Municipalismo
Política y consenso: el ejemplo de Málaga Ahora

La confluencia ciudadana acaba de convocar, tras un proceso de varios meses abierto, participativo y con el consenso como característica principal, un diálogo público para el próximo día 13 de diciembre, de cara a una posible confluencia con la que desbancar al PP tras dos décadas de gobierno.

La Colmena de Carretera de Cádiz (Málaga Ahora)
Un momento del acto celebrado el pasado 17 de noviembre.
26 nov 2018 12:01

Este fin de semana la candidatura municipalista Málaga Ahora ha anunciado las resoluciones que alcanzadas en un encuentro celebrado de cara a las próximas elecciones municipales, previstas para mayo de 2019. El encuentro, que tuvo lugar en La Colmena, un centro vecinal del populoso distrito Carretera de Cádiz, reunió a un centenar aproximado de personas que durante cuatro horas debatieron en grupos con un único fin: llegar a acuerdos consensuados.

La puesta en común de esos acuerdos fue retransmitida por streaming y deja un imagen simbólica: las participantes celebraron las propuestas agitando las palmas de la mano, rememorando las plazas del 15M. Se ponía fin de esta forma a un proceso abierto y participativo, que Málaga Ahora arrancó en primavera con la intención de que cualquier decisión trascendental para su posible futuro electoral se alejara de pactos en despachos, listas negociadas, repartos entre organizaciones o modos alejados de su "código fuente», como la candidatura ciudadana (tercera fuerza en el Ayuntamiento) llama a sus líneas vertebradoras, recogidas en varios principios éticos y metodológicos, según han explicado sus portavoces en rueda de prensa.

«Málaga Ahora acuerda presentarse a las próximas elecciones municipales dándole continuidad a la confluencia municipalista. Con este fin convocará a un diálogo público y abierto con la ciudadanía a organizaciones políticas y sociales antes de finales de año para definir las características de la confluencia». Lo importante del acuerdo consensuado no es solo su contenido y detalles, ni siquiera la manera en que pueda traducirse, sino el proceso en sí que ha permitido definir este compromiso.

El célebre lema «No nos representan», que llenó las plazas de todo el país en mayo de 2011, suponía a una impugnación a la totalidad del Régimen del 78. No solo señalaba sus fallas democráticas, las desigualdades sociales, las injusticias intrínsecas, la falta de oportunidades y las sombras del futuro, sino que a su vez ponía el dedo en las llagas de las instituciones que lo sustentan, entre ellas las organizaciones de carácter electoral, es decir, partidos políticos principalmente, a los que achacaba poca transparencia, dependencia de la banca o déficit de democracia interna, entre otras cuestiones.

Eran críticas que de algún modo emparentaban el 15M con el Mayo del 68, un terremoto cuya onda expansiva provocó que posteriores movimientos sociales, con especial mención a los feminismos, pero también el ecologismo o el anticolonialismo, cuestionaran ya entonces, muy a fondo, las formas y prácticas de los viejos partidos y sindicatos de la izquierda clásica. Garantizar una mayor horizontalidad, participación, transparencia o cuidados del clima grupal se convirtió en prioridad, al tiempo que se señalaba el dilema de considerar todo ello en un nivel semejante a las actividades y objetivos propios del grupo. El desafío era evidente: combinar la democracia interna con la eficacia, que la horizontalidad no obstaculizara la acción. Se produjo así un basto bagaje de teoría y prácticas en torno a metodologías participativas, con los movimientos sociales como terreno propicio para la experimentación y desarrollo.

El suelo se movía, por tanto, pese a lo que los partidos políticos, incluso los de izquierda, se afanaron en mantener sus estructuras verticales, centralizadas, burocratizadas, envejecidas y masculinizadas. El «No nos representan» del 15M se lo volvió a recordar.

De aquellas plazas surgió una constelación de nuevas organizaciones que pretendían aplicar las premisas y formas del 15M en el ámbito institucional: partidos como Podemos, el más relevante, y otros como el Partido X, además de aquellos que intentaron adaptarse al nuevo escenario (Equo, Compromís, Izquierda Unida), así como multitud de candidaturas de municipalismo democrático, con algunas que más tarde han superado el margen de sus municipios (En Común, En Marea, etc.). De todo ello resultaron nuevos conceptos y prácticas que atestaron la actualidad política del país: confluencias, primarias, crowdfunding.

De aquellas plazas surgió una constelación de nuevas organizaciones que pretendían aplicar las premisas y formas del 15M en el ámbito institucional

Pese a la dificultad de valorar de forma cabal ese magma, cabe afirmar que la gran asignatura pendiente de la llamada «nueva política» es el consenso. Quienes defienden el consenso como método clave abundan en que evita que las mayorías aplasten a las minorías y diversidades y, por tanto, perpetúen anquilosados poderes internos. Al tiempo, sirve de vacuna contra posibles injerencias de grupos estructurados con intención de copar y desvirtuar la organización. Obliga, por el contrario, a actitudes como la escucha activa, reflexión, flexibilidad, cooperación o empatía. Justo es señalar que cuando se abordan decisiones trascendentales la complejidad resulta evidente. Con todo, la explicitación previa de principios y objetivos comunes, la planificación metodológica y las figuras facilitadoras allanan notablemente el camino del consenso.

El método Málaga Ahora

Málaga Ahora nunca ha renunciado al consenso como método para abordar sus decisiones estratégicas, como la candidatura ha vuelto a repetir en su anuncio de este fin de semana. De ese modo, tras un trabajo previo de balance e identificación de sus principios y prácticas fundamentales, su "código fuente", el 17 de noviembre culminaba tras varios meses el proceso Juntas hacia 2019, algo que a nuestro juicio merece analizarse por lo que tiene de paradigmático.

Se debatía entonces, ni más ni menos, y a través de un debate público y ciudadano, su propia continuidad. Las opciones iniciales eran tres: no presentarse a las próximas elecciones, hacerlo y de nuevo como confluencia de personas o, por último, explorar posibles coaliciones con otras organizaciones políticas.

Para ello se preparó un equipo de facilitación compuesto por doce personas que dividió al aproximadamente centenar de asistentes en cinco grupos de trabajo. Cada grupo realizó una valoración conjunta de ventajas e inconvenientes de cada una de las opciones iniciales para que a continuación cada una de sus integrantes manifestara su postura mediante tres parámetros: cuál era su propuesta, cuál podría admitir y cuál rechazaba de plano. Especialmente en el segundo caso, debía exponer bajo qué condiciones. A la postre, esas condiciones serían las llaves que abrirían las puertas hacia nuevas opciones de consenso.

A medida que avanzaba, este procedimiento arrojaba valoraciones y posiciones tan enfrentadas en apariencia como para que el deseado consenso pareciera alejarse. Veamos algunas: "Es fundamental garantizar una candidatura lo más amplia posible para no dividir el voto", "Málaga Ahora es también sus principios éticos y prácticas, como las primarias abiertas, el consenso o la limitación de mandatos y renunciar a todo ello en pro de la unidad supone abandonar lo que el 15M aportó a la política, a lo que es Málaga Ahora", "La forma jurídica, confluencia o coalición, no debería ser motivo de bloqueo". Sin embargo, tras un análisis conjunto y la preceptiva ronda para exponer posicionamientos y condiciones, surgieron nuevas opciones sorprendentemente -o no tanto- coincidentes entre los 5 grupos.

Málaga Ahora no se aferra a ninguna forma jurídica ni marca, sino que acepta un marco flexible siempre que no entre en contradicción con su código ético y metodológico

Finalmente en el plenario o puesta en común, el consenso brotaba como una virtuosa combinación entre confluencia y coalición, toda vez que la opción de presentarse o no apenas desataba diferencias: Málaga Ahora aboga por su continuidad en la institución y la necesidad de construir una confluencia lo más amplia posible para desalojar del gobierno al PP, que acumula ya dos décadas. Con ese objetivo, Málaga Ahora no se aferra a ninguna forma jurídica ni marca, sino que acepta un marco flexible siempre que no entre en contradicción con su código ético y metodológico. En consonancia, llama al resto de fuerzas sociales y políticas de la ciudad a un diálogo generoso, flexible y necesariamente público con toda la ciudadanía.

El mencionado encuentro tuvo lugar el pasado 17 de noviembre, justo hace una semana. El próximo se celebra el 13 de diciembre. A lo largo de esta misma semana se harán públicos más detalles de lo que puede significar la consolidación de un proceso ciudadano y municipalista, en una línea similar a las anunciadas por Jerez y Córdoba, otros municipios igualmente relevantes de Andalucía.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Opinión
Opinión El pesimismo es contrarrevolucionario
Muchas cosas no encajan en la épica de grandes victorias y derrotas: las redes ciudadanas, la defensa de derechos sociales y económicos o las múltiples estrategias de solidaridad que sostienen la vida cotidiana.
Derechos reproductivos
Ofensiva antiabortista Unidas Podemos Plasencia denuncia que la Concejalía de Igualdad está financiando asociaciones antiabortistas
UP Plasencia señala que Igualdad subvenciona con dinero público a Red Madre, de la que está detrás políticos populares como Benigno Blanco, ex Presidente del Foro de la Familia y ex Secretario de Estado con Aznar.
Municipalismo
Manipulación de presupuestos Denuncian que el Ayuntamiento de Olivenza manipula los presupuestos participativos
Izquierda Unida Olivenza denuncia que el Ayuntamiento (PSOE) ha mandado papeletas a los vecinos con votos ya marcados, involucrando incluso a menores de edad de centros educativos de Primaria y Secundaria de la localidad.
ricardo-3
26/11/2018 22:56

Se me saltan las lágrimas. Sí se puede!

3
0
#26731
26/11/2018 17:34

Ahora más que nunca es necesario una confluencia de la izquierda transformadora, adelante!

4
0
Ley de Seguridad Ciudadana
Congreso de los diputados Reforma de la Ley Mordaza: ¿esta vez sí se puede?
Una de las mayores deudas de toda la izquierda del Estado español parece que está a punto de saldarse.
Análisis
Análisis El independentismo se reorganiza, pero ¿sigue siendo independentista?
Los partidos independentistas han sufrido la crisis del procés y el posprocés, y todavía no la han resuelto, sino, a lo sumo, la han aplazado. El PSC aparece como el ganador de una carrera con corredores agotados.
Literatura
Gustavo Faverón Patriau “Quizá la novela sea ahora mismo más relevante que nunca”
El escritor peruano Gustavo Faverón Patriau quería narrar en su nueva novela la historia de un boxeador que no sabía boxear pero tumbaba a sus rivales recitándoles al oído versos de César Vallejo. ‘Minimosca’ acabó siendo un cuentacuentos inagotable.
Galicia
Memoria histórica Así fue como el Patronato de Protección a la Mujer transformó Galicia en un convento de clausura
Las mujeres que cayeron en las redes del Patronato iniciaron un periplo de encierro, humillaciones, abusos y explotación que es desconocido para la mayor parte de la población. Queda hoy en la impunidad de un silencio que tenemos el deber de romper.
Derecho a la vivienda
Vivienda El Sindicato de Vivienda de Euskal Herria propone la “expropiación de pisos turísticos”
Ponen en el punto de mira los intereses del sector inmobiliario y tachan de “falsas” a todas las medidas propuestas por los partidos políticos como la Ley de Vivienda.
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Opinión
Tribuna Todas las razones para decir ‘Altri non’
Aquí van unos cuantos motivos para juntarnos este domingo en Compostela y dejar clara nuestra postura frente a un expolio que nos están tratando de imponer disfrazado de progreso, pero que sólo trae beneficio económico a unos cuantos indeseables.
Palestina
Eyad Yousef “No cuentes lo que queremos ser, cuenta lo que nunca hemos dejado de ser: un pueblo que quiere la paz"
Eyad Yousef es profesor en la Universidad de Birzeit, Cisjordania, y comparte su experiencia en una universidad que “representa el pluralismo y la libertad que tanto anhela la sociedad palestina”

Últimas

Opinión
Opinión Sobrevivir pagando en el Álvaro Cunqueiro
Una de las victorias ideológicas del PP de Feijóo en Galicia ha sido hacernos creer que pagar por servicios esenciales en los hospitales durante el cuidado de nuestros enfermos es lo natural, que no hay otra manera de abordarlo, pero es mentira.
Más noticias
Siria
Oriente Próximo Israel impone hechos consumados sobre Siria para condicionar la transición según sus intereses
“Está escrito que el futuro de Jerusalén es expandirse hasta Damasco”, dijo este octubre el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, uno de los exponentes ultras del Ejecutivo.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Un tercio de los asesinatos de periodistas en 2024 fueron obra del ejército de Israel
Reporteros Sin Fronteras documenta la muerte de 18 periodistas en Palestina y Líbano este año “asesinados deliberadamente por hacer su trabajo” y habla de una “masacre sin precedentes” de profesionales del periodismo.
Crisis energética
Análisis Los aerogeneradores no son molinos, son gigantes
El megaproyecto eólico del Clúster Maestrazgo, punta de lanza del capitalismo verde, destruirá un área natural de alrededor de 1325 campos de fútbol.

Recomendadas

Pensamiento
Sarah Jaffe “En realidad tenemos que hacer menos. E impedir que algunas cosas sucedan”
La escritora y periodista Sarah Jaffe aborda el desengaño cotidiano al que nos aboca el mundo laboral e investiga cómo, a pesar de todo, las personas se organizan colectivamente en sus empleos para que “trabajar apeste menos”.
Ocupación israelí
Palestina Vivir en alerta: la resistencia palestina frente la ocupación israelí
La cruda realidad de las feministas palestinas que, ante la represión y las detenciones arbitrarias, continúan su lucha por la libertad, la justicia y los derechos humanos.
Madrid
Ciudades Fake Madrid, un paseo por los hitos del simulacro
Un recorrido por los grandes éxitos de la conversión de Madrid en una ciudad irreal.