OTAN
La banda de Hank Scorpio

Si la OTAN, en un principio, fue parte de la presión ejercida sobre el bloque soviético, desde la caída de la URSS se ha mostrado como el brazo militar que ejecuta las decisiones tomadas desde Washington.
Soldado defendiendo a Occidente del sol que sale desde oriente
Soldado defendiendo a Occidente del sol que sale desde oriente (Fuente: Freepik)
Grup Antimilitarista Tortuga
21 jun 2022 08:12

El 4 de abril de 1949 doce países (Estados Unidos, Canadá y diez estados europeos) firman en Washington el Tratado del Atlántico Norte, carta fundacional de la OTAN, organización a la que hoy ya pertenecen treinta estados. Según el artículo 5 del citado tratado —perezosa bandera que avientan sus propagandistas— la finalidad de la OTAN sería meramente defensiva. Si uno de sus miembros es atacado por un estado ajeno a la organización, el resto debería responder por él.

Pero la mentira dura hasta que la verdad florece y basta un somero repaso a la historia de los últimos 73 años (algo que escapa de las pretensiones de este artículo) para advertir que la OTAN no es más que una extensión de la fuerza militar estadounidense. Si, en un principio, fue parte de la presión ejercida sobre el bloque soviético, desde la caída de la URSS se ha mostrado como el brazo militar que ejecuta las decisiones tomadas desde Washington. Sus intervenciones en los Balcanes, Irak, Afganistán y Libia lo demuestran; también su extensión hacia Europa del Este, en contradicción con las declaraciones de los líderes occidentales de principios de los noventa. La organización defensiva ha resultado ser, además de escudo, espada de Estados Unidos, gran potencia y supuesta culminación de la cultura occidental.

La vida es como el agua marina, que siempre escapa de las redes, y el ser humano bien haría en aceptarlo sin, por ello, renunciar a exponer su piel a la sal.

Los límites y los fundamentos de esa cultura occidental, como los de cualquier otra, son caprichosos como el humo. No existe ninguna visión del mundo que no deba contaminarse y afrontar el caos que le da forma. Pretender definir cualquier cultura con la imagen cosmética y monolítica con la que la presenta el poder y no como un constante flujo de ideas, sensaciones y personalidades es matarla.

Todo el legado del pensamiento griego, el derecho romano, los cantares de gesta, las cosmovisiones campesinas europeas, la ciencia árabe o la ética de Cristo no puede desembocar mansamente en la consolidación de la estructura de poder que toque en cada momento ni en una ideología que reduce la razón al instrumentalismo, que, pretendiendo controlar la naturaleza, acaba controlando al ser humano, pues este es parte de ella.

Podemos elegir ser herederos de Alejandro Magno o de Diógenes el Cínico. Entre la honestidad del «solo sé que no sé nada» de Sócrates y el belicismo de la OTAN hay infinitos caminos por emprender en este viaje entre el placer y el dolor. Y bien haríamos en acompañar a quienes peregrinan más allá de unas fronteras que se muestran incapaces de contener el aliento de la vida. La OTAN no defiende la visión occidental del mundo: la OTAN es el brazo criminal de un poder que intenta imponer una interpretación reduccionista y utilitaria de la realidad.

En su maravillosa Pequeña serenata diurna, Silvio Rodríguez canta a la libertad, al amor y al esfuerzo por crecer en la contradicción, elementos imprescindibles para la comprensión de uno mismo y entre las culturas, los pueblos y los seres humanos. Pero el momento más estremecedor de la canción llega en estos versos: «Soy feliz, soy un hombre feliz y quiero que me perdonen, por este día, los muertos de mi felicidad». Bien haríamos en plantearnos si es posible no dejar muertos (metafóricos o reales) en el camino y si los asesinatos de la OTAN realmente protegen algo que valga la pena.

La OTAN es el brazo criminal de un poder que intenta imponer una interpretación reduccionista y utilitaria de la realidad

Nuestros ejércitos se confunden con la banda terrorista de Hank Scorpio, aquel villano de Los Simpson que, con buen humor, cimentaba su poder, edulcoraba las penas de unas indefinidas clases medias y convertía a los mendigos en buzones.

Lo peor es que todo esto lo sabemos y ni siquiera somos de los que se alejan de Omelas.

Archivado en: Antimilitarismo OTAN
Sobre este blog
Antimilitarimo y Noviolencia
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Antimilitarismo
Antimilitarismo En la Junta de accionistas de Indra
Entramos en la Junta de accionistas de Indra para denunciar su complicidad con el genocidio israelí en Palestina
Palestina
Marcha Global a Gaza Bloqueados a 200 kilómetros de Gaza
Cuando se cumplen diez días del inicio de la Marcha Global a Gaza, el fotoperiodista Álvaro Minguito, que acudió como enviado de El Salto a participar en la movilización, relata cómo fueron esos días.
Antimilitarismo
Rearme La sociedad española rompe con el tabú del gasto militar… o no
La cantidad de eufemismos utilizados por los gobiernos para vender las bondades del aumento en el gasto militar es un buen termómetro para sospechar que el debate no está tan decidido como pareciera.
Sobre este blog
Antimilitarimo y Noviolencia
Ver todas las entradas
Corrupción
Corrupción El juez decreta prisión provisional sin fianza para Santos Cerdán
El juez acepta la propuesta del fiscal y decreta cárcel contra el ex secretario de organización socialista por integración en organización criminal, cohecho y tráfico de influencias.
València
València La Audiencia de Valencia confirma la imputación a Argüeso en el juicio de la dana
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial concluye que la resolución de la instructora “no es irrazonable ni arbitraria”, ratificando la imputación del ex secretario autonómico de Emergencias.
Barcelona
Derecho a la vivienda Amenazas de violencia extrema y una paliza a los habitantes de un bloque okupado de Barcelona
El Salto accede a las llamadas y mensajes de audio amenazadores que un grupo de desokupa envía al vecindario del bloque Llenguadoc, donde confirma cumplir con el mandato del propietario del edificio.

Últimas

Palestina
Tribuna Tres o cuatro días sin comer en Gaza
El drama de no poder dar suficiente comida a tus hijos es inmenso, sobre todo cuando sabes que a pocos kilómetros hay camiones llenos de ayuda. Parados. Bloqueados.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición La fuga de más diputados de Sumar, en manos de Sánchez
Más representantes de las confluencias aguardan a la comparecencia del presidente del Gobierno del 9 de julio como la última señal para no saltar al grupo Mixto.
Más noticias
Medio ambiente
Tribuna Mapa de los conflictos del agua: una herramienta para la defensa de los ríos, acuíferos y humedales
A pesar del grado y extensión del daño que sufren los ríos, acuíferos y humedales, las administraciones públicas no están tomando las medidas necesarias para frenar el deterioro y responsabilizar a las entidades que lo causan.

Recomendadas

Economía social y solidaria
Historia Lo que Franco arrebató al cooperativismo y a la economía social y solidaria
La dictadura franquista combatió de forma cruel el movimiento cooperativo fraguado en la II República, y durante la propia guerra con las denominadas colectividades, y pervirtió la idea de autogestión a través de los ideales falangistas.
Río Arriba
Río Arriba Yayo Herrero: “El holocausto nazi no es una excepcionalidad en la historia de Europa, es un modus operandi”
Nueva entrevista de Río Arriba en formato podcast y vídeo en el que hablamos de ecofeminismo, transiciones ecosociales justas, decrecimiento, colapso, poner la vida en el centro y mucho más.
En el margen
Cécile C. Eveng “Perdemos amigues y es una pena porque las personas LGTBIQ pueden ayudar a desarrollar África”
La filóloga camerunesa reside actualmente en España y estudia un doctorado en migraciones, cuerpos, negrofobia y vulnerabilidad de personas. Investigar sobre identidades disidentes en su país le ha traído críticas, hasta desde la propia academia.