Deportes
Amateur y popular, el fútbol gaélico más allá de lo deportivo

La visión mediática del deporte suele medirse por su espectacularidad y por las millones de personas que atraerá, ya sea la Super Bowl con su minuto de publicidad a precio de oro, la final de la NBA, unas Olimpiadas o cualquier partido europeo de fútbol. Bajo el pretexto de un acontecimiento se han cerrado operaciones inmobiliarias previas a un gran evento, como es el caso de un Mundial, incluyendo el otorgamiento supuestamente irregular a Qatar para organizar la edición del 2022. De repente, cuando nos cuentan que existen deportes con fuertes convicciones populares, dudamos de quien nos lo afirma. Hablamos, por ejemplo, de los deportes gaélicos, disciplinas nacidas hace cientos de años en una isla al norte de la Península Ibérica con uno de los mayores niveles de producción cultural del mundo.

Punto de partida

El fútbol gaélico y el hurling son, indudablemente, los deportes más practicados en Irlanda. Son tan populares que es extraño encontrar a alguien que no sea miembro de la Asociación Atlética Gaélica (GAA, por sus siglas en inglés), entidad encargada de la regularización de estas disciplinas y que alberga a 3000 clubes con más de 400 establecidos fuera del país gracias a la diáspora irlandesa. El fútbol gaélico femenino está coordinado por la Asociación de Mujeres de Fútbol Gaélico (LGFA), mientras que el camogie lo está bajo la Asociación Camogie (CA). Como apunte sobre esta útima, se trataría del hurling practicado por mujeres con normas propias, considerados en todo caso el deporte más rápido del mundo. Todas estas organizaciones trabajan conjuntamente y comparten techo en las instalaciones del estadio Croke Park, en Dublín, el corazón y el alma de los deportes gaélicos tratándose del tercer estadio con más capacidad de Europa, 82300 asientos. Estas disciplinas son jugadas en toda la isla, tanto en los 26 condados de la República de Irlanda como en los 6 restantes que conforman Irlanda del Norte, aún bajo administración británica. A través de los deportes gaélicos puede contarse la fascinante historia de la isla y que, aparte de su marcado carácter social, también tratamos en este artículo.

La GAA como identidad en Irlanda desde su fundación

La Asociación Atlética Gaélica nació en 1884 con un objetivo principal de la GAA, preservar y fomentar los deportes tradicionales irlandeses. En aquella época, en pleno apogeo de los estados-nación y los procesos de independencia aún recientes en el continente americano, los 32 condados de Irlanda formaban parte del Imperio Británico no sin protagonizar varias revueltas durante siglos, surgiendo a finales del siglo XIX movimientos nacionalistas en diversas áreas como la literaria, bajo la denominación de "Renacimiento literario irlandés", y con el auge del idioma irlandés mediante la fundación en 1893 de la Liga Gaélica (Conradh na Gaeilge). O en política, con organizaciones como la Hermandad Republicana Irlandesa (IRB), conocida popularmente como fenians, que buscaba la independencia de la república irlandesa. Cabe destacar que los protagonistas del Alzamiento de Pascua de 1916 disponían de hurleys, palos para jugar al hurling, durante su estancia en la cárcel.

Las primeras normativas de la GAA fueron estrictas con respecto al uso de sus instalaciones para albergar eventos de deportes "no gaélicos" como el rugby o el fútbol, viéndose desde una parte de la sociedad irlandesa como "imperialistas" ya que procedían del Reino Unido. Por ello, la ya extinta regla 42 de dicha normativa prohibía "la práctica de deportes no gaélicos en estadios acogidos por la GAA". A partir del 2005, esta norma se relajó dejando constancia en la norma 5.1³ de la actualización 2017, en la que se reflejó expresamente la aceptación de albergar partidos de rugby si Irlanda organizaba el mundial de esta disciplina en 2023, que finalmente será en Francia, ó 2027. Se trataba de una interpretación política de la norma acerca de la "influencia británica" aunque, mucho antes de comenzar a debatirse su modificación, albergó combates de boxeo como el de Muhammad Alí en 1972 o partidos de fútbol americano desde 1946. Cabe destacar la influencia y apoyo buscados en EEUU para conseguir la independencia irlandesa de Reino Unido con una figura clave en el siglo XX, Eamon De Valera, nacido en Nueva York y presidente de la República de Irlanda durante décadas. Por otra parte, hasta 1971 existió la regla 27 donde se prohibía a miembros de la GAA practicar "deportes prohibidos". O la regla 21, abolida en 2001 con la que también se prohibía a miembros del ejército británico participar en competiciones de deportes gaélicos, 3 años más tarde de firmarse los importantes Acuerdos del Viernes Santo. Existe una cronología muy interesante para seguir la evolución de la normativa con la que puede interpretarse, de manera paralela, la historia de Irlanda incluido el periodo de "The Troubles", que tan violentamente marcó a la isla durante décadas, especialmente los 6 condados del norte.

Croke Park está íntimamente ligado a la cultura del país albergando momentos muy importantes en la historia de Irlanda. Uno de los capítulos más negros ocurridos fue el llamado "Domingo sangriento" de 1920, cuando la entonces Real Policía Irlandesa (RIC) entró con tanques en el estadio minutos antes del partido Dublín - Tipperary matando a 14 personas como represalia por una orden previa de Michael Collins, Ministro de Finanzas en ese momento y cabeza visible del IRB, para asesinar a miembros del Servicio de Inteligencia Británico. Quien haya visto "El viento que agita la cebada" (Ken Loach, 2006), recordará esta escena al principio de la película. De 1913, con el Lockout (cierre patronal) de Dublín, hasta 1923, fecha en la que se puso fin a la Guerra Civil irlandesa, la isla fue testigo de incesantes capítulos de violencia donde el deporte pudo servir de contrapeso para la conciliación tras años de guerras.

¿Cómo están organizadas las competiciones?

Para la GAA, las competiciones en Irlanda están divididas en campeonatos para los clubes y los organizados para las selecciones de los condados. Estas últimas están compuestas por miembros de los equipos que componen el territorio de dicho condado, el county board. En el caso de los torneos de clubes, comienzan jugándose entre equipos del mismo condado, pasando a la provincia para posteriormente jugar el campeonato de "All-Ireland". Este término hace referencia a toda la isla sin tener en cuenta la división política actual entre "República de Irlanda" e "Irlanda del Norte", un país constituyente del Reino Unido.En cuanto a la aparición en TV, seguimiento y contratos comerciales, los campeonatos inter-condado son más relevantes que los de clubes. Por ello, es más accesible desde fuera de Irlanda poder ver un partido de condados que de clubes.En primavera, se juegan las Ligas Nacionales de fútbol gaélico (NFL) y hurling (NHL). El formato de competición es muy parecido a los jugados en otras partes de Europa, todos los equipos juegan entre ellos divididos por ligas y con promoción de ascenso y descenso. Tanto la NFL como la NHL son tenidas en cuentas como un "calentamiento" para el principal campeonato, el "All-Ireland Senior Championship" de las selecciones de condados. Paralelamente, se juegan los campeonatos de categorías inferiores. El formato es parecido al de Copa en otros deportes, un sistema de eliminación comenzando a nivel provincial (Leinster, Connacht, Munster y Ulster) finalizando con partidos entre los mejores equipos de la isla. El campeón de cada provincia se enfrenta contra cuatro equipos de otros condados que han sido repescados para seguir jugando el torneo, siendo una especie de "segunda oportunidad" para equipos que han quedado en posiciones altas pero no han ganado su respectivo campeonato. En el fútbol tradicional, esto es conocido como "repesca".

Parte del club, Parte de la gaa

Los clubes pertenecientes a la GAA pagan una cuota anual a sus respectivas delegaciones del condado y estos, a su vez, hacen sus aportaciones a la propia GAA. En el caso de los clubes de fuera de Irlanda, este pago se realiza a sus respectivos comités (Europa, Medio Oeste, Australia, etc). La función de los clubes es como en cualquier organización deportiva sin ánimo de lucro, con gran parte de sus actividades cubiertas por cuotas de sus miembros y trabajo voluntario. Generalmente, estas cuotas son percibidas como "asequibles" por el público general.Existen cuatro tipos de membresía⁴:

• Miembro de pleno derecho. Personas mayores de 18.
• Jóvenes miembros. Menores de 18.
• Miembro honorario. Se otorgan a personas clave en el desarrollo de su club o en los deportes gaélicos en general.
• Miembro simpatizante. Personas mayores de 18 que apoyan al club pero no desean participar en organización de eventos rechazando su derecho de voto sobre el club.

Todas las entidades deben seguir estrictamente los estándares de igualdad defendidos en la GAA. Con respecto a los precios de las cuotas, los clubes tienen libertad de decisión incluyendo descuentos de familias o para estudiantes.

El GAA en el sistema educativo

Los deportes gaélicos están muy bien integrados en el plan escolar irlandés, donde lo más normal es encontrar equipos en llas escuelas de primaria y secundaria. De hecho, es muy común que la persona que imparta Educación Física tenga también la acreditación oficial de la GAA para entrenar. Sin embargo, si el colegio no tiene a nadie con la acreditación de "coach", el club provee a alguien sin coste alguno para padres y madres.

Una organización sin ánimo de lucro creando un producto comercial de éxito

Uno de los puntos más importantes en el reglamento de la GAA es proteger el carácter "amateur" de las competiciones. Esta característica, sumada a que la GAA es una organización sin ánimo de lucro, podría sonar a paradoja observando los niveles de profesionalidad sobre gestión y marketing existente en los equipos. Como nota importante, fuera de los estadios, todos los jugadores y jugadoras tienen sus propios trabajos como fuente principal de ingresos, llegando a darse casos donde estrellas de algunos equipos han abandonado el campeonato por compromisos laborales. Cada último fin de semana de septiembre, la final del campeonato masculino de Irlanda llena los 82300 asientos y es seguido por millones de personas a través de TV. En el caso del femenino, una semana después, la asistencia de más de 51000 personas a la final jugada en 2018 entre Dublín LGFA y Cork LGFA, donde las primeras vencieron en un partido muy disputado por 3-11(20) - 1-12(15), fue récord aunque con una cifra no muy inferior desde hace años. No olvidemos que se trata de un deporte amateur. Los torneos inter-condados tienen acuerdos de difusión con canales importantes como la BBC, SKY Sports y Premium Sports, además de importantes firmas comerciales como patrocinios.

Uno de los puntos más importantes en el reglamento de la GAA es proteger el carácter "amateur" de las competiciones.

Transparencia financiera y autosuficiencia

Anualmente, la GAA publica su informe presentando sus hitos más importantes ofreciendo una visión general de sus cuentas en pleno ejercicio de transparencia. En 2018, la GAA facturó 63,5 millones de euros⁵, de los cuales 52,89 millones se distribuyeron entre clubes y escuelas. En este mismo año, la GAA invirtió 11,1 millones para organizar eventos y campeonatos, llevados a cabo con un 40% de lo obtenido por las entradas y un 17% del presupuesto total. El desarrollo y promoción de la GAA para la implantación de los deportes gaélicos supusieron unos 11,4 millones de euros, consistente en programas de entrenamiento, concienciación y la estimulación de la práctica de deportes gaélicos por todo el mundo. El programa de coaching está financiado en parte por las becas de Sport Ireland, el Consejo de Deportes de la República en los 26 condados. La única condición para contar con estos fondos es que el Estado no supere la tercera parte de los costes. Por el momento, la GAA puede desembolsar el 80% sin problemas para los programas de promoción de “coaching”. Casi la mitad del total procede de la venta de entradas seguido de los derechos de explotación comercial. Como dato a destacar, el fichaje de un jugador de fútbol como Cristiano Ronaldo costó 96 millones de euros al Real Madrid en 2009, es decir, la GAA en 2018 facturó un 66% del coste total del delantero portugués para llevar a cabo todas las competiciones.Durante los últimos 50 años, la GAA ha invertido más de 2,7 billones de euros en infraestructuras. Gracias a una beca especial de la Asociación, la GAA ayuda a modernizar los programas de entrenamiento. Sin embargo, es necesaria una rendición de cuentas consistente en:

• Un detallado plan de inversión.
• Informes cada cierto tiempo.
• La presencia de otras fuentes de financiación (recaudación de fondos, inversores, patrocinadores, etc).

Una base para el éxito deportivo

Los deportes gaélicos, especialmente el fútbol, no para de crecer en todo el mundo. En la Península Ibérica, el fútbol gaélico está teniendo una gran aceptación siendo Galicia el territorio con más equipos y con campeonato propio, al igual que Andalucía donde hay presencia en Sevilla, Costa del Sol, Gibraltar y Málaga capital.  A su vez, existen rondas ibéricas previas a la final, disputada en mayo, participadas por equipos estables en Castilla (Madrid), Catalunya (Barcelona, Sitges), País Valenciano (Valencia), creciendo su implantación en otras ciudades como Zaragoza o Lisboa. Además de estos clubes, existen selecciones que en Irlanda serían el equivalente a las selecciones de los 32 condados (County boards). En el caso de la Península Ibérica, Galicia está reconocida oficialmente y ha participado en mundiales con resultados muy positivos como el subcampeonato en Abu Dabi celebrado en 2016.

La GAA facturó en 2018 el 66% de lo que costó el fichaje de Cristiano Ronaldo, destinando ese dinero al desarrollo de su programa en escuelas y a la promoción.

Como dato anecdótico, la selección nacional de fútbol o soccer de Irlanda tiene a jugadores con pasado en disciplinas gaélicas: Shane Long, Seamus Coleman, Kevin Doyle, John O’Shea o Mark Wilson, entre otros. Martin O’Neill, seleccionador de la República de Irlanda entre 2013 y 2018, procede de una familia con tradición: practicó el fútbol gaélico en su juventud jugando en varios equipos siendo su padre fundador del Pádraig Pearse's GAC Kilrea en el sur de Derry, ciudad bajo administración británica. El nombre del equipo está dedicado a la memoria de uno de los instigadores del Alzamiento de Pascua que tomó la oficina de Correos de Dublín en 1916, Pádraig Pearse.

El fútbol gaélico en Andalucía

Localidades de la Costa del Sol, Málaga capital, Sevilla y Gibraltar son los territorios en Andalucía donde más actividad encontramos. Actualmente, los equipos masculino y femenino de cada club disputan una liga andaluza clasificándose para una ronda final ibérica donde comparten cartel con equipos de la península. El hurling también tiene cabida a través de "Andalucía Vandals",  un combinado de jugadores de los distintos equipos andaluces.

Más allá de lo deportivo

En tiempos donde los millones de euros invertidos en publicidad y fichajes insultantemente caros, en tiempos de crisis socioeconómica, miles de personas han potenciado la contratendencia de experiencias de accionariado popular en el fútbol como el CAP Ciudad de Murcia, UC Ceares de Xixón o el FC United de Manchester bajo la premisa Against the modern football ("Contra el fútbol moderno"). Nelson Mandela no fue ajeno a este fenómeno, usando el rugby y el mundial en Sudáfrica de 1995 para intentar cohesionar un país dividido recién salido de décadas de apartheid. Con respecto al fútbol gaélico, las demostraciones de apoyo al Día Internacional de la Mujer Trabajadora, la realización de partidos contra la homofobia o la cultura popular son comunes en el Estado. Cabe destacar la Liga Gallaecia, que bajo el formato de equipos mixtos contiene una alta militancia política en Galicia.

Sin duda, los deportes gaélicos son una ventana cultural de intercambio y "fair play" en los que el carácter amateur y el buen ambiente en los partidos propician unas condiciones únicas para mantener, sin duda, las esperanzas en el deporte como herramienta de educación, respeto y solidaridad.

La Costa del Sol, Sevilla, Gibraltar y Málaga son los puntos de más actividad en Andalucía de los deportes gaélicos.

Podemos agradecer que existan organizaciones apegadas a la realidad para crear equipo(s). La influencia cultural de los deportes gaélicos en Irlanda han contagiado a miles de personas en el mundo que siguen los torneos de la isla o se han animado a jugar en los equipos de sus respectivas ciudades. Este deporte, que es difícil de definir por quienes lo practican recurriendo a explicaciones como "Es como el fútbol, pero con las manos", "Tiene algo de rugby pero no tanto", "Se dan botes como en baloncesto", cada vez reúne a más gente y más afición. Citando al histórico expresidente sudafricano, "El deporte tiene el poder de transformar el mundo". Quién sabe si Eduardo Galeano, un apasionado del esférico, tuvo tiempo de compartir momentos de peloteo gaélico con la emigración irlandesa llegada al Cono Sur a finales del siglo XIX, la gran mayoría para trabajar en fábricas y pastoreo.

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1 Editado por Hoja de Lata (2019) en castellano y Tigre de Paper (2019) en catalán.

2 Editado por Capitán Swing (2017) en castellano y Tigre de Paper (2017) en catalán.

3 Páginas 67 y 68 de la normativa actualizada en 2017.

4 Página 4 del documento oficial "Registro y membresía".

5 Rendición de cuentas económicas de la GAA en 2018.