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El día 26 de octubre salió publicada en el Boletín Oficial de la provincia de Cáceres la comunicación de la Junta de Extremadura de la admisión definitiva de la solicitud del permiso de investigación de recursos mineros denominado "Logrosán Norte", nº 10C10367-00, en la provincia de Cáceres, e información pública del Plan de Restauración, al amparo de la preconstitucional ley de Minas de 1973.
La iniciativa es de la empresa Logrosán Minera S.L. Con menos de 3500 € de capital social, según www.expansion.com, es una empresa pantalla de la matriz de otra de titularidad finlandesa y de sede en Suiza, según información de la propia empresa. El permiso le permitirá comenzar la Fase de Investigación de su actividad en terrenos de la comarca cacereña de Las Villuercas. Se trata de la segunda fase de tres (exploración, investigación y explotación) para establecer una actividad minera.
El permiso le permitirá comenzar la Fase de Investigación de su actividad en terrenos de la comarca cacereña de Las Villuercas
Resulta que la fase final de este proceso implica la instalación de una mina a cielo abierto, dado que hoy por hoy es la técnica viable para la industria promotora. Y de un día para otro el pueblo se ha puesto en pie. Pero ¿por qué? Pues resulta que los parajes sobre los que se refiere la autorización disfrutan de diversos valores incompatibles con esa industria. Asunto que parece que tan solo sabían los habitantes de estos pueblos.
Minería
Cáceres, de montaña a cráter
Un proyecto de mina a cielo abierto de la empresa australiana Plymouth en colaboración con el Grupo Sacyr amenaza la Montaña de Cáceres y a la ciudad Patrimonio de la Humanidad.
Por un lado, el permiso afecta a territorios vulnerables que están dentro de la red Natura 2000. Están declarados por la Unión Europea como claves para la conservación de los paisajes y por la riqueza de la fauna. La Unión ampara estas zonas con dos Directivas, disposiciones normativas de Derecho comunitario que vinculan a los Estados mienbro. En este caso son dos: Directiva Hábitat y Directiva Aves.
Por otro lado, ese mismo permiso incluye el espacio singular desde el punto de vista social de La Colonia de Cañamero. Experiencia modelo que a principios del siglo pasado desamortizó bienes públicos para hacer un reparto de tierras entre los vecinos de la citada población, ayudando así a las familias más desfavorecidas.
El permiso afecta a territorios vulnerables que están dentro de la red Natura 2000
Además, el área autorizada para la fase descrita, de nada menos que 3.025 hectáreas, está íntegramente dentro del Geoparque Mundial de la UNESCO Villuercas, Ibores y Jara. Un reconocimiento que le ha costado a la comarca mucho obtener y que está en proceso de renovación después de las inspecciones pertinentes. Vamos, que no han podido elegir peor sitio para arruinar los intereses comarcales, europeos y mundiales. Han ido a dar en todo el centro racional y afectivo de la comarca.
La empresa minera presenta la solicitud para ver si cuela. Pero las gentes que viven aquí, descreídas de la defensa que los sucesivos gobiernos, conocen lo que ocultan estos proyectos que se venden como salvadores de la patria, saben lo redondo de un negocio en el que la empresa gana y los demás perdemos. Un cero para los responsables miopes e incultos.
Hay algunos gobiernos que piensan que el populacho es imbècil. Que le pueden romper su casa mientras los inquilinos sonríen agradecidos. Que le pueden arrastrar sus recuerdos porque son recuerdos de paletos lerdos. Hay otros que creen que tienen derechos sobre lo que estaba antes que ellos y estará después de ellos. Hay gobiernos apisonadora que permiten arrancar olivares centenarios, que quizás plantaron sus propios bisabuelos y que dan de comer a cientos de personas, para que consigan suculentos beneficios piratas elegantes, rubios, altísimos y riquísimos, que nunca dan la cara ni la darán, como ellos. También hay gobiernos democratiquísimos que, sin que se les revuelven las tripas, aceptan que una ley franquista despachurre al pueblo que les vota.
Pues mire usted que mala pata que nos ha tocado el gordo en la comarca cacereña de las Villuercas, donde todos esos gobiernos contrapopulares son los que nos gobiernan. Y nos quieren aplicar la ley del embudo para cretinos. ¡Já!.
Animan a venir a trincar a las empresas mineras multinacionales (hay más de 80 permisos concedidos y otros 50 en ciernes solo en Extremadura)
Y es que no se enteran. Todavía no se han enterado de que el pueblo es de donde salen ellos, tanta gente lista. Se comprende que las corbatas les aprietan tanto el pescuezo que les hincha la cabeza y no les llega la sangre de ese corazón que sí riega las entendederas de las olivareras y los vinicultores. Se entiende que el silloncito ergonómico con ruedas chipi que les pagamos los vinicultores y las olivareras, entre otros currantes, les ha hecho olvidar cómo se dobla el lomo en el lagar o en el surco, del que comen ellos y sus hijos. Porque tienen hijos, como todas.
¿Pero qué les pasa a estos firmadores de concesiones, permisos y atropellos? Debemos elegir entre estas opciones. Padecen y practican estulticia, o soberbia, o ignorancia, o codicia o maldad. Espero que gane la ignorancia, pero me temo que padezcan un cuadro sociopático que sea la suma de todas.
Son además desmemoriados. Animan a venir a trincar a las empresas mineras multinacionales (hay más de 80 permisos concedidos y otros 50 en ciernes solo en Extremadura). Y les informa de que somos un triste desierto despoblado y que no se preocupen, que los cuatro extremeños que quedan en los campos son gentes sumisas que no defienden lo suyo. Ignoran que el pueblo ya les puso en su sitio. ¿O es que fue puesta en marcha la central nuclear de Valdecaballeros, iniciada su construcción en tiempos de Franco el intocable? ¿O se instaló la siderúrgica de Balboa hace tres días? ¿O el colindante campo de tiro de Anchuras?
Decían que la población rural está desmovilizada. Pues en tres semanas ya tienen la Plataforma contra la mina Salvemos las Villuercas
El pueblo ha tenido que ir educando a los tecnócratas a base de echar pulsos y hacer manifestaciones, cuando su misión debería ser ayudar y simplificar. O que directamente nos dejaran en paz. Y en el tercer milenio todavía nos están echando el aliento en el cogote como mamporreros de las grandes economías multinacionales. Lamentable y vergonzosa misión la de los facilitadores de la rapiña. Menudo ejemplo para el pueblo, el de algunos dirigentes. Defiendan nuestros derechos, no los intereses de las empresas finlandesas con capital ruso.
Decían que la población rural está desmovilizada. Pues en tres semanas ya tienen la Plataforma contra la mina “Salvemos las Villuercas” con 2.200 miembros en facebook. Más de 300 personas de estos desiertos llenaron el salón de actos de Cañamero y los aledaños para decir “No”. Y acudieron también a la explicación de los parabienes del proyecto que ejerció la empresa minera a los pocos días, en el mismo sitio y con la misma afluencia. Pero no convenció, no podía. No tenía razones que no fueran el dineral que iba a general la mina... para los inversores. Para el pueblo quedaba la contaminación, el roto, la expropiación a justiprecio y la cara de tonto.
La gente ganó, en razones, aplastantes, en emociones y en sentido común. Una lección que mereció la pena ser vivida. Y hubo quien de la empresa se fue llorando, en sentido literal. No hay alma que no se rompa frente a la sinrazón. Y el pueblo como un Fuenteovejuna defiende lo suyo.
Cuidado, empresas depredadoras y políticos despistados, aquí hay pueblo.
Ya sabemos que la ley de 1973 no tiene en cuenta las competencias de las Comunidades Autónomas, pero sí le podemos pedir a los gobernantes de la Junta de Extremadura que no acepten el agravio, que reflexionen y enfrenten los permisos letales, impidan el desastre, sean modernos. Ustedes nos han hecho creer en su propuesta de economía verde y circular y estas minas son radicalmente contrarias a su proyecto.
El pueblo le pide ayuda.
Persónense en el procedimiento.
No las permitan. Por decencia.
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Gracias Mario, grande ese razonamiento desde el corazón pero con clarividentes motivos, la tierra vivida, la gente que la ama y el bien común de la sociedad a la que les reporta calidad de vida. No se vende lo que se ama, a lo que se aprecia no se le pone precio.
La voz del populismo, las grandes empresas roban al pueblo. Ellos malos, nosotros buenos...
Palabrería, hacen falta proyectos que abran posibilidades de futuro a los habitantes de las Villuercas, a muchas pueblos de esta comarca les quedan dos generaciones para desaparecer.
La clave está en que se hagan las cosas bien, no en que no se hagan.
Sí, invertir, pero no destrozar la zona base de la economía de un pueblo, el sustento de sus habitantes, lo único que tienen. Estás explotaciones no generarían empleo, quitaría a sus habitantes el único medio de vida que tienen, para dar trabajo sólo unos años a una docena de personas.
Si alguien piensa que con proyectos como este se va a frenar la despoblación de la zona es que está ciego.
No es cuestión de hacer las cosas bien, sino de hacer cosas buenas. Estoy seguro de que la multinacional finlandesa interesada lo haría bien para obtener beneficios, sin embargo eso está a años luz de ser bueno para un enclave medioambiental único. Que se exponga tan a la ligera tanto y de tantos por el interés de unos pocos es vergonzante.
Populismo no es dar voz al pueblo, en este caso sería en todo caso activismo. Gracias Mario, esto es defender algo que es de todos y de un altísimo valor.
La clave está en hacer cosas útiles, de contrastada eficacia y que no hipotequen el futuro de lo que ya funciona. Lo otro es hacer el canelo, entregando sin contrapartidas el patrimonio de generaciones bajo la premisa de que todo vale para crear empleo, cuando ni siquiera hay certezas de que lo pueda crear en la zona. Pasó el tiempo de engañar al medio rural, a otro perro con ese hueso.
Orgullo de los habitantes de Las Villuercas, Extremadura no se vende!