Pero cuando se levantó el muro dejaron de jugar”. Rami hace una pausa para sorber té y encender su ciento trigésimo cuarto cigarrillo del día. “En 2004 lo reconstruyeron tan cerca del pueblo que tuvieron que dejar de entrenar porque se les colaban los balones cada dos por tres. Era imposible”.

Al fondo, cinco chavales pegan patadas a una lata de aceite. Rami les observa, negando con la cabeza, por el mundito de mierda que les hemos preparado a estos niños condenados a crecer rápido y mal.

 

En 2004, la Corte Internacional de Justicia declaró la ilegalidad del muro entre Abu Dis y Jerusalén, instando a su inmediato desmantelamiento, ya que su trazado ignora sistemáticamente “la línea verde” acordada entre Israel y Palestina. Hoy el muro continúa separando a las familias campesinas de su principal sustento económico, más de 600 hectáreas de tierra que ya no pueden cultivar, y bloquea la carretera que antes iba hasta Jerusalén, limitando el acceso de miles de personas a escuelas, hospitales y puestos de trabajo.

El hormigón rodea el campo de fútbol de Abu Dis por el norte, el este y el sur. Junto a un córner se erige una torre de control del ejército israelí. Desde allí arriba, un soldado ve los partidos que ya no se juegan. Los balones se han perdido. En Abu Dis, como en México, Hungría o el Sahara Occidental, cualquier muro puede arruinar un partido; pero nunca logrará que se pierdan las ganas de jugar. 

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Palestina
Palestina Los aceituneros palestinos y los árboles milenarios que los arraigan a la tierra
La recolección de aceitunas es el momento más importante para las comunidades rurales palestinas. Pero con los ataques del ejército israelí y de los colonos intensificándose, también se ha tornado el más peligroso.
Palestina
Semana de Lectura por Palestina Literatura palestina toma el Metro de Madrid
Tuneando la campaña “Libros a la calle” activistas distribuyen poesía de autores palestinos en el transporte público madrileño en la semana de lectura por Palestina.
Israel
Según un informe Amnistía Internacional asegura que Israel “ha cometido y continúa cometiendo” un genocidio en Gaza
Israel trata a la población palestina de Gaza como un grupo infrahumano que no merece derechos humanos ni dignidad, según un informe de Amnistía Internacional.
Siria
Oriente Próximo Israel impone hechos consumados sobre Siria para condicionar la transición según sus intereses
“Está escrito que el futuro de Jerusalén es expandirse hasta Damasco”, dijo este octubre el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, uno de los exponentes ultras del Ejecutivo.
Ibex 35
Ibex 35 Las retribuciones de los grandes empresarios multiplican por 118 lo que ganan sus trabajadores
Los directores y ejecutivos de Inditex, Banco Santander, Iberdrola, Indra, CIE Automotive y otras empresas del Ibex 35 multiplican por cientos de veces los sueldos medios de sus empleados.
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Catalunya
Derecho a la vivienda La “revuelta de las llaves” echa a andar con tres huelgas de alquileres en Catalunya
Tres promociones de vivienda deciden ir a la huelga de inquilinos, una de las medidas defendidas por las manifestaciones del 13 de octubre y el 23 de noviembre en Madrid y Barcelona para hacer frente a los alquileres impagables.
Galicia
Economía ¿Quién lidera el negocio del eucalipto en Galicia al que Altri quiere sumarse?
El estallido social que ha producido el intento de la multinacional Altri y la Xunta de instalar una nueva celulosa en Galicia abre la necesidad de poner el foco en el sector forestal, donde se encuentran algunas de las mayores fortunas del Estado.
Inteligencia artificial
Inteligencia artificial Los creadores rechazan las licencias ampliadas para el uso de sus obras en la IA: “Es un genocidio cultural”
El Real Decreto para regular la concesión de licencias colectivas ampliadas para la explotación masiva de obras protegidas por derechos de propiedad intelectual para el desarrollo de modelos de Inteligencia Artificial recibe un rechazo generalizado.

Últimas

Personas sin hogar
Personas sin hogar Encierro en el Ayuntamiento de Granada para reclamar albergues para las personas sin hogar
Decenas de activistas exigen tratar, en el Día Internacional de los Derechos Humanos, con la alcaldesa de la ciudad sobre la necesidad de medidas urgentes ante la gravísima situación de las personas sin hogar en plena ola de frío.
Opinión
Tratados UE-Mercosur, el acuerdo que acabará con el modelo de agricultura europeo
Toda la producción agroalimentaria familiar, de pequeña escala y que desarrollan la economía local va a salir perdiendo, sea en Europa o los cuatro países latinoamericanos.
Siria
Siria Israel bombardea la transición siria
Mientras el nuevo gobierno del país intenta proyectar legitimidad dentro y fuera de sus fronteras, el ejército sionista expande su control del territorio en los Altos del Golán, y Europa congela miles de solicitudes de asilo de personas sirias.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda La moratoria del ‘escudo social’ no ha servido para impedir tres de cada cuatro desahucios
Un redactado poco claro, que deja libertad a los jueces para saltarse la moratoria, limita su alcance. A pocas semanas de su fin, organizaciones de vivienda piden que sea mejorada, ampliada y convertida en permanente.
Más noticias
Baleares
Memoria histórica Acuerdo en Baleares entre la izquierda y el PP para no derogar la ley de memoria histórica
El Govern ya no buscará los apoyos de la ultraderecha en los presupuestos ni cumplirá con uno de los puntos más calientes del programa, como era la derogación de la ley de memoria democrática.
Tribuna
Tribuna El día después del derrocamiento de Al Asad en Siria
El pueblo sirio ha sufrido lo indecible en los últimos años en sus aspiraciones de soberanía y de liberación. La pregunta ahora es ¿cómo se va a reconfigurar el reparto de poder en Siria y en la región?
Tren de alta velocidad
Explotación laboral Huelga en Iryo para los días clave de Navidad: “Solo queremos que respeten el Estatuto de los Trabajadores”
CGT convoca paros los días fuertes de estas vacaciones para, antes de comenzar a negociar un convenio propio, conseguir el abono de dietas a la plantilla de tripulación y el cobro del plus de nocturnidad.

Recomendadas

Siria
Rojava El rompecabezas sirio que estalló en Alepo
El nuevo escenario sirio se ha gestado bajo la intervención implacable de Turquía, patrocinadora del Ejercito Nacional Sirio y otros grupos yihadistas que libran la guerra de Erdogan contra el pueblo kurdo.
Cine
Ramón Lluis Bande “Asturies tiene sin construir el relato de su tiempo revolucionario”
El cineasta Ramón Lluis Bande entiende la memoria histórica como un “camino de exploración formal infinito” y de reflexión sobre el propio lenguaje cinematográfico “en relación con la realidad, la historia, el arte y la política”.
Fondos buitre
Madrid Ecosol, la cooperativa agroecológica que lucha por sobrevivir al desalojo del fondo buitre Élix Rent
Este gigante inmobiliario, que ya ha logrado hacerse con la práctica totalidad del edificio que alberga el proyecto, se niega a renovar su contrato de alquiler ya que busca rehabilitar el inmueble y alquilarlo a precios desorbitados.
Siria
Siria Cuando el miedo a la deportación es real: obligados a volver a Siria
Turquía lleva mucho tiempo deportando a los refugiados sirios. Aunque intenta justificar sus prácticas ante la comunidad mundial, estas vulneran el derecho internacional.