Pista de aterrizaje
Hind El Fadli Rzigui: “Las musulmanas estamos creando espacios propios”

La activista contra la islamofobia de género Hind El Fadli Rzigui puso en marcha G-CHIME, un espacio de encuentro para jóvenes musulmanas de Elche.

1 oct 2019 12:17

Las movilizó una cuenta de Instagram. Ahora, funcionan sobre todo a través de un grupo de WhatsApp, donde se conectan, apoyan y plantean resistencias a una sociedad que limita sus aspiraciones: por su religión, por sus orígenes, por su género, por su edad… G-CHIME es, desde 2018, una referencia para jóvenes musulmanas de Elche, un espacio desde donde reivindican su diversidad y sus derechos. La activista contra la islamofobia de género Hind El Fadli Rzigui (Larache, Marruecos, 1999) hizo el primer clic.

Todo empezó con un Bismillah…
Volvía de un viaje a Rumania con la Red Acoge, muy animada después de hablar con otros compañeros de Barcelona, Madrid, Murcia… de las dificultades para crear una comunidad musulmana joven aquí. Me dieron ideas. Y, al volver, abrí la cuenta de Instagram para intentar crear un grupo y empezar a quedar, hablar, compartir recursos… Lo siguiente fue un macroiftar para jóvenes con Elche Acoge. Y las primeras compañeras empezaron a contactar.

¿Qué os ha unido?
El grupo es una familia-refugio para nosotras: encontramos información, formas de participar en la comunidad y también apoyo. Hablar y compartir situaciones nos ha hecho ver nuestras carencias porque, muchas veces, nos sentimos en tierra de nadie, sobre todo las inmigrantes, que soportamos una triple discriminación: por ser mujeres jóvenes, migradas y, encima, musulmanas. Todo a la vez. Por ejemplo, en Marruecos, soy la europea. Aquí, la africana. Entonces, ¿quién soy? G-CHIME es el espacio que nos ayuda a no pensar en quiénes somos para el resto, sino para nosotras mismas. Y, si tenemos dudas, seguro que encontramos a alguien con quien conectar, porque somos muy diversas. Queremos crear espacios propios desde donde reivindicar nuestro sitio en la sociedad.

Cuéntame más sobre los espacios propios…
Hablar entre nosotras nos ha hecho más conscientes de que en realidad no tenemos espacios propios. Por un lado, algunos grupos feministas nos cuestionan todo el tiempo. Dicen que el islam es una religión patriarcal, machista y hasta misógina. Hay toda una corriente que defiende la exclusión de las musulmanas en el feminismo, entre ellas Najat el Hashmi o Mimunt Hamido. Por otro, las comunidades islámicas nos cuestionan alegando que nuestra lucha no es necesaria. Sin embargo, debido al patriarcado, las mujeres hemos perdido estatus en la sociedad musulmana. En la época del profeta, ocupábamos cargos y espacios de relevancia social. Había políticas, profesoras, enfermeras, vendedoras, vigilantes… De hecho, Aisha, una de las esposas del profeta, lideró un grupo del ejército. En cambio, esta presencia tan poderosa de las mujeres no es tan común hoy. A los hombres de nuestra comunidad les cuesta asimilar nuestra presencia porque están acostumbrados al silencio impuesto por el patriarcado. 

Una de nuestras labores es recordar que las mujeres tenemos voz y voto en el islam y que nuestro lugar, muy a su pesar, no está detrás de una cortina. Después de varios debates, desde G-CHIME planteamos espacios no mixtos, para poder ser y sentirnos sin ser ocupadas por los hombres. Y también procurar espacios exclusivos para musulmanas, para sentirnos totalmente libres, sin ser juzgadas ni cuestionadas. Porque, claro, si no tenemos espacio en la comunidad islámica porque se nos pone detrás de una cortina ni en el resto de la sociedad, tampoco en los espacios feministas, porque no se nos tiene en cuenta, entonces ¿qué hacemos?, ¿dónde estamos?... En estos espacios de mujeres musulmanas encontramos nuestro sitio.

G-CHIME es una familia-refugio para chicas musulmanas

En Instagram decís que no encontrasteis refugio en vuestros mayores y en vuestras mezquitas…
La comunidad musulmana en Elche no nos apoya porque la mayoría cree que lo que hacemos no es necesario. No entienden que, como jóvenes, necesitamos espacios propios para encontrarnos, apoyarnos y crear, también desde la religión. Aun así, estamos consiguiendo cambiar ciertas actitudes y que nuestras ideas lleguen. Ya tenemos el apoyo de una de las cinco mezquitas de la ciudad y yo misma, de hecho, me acabo de incorporar a la directiva de la comunidad islámica Aljitab, siendo la única mujer que lo ha conseguido en Elche.

¿Y cómo te sientes?
Estar ahí entre todos esos hombres es un poco incómodo, aunque también me hace sentir fuerte y me ayuda a creer en un futuro más igualitario. Confío en que otra mezquita incorpore a otra mujer pronto, luego vendrá otra, y otra, y así hasta recuperar nuestro lugar en la sociedad musulmana.

¿Qué objetivos tiene G-CHIME?
Por un lado, concienciar y sensibilizar a la sociedad no musulmana para que pueda conocernos y tenernos en cuenta en los espacios, que también son nuestros, aunque se nos desplace. La mayoría de las compañeras de G-CHIME son nacidas en España, las inmigrantes somos minoría, pero esto nunca se juzga así. Entonces, la idea es desmontar prejuicios, como que ser musulmana implica ser inmigrante, que todas llevamos pañuelo, que quienes lo llevamos estamos oprimidas o que las que no son más liberales. También queremos ser referencia para las mujeres musulmanas de Elche: apoyarnos, asesorarnos, acompañarnos… Desde acoger y facilitar recursos a aquellas que llegan nuevas al municipio hasta facilitar información sobre nuestros derechos. Hay mucha confusión en relación al pañuelo, por ponerte un caso: muchas desconocen que tenemos derecho a llevarlo porque forma parte de nuestra identidad. Por último, reempoderarnos. Las musulmanas tenemos mucha fuerza, pero lo vamos perdiendo por agotamiento, así que intentamos reavivirla y conectarla con otras, para crear también los referentes que nos faltan.

Lleváis un registro de agresiones islamófobas…
Sí, desde que empezamos, para intentar documentar los ataques de islamofobia y los ataques de odio en Elche. Compartimos los datos con la Asociación Musulmana por los Derechos Humanos para integrarlos en otros registros por regiones, países… Tenemos 22 registros entre diciembre y junio, son insultos y vejaciones sobre todo.

¿Están incluidos los registros de chicas con hiyab en la Selectividad?
Sí, porque implica humillación. Son registros selectivos. Las apartan del grupo y las llevan al baño, cuando podrían pedirles que se descubrieran las orejas, como hacen cuando alguien tiene el pelo largo. Imagina lo que eso implica para ellas, y justo antes de un examen tan importante. De hecho, como esto ocurrió en la UMH en 2018, este año, días antes, ya había chicas nerviosas, preguntándonos qué hacer.

¿Algún otro ejemplo de islamofobia institucional cotidiana?
En la Concejalía de Igualdad nos dijeron que la gente no se tiene que acostumbrar a nuestro pañuelo, sino que somos nosotras las que tenemos que desnormalizar su uso. Es la misma área que, al constituirnos, nos derivó a la Oficina PANGEA de Elche, que atienden a población migrada y refugiada, ¡cuando la mayoría de las chicas de la asociación son españolas!, porque la Casa de la Dona, dicen, no tiene que ver con nuestros objetivos. En los centros de estudio, por ejemplo, el uso del hiyab se plantea como problemático para hacer prácticas, entonces los tutores tratan de convencer a las chicas para que se lo quiten. En lugar de apoyar nuestra decisión, nos niegan cualquier oportunidad. Y luego, en los trabajos, se nos dice que, por ser jóvenes, se espera que tengamos la mente más abierta. Nos juzgan todo el tiempo por ser musulmanas, migradas, jóvenes…

Lograr un bloque de jóvenes musulmanas el 8M fue una experiencia muy poderosa
¿Y acoso escolar?
También. Hace poco, intervenimos en una situación en que una maestra ignoraba y aislaba tanto al niño como a su madre. Tenemos constancia de más experiencias violentas en los centros. De hecho, en el grupo, muchas lo hemos sufrido. En mi caso, en el colegio, me dejaron bien claro que no me querían allí desde el principio. Llegué a pensar que se debía a que acababa de llegar y que el hecho de no dominar el idioma, entre otras cosas, influían en “no encajar” o “no estar integrada”. Sin embargo, sentí el rechazo de mis compañeros de clase hasta el último año de instituto. Fue entonces cuando me di cuenta de que yo no era el problema y fue precisamente esta experiencia la que me animó a buscar y crear espacios como G-CHIME, porque sabía que no lo habría vivido igual de tener un grupo de apoyo.

¿Cómo trabajáis la islamofobia en institutos?
Se plantean como encuentros que facilitan algunas docentes amigas para que la gente joven pueda conocer a personas musulmanas y compartir dudas. Estos encuentros nos permiten acercarnos, conocernos y conectar, porque no tomamos conciencia por ir una charla, pero sí a través de la historia y las experiencias de vida de gente cercana, por eso también organizamos convivencias con otras compañeras no musulmanas y con otros colectivos.

¿Qué otras actividades habéis impulsado?
Movilizaciones de apoyo a las temporeras de Huelva y por el atentado de Nueva Zelanda, un acto reivindicativo del uso del hiyab con otras compañeras feministas no musulmanas, una acción humanitaria (El bocadillo solidario) por Murcia con Nabdat Amal de Cartagena y la Asociación de Jóvenes Ben Arbi de Lorca, un encuentro de mujeres a beneficio de Palestina en colaboración con Human Appeal y otro sobre mujeres y migración para la nueva mezquita del Sector V… Procuramos crear espacios de encuentro entre mujeres en torno al Corán y las culturas árabes, con mercadillos, tatuajes de henna y comida árabe, porque no los hemos tenido hasta ahora.

Fuisteis muy visibles en las movilizaciones del 8M.
Logramos crear un bloque de musulmanas en la manifestación. Al anunciar en Instagram que participaríamos, se sumaron otras chicas que no conocíamos. Muchas querían ir desde el principio, pero no se planteaban hacerlo solas. Tener la posibilidad de hacerlo juntas, unidas, apoyándonos, fue muy emocionante y poderoso.

¿Estáis conectadas con más grupos?
Formamos parte de ReFAL, la Red Española de la Fundación Anna Lindh, para colaborar con otras organizaciones del Mediterráneo. También colaboramos con la Asociación Cultural Iqraa repartiendo libros en castellano sobre el islam, para dar a conocer el mensaje que seguimos, entre ellos: La mujer en el islam, Perspectiva islámica del sexo, El profeta Muhammad, modelo para la humanidad, Diálogo entre un profesor ateo y un estudiante musulmán o Guía ilustrada para entender el islam. En el último Ramadán, hicimos donaciones a algunas mezquitas para que los tengan como ejemplares de consulta, ya que no es habitual encontrar libros sobre mujeres y sexualidad.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Islamofobia
Islamofobia El Estado alemán veta a Varoufakis por su discurso para el Congreso proPalestina
Tres personas fueron detenidas en el contexto de un Congreso en el que iban a participar políticos y activistas internacionales. La organización ha convocado una manifestación de repulsa por la prohibición.
El Salto Radio
El Salto Radio Hechos abstractos
Omar estuvo casi tres años en prisión preventiva en régimen de aislamiento, acusado de adoctrinamiento y enaltecimiento, pese a ser inocente. En 2023, la Audiencia Nacional condenó a España a indemnizar a su familia, en una sentencia histórica.
Literatura
Hamja Ahsan “Los radicales simplemente entienden la naturaleza del poder y del sistema”
El autor de ‘Tímidos Radicales’ emplea el humor para ahondar en las contradicciones de los movimientos sociales y reflexionar sobre la opresión, en una obra que desmonta el ‘supremacismo extrovertido’.
#80518
21/1/2021 11:13

Estas mujeres, al igual que las gitanas, tienen el primer "enemigo" en "casa". Deberían empezar por despojarse del yugo religioso y cultural. Si después se liberan de otras cosas, pues mejor para ellas.

0
0
#80454
20/1/2021 17:14

Cuanto nazi suelto dando el coñazo.

0
1
#40352
3/10/2019 8:02

Como puede la izquierda defender una religión que es autoritaria como todas?

2
1
#40546
6/10/2019 13:10

No defiende una religión, sino el derecho de las personas a creer lo que quieran, igual que el tuyo cuando vas a comer como un cerdo a casa de tus papis en navidades.

2
2
#40314
2/10/2019 14:42

¿Cómo de fascinado por lo exótico tienes que estar para entrevistar a esta mujer y no morirte de risa o, por lo menos, hacer preguntas y no un masajeo?
Al igual que el resto de comentaristas, apunto que es una vergüenza la táctica de intentar ocupar una idea emancipatoria con el atraso de la religión (digo 'atraso' pero pienso en una palabra malsonante).
Queridos de El salto; ¿no os parece curioso que deis cancha a la vision colonialista (esa que dejó a los pueblos colonazdos la religión como única vía de expresion político-social) disfrazada de pluralismo, mientras los de El Mundo dan espacio a los valientes movimientos laicos entre mujeres que vienen de entornos musulmanes?

8
3
#40254
1/10/2019 20:14

La verdad es que me importa bien poco lo que opinen de la vida y de la sociedad estas jóvenes con poca trayectoria vital. Pero debo decir que el verdadero feminismo, aquel que lucha por la igualdad entre hombres y mujeres en cuanto a derechos y obligaciones, se formó al margen o en contra de la religión, dado que ésta, cualquiera de ellas, es un lastre para el avance de las mujeres. También de los hombres y del conjunto de la sociedad. Partiendo de ésto, el "feminismo islámico" me da la risa..., por no llorar, claro....

20
6
#40251
1/10/2019 19:01

“A aquellas de quienes temáis la desobediencia, amonestadlas, mantenedlas separadas en sus habitaciones, golpeadlas”. Azora IV, aleya 38

15
3
#40261
1/10/2019 21:09

Con esta interpretación totalmente fuera de contexto e irreal lo único que haces es legitimizar el discurso machista, las mujeres musulmanas ni necesitamos ni pedimos ser salvadas,ya tenemos nuestros propios espacios.

3
11
Yassine
1/10/2019 22:18

¿Interpretación? Es una cita literal

12
2
#40270
1/10/2019 22:42

En realidad nadie os quiere salvar de nada. Se trata de que no deis la plasta a los demás con vuestras vomeduras de coco

14
5
Lawfare
Justicia a la derecha Pedro Sánchez no está solo: estos son los precedentes a su caso de ‘lawfare’
El presidente del Gobierno aseguraba en su carta que el suyo era un caso de lawfare “sin precedentes”. Lo cierto es que esta estrategia de judicializar la vida política se ha enraizado durante los últimos años.
Lawfare
Guerra judicial Las izquierdas brindan el apoyo unánime a Sánchez que él les negó durante la era del ‘lawfare’
Todos los partidos con representación en el Parlamento y ubicados a la izquierda del PSOE, también los soberanismos, han mostrado sus posiciones públicas en solidaridad con el acoso mediático y judicial contra el presidente del Gobierno.
Política
Lawfare ¿Qué decisiones puede tomar Pedro Sánchez tras amagar con dimitir?
Tras el anuncio del presidente, se abren varias posibilidades que no se resolverán hasta el lunes: ¿Una moción de confianza? ¿La convocatoria de elecciones? ¿Un cambio de marco? ¿Dimitir y dar el salto a la presidencia del Consejo Europeo?
Opinión
Opinión Cuando la mierda nos come
El panorama mediático se ha convertido en una amalgama de espacios a cada cual más insano. Basura fabricada por gabinetes ultras, aceptada por jueces afines y amplificada por pseudomedios de propaganda regados con dinero público. Hay que pararlo.
Medios de comunicación
Opinión ¿Y qué esperabas, Pedro?
Los gobiernos de derechas llevan años alimentando con dinero público a sus medios afines que esparcen bulos y manipulan sin que el Gobierno haya hecho nada para evitarlo.
Sanidad pública
Ribera Salud Hospital del Vinalopó: el último rehén de la privatización del PP valenciano
La vuelta del PP al gobierno valenciano ha supuesto un balón de oxígeno para la principal beneficiaria de la privatización sanitaria, que mantendrá la concesión de Elx-Crevillent a pesar del malestar social.

Últimas

El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Antifascismo
Antifascismo en Roma 25 de Abril, día de ‘La Liberazione’
El movimiento antifascista celebra el fin de la ocupación nazi con una demostración de poder en las calles de Roma.
Más noticias
Portugal
Portugal Cuando los campesinos portugueses tomaron la tierra… y la contrarrevolución se la despojó a tiros
Tras el 25 de abril de 1974 una ola de ocupaciones agrícolas impulsó en Portugal una profunda reforma agraria que los gobiernos socialistas y conservadores tardarían más de una década en desmontar.
El Salto Twitch
El Salto Twitch La Catana 2x06, comunicación política y campaña
Nos preguntamos cómo la carta de Pedro Sánchez atraviesa un momento político y electoral que se estira desde las generales, pasando por elecciones gallegas y vascas, para cristalizar en unas catalanas y europeas que van a marcar nuestro imaginario.
Derechos Humanos
Libertades y derechos Amnistía Internacional acusa al Estado de no investigar casos graves de violación de los derechos humanos
El informe anual de esta organización de derechos humanos denuncia “la persistente falta de rendición de cuentas por las violaciones de derechos humanos cometidas por el Estado español”.
Portugal
Memoria histórica 50 años del 25 de abril: la reforma agraria
Cuando se cumple medio siglo de la Revolución de los Claveles este catedrático y corresponsal de prensa en Portugal entre 1974 y 1975 relata una de las caras menos conocidas de este proceso histórico: la reforma agraria.
Medio ambiente
Minas en Andalucía La sinrazón de los vertidos mineros al Guadalquivir
Se cumplen 26 años del vertido minero desde la Mina de Aznalcollar al Río Guadiamar en abril de 1998. Ahora, los nuevos proyectos de vertidos mineros desde las minas Cobre-Las Cruces y Aznalcóllar-Los Frailes vuelven a poner en peligro la zona al no haber tenido en cuenta las características del lugar.

Recomendadas

Derechos reproductivos
Luciana Peker y Cristina Fallarás “El aborto se ha apartado del relato feminista porque genera consenso”
Las periodistas Cristina Fallarás y Luciana Peker forman parte del grupo motor de una campaña europea que quiere blindar el derecho al aborto mediante una iniciativa ciudadana que necesita un millón de firmas para llegar a ser debatida.
Música
Música Aprendiendo filosofía con el punk patatero de La Polla Records
Los cáusticos esputos lanzados por Evaristo en las canciones de La Polla Records contenían materia adecuada para hablar de filosofía política en el instituto. Así lo entiende el profesor Tomás García Azkonobieta, autor de ‘La filosofía es La Polla’.
Pensamiento
Kristen Ghodsee “Necesitamos soluciones que podamos llevar a cabo sin la ayuda del Estado”
Esta escritora y etnógrafa estadounidense explora experiencias utópicas del pasado y del presente en su último libro ‘Utopías cotidianas’ (Capitán Swing, 2024).