Transporte
Yo también tiré de la palanca: “Participamos en esta acción para señalar a Metro y porque era pacífica”

El próximo 5 de noviembre, siete personas irán a juicio por tirar de la palanca de varios vagones del Metro de Madrid. La acción, que tuvo lugar en abril de 2012, denunciaba el aumento del precio de transporte. Hoy se enfrentan a dos años y medio de cárcel.

26 oct 2018 06:02

25 de abril de 2012, medio de centenar de personas suben a distintos vagones del Metro de Madrid. En un momento determinado, con los vagones parados en las distintas estaciones, accionan la palanca de emergencia. Este acto de protesta, que ocasionó algunos minutos de retraso en el suburbano madrileño, fue una de las acciones que tuvieron lugar a raíz de los sucesivos aumentos del precio del transporte público en Madrid. De un euro a 1,5 euros en el billete sencillo. A esa subida, en verano de 2011, se le sumó un encarecimiento medio del 11% en la primera mitad de 2012 para el resto de tickets. Fue también la época del movimiento Yo no Pago en Madrid, Memetro en Barcelona o Den Plirono en Grecia.

Seis años después, siete personas están acusadas de desórdenes públicos reiterados. El lema “Yo también tiré de la palanca” —nacido en la concentración convocada en apoyo a los detenidos por la acción en el metro, en la que identificaron a un centenar de personas y llovieron multas de 300 euros— las precede.  Metro de Madrid pide para cada uno de ellos dos años y medio de cárcel y 3.232 euros de responsabilidad civil a pagar de forma solidaria. Fiscalía pide once meses de multa diaria de 20 euros —6.600 euros para cada uno— más cinco años de inhabilitación. Hablamos con Teresa y Juan Antonio —nombres ficticios—, dos de las personas acusadas de tirar de la palanca.

¿Por qué participasteis en esta acción? 
Juan Antonio: En 2012 yo estaba metido de lleno en el movimiento 15M, en asambleas tanto de Sol como de varios barrios, porque me fui mudando. Era un momento de muchas manifestaciones, con mucha participación. Surgió la subida del precio del Metro de forma brutal y a mi y a mi compañera de piso nos pareció fatal y surgió la posibilidad de participar de esta protesta. Nos pareció una forma correcta de protestar por la subida del precio del Metro y señalar a Metro como causante del aumento de la precarización de la gente, porque, si en un momento de crisis encima subes el precio de los transportes públicos, medios que tienen que utilizar gente que no tiene coche en una ciudad como Madrid, donde es imposible ir de un sitio a otro si no es con transporte público… Son básicamente los motivos por los que participamos, y sobre todo porque era una acción pacífica. 

Teresa: Pues un poco por lo mismo. La situación social del momento. Había muchas acciones y medios de participar en muchas cosas, y esta era una idea tan inocente… Nunca pensé que pudiera tener una trascendencia así. La lógica era muy inocente y muy sencilla, muy simbólica, por eso me atrajo. Yo también en esa época participaba en asambleas y estaba más comprometida. Después ya lo estuve menos. Al pasar esto me quedé un poco fuera de lugar, que es lo que pretenden. Con algo tan inocente y tan poco nocivo para nadie, nos dejan fuera de juego, porque estás pendiente del juicio.

Por qué sí teníais claro que esta era una acción pacífica y segura, a pesar de la acusación que afrontáis…
Juan Antonio:
Sí, al accionarse los frenos de emergencia del Metro en las estaciones y con las puertas abiertas y el tren parado, no íbamos a hacer daño a nadie ni a romper nada. La única consecuencia de accionar los frenos de emergencia es que el conductor tiene que bajar y rearmar lo que es el freno, una operación que dura dos minutos. No rompíamos nada, por eso nos pareció una forma correcta de protestar.

En tu caso, en qué parada de metro fue?
Juan Antonio:
En Príncipe Pío.

¿Cómo vivisteis ese momento, cuando tirasteis de las palancas? ¿duró mucho el parón de los coches de metro?
Juan Antonio:
Según datos de Metro de Madrid, el parón no llegó a dos o tres minutos como mucho.

Teresa: Luego desencadenó paradas en los siguientes trenes, pero del orden de los tres minutos. 

¿Se respiraba ambiente de miedo entre la gente que viajaba en el vagón?
Teresa: Ni se enteraron. Salimos todos con normalidad y nadie dijo nada.
Juan Antonio: En nuestro caso yo creo que tampoco se enteraron.

¿Cómo fue la detención?
Juan Antonio: En mi caso fue al día siguiente. Vino a casa por nosotros la Policía Nacional. La Brigada 21, que es la que se encargaba de vigilar los movimientos sociales. Vinieron a por mi y a por mi compañera de piso. Nos llevaron a Moratalaz y estuvimos allí unas 30 horas. De allí nos llevaron a Plaza de Castilla a declarar. Es el peor recuerdo, el hecho de que te detengan, de lo que es Moratalaz en sí, que es una cárcel… Lo recuerdo como el peor momento de mi vida. Pero luego también es verdad que, en Plaza de Castilla, cuando salimos, el apoyo que tuvimos de la gente, que ya se escuchaba desde las propias celdas cómo gritaban desde fuera, emocionaba y ayudaba a seguir y a estar más animado.

Teresa: En mi caso, llamaron a mi compañero por teléfono a las siete de la mañana y con amenazas le dijeron que fuera a la calle Gran Vía. Él se fue y una amiga y yo le seguimos por detrás y le vimos desaparecer en un coche. Al rato me llamaron y me dijeron que tenía que ir a la casa de mis amigos. Les pregunté por qué y les dije que no iba a ir a ningún sitio. Llamé a un abogado y me dijo que, si había una orden de búsqueda contra mí, no tenía por qué ir a esa casa, podía ir a cualquier comisaría, pero al final me empezaron a chantajear emocionalmente y fui. Cuando llegué había un cordón policial y estaba toda la calle cortada.

Fue bastante estúpido, pero han pasado seis años, entonces tenía 21 años. Cuando llegué estaban todos esposados en el salón y los de la Brigada con pasamontañas. No me dijeron que me fueran a detener, pero en seguida me pusieron las bridas. Lo peor de todo es que, al salir, estaba todo el dispositivo de prensa. Ya allí nos separaron y nos llevaron a Moratalaz. Pasamos allí una o dos noches, no me acuerdo muy bien, y luego a Plaza de Castilla.

Juan Antonio: Es algo que también quiero destacar, el papel de los medios de comunicación, cómo trataron el tema. Lo sacaron en todos los telediarios de forma absolutamente sesgada, con tan solo el informe policial. Se nos trató como un grupo terrorista en algunos casos, lo que es falso y ridículo. Para ser un grupo terrorista hay que causar terror, y creo que esa acción precisamente no creo ningún terror.

¿Cómo os ha afectado este proceso?
Juan Antonio:
Realmente la primera fase fue dura, pero estuvimos más activos en el sentido de que organizamos eventos, charlas para contar lo que pasó, ya previendo la posible multa que nos van a poner. Luego hemos tenido una fase muy tranquila en el sentido de que parecía que no avanzaba, llegamos a pensar que se iba a archivar el caso. Pero ya en la última fase, nos hacen la acusación formal y ponen fecha del juicio… Realmente ha cambiado mucho mi situación desde 2012, cuando estábamos en la calle todo el día, a ahora.

Te quedas con el shock de la detención y con la sensación de que te siguen. También te condiciona en cuanto a lo que puedes hacer con tu vida

En mi caso, tengo una vida distinta, más asentada y hogareña. Este juicio viene en un momento malo, a contrapié. Ha cambiado tanto mi vida como que ahora tengo dos hijos, una acaba de nacer y tendrá un mes cuando llegue el juicio. Llevo seis años en vilo por este caso, que es lo que pretenden a la hora de dilatar los procesos judiciales, mantener a la gente bloqueada, porque si te cae otra cosa vas a la cárcel. Creo que es una estrategia de contención de la movilización social.

Teresa: En el momento más inminente te afecta mucho a nivel emocional. También porque nos llevaban siguiendo un tiempo, echando fotos. Te quedas con el shock de la detención y con la sensación de que te siguen. También te condiciona en cuanto a lo que puedes hacer con tu vida. Aunque es verdad que hubo una etapa de tranquilidad, siempre estás preocupada por lo que va a pasar en el juicio o cómo te va a afectar a tu futuro laboral.

¿Contáis con la posibilidad de que os condenen a cárcel?
Juan Antonio:
Sería muy absurdo ir por esto a la cárcel, pero está ahí ese miedo. Es verdad que hay atenuantes que van a hacer que no vayamos a la cárcel.

Teresa: Con los tiempos que corren nunca se sabe, aunque supongo que sería muy difícil que se nos condenara a cárcel.

El transporte sigue tan caro como antes o más… ¿haría falta que volvieran las movilizaciones?
Juan Antonio:
La protesta debería seguir, y señalar a Metro y a la empresa de transporte. La situación no ha cambiado y, por mucho que digan que estamos fuera de la crisis, la población sigue igual de precaria. Imagino que en algún momento volverá a haber movilizaciones, tanto por el transporte como por otros temas, igual que siguen ahí los de Stop Desahucios.

Teresa: La gente también acepta más lo que hay. A ver si la gente de las próximas generaciones viene más libre de esa aceptación y se moviliza, espero que tomen el relevo.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Multinacionales
Multinacionales Maersk y las rutas de complicidad con el genocidio israelí en Gaza
Crece la presión internacional contra la naviera danesa que está aprovisionando a Israel de armas para cometer el genocidio de Gaza en contra de las medidas cautelares tomadas por la Corte Internacional de Justicia.
Huelga
Huelga Nueva jornada de huelga en Renfe el 1 de abril
Los tres sindicatos que no firmaron el acuerdo recuerdan que hay convocatoria de paro en todo el territorio. Reclaman mejoras en el servicio público.
Análisis
Análisis Inmigración, trenes e ilusiones de soberanía
El mayor beneficiario de la situación política en Catalunya sigue siendo el PSC, que ve cómo la definitiva irrupción demoscópica de Aliança Catalana reduce el campo de los principales partidos del independentismo.
#30209
7/2/2019 8:27

Está muy bien el artículo pero revísalo antes de publicarlo, tienes faltas de ortografía importantes, como "por qué" cuando es pregunta y "porque" cuando contestas, da vergüenza ajena

0
0
#25156
28/10/2018 9:06

Es una vergüenza que las fuerzas policiales no distingan -o no quieran distinguir- entre terrorismo y activismo. Ánimo,ojalá que todo salga bien.

4
1
#25053
27/10/2018 2:03

A la cárcel no irán pero el apuro que han pasado bien les está por descerebrados

2
10
#25275
29/10/2018 22:51

¿Les está bien el "apuro" que están pasando (ayanamiento de morada, intimidación policial, presión failiar, pago de tasas de juicio y abogados y riesgo de cárcel) por defender los intereses de la ciudadanía a largo plazo frente a los de una emrpesa privada? Así nos luce el pelo chavales... Vaya mentalidad.

4
0
#25049
26/10/2018 23:07

En shock se debieron quedar los viajeros del metro creyendo que había ocurrido algo grave cuando estos descerebrados activaron la palanca de emergencia. Espero que en la cárcel recapaciten sobre lo que han hecho.

2
13
#25158
28/10/2018 9:30

Cuando se acciona la parada de emergencia no suenan sirenas, ni aparecen luces rojas, ni nada por el estilo. Si no se ve a la persona accionando el freno el pasaje ni se entera (como dicen en la entrevista). Venga ya! que esto era la típica chiquillada que se hacía, a rasgarse las vestiduras, què descerebrados,

3
1
#25052
27/10/2018 1:26

Menudo drama!
Mucho peor es perder más horas de sueño a la semana, y por tanto salud, para poder ir a trabajar. O tener que compartir mundo con gente como tú ¡escoria!

3
3
Ocupación israelí
Ocupación Israelí La policía egipcia impide con violencia la marcha internacional a Gaza
La marcha de 4.000 personas a Gaza es reprimida por la policía del régimen de Al-Sisi. La organización pide a las embajadas que reaccionen y protejan a sus ciudadanos.
Ocupación israelí
Movilizaciones Un centenar de organizaciones de 26 países denuncian a la empresa vasca CAF y su tren del apartheid
Más de 50 localidades salen a la calle este fin de semana para señalar a la empresa que construyó el tranvía que conecta Jerusalén con territorio ocupados y exigir el fin del genocidio en Gaza.
Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.
Análisis
Análisis del CIS La calma antes de la tormenta: la dimisión de Santos Cerdán como punto de inflexión
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha muerto pocas horas después de nacer por la dimisión de Santos Cerdán, aunque sirve como foto fija de un escenario que favorece a la derecha.
Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.
Estados Unidos
Estados Unidos “No Kings”: más de 2.000 manifestaciones en EEUU para protestar contra la deriva autoritaria de Trump
Con el nombre de movimiento No Kings (sin reyes), millones de personas están convocadas a manifestarse en todo el país este sábado y enfrentar el desfile militar organizado por Trump el día de su 79 cumpleaños.

Últimas

Galicia
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar a Altri
Queremos investigar a los responsables políticos y empresariales del que podría ser el mayor atentado ambiental de la historia reciente de Galicia.
Galicia
TSXG Peritos en el juicio contra la Xunta: la contaminación del embalse de As Conchas es “extremadamente peligrosa”
Siete vecinos, la Asociación de vecinos de As Conchas y la organización de consumidores CECU han demandado a varias administraciones gallegas por presunta mala gestión de una contaminación derivada del exceso de macrogranjas en la comarca de A Limia.
Palestina
Marcha a Gaza Poner el cuerpo contra el genocidio
Miles de activistas de todo el mundo participan en la Marcha a Gaza desde Egipto. Desde el movimiento solidario extremeño con Palestina, una reflexión acerca de la importancia de esta lucha y de su momento histórico.
La madeja
La Madeja Oído/lengua/vientre
El oído que deja de prestar atención a la palabra del amo y se vuelve, inclinado ligeramente hacia abajo, a las que durante siglos callaron y al fin abandonaron la mudez, no será nunca subyugado.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Un centro de salud desbordado y con cucarachas y otro pendiente de construir desde hace 22 años
Los vecinos del barrio de Comillas, en Carabanchel Bajo, se han manifestado para reclamar el nuevo centro de salud planificado desde 2003 y cuya parcela ya fue cedida por el Ayuntamiento a la CAM, que no da explicaciones por la paralización.
Centrales nucleares
Cierre de Almaraz Las empresas propietarias de Almaraz no acuerdan una propuesta conjunta para alargar la vida de la central
Solo Iberdrola y Endesa firman la propuesta de alargar la vida de Almaraz trasladada al MITECO. Naturgy se descuelga de la misma y bloquea su viabilidad, al estar la central explotada por las tres energéticas en un régimen de comunidad de bienes.
Más noticias
Israel
Oriente Próximo Israel mata al comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán, que prepara “una respuesta contundente”
Israel ha atacado Irán en la madrugada del viernes 13 de junio con bombardeos de unos 200 aviones de combate. La Guardia Revolucionaria iraní ha confirmado la muerte de su comandante, el general Hossein Salamí.

Recomendadas

Derecho a la vivienda
Jaime Palomera “La vivienda necesita una revolución”
Investigador y uno de los fundadores del Sindicat de Llogateres, Jaime Palomera presenta ‘El secuestro de la vivienda’, un libro sobre el juego amañado en el que los propietarios son cada vez más ricos y los inquilinos cada vez más pobres.
Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Brasil
Extrema derecha Arte en tiempos de fascismo: cuando enseñar a Goya y Rubens le cuesta el puesto a un profesor
Una clase de Historia en la escuela municipal en una localidad del Estado de São Paulo desemboca en acusaciones contra el profesor y una campaña de difamaciones que encabeza el concejal de educación de la zona, de la extrema derecha bolsonarista.
Literatura
María Agúndez “El trabajo de limpiadora es muy digno, pero nadie quiere hacerlo”
La escritora retrata en ‘Casas limpias’ las contradicciones de quienes considerándose personas igualitarias y progresistas delegan los cuidados y la limpieza para evitar el conflicto y sostener su comodidad.