Francia
Franceses en tierra extraña

Casi nueve de cada cien franceses son musulmanes. Las dificultades que afronta este colectivo están marcadas por los prejuicios. Las dos candidaturas en las elecciones de mañana coinciden en líneas generales en la necesidad de no cambiar el modelo vigente.
23 abr 2022 05:54

La comunidad musulmana en Francia es una de las más grandes de Europa. Con 5,4 millones de personas, representan un 8,88% de la población total. Estas cifras son aproximadas: los datos son difíciles de obtener ya que no se le puede preguntar a alguien directamente por su etnia o por su confesión. Debido a su pasado colonial –y a su presente neocolonial–, los orígenes de la población musulmana francesa son, en general, magrebíes: Argelia, Marruecos, Túnez, las antiguas colonias de Francia. El 50% ha nacido en el país galo y el 75% son ciudadanos franceses, por lo que sólo el 25% son extranjeros como tal.

Leyendo estas cifras, se podría intuir que la comunidad musulmana francesa se encuentra totalmente integrada y aceptada en la sociedad, pero, a día de hoy, cabe preguntarse si esto es realmente así. El auge de candidatos de ultraderecha como Marine Le Pen –que este domingo se enfrenta a Emmanuel Macron en la segunda vuelta de las elecciones tras obtener el 23,1% de los votos– o Éric Zemmour, lleva a replantearse esta cuestión. Son muchos los musulmanes franceses que están dejando el país galo en busca de un lugar en el que sentirse valorados y, por raro que pueda parecer, sentirse franceses. Muchos son todavía vistos como extraños en su propia tierra.

Un poco de perspectiva histórica

La guerra de Argelia, entre 1954 y 1962, fue un duro conflicto en el que el país africano luchó por su independencia después de haber sufrido durante 130 años el colonialismo francés. Las consecuencias del enfrentamiento también se vieron en el país galo: muchos fueron los argelinos que migraron a Francia, huyendo de la violencia que asolaba su tierra, y que comenzaron allí sus nuevas vidas. Personas como Aicha y Mabrouk, cuya historia se puede ver en el largometraje de Lina Soualem Leur Algérie, que emigraron a Thiers, la conocida entonces como la “capital francesa de la cuchillería”. Aicha y Mabrouk, que llevan más de media vida en Francia, que formaron allí su familia y que, después de tantos años, todavía no tienen la correspondiente nacionalidad.

Hay muchas historias como la suya, historias de migrantes que dejaron su querida tierra –colonia francesa– para irse a un país que prometía acogerlos y que, a día de hoy, todavía no ha conseguido integrarlos, ya sea por sus nombres, por su color de piel o por su religión.

En los 90, la visibilidad de la comunidad musulmana en Francia comenzó a crecer mientras tenía lugar el ascenso político del partido de extrema derecha Agrupación Nacional

Desde los años 80, la imagen del islam en Francia se ha ido deteriorando, al igual que en otros países occidentales, “debido a diversos acontecimientos internos y externos”, explica Laurence Thieux, doctora en Estudios Árabes e Islámicos, en su artículo El islam en Francia: seguridad e identidad. El islam es visto en Occidente, en muchas ocasiones, como algo extraño, una amenaza a la que hay que temer. Y el contexto internacional ha contribuido a acrecentar este sentimiento. Según indica Thieux, desde la revolución iraní de 1979, “la evolución política de los países árabes ha sido percibida bajo el prisma de la amenaza a la seguridad”.

Islamofobia
Discursos de odio Islamofobia y creación del otro en Europa
La Francia de Macron se ha puesto a la vanguardia de un discurso que sitúa al Islam como amenaza a la identidad europea y que lleva años de apogeo gracias a la extrema derecha.


En 1986, tuvieron lugar diversos atentados terroristas en cafés y centros comerciales en Francia. A esto le sigue la Década Negra de Argelia en los años 90 que, en palabras de la investigadora, “marcó un hito en este proceso de diabolización” del islam. Durante este periodo, se produjo en la excolonia francesa un conflicto armado entre el Gobierno argelino y varios grupos rebeldes islamistas y murieron en torno a 200.000 personas.

En los años siguientes, la visibilidad de la comunidad musulmana en Francia comenzó a crecer mientras tenía lugar el ascenso político del partido de extrema derecha Agrupación Nacional (Rassemblement nacional) –que entonces se llamaba Frente Nacional–, fundado por Jean-Marie Le Pen (padre de la actual candidata a la presidencia) que, tal y como indica Thieux, dejó “al descubierto las grietas sociales que amenazaban la cohesión de la sociedad francesa”.

En septiembre de 2004, el Ejército Islámico de Iraq secuestró a dos periodistas franceses en ese país, a modo de queja por la ley que se aprobó ese mismo año en el país galo y que prohibía que se llevara el velo en las escuelas, prohibición que se mantiene hasta el día de hoy. Francia es un país de tradición laica y los valores del islam parecen “amenazar” los de la propia nación.

Los atentados que se sucedieron en los siguientes años, no ayudaron a la conciliación del islam y los musulmanes con la sociedad y la identidad francesas. Entre ellos se encuentran el atentado de Nantes en 2014, el ataque en Tours ese mismo año, el atentado contra el semanario satírico Charlie Hebdo con el tan sonado Je suis Charlie, el tiroteo en la sala Bataclán en 2015, el ataque en Niza en 2016, el tiroteo en París en 2017, el apuñalamiento sucedido en la misma ciudad en mayo de 2018, el ataque en Estrasburgo a finales de ese mismo año, el de Lyon en 2019, el de Niza en 2020 o el asesinato del profesor Samuel Paty ese mismo año por enseñar en clase una caricatura de Mahoma. Todos estos ataques, llevados a cabo, en su mayoría, por miembros de Al-Qaeda o del Daesh, han puesto en alerta a la sociedad francesa y han hecho que se asocie injustamente a la comunidad musulmana con palabras como “islamistas”, “radicalización” o “extremismo”. Se perpetúa la creencia de que el islam es algo extranjero y ajeno cuando la mayoría de musulmanes en Francia son ciudadanos europeos.

Francia
Francia, el islam, la laicidad y la necesidad de cambiar el enfoque

Los atentados cometidos en nombre de la religión musulmana suscitan una cadena de reacciones que ponen en la diana al conjunto de creyentes de esta confesión, así como algunas de sus prácticas.


Según anunciaba el presidente del Observatorio Nacional de Islamofobia de Francia, Abdallah Zekri, en 2020 se dispararon los ataques islamófobos en el país. Como indican los investigadores Barreto y Rodríguez en su artículo Francia y la islamofobia: Conflicto histórico y contemporáneo, estas actitudes islamófobas “son consecuencia del arraigado nacionalismo y el extremo laicismo francés”, rasgos que tienen unas raíces históricas que siguen presentes hasta el día de hoy.

“La dificultad para aceptar al multiculturalismo se convierte en un miedo a perder la identidad francesa”, explican Barreto y Rodríguez. La extrema derecha del país galo ha sabido aprovechar bien esta baza: ha convertido el tema de la identidad en su caballo de batalla y el islam en uno de sus mayores obstáculos en un camino embarrado de nostalgia hacia una Francia que ya no va a volver.

La situación actual de cara a la segunda vuelta de las elecciones

En la primera vuelta de las elecciones se esperaba que los tres mayores opositores de Emmanuel Macron se hicieran con casi el 50% de los votos. Las predicciones se han acercado con precisión a la realidad: los votos que han obtenido Le Pen (23,1%), Zemmour (7,1%) y Jean Luc Melénchon (22%) suman el 52,2%.

A pesar de que la inmigración en Francia dista mucho de las cifras que presentan el resto de países europeos, Valérie Pécresse (del partido Soyons libres), Le Pen (Rassemblement nacional) y Éric Zemmour (Reconquête) prometían en sus mítines previos a las elecciones que tomarían medidas enérgicas contra la inmigración. “No hay soberanía sin fronteras”, decía la candidata de Soyons libres el pasado 13 de febrero. Marine Le Pen ya declaraba en 2014 que “no hay sitio para los migrantes en Europa”; Europa, un continente que en unos años tendrá que hacer frente a un gran vacío demográfico.

Por otro lado, Zemmour sugería construir un muro al más puro estilo Donald Trump o prohibir bautizar a los bebés franceses con nombres musulmanes, además de declarar que los empresarios tienen derecho a negarle a alguien un puesto de trabajo por ser afrodescendiente o árabe.

Le Pen está jugando sus últimas cartas para vencer a Macron, al que las encuestas le dan ya una considerable ventaja en la segunda vuelta

La idea de Zemmour —y que en parte también transmitían Le Pen y Pécresse con sus proclamas—, es que Francia es un país en decadencia y que la culpa es, entre otros, de los inmigrantes musulmanes y sus descendientes, ese “enemigo” que ya lleva años dentro de sus fronteras, que es parte de él y que también sigue llegando de fuera.

La dureza de Zemmour ha suavizado, en cierto modo, la figura de Le Pen. La aparición del controvertido escritor y periodista en la escena política francesa ha sido uno de los grandes aliados de la candidata a la presidencia. A esto hay que sumarle la imagen más moderada y relajada que Le Pen está ofreciendo durante la campaña electoral: desde las fotos con gatitos, hasta mostrar cierta ambigüedad en lo que respecta a la prohibición de llevar el velo islámico, una de las propuestas más polémicas de su programa. Le Pen está jugando sus últimas cartas para vencer a Macron, al que las encuestas le dan ya una considerable ventaja en la segunda vuelta.

El sentir de la comunidad musulmana hoy

Desde los sucesos de la sala Bataclán y Charlie Hebdo, la comunidad musulmana en Francia ha tenido que hacer frente a más y mayores prejuicios y ataques. A esto se suma, como ya se ha mencionado, la aparición de discursos como el de Marine Le Pen o Éric Zemmour, aunque Macron tampoco se queda corto. Durante su mandato, el actual presidente propuso un plan para hacer frente al “separatismo islamista”, plan que proponía cerrar asociaciones religiosas que inciten de cualquier forma a la violencia y que discriminen por razones de género, o restringir la educación en casa. Por otro lado, también se aprobó un proyecto de ley para promover “el respeto a los principios de la República”, proyecto que se concibió con la idea de fortalecer al país contra el “islamismo radical”.

Como demuestra una investigación realizada en noviembre de 2021 por el Gobierno francés, los musulmanes tienen un 32% menos de posibilidades de ser llamados a una entrevista de trabajo

Ante esta situación, cada vez son más los musulmanes que deciden marcharse a otro país, países donde no se sienten fuera de lugar e, irónicamente, se sienten más franceses que en su propia tierra, sitios como Inglaterra o Turquía. Madjid Bennaceur —periodista francés y musulmán— conoce bien este sentimiento, la tristeza de no sentirse cien por cien en casa en el país donde ha crecido. De padre argelino y madre francesa con padres argelinos, Madjid nació en Francia y, a día de hoy, ha encontrado su hueco ejerciendo el periodismo. Aun así, es consciente y conoce de primera mano la situación de otros franceses musulmanes que no han tenido su misma suerte y con los que comparte este mismo sentir.

La gente mira con extrañeza a los musulmanes y, como cuenta Madjid, “piensan así porque los políticos, los medios de comunicación, perpetúan esta imagen del islam, perpetúan la creencia de que si dejan a los musulmanes ser como son, pasará algo similar a lo que ocurrió en 2015”, dice en referencia a los atentados de Bataclán y Charlie Hebdo. En Francia puedes ser musulmán, sí, pero tienes que ser un musulmán “a la francesa”.

Por ello, los que no se adaptan rigurosamente a estas imposiciones no escritas —entre ellas no llevar el velo o ropas tradicionales— o que, simplemente, tienen nombres musulmanes, tienen que hacer frente a mayores dificultades para encontrar un empleo o integrarse en sus espacios de trabajo. “Cuando estás en el trabajo, hay una cierta atmósfera con tus compañeros; por ejemplo, solo por el hecho de que no te vayas a beber con ellos, o no hagas ciertas cosas, te miran como si fueras raro, como si fueras raro por hacer eso”, explica Madjid.

“Es más difícil para un musulmán o para alguien con un origen racial encontrar un trabajo, y para los musulmanes en particular también”, añade. Y es que, como demuestra una investigación realizada en noviembre de 2021 por el Gobierno francés, los musulmanes tienen un 32% menos de posibilidades de ser llamados a una entrevista de trabajo.

Cuando el mundo miraba hacia Rusia y Ucrania, el Senado francés votaba a favor de una ley para prohibir el uso del pañuelo en las competiciones deportivas por considerar que simboliza el radicalismo

Por otro lado, como ilustra un estudio reciente llevado a cabo por la Agencia de Seguimiento de la Discriminación y la Igualdad en la Educación Superior (ONDES) y de la Universidad Gustave-Eiffel, los estudiantes con nombres musulmanes tienen un 12,3% menos de posibilidades de obtener una respuesta a sus solicitudes en programas de posgrado. Y, siguiendo con las discriminaciones, los árabes y las personas afrodescendientes tienen veinte veces más posibilidades de que la policía revise su identidad.

“Hay también una especie de provocación y de desestabilización psicológica”, puntualiza Madjid a través de la pantalla del ordenador. Cuando el mundo miraba hacia Rusia y Ucrania, el Senado francés votaba a favor de una ley para prohibir el uso del pañuelo en las competiciones deportivas por considerar que simboliza el radicalismo, el patriarcado y la falta de empoderamiento de la mujer. “No creo que el Gobierno deba decirle a las mujeres cómo vestirse”, declara Madjid.

Las provocaciones no vienen sólo del propio Estado que cuestiona la forma que tienen los musulmanes franceses de vivir su propia religión, sino también de organizaciones de extrema derecha como Genération Identitarie, ya disuelta, y otras que continúan apareciendo y se dedican a, entre otras cosas, atacar mezquitas o poner la cabeza de un jabalí muerto delante de una funeraria musulmana como pasó hace varias semanas en Toulouse.

Cuando tenía lugar la guerra de Argelia, muchos fueron a Francia con la condición de que solo irían allí a trabajar y luego se volverían a su país. “No puedes mezclar la ‘raza francesa’ que es ‘la más pura de todas’, con otras como los musulmanes o los judíos”, declara Madjid con ironía. A grandes rasgos, la cuestión se podría resumir en que hay un intento desesperado por parte del país galo de proteger los valores de la República, valores que ven amenazados cuando hay algo que se sale del modo de vida francés.

Esto ha llevado a que muchos musulmanes franceses se vayan a Inglaterra, a los Estados Unidos, a Canadá… “Cuando estás aquí, siempre te están recordando que, vale, que quizá tú piensas que eres francés, pero tienes diferentes convicciones a las nuestras, eres musulmán, así no es como hacemos las cosas aquí”.

Los que todavía no se han ido, a veces se encuentran con el pensamiento en su cabeza: “vale, si no puedes existir de la forma en la que te gustaría hacerlo, ¿qué harás en el futuro?”, se pregunta Madjid. Para responder a eso, se dice a sí mismo: “vale, vale, pues quizá te tengas que ir”.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Energía
Península ibérica Apagón masivo en toda España: “entre 6 y 10 horas” para restituir la energía en todo el territorio, según REE
El cero eléctrico de origen desconocido afecta a la España peninsular, Andorra y Portugal desde las 12.38 de este 28 de abril. Parte del Gobierno está reunido en la sede de Red Eléctrica. El Ejecutivo ha convocado el Consejo de Seguridad Nacional.
Francia
Francia Militantes e intelectuales exigen la absolución de Anasse Kazib, perseguido por su apoyo a Palestina
El Estado francés utiliza el tipo penal de “apología del terrorismo” para perseguir a personalidades y colectivos que han mostrado su apoyo a Palestina y su repulsa al genocidio cometido por Israel.
Francia
Francia Tras su inhabilitación, Le Pen no logra movilizar con su estrategia victimista
La mayoría de los franceses se dicen satisfechos de la condena de la líder ultraderechista y la manifestación en su apoyo solo reúne a unas 7.000 personas en París.
Aemilius
13/2/2025 16:58

"Islamofobia" es un palabro para tratar de evitar la lícita crítica al Islam en lo que se refiere a libertades públicas y derechos de la mujer. Con Mélenchón el progresismo camina hacia atrás como los cangrejos. Hay que hablar de marroquíes, argelinos, tunecinos, etc. No existe ningún colectivo musulmán, eso es lo que pretende el llamado Consejo Musulmán de Francia pero no tiene seguidores. libertad y emancipación de la mujer que procede de países musulmanes. Libertad para quitarse el velo si es que es cierto lo de la libertad para ponérselo

0
0
Antonino
23/4/2022 17:20

Después de décadas de convivencia, las dificultades del colectivo musulman en Francia, no sólo se basan en prejuicios. Ha pasado el tiempo suficiente para poder tener ya ciertos juicios, bastantes de los cuales resultan desoladores. Váyanse un tiempo a vivir en barrios de mayoría islámica, dónde el respeto a la mujer o a las personas homosexuales brilla por su ausencia, y nos cuentan a la vuelta.
Sí bastante tenemos ya con nuestros curas, abogados cristianos, y demás ralea integrista, qué podemos esperar de una fé que tiene aún más recorrido por hacer en lo que respecta a esos temas.

1
0
jamtmiranda
jamtmiranda
26/4/2022 13:03

Lo que estás diciendo, no es un problema de musulmanes, es un problema de integristas, sean cristianos o musulmanes. Llamemos a la cosa por su nombre. No es problema del islam o del cristianismo, es problema del integrismo.

0
0
Aemilius
14/2/2025 14:31

Pero, lamentable, el Islam actual en Francia está dirigido por integristas que no han aceptado el llamado "Islam de Francia" que pretendía impulsar Macron. Las sociedades civiles en Occidente hemos pasado por encima del catolicismo y, por otro lado, las jerarquías y los distintos concilios, han actualizado al catolicismo en general. La iglesia católica integristas ni pincha ni corta. El Islam, lamentablemente está dirigido por los llamados Hermanos Musulmanes y los Wahabistas de Arabia Saudita. Busque usted en Google textos de "Islam" artículos y publicaciones de Ilya.U.Topper y verá mucho más claro todo esto. Le recomiendo un artículo titulado "Los moderados". Saludos

0
0
Eléctricas
Sistémica eléctrico Del lobby nuclear a la burbuja de las renovables: comienza la pugna por encontrar al culpable del apagón
Un crecimiento desmedido de las renovables guiado por intereses corporativos y una red eléctrica que no ha sido actualizada a la nueva realidad energética son algunas de las causas señaladas del apagón del 28 de abril.
Pobreza energética
Energía Apagón crónico: lugares donde no volverá la luz, a pesar de la restauración del sistema eléctrico
Miles de personas en el Estado español viven día a día apagones y falta de suministro en lugares como Cañada Real (Madrid), la Zona Norte de la ciudad de Granada o los asentamientos de jornaleras y jornaleros migrantes en Huelva y Almería
Galicia
Galicia La Xunta aprobó la celulosa de Altri argumentando que su chimenea de 75 metros sería “icónica”
El Informe de Patrimonio Cultural, favorable a la multinacional, se emitió en base a dos encargos externos, contratados y pagados por la empresa al ex presidente y al actual tesorero de Icomos-España.
Electricidad
Apagón Pedro Sánchez: los protocolos de emergencia siguen activos y se abrirá una investigación
El presidente del Gobierno ha comparecido ante los medios de comunicación tras presidir la reunión del Consejo de Ministros para explicar las cuestiones abordadas en relación con la crisis eléctrica.
Opinión
Opinión Provoquemos la próxima interrupción
Lo que nos resta es gobernar el apagón que habrá de venir, ser la causa colectiva de las próximas interrupciones, aquellas que lleven al fin de este mundo desbocado y sin sentido.

Últimas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.
Energía
Energía El gran apagón de abril | El suministro de energía se recupera al 99%
Pedro Sánchez explica que se produjo una “pérdida” del 60% de la electricidad a las 12:33h: “15 gigavatios se han perdido súbitamente del sistema en apenas 5 segundos. Aproximadamente el 60% del sistema eléctrico”.
Energía
Energía La ley marca permisos retribuidos para situaciones como el apagón eléctrico
El Estatuto de los Trabajadores, en su artículo 37.3, protege a la plantilla cuando no es posible llegar a su puesto de trabajo o desarrollar con normalidad su tarea en situaciones como no tener electricidad durante horas.
Electricidad
Apagón ¿Qué le puedo reclamar a la empresa eléctrica y al seguro tras el apagón?
Tras el incidente con la electricidad de este lunes 28 de abril, los consumidores deben conocer qué pueden reclamar a las compañías de la luz o a sus seguros.
València
València La jueza de la dana acorrala al relato político de Mazón
El president viaja a Estados Unidos la semana en la que el PP europeo celebra su congreso en València y no acudirá a la multitudinaria romería de Santa Faz.
Crisis climática
Informe Las diez empresas más contaminantes del país son responsables de un quinto de las emisiones españolas
Repsol mantiene el podio gris de empresa más contaminante que le arrebató a Endesa en 2020. Completan el top 10 de compañías más emisoras energéticas, cementeras y siderúrgicas, que copan entre ellas el 56% de las emisiones del mercado de carbono.
Más noticias
El Salto Radio
El Salto Radio Desmantelando E2 I El racismo institucional y sus grietas
Las redes de apoyo mutuo y la actitud de compartir privilegios son herramientas imprescindibles para combatir los impactos del racismo estructural.
Comunidad de Madrid
Energía El apagón en Madrid, en imágenes
En Madrid, la gran urbe ha permanecido incrédula al pasar de las horas, entre rescates en el Metro, en el Cercanías y en ascensores, donde han quedado atrapadas algunas personas.
Opinión
Opinión La luz de lo público durante el gran apagón
El fundido del sistema eléctrico ahonda en las grandes preocupaciones del siglo XXI. También en el diagnóstico fundamental de necesidad de refuerzo de los servicios públicos.

Recomendadas

Senegal
Migraciones El mito de la migración ordenada: la denegación de visados por el Consulado de España en Dakar
Maltrato institucional. Estas dos palabras son las más escuchadas cuando se pregunta a personas descontentas con el Consulado de España en Dakar. Cada vez más personas denuncian denegación de visados que no consideran justificados.
Guinea-Bissau
Internacional Guinea-Bissau arranca una ola de represión tras el sabotaje popular de una mina de arena en un parque natural
Una acción liderada por las mujeres del pueblo de Varela provocó un incendio en la bomba de extracción de la mina de arena pesada. El Gobierno ha llevado a cabo la detención de 16 personas, entre las que se encuentran líderes locales.
Galicia
Galicia Vigo, A Coruña y Ourense compraron material policial a Israel por medio millón de euros en solo cuatro años
El alcalde ourensano, Gonzalo P. Jácome, adjudicó un contrato por 70.000 euros días después del siete de octubre. Abel Caballero firmó otro de más de 200.000 euros y la alcaldesa de A Coruña siguió la estela con un contrato de 170.000 euros.