Derecho a la vivienda
Intentan desalojar por la fuerza una vivienda okupada ante la inacción de la policía municipal en Gorliz
Un grupo de jóvenes okupa una vivienda de una constructora que llevaba 20 años sin usarse para hacer frente a la problemática de la especulación y de las viviendas vacías en Uribe Kosta.

Un grupo de jóvenes tomó hace semanas la decisión de okupar una vivienda en la calle Kinpulene de Gorliz. La vivienda es propiedad de la constructora Lanbide S.L. y lleva 20 años vacía, sin habitar. Tampoco está en venta ni en alquiler. A pesar de esa desidia de dos décadas, cuando los hermanos Irastorza -hijos del dueño de la empresa- se dieron cuenta de que había sido okupada, se presentaron allí rápidamente para intentar expulsar a los nuevos vecinos. Sin tiempo que perder en procesos judiciales, lo intentaron con amenazas, empujones y violencia. Todo ello ante la inacción de la Policía municipal, que se limitó a identificar a dos de los jóvenes que están viviendo allí.
Así lo han denunciado las personas de la vivienda okupada Kinpuletxe en una rueda de prensa este viernes. También han señalado que “no existe intención firme de cortar de raíz la problemática de la especulación con la vivienda, ni de solucionar el tema de las viviendas vacías, ni a nivel comarcal, ni local”. Por ello, reivindican la okupación como una decisión política, aunque son conscientes de sus posibles consecuencias judiciales. Con todo, han anunciado que seguirán trabajando por construir “proyectos de vida colectivos y liberadores” y organizándose en torno a la okupación y el problema de la vivienda en la comarca de Uribe Kosta.
El lunes, la Policía municipal identificó a una persona en la vivienda okupada. Ese mismo día, uno de los hermanos Irastorza apareció allí para amenazarles con echarlos por la fuerza. El jueves se presentó para cumplir sus amenazas junto a sus hermanos, un cerrajero y cuatro policías municipales. Al comenzar las agresiones, las personas de Kinpuletxe pidieron a los municipales que mediaran y ante el inmovilismo de los agentes se vieron obligados a llamar a la Ertzaintza. Solo cuando se lo ordenó la Policía autonómica los Irastorza abandonaron la casa.
Tras el intento de desalojo “al más puro estilo mafia Desokupa”, en palabras de los jóvenes, las dos personas identificadas por los municipales fueron llamadas para un juicio rápido el viernes, al que decidieron no presentarse.
Relacionadas
Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.
Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!