La Unión Europea cede ante Trump y lanza “el mayor ataque” a los derechos digitales de la historia

La Comisión plantea retrasar un año la aplicación de garantías en los sistemas de alto riesgo que utilizan inteligencia artificial y propone debilitar el sistema de protección de datos para entrenar modelos de IA.
Ursula von der Leyen Comisión Europea
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, junto a Mario Draghi en un acto el 16 de septiembre. Foto: European Commission
@MartinCuneo78
@martincuneo.bsky.social
21 nov 2025 06:00

La diplomacia Trump ha vuelto a doblegar a la Unión Europea y ha conseguido que la Comisión proponga retrasar un año más la aplicación de garantías para los sistemas de alto riesgo que utilicen inteligencia artificial, según disponía la ley europea que regula esta nueva tecnología. Estas obligaciones están pensadas para que la introducción de la IA en Europa se lleve a cabo sin vulnerar los derechos de las personas y con garantías suficientes para la seguridad y las infraestructuras clave.

Los sistemas de alto riesgo son aquellos que cuentan con un alto potencial de causar daños en la seguridad, la integridad, derechos civiles, la privacidad o la capacidad de toma de decisiones de las personas. Desde herramientas para el control del tráfico a juguetes con inteligencia artificial, desde algoritmos de identificación biométrica a software de reconocimiento de emociones, desde aplicaciones que determinan la admisión en centros educativos a la contratación o evaluación de trabajadores en empresas, desde sistemas de triaje en hospitales a algoritmos que reparten prestaciones, estos sistemas de alto riesgo se definen no solo por su capacidad técnica avanzada, también porque pueden tomar decisiones de manera autónoma en áreas de gran impacto social.

Las garantías que la UE pretende aplazar estaban pensadas para que la introducción de la IA en Europa se lleve a cabo sin vulnerar los derechos de las personas y con garantías suficientes para la seguridad y las infraestructuras clave

Los criterios obligatorios para las entidades que utilicen IA en estos sistemas sensibles no han sido diseñados aún, aunque deberían estar funcionando a partir de agosto de 2026, según dice la ley europea de inteligencia artificial, aprobada en marzo de 2024. La presión de la administración de Donald Trump y las tecnológicas ha conseguido que estos estándares técnicos, si sale adelante la propuesta de la Comisión, vayan a tardar un año más en ser aplicados.

“Ataque al sistema de protección de datos”

La filtración la semana pasada del borrador de un paquete de medidas digitales en las que estaba trabajando la Comisión Europea escandalizó a las organizaciones que defienden los derechos digitales. La llamada ley ómnibus digital no solo retrasa la aplicación de garantías en el uso de la IA en sectores clave, sino que pretende debilitar el sistema de protección de datos de la UE, más garantista que el de Estados Unidos o China. En la propuesta, la Comisión apela a la necesidad de “desbloquear datos de alta calidad para la IA”.

Pese a que la Comisión Europea habla de “simplificación” e “innovación”, para los sectores más críticos esta propuesta supone un ataque directo al sistema de protección de datos de los ciudadanos europeos, acabando con la protección que gozaban para permitir el auge y la expansión de empresas y modelos que se nutren de ellos, especialmente los sistemas de inteligencia artificial alimentados por la información personal, los hábitos, movimientos y comportamientos de la ciudadanía.

Los sectores críticos señalan que la UE pretende acabar con la protección de datos que gozaba la población europea para permitir el auge y la expansión de empresas y modelos de IA que se nutren de ellos

La organización de defensa de los derechos digitales NOYB considera que la ley ómnibus digital “reduce masivamente la protección de los europeos”. Las medidas incluidas en la propuesta “no benefician en nada” a las pequeñas y medianas empresas europeas, mientras representan “un regalo para las grandes tecnológicas”, especialmente para las estadounidenses Google, Meta, Amazon y Open AI.

Para el activista Max Schrems, fundador de NOYB, se trata “del mayor ataque” a los derechos digitales de la población europea en años. “Cuando la Comisión afirma que ‘mantiene los estándares más altos’, es claramente incorrecto. Propone socavar estos estándares”, dice.

Más de 120 organizaciones sociales europeas mostraron su preocupación por este paquete legislativo que la Comisión pretende aprobar por la vía de urgencia. “Lo que se presenta como una ‘simplificación técnica’ de las leyes digitales de la UE es, en realidad, un intento de desmantelar subrepticiamente las protecciones más sólidas de Europa contra las amenazas digitales”, dicen en el manifiesto. A menos que la Comisión Europea cambie de rumbo, advierten, la ley ómnibus digital “supondría el mayor retroceso en los derechos digitales fundamentales en la historia de la UE”.

Además de dar más facilidades a las tecnológicas para utilizar los datos personales, teóricamente anonimizados, para entrenar modelos de IA, la ley debilitaría la “única norma clara” que impide a las empresas y los gobiernos rastrear constantemente la actividad de las personas en sus dispositivos, denuncian. “Esto facilitará enormemente a quienes ostentan el poder el control de los teléfonos, coches o hogares inteligentes de las personas, revelando además información sensible sobre dónde van y con quién”, añaden.

Las críticas desde la izquierda europea no se han hecho esperar. Para la eurodiputada alemana de los Verdes, Kim van Sparrentak, se trata de un “desmantelamiento” de la legislación europea que solo favorece a Trump y a los gigantes europeos del sector. “Resulta decepcionante ver cómo la Comisión Europea cede ante la presión de la administración Trump y los grupos de presión de las grandes tecnológicas”, señaló. 

“No podemos permitir que nos intimiden. Debemos resistir cualquier intento de desmantelar estas leyes [de protección de datos]. Nadie se deja engañar por el origen transatlántico de estos intentos”, dice Thierry Breton

El peligro, señala esta eurodiputada, es “abrir las puertas a un modelo de negocio basado en datos robados, publicidad engañosa y un total desprecio por los derechos humanos y el planeta”, un modelo, afirma, que “no tiene nada que ver con la competitividad ni la innovación; se trata de explotación”.

Thierry Breton, el comisario europeo de Mercado Interior que propuso y negoció la ley de Inteligencia Artificial también se mostró crítico con el paquete de medidas en un artículo publicado en The Guardian: “No podemos permitir que nos intimiden. Debemos resistir cualquier intento de desmantelar estas leyes (...). Nadie se deja engañar por el origen transatlántico de estos intentos. Así que no seamos ingenuos útiles”.

La propuesta de ley ómnibus llega apenas unas semanas después de que naufragara la propuesta de la Comisión para escanear millones de mensajes privados de los servicios de mensajería, acabando con el cifrado de extremo a extremo. La oposición de las organizaciones de defensa de los derechos digitales y, sobre todo, de Alemania a la propuesta fue clave para que la iniciativa, conocida con el nombre de Chat Control, no prosperara. Pero esto no significa que esté definitivamente muerta.

Según denunciaba el ex eurodiputado e integrante del Partido Pirata Patrick Breyer, se trató de una victoria parcial: “Hemos evitado el control obligatorio del chat por la puerta de atrás. Pero aún se planean controles de edad que vulneran el anonimato y escaneos masivos ‘voluntarios’. ¡La lucha continúa el próximo año!”.
Derechos digitales
El plan europeo para espiar millones de chats tendrá que esperar tras la negativa de Alemania
Sin los votos alemanes, España y los otros países partidarios del escaneo masivo de conversaciones en línea a través del reglamento conocido como Chat Control carecen de los apoyos suficientes para aprobarlo.
Cargando valoraciones...
Comentar
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Cargando...
Cargando...
Comentarios

Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.

Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!

Cargando comentarios...