Tribuna
Restaurar la naturaleza: por el mar corren las liebres, por el monte las sardinas

La derecha europea, contra la Ley de Restauración de la Naturaleza y en defensa de la agroindustria extractivista y la insostenibilidad ambiental.
En España el herbicida glifosato se utiliza en la agricultura convencional y para exterminar malas hierbas y arbustos en parques, plazas y aceras en las ciudades.
En España el herbicida glifosato se utiliza en la agricultura convencional y para exterminar malas hierbas y arbustos en parques, plazas y aceras. Foto: Ecologistas en Acción

Jurista y eurodiputada

1 mar 2024 07:00

El reglamento que acaba de aprobar el Parlamento Europeo, la denominada Ley de Restauración de la Naturaleza, es la primera legislación integral de la Unión Europea en materia de naturaleza en 30 años (desde la Directiva de Hábitats de 1992) y establece un marco jurídico comunitario para la biodiversidad que resulta clave para cumplir compromisos internacionales recientemente acordados. La ley contiene metas y objetivos para la restauración de ciertos hábitats y ecosistemas (ríos, zonas urbanas, polinizadores, bosques, zonas agrícolas) y su aplicación depende de Planes Nacionales cuya puesta en marcha podría requerir, al menos, dos años.

A lo largo de las negociaciones, el Partido Popular Europeo (EPP) llevó a cabo una intensa campaña de propaganda para acabar con esta iniciativa. Manfred Weber la convirtió en un arma arrojadiza contra la agenda verde de la Comisión, acercándose a los postulados de la extrema derecha para buscar el voto agrícola, en un momento en que cobraban fuerza las protestas en Países Bajos, Polonia o Austria. El caballo de batalla del EPP siempre fue acabar con el Pacto Verde antes de que pudiera ponerse en marcha, fundamentalmente, en su vertiente alimentaria.

La guerra de Ucrania sirvió como una coartada razonable para suspender buena parte las obligaciones ambientales que condicionaban la Política Agrícola Común

La guerra de Ucrania sirvió como una coartada razonable para suspender buena parte las obligaciones ambientales que condicionaban la Política Agrícola Común y las movilizaciones agrarias (espontáneas o no) combinadas con la proximidad de las elecciones europeas se han visto ahora como una oportunidad de oro para asestarle un golpe definitivo. La flexibilización de las medidas ambientales de la PAC es lo que las derechas esperan utilizar como munición política. Que con tal flexibilización digan favorecer a los agricultores mientras firman Tratados de Libre Comercio que hunden sus mercados solo resulta contradictorio si se piensa en pequeños y medianos productores. Pero es totalmente coherente si de lo que se trata es de convertir a la agricultura en una industria extractiva orientada a la exportación.

Green European Journal
Green European Journal ¿Luz roja al Pacto Verde?
Con las elecciones europeas de 2024 a la vista, los grupos de activistas medioambientales temen que el Pacto Verde se convierta en el blanco de cada vez más ataques.

Lo primero que sorprende es que se considere como una incontestable amenaza verde por la Europa que apuesta por el uso del glifosato o de organismos genéticamente modificados, que retira la Directiva de Uso Sostenible de Pesticidas, posterga la legislación sobre bienestar animal y la iniciativa sobre sistemas alimentarios sostenibles o elimina los controles de condicionalidad para las explotaciones de menos de 10 hectáreas. La misma que hoy debilita las medidas relativas al barbecho, la cobertura vegetal de los campos y la rotación de cultivos con las que se intentaba evitar la pérdida de suelo fértil, frenar la desertificación (que, en el caso español, podría alcanzar al 74% del territorio), aliviar la necesidad de fertilizantes y pesticidas, contener las plagas y contribuir a la proliferación de polinizadores a base de charcas, setos y arbustos.

No hay que olvidar que la pérdida de suelo puede aumentar entre un 13% y un 22.5% en la UE y el Reino Unido de aquí al 2050 (1/5 parte de la superficie total de la UE) y será un problema muy serio porque se perderán nutrientes y materia orgánica, aumentarán los niveles de gases de efecto invernadero, seremos más vulnerables a los desastres climáticos y tendremos menos capacidad para retener agua. De hecho, según la Comisión Europea, lo que ganamos restaurando la naturaleza es mucho más de lo que perdemos: los beneficios netos pueden ascender a unos 1.706 millones de euros.

Las derechas se han empeñado en plantear contradicciones entre el campo y la protección del campo, alimentando la fantasía terraplanista del crecimiento infinito y lineal

Sin embargo, las derechas se han empeñado en plantear contradicciones entre el campo y la protección del campo, alimentando la fantasía terraplanista del crecimiento infinito y lineal, el agua inagotable y el segundo planeta. Una fantasía funcional a su particular capitalismo del desastre, que consiste en convertir el expolio de la naturaleza en una fuente de beneficios o la escasez de recursos en un nicho especulativo. Cuanto peor, mejor: a menos suelo fértil, más posibilidades de negocio. Y si a eso se une la voracidad y la prisa, la sensación de ausencia del mañana, el negocio puede salir redondo: retener suelo, aumentar su fertilidad y ahorrar en fitosanitarios, es una pésima idea si tenemos que esperar para ver resultados.

La agroindustria y la agroquímica son las grandes beneficiadas de este relato y del estado de ánimo que lleva aparejado. También lo es el oligopolio eléctrico, deseoso de apropiarse de tierras para plantar solares y eólicas o abrir minas a cielo abierto, siempre en nombre de la transición ecológica. En la lista de curiosidades habría que apuntar, por cierto, la buena recepción que ha tenido la vertiente energética del muy denostado Pacto Verde.

Opinión
Opinión Pacto verde, minas negras
Un análisis del extractivismo en el suroeste de Europa, la responsabilidad del gran capital en el mismo y su relación con la reconversión del sector automovilístico.

En fin, a partir de aquí manipular y mentir resulta fácil y rentable. El problema es que haya pequeños y medianos productores que hayan entrado de lleno en semejante juego.

En estos días hemos visto en Extremadura cómo algunas organizaciones agrarias han dirigido duras críticas a la eliminación de diques y presas que se prevén en le Ley de Restauración de la Naturaleza omitiendo que solo se habla de eliminar las estructuras obsoletas e innecesarias (artículo 9); omitiendo que cualquier medida que se adopte al amparo de esta Ley ha de tener en cuenta las necesidades sociales y económicas de las zonas rurales y la producción agrícola (artículo 11) o que lo que se recoge en el Anexo VII, que tanto se ha difundido, son simples ejemplos de lo que podría hacerse siempre que se optimicen las funciones ecológicas, económicas y sociales de los ecosistemas y su contribución al desarrollo de las regiones y comunidades pertinentes (artículo 14.16).

La verdad es que lo que deberíamos estar destacando hoy es que la biodiversidad en la Unión Europea está en crisis; que sólo el 23% de las especies y el 16% de los hábitats contemplados en las Directivas sobre Naturaleza gozan de buena salud

Extraño es que se haya pasado por alto que para todo esto los Estados están obligados, además, a garantizar la participación de los propios agricultores y otras partes interesadas (artículo 14.16) y que para evaluar la situación de los ecosistemas agrícolas se debe tener en cuenta la proporción de superficie agraria con lo que se denominan elementos paisajísticos de gran diversidad (lindes, acequias, mojones, cercas de piedra, franjas de protección, setos o árboles). En fin, hay campañas de descrédito que se desacreditan a sí mismas y que, por ignorancia o mala fe, acaban resultando inútiles a quienes deberían ser más útiles. Algo parecido a lo que ha sucedido con la demonizada Agenda 2030.

La verdad es que lo que deberíamos estar destacando hoy es que la biodiversidad en la Unión Europea está en crisis; que sólo el 23% de las especies y el 16% de los hábitats contemplados en las Directivas sobre Naturaleza gozan de buena salud. Y que esa crisis tiene que ver con la intensificación de la agricultura que conduce a la acidificación de los suelos, la eutrofización de las aguas y la deposición de nitrógeno en el aire debido a la aplicación de fertilizantes químicos. Está claro que las soluciones deben idearse con los agricultores y no contra ellos, con financiación y acompañamiento, pero para eso es importante que no nos engañemos.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Medio ambiente
Minas en Andalucía La sinrazón de los vertidos mineros al Guadalquivir
Se cumplen 26 años del vertido minero desde la Mina de Aznalcollar al Río Guadiamar en abril de 1998. Ahora, los nuevos proyectos de vertidos mineros desde las minas Cobre-Las Cruces y Aznalcóllar-Los Frailes vuelven a poner en peligro la zona al no haber tenido en cuenta las características del lugar.
Ecología
Medio Ambiente Grupos ecologistas se movilizan contra la reapertura de la mina de Aználcollar 26 años después del desastre
Los colectivos ecologistas llaman a la movilización ciudadana 26 años después del desastre de Aznalcóllar ante la próxima reapertura de la mina y la aprobación del vertido de 85.520 millones de litros de agua contaminada al Guadalquivir.
Comisión Europea
Altri Veciños, ecoloxistas e científicos dan o salto a Bruxelas para frear a celulosa que ameaza o corazón de Galiza
As plataformas de afectadas e ambientalistas puideron reunirse con altos funcionarios da Comisión especializados en normativa ambiental apoiados pola eurodeputada do BNG Ana Miranda para seguir defendéndose dos intereses empresariais de Altri.
juabmz
2/3/2024 18:13

Para liebre Mª Eugenia, que corre que se las pela por su mar...

0
1
Paco Caro
1/3/2024 13:35

Los agricultores y ganaderos serán los que nos maten de hambre. Sus exigencias son incompatibles con la vida humana. Nos extinguiremos sin remedio, tras horribles sufrimientos.

1
0
fllorentearrebola
1/3/2024 8:04

A ver si leen este artículo algunos de esos "izquierdistas" e incluso "agroecológicos" que se pusieron a apoyar las movilizaciones objetiva y subjetivamente reaccionarías (y en determinados casos algo peor) de los agricultores españoles y concretamente extremeños, porque siguen anclados en relatos anacrónicos y románticos. Las movilizaciones del campo han estado instrumentalizadas por la derecha ecocida, las cúpulas de Asaja, Upa Coag y La Unión son enemigas del pueblo, de la salud alimentaria y de los ecosistemas, en muchos casos (Luis Cortés condenado en firme por corrupción) son decididamente corruptas y hacen fraude con las ayudas, y se han posicionado objetivamente del lado del industria agroquímica multinacional, del lado de los grandes terratenientes y sirven a los intereses del oligopolio de las grandes distribuidoras de alimentos y grandes superficies. Su agenda de reivindicaciones era decididamente antiecologista, contra el bienestar animal y aceleracionista climática, lo que han conseguido se relata en este artículo: tumbar algunas de las muy tibias medidas de transición a un modelo agropecuario más sano, sostenible y bajo en venenos y emisiones. Una agenda ecófoba y criptofascista que lamentable y vergonzosamente ha sido indirectamente apoyada por gente que se dice de izquierdas y agroecológica, por urbanitas bienintencionados que se han dejado seducir por el victimismo y la demagogia de los "sacrificados campesinos", un error imperdonable por parte de algunos de "nuestros amigos" que en el fondo han caído en una especie de negacionismo climático blando (no lo niegan de plano, pero siguen pensando y actuando como si de hecho hubiera tiempo de sobra para postergar el cambio estructural de un sector clave en cuanto a emisiones y seguridad alimentaria de la población),

2
1
Genocidio
Genocidio La Flotilla de la Libertad pospone el viaje a Gaza hasta un próximo intento
Las activistas internacionales que tienen previsto zarpar para llevar ayuda humanitaria hasta Palestina anuncian que volverán a intentar zarpar para romper el bloqueo israelí.
Palestina
Palestina Estudiar y formarse mientras sobrevives a un genocidio
La destrucción generalizada de las infraestructuras ha tenido un impacto brutal en el sistema educativo palestino.
Política
Política El PSOE escenifica un apoyo unánime a Sánchez ante la incerteza sobre su dimisión
Miles de militantes y simpatizantes se concentran en Ferraz mientras la dirección socialista se reúne en su comité federal televisado y transformado en un mitin de apoyo al presidente.
México
América Latina México a las urnas: los claroscuros de AMLO y la primera presidenta
Todo apunta que el 2 de junio, por primera vez en la historia, una mujer llegará a la presidencia. Claudia Sheinbaum, sucesora de Andrés Manuel López Obrador, se presenta como “hija del 68” en un país todavía asolado por el conflicto interno.
Análisis
Análisis Racionar el agua, cortar derechos; historias desde Bogotá
Ante la sequía, la alcaldía de la capital colombiana arrancó con una política de racionamiento de agua. La medida ha puesto sobre la mesa las dinámicas estructurales que acompañan a la crisis climática.

Últimas

El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Sidecar
Sidecar Prioridades cruciales de la izquierda francesa
La única forma que el partido de Mélenchon prevalezca en esta coyuntura desfavorable y preserve su frágil hegemonía sobre los demás partidos progresistas es ampliar su base electoral de cara a las elecciones presidenciales de 2027.
Galicia
Redes clientelares Todas las veces que la Xunta de Feijóo contrató a sus familiares y a los de otros altos cargos
Mientras Sánchez reflexiona sobre su dimisión tras el ‘lawfare’ contra su mujer, el líder del PP ha prometido que no consentiría a su pareja contratar con un Gobierno del que él formase parte, pero sí lo permitió con su hermana, su prima y su cuñado.
Más noticias
PNV
Opinión Más allá de la corrupción
Lo que parece perturbar al PNV es la posibilidad de que se establezca un sistema que priorice los derechos y el bienestar de la ciudadanía sobre sus intereses partidistas y clientelares
Palestina
Flotilla de la Libertad Los cargos públicos integrantes de la Flotilla a Gaza regresan a España
Mientras la flota que llevará ayuda a Gaza permanece en Estambul por los impedimentos de Israel para que zarpe, las políticas españolas deciden retornar a España, ante el anuncio de Pedro Sánchez.
Sanidad pública
Sanidad a la madrileña Vecinas y vecinos de Madrid acampan frente al Hospital Doce de Octubre de Madrid
El colectivo prevé permanecer frente al gran hospital madrileño para mostrar su rechazo al deterioro de la sanidad pública y programa actividades para los próximos tres días.

Recomendadas

Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda Vivir y resistir en Andalucía, la comunidad con más desahucios del Estado español
En Andalucía, la comunidad con mayor número de desahucios, se producen 11 al día. En todo el territorio surgen experiencias que luchan por la vivienda digna en un lugar donde tener un techo “se ha vuelto una utopía”.
Cine
Estíbaliz Urresola “El cine no debe quedar impasible ante las atrocidades que suceden”
La directora de ‘20.000 especies de abejas’ sigue recibiendo reconocimientos por su película, pero pide que se transformen en aplicación de mejoras concretas para el colectivo trans.