Laboral
Trabajadoras familiares intensifican sus acciones para frenar la externalización que las precariza

El Sindicato SAD de Cuidadoras Profesionales Municipales ha trasladado esta semana a la Fiscalía y a varios grupos del Congreso cómo se han precarizado sus condiciones laborales mediante la cada vez más común externalización de los servicios.
Cuidadoras reunión
Los Fiscales de Sala de Seguridad y Salud en el Trabajo y de Violencia sobre la Mujer, Félix Pantoja y Teresa Peramato, han celebrado una reunión con representantes de las cuidadoras profesionales.. Foto: Fiscal.es

El Sindicato SAD de Cuidadoras Profesionales Municipales mantuvo el jueves una reunión con el fiscal de Sala de Seguridad y Salud en el Trabajo, Félix Pantoja, y con la Fiscal de Sala de Violencia sobre la Mujer, Teresa Peramato, en la que ambos responsables explicaron las competencias y funciones que desarrolla el Ministerio Público para perseguir los delitos que se cometen en las distintas actividades laborales y se pusieron a disposición de las trabajadoras para que puedan denunciar los abusos que sufren ante la red de fiscales especialistas.

Las trabajadoras se reunieron ese mismo día con dos grupos parlamentarios en el Congreso: el Grupo Socialista y el PDCAT. A ellos les expusieron también los problemas a los que se enfrentan a diario las personas que se desempeñan profesionalmente las múltiples tareas que realizan como trabajadoras familiares desde servicios de los ayuntamientos —hacer o llevar comida, acompañar a personas dependientes, higiene personal, planchar o limpiar son algunas de ellas— en virtud a las ayudas por la Ley de Dependencia o bien de cualquier situación de precariedad o vulnerabilidad que consideren los servicios sociales.

Las trabajadoras han solicitado también una entrevista con la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz quien, según explican, se ha comprometido a reunirse con ellas. Además, el 15 de octubre tienen previsto acudir a una manifestación en Madrid junto a Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones en defensa de servicios públicos como los que ellas desempeñan.

La práctica de la externalización ha ido imponiéndose en los ayuntamientos en detrimento de la contratación directa pese a que empeora el servicio y las condiciones laborales de las plantillas, compuestas en un 98% por mujeres

“Nos hemos tenido que organizar para intentar revertir la situación y trasladar que la contratación público-privada no funciona”, explica Pilar Nogués, presidenta del sindicato. Nogués detalla que, al mismo tiempo que aumentaba el presupuesto para Servicios Sociales y en concreto de la Ley de Dependencia, y se subía el precio por hora del servicio, las trabajadoras han visto mermadas sus condiciones laborales y también la calidad de los servicios. 

En los últimos años, sobre todo a partir de la aprobación de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, conocida como Ley Montoro, la práctica de la externalización ha ido imponiéndose en los ayuntamientos en detrimento de la contratación directa. La pandemia, dice Nogués, ha demostrado que las administraciones pueden intervenir en este tipo de servicios cuando es necesario para mejorar los resultados y las condiciones laborales. Por eso, aunque ya estaban organizadas antes, esa situación sirvió a las trabajadoras para dar un paso más y constituirse como sindicato en Catalunya.

Entre las empresas que gestionan la ayuda a domicilio se encuentran grandes grupos como ACS, OHL, Eulen o Domus Vi.

Precariedad laboral
Laboral El declive de la ayuda a domicilio: servicios integrales y remunicipalización para su salvación
Mientras las trabajadoras denuncian precariedad, falta de control de la administración y un excesivo beneficio de los intermediarios, la calidad de la asistencia a los mayores se degrada. Del apoyo psicosocial que hacían antes y ayudaba a frenar el avance del deterioro cognitivo, ahora se han quedado en un mero servicio de limpieza.

700 euros y disponibles todo el día

Nogués explica cómo son las condiciones laborales de una trabajadora externalizada, en un sector donde el 98% de las plantillas están compuestas por mujeres: “Cobramos 700 u 800 euros al mes, no podemos cobrar más porque trabajamos un máximo de 29 horas; además, nos ponen jornadas partidas con lo que no podemos complementarlo con otros trabajos”, asegura.

Además, estas trabajadoras no disfrutan de pagas extras ni del plus de penosidad —un complemento salarial que hace referencia al desempeño de un trabajo en circunstancias excepcionales que suponen un constante esfuerzo— del que sí disfrutan trabajadoras que son contratadas directamente por las administraciones.

Fin  a la huelga en Asturias
En Asturias, trabajadoras de ayuda a domicilio, centros de día y afines ponían fin el martes a una huelga de más de 40 días tras aceptar la última propuesta del Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (SASEC) para un convenio colectivo. Las trabajadoras han estado de huelga indefinida desde el 16 de agosto para exigir mejoras de un convenio colectivo que afecta a unas 3.500 personas.

El sindicato mantiene que es posible revertir esta situación y que, de hecho, haría del servicio de ayuda a domicilio un servicio más eficaz y menos costoso, como han demostrado los casos de San Fernando o Jerez de la Frontera, en Cádiz.

En San Fernando, el Ayuntamiento anunció este verano que se hará cargo de la gestión del servicio de ayuda a domicilio. Lo hará a través de una empresa pública, la Empresa de Suelo Isleña (Esisa) que, aunque se dedica a la construcción de vivienda pública, ampliará su concepto social para asumir esta gestión.

Otro ejemplo es el de Jerez de la Frontera, que desde el 1 de enero de 2017 tiene el servicio municipalizado, también a través de una empresa pública. Tras el proceso por el que la empresa Comujesa asumió la gestión, las trabajadoras han llegado incluso a negociar su propio convenio colectivo con mejoras significativas para la plantilla.

Un servicio integral

El caso de Esther Sagués, portavoz de Lérida del Sindicato SAD, es poco habitual: en su contratación como trabajadora familiar no media ninguna empresa, ni pública ni privada, sino que es el Ayuntamiento quien la contrata directamente. Sagués explica cómo funciona el servicio de ayuda a domicilio en el que trabaja para dibujar las consecuencias de externalizarlo: “Nosotras formamos parte de un equipo interdisciplinar, eso significa que mensualmente nos coordinamos con las trabajadoras sociales en los que intervenimos y formamos parte de un equipo donde hay educadoras sociales, pediatras, psicólogas…”. “Se trata de fomentar la autonomía y que la persona usuaria pueda quedarse en su domicilio el mayor tiempo posible, evitando o retrasando el ingreso en residencia”, explica. Es este equipo el que crea una plan de trabajo para cada persona usuaria, donde de establecen unos objetivos. El plan debe recibir la aprobación de la trabajadora social, de la trabajadora familiar y de la persona usuaria. 

Esther Sagués trabaja en ayuda a domicilio sin mediación de ninguna empresa, ni pública ni privada, un caso poco habitual 

La contratación directa tiene, además, consecuencias directas en las condiciones de trabajo. “Tenemos más medidas de conciliación, posibilidad de excedencias, podemos solicitar sillas de ruedas o grúas cuando son necesarias”. Según Sagués, es una forma de trabajar centrada en las necesidades de la persona, y no en el beneficio económico.

Además, al formar parte de un equipo multidisciplinar y estar sujetas al mismo compromiso de confidencialidad que el resto de equipo, las trabajadoras familiares pueden recibir información sobre enfermedades de las personas usuarias, si existen y tomar precauciones. Y, aunque el salario no es mayor, sí cobran más porque pueden trabajar la jornada completa. El acceso a formación permanente o la gestión de las jornadas es otro de los aspectos que subraya Sagués: en su caso, si un usuario causa baja y ella no trabaja en el domicilio, puede acudir a las oficinas y hacer trabajos de gestión, mientras que una trabajadora externalizada deberá esas horas a la empresa.

Incluso, dice, se le resta a la persona usuaria el tiempo de desplazamiento que requiera la trabajadora. “No se puede pensar solo en término de productividad, porque si tú estás haciendo una higiene no puedes dejar a una persona en la ducha porque no te da tiempo”. “Cuando se externaliza, se convierte en un servicio mecánico”, explica.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

1 de mayo
1º de Mayo Euskadi se moviliza contra la 'patronal explotadora' este 1º de Mayo
Además de los temas laborales, ha habido otras reivindicaciones y recuerdos a favor del Euskera, los presos o el genocidio israelí en Palestina.
Andalucía
1 de mayo Miles de personas se unen al 1 de mayo alternativo en Andalucía
Las convocatorias alternativas a las manifestaciones convocadas por los grandes sindicatos, UGT y CCOO, congregan a miles de personas en seis de las ocho provincias andaluzas.
Feminismos
Andrea Proenza “Debemos aproximarnos a nuevos horizontes feministas en nuestra forma de amar”
‘Cartografías del deseo amoroso’ es el título de un ensayo intimista sobre chicas que quieren ser Bravo y buscan no solo el amor, sino un buen relato.
Alimentación
Soberanía Alimentaria ¿Cómo hacer más accesible la alimentación sostenible a población en vulnerabilidad?
Existen proyectos en España que están intentado informar, sensibilizar y mostrar buenas prácticas en alimentación sostenible a personas en situación de inseguridad alimentaria, en los barrios o desde la infancia.

Últimas

There Is Alternative
There Is Alternative There Is Alternative #2: de supermercados, las cosas del comer y todo lo que no sea Juan Roig
Segundo episodio del podcast There Is Alternative de El Salto Radio sobre el lado oscuro de los supermercados, las grandes superficies y sus alternativas cooperativistas.
1 de mayo
1º de Mayo ‘Contra la guerra y el capitalismo’ en este Primero de Mayo interseccional de Madrid
Decenas de colectivos exigen en la calle acabar con el militarismo creciente, las violencias transversales y un espacio para todos los colectivos en la lucha de clase.
1 de mayo
1º de Mayo Euskadi se moviliza contra la 'patronal explotadora' este 1º de Mayo
Además de los temas laborales, ha habido otras reivindicaciones y recuerdos a favor del Euskera, los presos o el genocidio israelí en Palestina.
Más noticias
El Salto Radio
El Salto Radio 600 señales
Señales de Humo cumple 600 emisiones y hace memoria: propuestas, prioridades y gente que ha ayudado a mantener el sueño de una comunicación transformadora.
Laboral
1º de Mayo Inmigración y sindicatos: derechos universales o derrota colectiva
Los líderes sindicales no pueden ofrecer soluciones realistas para la situación de las personas migrantes, porque parecen asumir la vieja tesis de que la inmigración perjudica a la clase trabajadora en su conjunto.

Recomendadas

Cómic
Fabien Toulmé “Hablar de trabajo es menos sexy que hablar de amor o de guerra”
En su libro ‘Trabajar y vivir’, el autor francés recorre distintas realidades reflejando cómo las personas se relacionan con ese mandato ineludible de hacerse con un empleo para sostenerse económicamente.
Empresas recuperadas
Natalia Bauni “En este primer año del Gobierno de Javier Milei casi no hubo empresas recuperadas”
Natalia Bauni es coordinadora del Observatorio Social sobre Empresas Recuperadas y Autogestionadas del Instituto Gino Germani de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires.
Eléctricas
Sistémica eléctrico Del lobby nuclear a la burbuja de las renovables: comienza la pugna por encontrar al culpable del apagón
Un crecimiento desmedido de las renovables guiado por intereses corporativos y una red eléctrica que no ha sido actualizada a la nueva realidad energética son algunas de las causas señaladas del apagón del 28 de abril.