Tribuna
Acuerdo UE-Mercosur, un mal acuerdo en el peor momento posible

El acuerdo de la Unión Europea y Mercosur, cerrado la semana pasada después de 20 años de negociaciones, traerá graves consecuencias medioambientales y económicas.

Mercosur Estrasburgo
Concentración en Estrasburgo contra el tratado Mercosur el pasado 2 de julio. Foto: GUE/NGL
6 jul 2019 05:15

Durante el G-20 de la semana pasada conocimos el acuerdo provisional UE-Mercosur, el bloque comercial formado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay. Por lo que sabemos hasta el momento, este es un mal acuerdo que ya nace totalmente desfasado: ignora la nueva oleada de compromisos climáticos derivados del acuerdo de París, se queda muy corto en elementos de derechos sociales y no garantiza unos estándares aceptables de otros elementos ambientales tan relevantes en esos países como la deforestación y la especulación con la tierra.

Además, llega en un mal momento político, con la derecha más conservadora y antidemocrática vista en décadas gobernando Brasil. Con este acuerdo se limpia la maltrecha imagen internacional de Bolsonaro, que además de su involución democrática y autoritarismo, cuestiona el Acuerdo de París.

Las negociaciones comerciales de la UE son opacas, sin escrutinio parlamentario directo y con un Parlamento relegado a un rol totalmente secundario.

Los miembros del Parlamento Europeo no hemos tenido acceso a los documentos negociados, ni siquiera los miembros de la comisión parlamentaria de Comercio Internacional

Las negociaciones de este acuerdo UE-Mercosur no han sido una excepción, llegando a ser más opaco incluso que las famosas negociaciones del TTIP, donde al menos se disponía de una sala secreta para consultar los textos, aunque fuera en condiciones muy precarias. La mayor fuente de información la tenemos por una filtración masiva de los textos negociados que se publicó en 2017 por parte de la sociedad civil. Los miembros del Parlamento Europeo no hemos tenido acceso a los documentos negociados, ni siquiera los miembros de la comisión parlamentaria de Comercio Internacional. La  principal negociadora de la UE, Sandra Gallina, ha acudido regularmente a la comisión parlamentaria a dar explicaciones, pero para analizar este tipo de acuerdo hace falta mucha más transparencia y tener acceso a los textos.

Lo que la Comisión Europea y Mercosur presentaron la semana pasada no fue un acuerdo definitivo, sino un acuerdo político. Como de costumbre en este tipo de acuerdos, el diablo está en los detalles. Y lo que se presentó la semana pasada fue un documento de tan solo 17 páginas, mientras que sabemos que el texto final de este tipo de acuerdos suele ser de miles de páginas.

Sabemos todavía muy poco del acuerdo, pero sorprende a la vista en los textos disponibles la obsesión por negociar las tarifas, las cuotas, las cuantías, las unidades y los plazos. Sabemos que del Mercosur a la UE podrán viajar 99.000 toneladas de carne de vacuno, 180.000 toneladas de aves, 25.000 toneladas de porcino y 180.000 toneladas de azúcar. A cambio, 50.000 coches europeos podrán llegar al Mercosur en los próximos 15 años. Pero los elementos de fondo, de respeto de los derechos humanos y de fijación de estándares sociales y ambientales, están ausentes o son muy deficientes.

La buena noticia es que aún podemos hacer caer este acuerdo, que deberá pasar por el Parlamento Europeo antes de su aprobación. Todavía hay muchos interrogantes sobre el proceso. No sabemos cuándo pasará de ser un acuerdo provisional a un texto cerrado, listo para ser votado y ratificado si se aprueba. También hay cierta confusión respecto a si es un tratado mixto o es un tratado exclusivamente de la UE.

Se consideran tratados mixtos aquellos que negocian competencias comerciales que son exclusivas de los estados miembros y que, por tanto, requieren de ratificación en los diferentes Parlamentos estatales, como fue el caso del CETA, el acuerdo con Canadá. Así que todo ello hace que reine cierta confusión sobre los tempos de este tratado. Se puede cerrar en meses, que quede listo bajo la actual Comisión y quede solo pendiente de ser ratificado y votado. Pero también puede ser que las negociaciones técnicas embarranquen.

Nuestra obligación a partir de ahora es dar la máxima transparencia a los textos negociados. Y por supuesto trabajar con la sociedad civil para rechazar este acuerdo en el Parlamento, que es malo para el sector agrario europeo y que no supondrá ninguna mejora a la industria. No podemos volver una política comercial abusiva e irresponsable. Y, sobre todo, no podemos normalizar un espacio económico con unos gobiernos que vulneran por sistema los derechos sociales, laborales, civiles y ambientales. En algunos casos, como en el de Bolsonaro, representan una clara amenaza para las democracias y la gobernanza global.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Acuerdos comerciales
Crisis del campo Tratados y tractores: de aquellos acuerdos de libre comercio, estas protestas
Organizaciones de agricultores y ganaderos exigen que se paralicen unos acuerdos que llevan años abriendo las puertas a una competencia desleal que se materializan en sus actuales problemas.
Acuerdos comerciales
Quince negociaciones comerciales que nos dejan sin aire

Tras la fuerte oposición contra la firma del Tratado Transatlántico (TTIP) de hace cinco años, Bruselas prometió más “control democrático” de los acuerdos y participación de los parlamentos nacionales y la sociedad civil. Está pasando todo lo contrario.   

Parlamento Europeo
Seis decisións sobre a túa vida que tomará Bruxelas

Os tratados de libre comercio, a unión bancaria europea, as axudas da Política Agraria Común (PAC) ou a loita contra a evasión fiscal por parte de grandes empresas e fortunas serán os temas chave sobre os que traballará o Parlamento Europeo que saia das vindeiras eleccións.

#36672
6/7/2019 16:49

Donde quiera que hay un rojito está el ataque a otra forma de pensar ,este idiota no sabe que Bolsonaro es lo mejor que le puede pasar a Brasil y parecía que Trump crea el único que defendía los intereses de su país

2
8
Genocidio
Genocidio Israel se felicita por armar a sus ciudadanos, mientras ataca por cuarta vez el hospital de Al Shifa
Mientras el ministro de Seguridad Nacional Ben Gvir celebraba en el parlamento israelí un récord en la concesión de licencias de armas, las tropas sionistas invadían Al Shifa, donde se refugian unas 30.000 personas.
Análisis
Genocidio Armas y recursos para los palestinos y sus aliados
Es imposible escuchar ninguna petición de ayuda material, militar y económica para la resistencia armada palestina, o para sus aliados regionales, por parte de la izquierda global.
Música
Música “Stand by your man”: cómo el country posicionó el conservadurismo y la segunda ola feminista en Estados Unidos
A pesar de la imagen conservadora que tiene la música country, artistas como Tammy Wynette, Dolly Parton o Loreta Lynn cantaron y compusieron a finales de los años 60 sobre temas feministas.
Opinión
Opinión Hombre blanco busca negro no violento
'La próxima vez el fuego' supone una declaración de principios e intenciones, además de una denuncia del racismo de la sociedad norteamericana que a James Baldwin le tocó vivir, pero que abarca en sus propuestas, por igual, a blancos y negros.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda El Ayuntamiento del Partido Popular de Logroño desahucia a la PAH
Saltándose los protocolos, sin levantar acta ni expediente, el Gobierno del PP del Ayuntamiento de Logroño arrebata el local a la PAH de La Rioja y se lo concede irregularmente a la asociación de Familias Numerosas.
Crisis climática
Crisis climática El maremoto ignorado: la temperatura de los océanos alcanza registros nunca vistos
Los mares del planeta llevan un año batiendo récords de temperatura. Las consecuencias de este fenómeno van desde un incremento de las anomalías meteorológicas a una desestabilización de las corrientes marinas y los patrones climáticos globales.
Crisis climática
Crowdfunding 350.000 euros por denunciar la inacción climática
Un total de 16 integrantes de Rebelión Científica se enfrentan a importantes multas por sus acciones no violentas para denunciar la inacción ante la crisis climática. Activistas medioambientales denuncian un “efecto dominó represivo” en toda Europa.
Palestina
Protesta Miles de personas denuncian el genocidio de Israel en Gaza en una manifestación en Donostia
La movilización tenía por lema 'Genocidio Stop' y la han convocado agentes de la cultura vasca, que la han acompañado con actuaciones musicales, bertsos, bailes o ilustraciones

Últimas

Ocupación israelí
Palestina El Salto te ofrece una camiseta para apoyar económicamente a la UNRWA
No cesamos de buscar nuevas vías para visibilizar un mayoritario clamor social que pide un alto el fuego al que apenas se da cabida en el discurso mediático convencional. Todos los beneficios de esta campaña irán destinados a la UNRWA.
Opinión
Opinión Un marzo entre memorias, antídoto frente a ‘la neolengua’
‘El Gran Hermano’ continua con la peligrosa deformación y banalización de las realidades encerradas en la palabra ‘terrorismo’.
Más noticias
Formación El Salto
Formación El Salto Política por todos los medios: periodismo de análisis en la era de la aceleración
Entre el 10 y el 30 de abril, la Escuela de Periodismo Crítico de El Salto desarrolla un curso para aprender a leer y escribir la información política.
Análisis
Lobby bancario Sacrificar el euro digital para que nada cambie
Ante una adopción masiva del euro digital sin límites, los bancos dejarían de ser esenciales y verían disminuida su capacidad para seguir creando dinero.
Antitaurinos
Maltrato animal Un nuevo paso hacia la derogación de la tauromaquia
“El marco legislativo debe cambiar en base a una sociedad con mayor sensibilidad”, argumenta David Calvo, miembro de la Comisión Promotora de #NoEsMiCultura.
Antimilitarismo
Financiación de Israel Una sede del BBVA, “bañada en sangre” por los vínculos del banco con el genocidio palestino
Activistas de Alternativa Antimilitarista-Movimiento de Objeción de Conciencia rocían con pintura roja una sede del BBVA para denunciar el apoyo financiero de la entidad a las compañías que suministran armamento al ejército sionista.

Recomendadas

Inteligencia artificial
Inteligencia artificial La Unión Europea abraza la ley del algoritmo más fuerte
La inteligencia artificial ya tiene quién la regule. El Parlamento Europeo ha aprobado una ley que no mitiga las preocupaciones por los efectos que puede tener el modelaje algoritmo sobre los derechos fundamentales.
Cómic
François Schuiten “Viví la desaparición de mi perro con tanta violencia que dibujé guiado por la intuición”
Ven la luz las dos últimas obras del autor de cómic belga François Schuiten: ‘Jim’, elegía por su perro fallecido, y ‘El regreso del capitán Nemo’, nueva entrega de la imaginativa serie que desarrolla desde 1983 junto al guionista Benoît Peeters.
Rojava
Pueblo kurdo Alina Sánchez o Legerin: huellas para quien busca
El 17 de marzo de 2018, la internacionalista argentina Alina Sánchez perdía la vida en Rojava.
Análisis
América Latina Bukele, sin contrapesos e internacionalizado
El presidente de El Salvador ha ganado peso como referente de la derecha radical hispanohablante. Su “método”, una combinación de represión, punitivismo y propaganda digital, ha calado en otras experiencias regionales e internacionales.