Economía social y solidaria
Mercados sociales, la unión hace la fuerza

En estas fechas de furor consumista, los mercados sociales, surgidos desde la economía social y solidaria, nos recuerdan que otro tipo de relaciones comerciales son posibles.

Mercado Social 2018
Puesto de información del Mercado Social de este 2018 en Madrid. Álvaro Minguito
23 dic 2018 06:01

Puede que en su provincia exista un mercado social y aún no lo sepa. Eso sí, no vaya buscando un mercado convencional con puestos porque, aunque algunos celebran ferias o cuentan con espacios físicos, estos mercados son más bien redes de intercooperación que han emergido los últimos diez años por todo el país entre empresas de la economía social y solidaria, y consumidoras y consumidores responsables.

Su intención es colaborar y acceder a productos o servicios sostenibles, tejiendo redes desde la producción a la distribución, pasando por el consumo con criterios éticos, democráticos, ecológicos y solidarios, redes que reúnen en España a más de 700 entidades y centenares de consumidores.
Los mercados sociales “surgen para fomentar una economía más justa con implicación activa de la población a través del consumo responsable
Los mercados sociales más consolidados son los de Aragón, Baleares, Cataluña, Euskadi, Navarra o Madrid, pero se están creando más en Andalucía, Canarias, Extremadura, Valencia y La Rioja: “Surgen para fomentar una economía más justa con implicación activa de la población a través del consumo responsable”, apunta Susana Ortega Díaz, secretaría técnica del de Aragón y coordinadora de todos los mercados a nivel estatal.Se promovieron por REAS (Red de Economía Alternativa y Solidaria) junto a movimientos civiles y entidades de la economía social. “Como hormiguitas fuimos conociéndonos, debatiendo, trabajando y soñando con esta idea”, rememora Ortega Díaz: “Ahora dan a conocer y ponen en relación proyectos de productos y servicios locales muy diversos”. Para visibilizarse celebran ferias, comparten imagen y catálogo de bienes y servicios que se puede consultar en mercadosocial.net.
Economía social y solidaria
VI Feria del Mercado Social: mucho más que un fin de semana
En esta feria, además de ser consumidoras conscientes, vamos a demostrar que también estamos orgullosas de contribuir a la construcción de otra economía más justa y más ecológica. Hagamos que todo el año sea Feria.

ADAPTADOS AL TERRITORIO

En cada provincia, estos mercados sociales adoptan una configuración diferente de acuerdo al territorio y cada uno lleva su ritmo: “Se están organizando y construyendo partiendo de la singularidad de cada REAS territorial. Algunos territorios han optado porque sea la propia Red/Xarxa de Economía Solidaria quien gestione y articule el Mercado Social, como  Navarra y Cataluña. En otros, diferentes formas jurídicas aglutinan a todas las entidades de la REAS territorial y a otras entidades de la economía social” explica Ortega Díaz. El mercado social de Madrid, que como el de Aragón, posee la forma jurídica de cooperativa, cuenta desde hace poco con un espacio físico en el mercado de San Fernando, celebra una feria anual, y su balance social evalúa el buen desempeño de las entidades: “El balance implica reflexionar transversalmente sobre nuestro propósito, los compromisos con los socios, trabajadores, clientes, proveedores y la sociedad, sin olvidar la solvencia, el buen gobierno y la responsabilidad social”, indica David Sánchez Humanes, director general de Seryes, correduría de seguros con oferta ética. El de Seryes es uno de los servicios que accesibiliza esta red en la capital, junto a otros culturales, alimentarios, energéticos, de cosmética, moda, arquitectura, idiomas, comercio justo, educación o consultoría. De 70 entidades en 2013, el mercado madrileño ha pasado a contar con más de 169 en 2018, lo que ha conllevado una reorganización. Su plan estratégico para los próximos años pretende llegar a 500 entidades, 10.000 consumidoras y consumidores, el objetivo es que estos puedan realizar el 80% de su consumo dentro de la red.
“Nuestro sueño era crecer, y ahora afrontamos el reto de generar una estructura orgánica, flexible y dinámica, transparente, inclusiva”, cuenta Sandra Salsón, presidenta de REAS Madrid
“Creo que el crecimiento nos está poniendo en la tesitura de tener que formalizar nuestras estructuras, nuestra forma de organizarnos y tomar decisiones”, reflexiona Sandra Salsón integrante de su Consejo Rector, presidenta de REAS Madrid, e implicada en el proyecto desde su inicio. “No es negativo, es consustancial al crecimiento, lo que sirve para estructuras pequeñas deja de ser funcional cuando crecen. Pero este era nuestro sueño, crecer, y ahora afrontamos el reto de generar una estructura orgánica, flexible y dinámica, transparente, inclusiva. No es sencillo, pero merece el esfuerzo intentarlo si no perdemos el horizonte transformador”, puntualiza.Y rememorando los comienzos dice: “Tengo recuerdos muy bonitos de tejer relaciones de confianza, apoyo y construcción colectiva, como decía Galeano: ‘Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo’”.

DIVERSIDAD Y COOPERACIÓN

El mercado social de Aragón y el de Madrid tienen la peculiaridad de incorporar a los consumidores, una posibilidad también para el de Valencia. “Complica la gestión pero hace que sea propiedad de todos, les da voz en igualdad de condiciones, participan en la toma de decisiones y en las estructuras de gobierno”, explica Salsón del de Madrid. El mercado social de Islas Baleares, constituido como asociación, posibilita a las empresas más visibilidad e intercooperación. “Además, buscamos ofrecer alternativas a la dependencia estacional del turismo, soluciones a problemas vinculados a su impacto, a la insularidad, al cambio climático, etc”, relata Xavier Moyà Melero, de su secretaria técnica. La 4ª edición de su feria —Fira del Mercat Social— se celebró a finales de septiembre en Palma.El de Navarra lo gestiona la Red de la Economía Solidaria e incluye a Landare, un proyecto pionero de distribución de alimentación ecológica con 2.000 socios. Poseen una moneda social —el Txanpon— y un espacio físico en la Antigua Estación de Autobuses de Pamplona. “Los cambios en el consumo y en la creación de nuevas iniciativas son más lentos de lo que quisiéramos”, observa Carlos Rey, integrante del mercado: “Sin embargo muestran una tendencia ascendente. Las ferias que realizamos son un buen pulso de ese interés y de la participación de más iniciativas”.El de Euskadi se unió a la red Olatukoop de Gipuzkoa y durante la crisis también ha crecido en entidades y consumidores ofreciendo alimentación, energía, nuevas tecnologías, finanzas, inmobiliarias éticas, educación, hostelería, turismo, limpieza, consultoría, etc. “Cada año hacemos la Feria de Economía Solidaria en una provincia, rotatoriamente”, comenta Manolo Vilabrille García, que forma parte del mercado: “Eso nos facilita el contacto directo con las diferentes administraciones locales”.

REDES DE APOYO MUTUO

Pablo Ortiz es consumidor responsable y miembro del Consejo Rector del mercado social de Madrid. “Como consumidores es importante que tengamos dónde adquirir bienes y servicios con respeto a las personas y al medio ambiente”, opina. “Pertenecer al mercado social es una satisfacción, por poder contribuir a un cambio social y económico, pero también por encontrar una oferta de calidad”, detalla.También las empresas encuentran en estos mercados ayuda. “Crear un proyecto da miedo aunque tengas empuje y lo tengas claro”, afirma Victoria Hermida, alma máter de la firma de cosmética ecológica Eco-Eko. “Por eso me uní, me dio apoyo emocional y la posibilidad de compartir inquietudes con personas que entienden la economía no sólo desde punto de vista del capital”, cuenta Hermida. “Además me permite estar en contacto con proyectos, con consumidores, participar en ferias, eventos, lograr más visibilidad, intercooperar. Y como consumidora puedo optar por seguros, financiación ética, energías renovables, etc, mientras me mantengo al día de innovaciones sociales y ambientales”.
Economía social y solidaria
Lo sostenible no es moda pasajera
¿Cuánto cambio está dispuesto a asumir el mundo de la moda? El consumo responsable parece estar llegando por fin al mundo de la moda.
Uno de los socios fundadores del mercado madrileño es la productora de energía solar sin ánimo de lucro Ecooo. “Los proveedores y los consumidores no sólo encontramos aquí un marco afín a nuestros valores sino también una oferta completa competitiva. Además nos hace más visibles”, explican  sobre su experiencia en este espacio.Gema Gómez, directora de la plataforma de moda sostenible Slow Fashion Next, también forma parte del colectivo. “Me aporta una red de profesionales de distintos ámbitos relacionados con la ecología”, dice.“Compartimos un imaginario común sobre cómo deben ser las relaciones comerciales y los servicios”, comentan desde Fiare Banca Etica, parte de la oferta financiera de muchos mercados. “Nosotros facilitamos servicios a compañías con vocación de transformación social, por lo tanto pertenecer al mercado social nos sitúa en un entorno empresarial y cultural próximo donde ofrecerlos”, explican.

ETICS, LA MONEDA SOCIAL

El mercado social madrileño, desde hace cuatro años, posee una moneda social, el boniato, que hace poco ha sido renombrada como Etics. Actualmente se está transformando en un aplicación de móvil que será un sistema de pagos, una herramienta de gestión, de descuentos, geolocalizará tiendas, y facilitará la comunicación entre consumidores y proveedores. “Llevamos más de un año y aún no está terminada, entre otros motivos, por nuestro carácter asambleario de toma de decisiones conjunta con procesos respaldados”, narra Genoveva López Morales, una de sus artífices.

Esta es una experiencia seguida de cerca por el Mercado Social de Aragón, que desea lanzar también una moneda, así como por el de Euskadi, que quiere un sistema de bonificación en sus comercios. “Aunque las casuísticas son diferentes, cuando se demuestre la utilidad de Etics, espero que haya más mercados que se animen a partir del 2019”, aprecia López Morales.

UN INTERÉS CRECIENTE

El mayor auge en los últimos años de estas experiencias de economía social y solidaria se debe: “A que una parte importante de la población se ha dado cuenta de que el modelo neoliberal aumenta las desigualdades y destruye el planeta”, valora Ortega Díaz. “Muchas voces piden un cambio basado en las personas, en la cooperación y en el respeto medioambiental. Reivindicamos una financiación, producción, comercialización y consumo como medio, no como fin, al servicio de los pueblos y de la sostenibilidad de la vida”, subraya.
“La crisis supuso un estimulo al consumo responsable al poner de manifiesto las malas prácticas empresariales”, dice Moyà Melero, del Mercado Social de Baleares.
Moyà Melero, del mercado social de Baleares, coincide: “La crisis supuso un estimulo al consumo responsable al poner de manifiesto las malas prácticas empresariales. Provocó una crisis de reputación de sectores como la banca, o las empresas energéticas, que ha revertido en un crecimiento de la economía social y solidaria. En la medida en que el sector se consolida, aumenta la posibilidad de relacionarse con las instituciones, es más fácil que se creen nuevas empresas y atraer la atención de personas consumidoras. En nuestro contexto es un proceso lento, pero que empieza a brotar”. Rey, del mercado de Navarra, añade: “Los excesos de la economía capitalista y la concentración de la riqueza cada vez entre menos acentúan la necesidad de denuncia y de resistencia, pero también, y es esencial, el desarrollo de alternativas donde la mayoría social pueda ejercer su soberanía económica”.Por su parte, Vilabrille, del mercado social de Euskadi, añade: “Ha aumentado el nivel de conciencia crítica en el consumo directo por parte de las personas consumidoras y de alguna manera se han empoderado. Todo esto indica una realidad: la economía solidaria fue necesaria, ha sido necesaria en tiempos de crisis y ha llegado para quedarse”. “Ya no podemos considerarlo una tendencia, como en los años 90 y comienzos del 2000”, corrobora Salsón. “Tras la crisis es una realidad, somos parte de una brecha en el sistema que traza una camino posible hacia formas de organización postcapitalistas y no somos los únicos. Vamos de la mano de movimientos ecologistas, feministas, pacifistas, que cuestionan el modelo aportando prácticas que conviven con él”, explica. Y concluye: “Somos muchos los que queremos generar propuestas virtuosas, el cúmulo de ‘nuevas economías’ (circular, azul, verde, colaborativa, social, solidaria) surgen y se visibiliza por una demanda social. La gente quizás desconoce esas etiquetas pero buscan opciones que encajen mejor con estilos de vida más conscientes”.
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Naciones Unidas (ONU)
Crónica del evento internacional de celebración Aniversario de la resolución de la ONU para la ESS
Recorremos algunas impresiones internacionales con motivo del primer aniversario de la Resolución de la ONU por la Economía Solidaria
Feminismos
Organizaciones habitables Construyendo organizaciones más habitables
¿Es posible promover organizaciones habitables? Recorremos la senda de la Economía Solidaria para conocer sus avances para fomentar organizaciones feministas.
Feminismos
ESS equidad Rompiendo brechas
Al calor del marzo feminista, hablamos sobre equidad para ver cómo las empresas de la Economía Solidaria la integran y promueven.
Luis Begara Perez
27/12/2018 17:47

En Córdoba llevamos más de seis años construyendo el Mercao Social de Córdoba, donde incluso se vende y distribuye El Salto.
Aparte hay otros Mercaos Sociales en Graná, Sevilla y Málaga


3
0
Palestina
Palestina La Flotilla hacia Gaza anuncia un retraso de la salida de los barcos de ayuda
La organización refiere presiones internacionales para que no se lleve a cabo una misión que pretende entregar 5.500 toneladas de alimentos y productos de primera necesidad a la población atrapada en el territorio palestino.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Una investigación independiente confirma que Israel acusó a la UNRWA sin pruebas
Un comité de Naciones Unidas apoyado por tres ONG nórdicas de derechos humanos desestima las acusaciones vertidas por Tel Aviv contra la agencia de refugiados en Palestina.
Derechos reproductivos
Luciana Peker y Cristina Fallarás “El aborto se ha apartado del relato feminista porque genera consenso”
Las periodistas Cristina Fallarás y Luciana Peker forman parte del grupo motor de una campaña europea que quiere blindar el derecho al aborto mediante una iniciativa ciudadana que necesita un millón de firmas para llegar a ser debatida.
Melilla
Fronteras Denuncian expulsiones sin respaldo legal en el CETI de Melilla
La organización Solidary Wheels cuestiona las expulsiones recurrentes de solicitantes de asilo del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes en la ciudad autónoma.
Sanidad pública
Sanidad a la madrileña Muere un hombre tras esperar 20 minutos a la ambulancia en un municipio de Madrid sin urgencias medicalizadas
La familia del fallecido habría contactado con el 112 después de que manifestara un dolor en el pecho y la ambulancia tardó 20 minutos en acudir. En este municipio llevan cuatro años sin urgencias medicalizadas.

Últimas

El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
Opinión
Opinión ¿Sirve de algo la condena internacional del genocidio?
Somos nosotros, países testigos de cuanto ocurre, los que somos juzgados con cada vida humana a la que negamos la justicia.
Más noticias
PNV
Apuestas Una alto cargo del Gobierno Vasco acumula 140.000 euros en acciones de la promotora de apuestas Kirolbet
La Inspección General de Justicia de Argentina recabó que la Directora de Euskera en la Consejería de Cultura y Política Lingüística, Estíbaliz Alkorta, tiene participaciones en Tele Apostuak.
Gasto militar
Gasto militar El gasto militar mundial batió un nuevo récord en 2023 al aumentar un 6,8%
Crece en todas las regiones y alcanza la cifra de 2,44 billones, según el último informe del Stockholm International Peace Research Institute (SIPRI).
Elecciones
Análisis 21A País Vasco, donde gobiernan los hombres de la derecha vasca desde el nacionalismo español
El soberanismo es mayoría absoluta, también lo son los votos de izquierdas. La política vasca sigue anclada a viejos acuerdos de gobernabilidad, y alejada de unas calles feministas.
Elecciones
Elecciones Euskadi Sumar araña un escaño, pero la izquierda confederal se hunde en Euskadi
Elkarrekin Podemos desaparece del Parlamento Vasco tras perder seis escaños y casi 50.000 votos que Sumar no recoge al completo, pero que le permiten acceder a un acta de diputado por Araba.

Recomendadas

Música
Música Aprendiendo filosofía con el punk patatero de La Polla Records
Los cáusticos esputos lanzados por Evaristo en las canciones de La Polla Records contenían materia adecuada para hablar de filosofía política en el instituto. Así lo entiende el profesor Tomás García Azkonobieta, autor de ‘La filosofía es La Polla’.
Pensamiento
Kristen Ghodsee “Necesitamos soluciones que podamos llevar a cabo sin la ayuda del Estado”
Esta escritora y etnógrafa estadounidense explora experiencias utópicas del pasado y del presente en su último libro ‘Utopías cotidianas’ (Capitán Swing, 2024).
Catalunya
Antirracismo Las muchas voces de Catalunya: identidades diversas, segregación y más de 300 idiomas
En las últimas décadas la sociedad catalana se ha transformado con la llegada de personas migrantes, que ya suponen un 21% de la población. Aunque la exclusión y el racismo siguen ahí, en el día a día lenguas, experiencias e identidades se mezclan.