Residuos
Incinerar residuos no es Economía Circular

La quema de recursos desincentiva a los ayuntamientos a mejorar sus políticas de separación, ya que el reciclaje compite con la incineración y estas plantas están diseñadas para funcionar a plena capacidad

Zubieta
Obras de la construcción de la incineradora de Zubieta en marzo de 2018 Ione Arzoz
Miren Basaldua
Es militante de la Plataforma ZERO ZABOR BIZKAIA
20 sep 2018 14:29

La CEWEP (Confederación Europea de Empresas de Valorización Energética), celebra su 9º Congreso en el Palacio Euskalduna de Bilbao del 19 al 21 de Setiembre, auspiciados por Zabalgarbi y AEVERSU, la asociación española de incineradoras de RSU, bajo el lema De residuos a energía: haciendo posible la economía circular.

La concepto de Economía Circular se ha convertido en un mantra que se presenta frecuentemente como la salvadora de los males de contaminación y generación de residuos a causa de la sobreproducción y despilfarro de plásticos, embalajes y otros materiales. Es cierto que la Economía Circular puede poner coto o contribuir a paliar estos desastres, pero debemos subrayar que la incineración de residuos no forma parte de ella ya que no cierra el ciclo de materiales (producción-utilización/consumo-reciclado/reutilización); corta el círculo, quemando un residuo —que podría ser preparado para la reutilización y el reciclado—, vertiéndolo a la atmósfera. Zabalgarbi, por ejemplo, vierte cada año a la atmósfera 180.000 toneladas de restos de residuos urbanos.

La Unión Europea ha aprobado en junio de este año un paquete de medidas para impulsar la Economía Circular: aumento del objetivo de preparación para la reutilización y el reciclaje de residuos urbanos al 65% en 2030; disminución del vertido a vertedero al 5% en 2030; obligación de establecer una recogida separada de materia orgánica utilizando bolsas de plástico compostables; o la eliminación para 2020 de bolsas de plástico no reciclables, entre otras medidas. Para reforzar este camino, la Comisión Europea ya comunicó a principios de 2017 que no seguiría subvencionando más incineradoras, con el fin de desincentivar estas prácticas y promover, en su lugar, una gestión de residuos enfocada a la Economía Circular, a partir del reciclaje y políticas de residuo cero. En este sentido debe recordarse que la incineración de residuos, con valorización energética y sin ella, ocupa los dos últimos escalones de la Jerarquía Europea de Residuos, por debajo de la prevención de la generación (que incluye el compostaje a pequeña escala, casero y de barrio), la Reutilización y el Reciclaje (que incluye el compostaje en grandes instalaciones).

La Comisión Europea comunicó en 2017 que no subvencionaría más incineradoras, con el fin de promover una gestión de residuos enfocada a la Economía Circular, a partir del reciclaje y políticas de residuo cero

La incineración de residuos no encaja dentro de la Economía Circular, pero los incineradores alegan que ellos hacen valorización energética. ¿Es esta una fuente de energía realmente eficaz y renovable? Lo primero que hay que señalar es que estas incineradoras reciben una enorme cantidad de ayudas públicas a través de lo que antes se conocía como Régimen Especial, que incluye a la electricidad de origen renovable. Zabalgarbi, por ejemplo, recibió en 2017 24 millones de euros en concepto de primas a la electricidad que generó, aunque el 70% de ella provenía del gas natural, y solo el 15% tenía origen renovable (cuyo origen Zabalgarbi tampoco certifica oficialmente).

En los países del norte de Europa, que tanto gusta citar a nuestros mandatarios como cuidadores del medio ambiente y promotores de incineradoras, sucede a menudo que tienen sobrecapacidad, lo que se traduce en que para amortizar sus costes tienen que importar residuos de otros países. Así, Dinamarca, un “gran incinerador”, quema en sus plantas de “waste to energy” (Valorizacion Energética de Residuos) la basura que traen de países como Reino Unido, o Alemania. Según un artículo publicado por La vanguardia en Mayo de 2017, Alessio Boldrin (uno de los ponentes de este Congreso en Bilbao), afirmó que “Dinamarca ya tiene sobrecapacidad de por sí, y con las mejoras en el reciclaje, habrá mas sobrecapacidad en el futuro”. “Esta situación resulta familiar en el estado español. La incineradora de Son Reus, que gestiona Urbaser en Mallorca, ha quemado residuos italianos para hacer viable su modelo de negocio. De los cuatro hornos construidos solo funcionan dos con normalidad”, continúa en dicho artículo. En la CAV, Zabalgarbi está recibiendo residuos de Gipuzkoa, mientras que en Zubieta se está construyendo una planta con capacidad muy superior a las necesidades previstas para el futuro, cuando aumente significativamente la recogida separada, el compostaje y el reciclado tal y como exigen Europa y el sentido común.

Residuos
El expediente oculto de Zabalgarbi

La incineradora vizcaína ha sido presentada como un modelo de eficiencia, a pesar de que sus cifras aparecen salpicadas de trampas.

Si las incineradoras se han mostrado ineficientes y las normativas ambientales están cada vez más orientadas a fomentar una Economía Circular, ¿qué sentido tiene patrocinar un Congreso que promueve la incineración, y apostar como país a dedicar dinero público y recursos por un sistema que hasta la propia UE lo pone en la cola de los sistemas de gestión de Residuos y suspende las ayudas públicas a la construcción de nuevas incineradoras?

La incineración es un sistema que para producir energía debe quemar plásticos y otros materiales con alto contenido calórico, además de gas o petróleo, porque la humedad de los bioresiduos no los hace buenos combustibles y su compostaje es una alternativa mucho mejor desde todos los puntos de vista. La quema de recursos desincentiva a los ayuntamientos a mejorar sus políticas de separación, ya que el reciclaje compite con la incineración y estas plantas están diseñadas para funcionar a plena capacidad. La incineración también desincentiva a la población de seguir políticas de prevención y reciclaje, porque invisibiliza la basura y aleja a la ciudadanía del problema. También crea problemas de salud, es causa de la emisión de dioxinas, furanos y diversos metales pesados (arsénico, mercurio, etc), compuestos químicos muy perjudiciales para la salud humana. La incineración contribuye al cambio climático, emitiendo a la atmósfera gran cantidad de CO2 (en Bizkaia, Zabalgarbi emite 240 mil toneladas al año, solo por detrás de algunas grandes instalaciones como Petronor o Bahía Bizkaia).

Residuos
Ekologismoa Zubietako erraustegia: Zertan egin dugun kale?

Zubietako erraustegiaren lanak aurrera doaz, herri mugimenduen gainetik, eta alderdikerien eta interes ekonomikoen aztarna utzita. Bitartean, borrokak dirau.

Dice AEVERSU que su objetivo es “procesar la fracción no reciclable del residuo urbano para producir electricidad o vapor, dentro del marco de referencia de la Economía Circular”. Suena bien, pero ¿cuál es la fracción no reciclable del residuo urbano? En Bizkaia se recicla en torno al 40% de los RSU generados, y la inmensa mayoría de los residuos incinerados en Zabalgarbi se podrían haber reciclado si se hubieran recogido de forma separada.

Archivado en: Residuos
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Ayuntamiento de Madrid
Huelga de residuos La huelga de recogida de residuos entra en su primer fin de semana, sin solución a la vista
El consistorio ha impuesto una sanción de 1,6 millones a las concesionarias de basuras. Sin embargo CC OO ha denunciado al propio consistorio y a las empresas por vulnerar del derecho a huelga de los trabajadores con actuaciones fuera de ley.
Ayuntamiento de Madrid
Huelga de residuos Empresas y sindicatos acercan posturas y llegan a un preacuerdo en espera de su consulta en plantillas
Los sindicatos han convocado dos asambleas para ratificar las posturas que han ido avanzando en las últimas horas. La primera se celebra a las 13H y la segunda a las 22H.
Industria textil
Industria textil #Tirandodelhilo: la industria textil al descubierto
Comprar ropa se ha convertido en un gesto automático, pero detrás de cada prenda barata se esconde una realidad marcada por la explotación laboral, la violencia de género y el deterioro ambiental.
#23234
20/9/2018 17:58

Una ligera corrección al artículo: Prevención es otra manera de llamar a la clásica Reducción, que es la primera ERRE y está muy relacionada con el decrecimiento que reclama este mundo de recursos finitos.

0
0
#23221
20/9/2018 15:07

Oiga, pues he visto que Zero Waste Europe coordina uno de los paneles del congreso europeo de las incineradoras que se celebra en Bilbao!!! Dice que los paises que más reciclan son los que más incineran con recuperación energética...

0
0
#23238
20/9/2018 18:24

Claro, invitando a Zero Waste Europe quieren blanquear la sucia e insostenible incineración.
Y de paso dárselas de democratas y europeos.
Pero no cuela, aunque la mona se vista de seda...

4
0
#23241
20/9/2018 18:57

PNV partido del negocio vasco, corrupto e impulsor del capitalismo neoliberal que intenta, en vano, fagocitar el movimiento Zero Waste, como siguen haciendo con la Economía Circular.

4
0
#23240
20/9/2018 18:54

"Incinerar con recuperación energética" se hace a costa de gas y gasoleo que son combustibles fósiles que contribuyen al cambio climático y las crecientes factura y dependencia energética.

2
0
#23233
20/9/2018 17:56

No te pases de listo.
Si se aplicara la estrategia Zero Waste no habría combustible para las incineradoras en ningún sitio.

Que Zero Waste Europa haya sido invitada al contubernio de los pirómanos, no significa que apoyen la incineración en ningún caso.

1
0
#23239
20/9/2018 18:51

Bilbao, esa ciudad que ha sustituido los altos hornos por una incineradora venenosa. Se llama "pregreso".

1
0
#23235
20/9/2018 18:09

Los paises que "más reciclan" se ven obligados a importar basura de otros paises que es lo que ocurrirá en Guipuzcoa.

La guerra de las basuras en países de largos inviernos árticos (que les ha hecho yonkis de la incineración por el calor) como Suecia y Noruega lleva al alza el precio del plástico (que es lo que mejor arde y lo más tóxico) poniendo a su población en riesgo sanitario.

También importan plástico y papel de España a través de la opaca y mafiosa Ecoembes que nos cobra dos veces: una al pagar el envase en la tienda y otra por su "reciclaje".

Ojalá se instaurará en España el sistema alemán que recoge los envases en las tiendas devolviendo al consumidor su coste en el momento.

6
0
Comunidad de Madrid
Universidad pública El alumnado de la UNED denuncia el “modelo antipedagógico” tras la supresión de tutorías presenciales
El proceso de eliminación de clases se remonta a 2008, aunque ha sido este año, con el nombramiento Claudia Sevilla como directora de centros asociados de Madrid, cuando la CAM “ha pisado el acelerador”.
València
València Rechazada la querella por tortura contra Ramón, policía infiltrado en València
Un juzgado de València desestima el recurso presentado por Alerta Solidària contra la inadmisión de la querella criminal por torturas contra el agente que pasó dos años infiltrado.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición El PSOE se mira en el espejo de Canadá
La irrupción de un enemigo exterior poderoso como Trump ha provocado un giro rotundo en las elecciones del país norteamericano, catapultando a los progresistas tras estar al borde de una dura derrota.
Economía social y solidaria
Cooperativismo Economías tejidas por mujeres: feminismo y cooperativismo en Madrid, una genealogía por contar
La Economía Social y Solidaria feminista no ofrece fórmulas mágicas, pero sí un horizonte: uno donde lo productivo y lo reproductivo, lo económico y lo afectivo, dejen de estar enfrentados.

Últimas

Opinión
Opinión Sobre la guerra y la paz
Parece que los alemanes y el resto de europeos no aprenden con la historia que ellos mismos han protagonizado en los últimos 400 años. Ni siquiera con la historia del siglo XX, tan inmediatamente próxima y tan inmensamente trágica.
La vida y ya
La vida y ya Unas horas sin luz
Edu, un amigo que es conserje en un colegio público, me escribe para contarme que quienes más se angustiaron fueron las familias más vulnerables.
Oriente Medio
Oriente Medio ‘Aliadas’, un libro para imaginar otra Shatila y recordar Palestina
Hablamos del libro, el deporte, la vida en Shatila y el genocidio en Gaza con la autora, Txell Feixas, junto a Majdi y Razan, padre e hija que protagonizan esta historia de rebeldía y amor por la vida en el campo de personas refugiadas del Líbano.
Maternidad
Maternidades Maternar sola, precaria y sin que se note
Actualmente, asistimos a un nuevo modelo de súper madre que es la monomarental, precaria, activista feminista, que hace malabares para que sus criaturas no se enteren de las patrañas que nos rodean sin perder de vista la crianza respetuosa
Más noticias
Culturas
Opinión Macrofestivales o la romantización del hiperconsumo
No hay macrofestival ético, del mismo modo que no hay banco que piense en las personas. La forma de construir relaciones sociales, así como el lugar desde donde estas se producen son importantes.
Málaga
Lucha por el agua Victoria parcial para la Mesa del Agua
Tras meses de lucha ciudadana, el equipo técnico de la Junta de Andalucía rechaza la concesión de agua al proyecto Transcendence sobre El Llano de Matagallar (Málaga)
Argentina
Argentina Argentina encadena su destino al FMI por las próximas generaciones
A corto plazo, el nuevo acuerdo permitirá equilibrar el balance de pagos, pero a costa de que la economía se incline hacia la recesión

Recomendadas

Feminismos
Andrea Proenza “Debemos aproximarnos a nuevos horizontes feministas en nuestra forma de amar”
‘Cartografías del deseo amoroso’ es el título de un ensayo intimista sobre chicas que quieren ser Bravo y buscan no solo el amor, sino un buen relato.
Cómic
Fabien Toulmé “Hablar de trabajo es menos sexy que hablar de amor o de guerra”
En su libro ‘Trabajar y vivir’, el autor francés recorre distintas realidades reflejando cómo las personas se relacionan con ese mandato ineludible de hacerse con un empleo para sostenerse económicamente.