Cine
Almudena Carracedo y Robert Bahar: “Esta película puede ayudar a cerrar muchas conversaciones negacionistas”

Netflix estrena ‘No estás sola’, un documental riguroso y situado que entrelaza las historias de los sanfermines de 2016, Pozoblanco y Nagore Laffage para ofrecer un relato universal y luminoso de la violencia sexual con las víctimas en el centro.
Almudena Carracedo y Robert Bahar - 3
Almudena Carracedo y Robert Bahar, creadores de ‘No estás sola’. Álvaro Minguito

Este viernes 1 de marzo se estrena No estás sola, la película en la que Almudena Carracedo y Robert Bahar unen piezas sueltas de la violencia sexual para ofrecer un relato riguroso y situado de ella. Para hablar de esta película hay que decir dos palabras que ellos con mucha intención tratan de evitar: “La Manada”. Porque, insisten los firmantes de El silencio de otros —Goya a la mejor película documental de 2018—, no es “la película de La Manada”, aunque ese sea uno de los casos que se hilan en su trama. No estás sola trenza tres historias concretas —la de la superviviente de la violación de los sanfermines y la de Pozoblanco, ambos casos de 2016, con la de Nagore Laffage, asesinada en los sanfermines de 2008— pero hila más allá, porque quiere mostrar la universalidad de esta violencia que nos atraviesa a todas como víctimas y a todos como responsables de verla y hacer algo al respecto.

Los tres años y medio de trabajo que ha necesitado la película se han producido en secreto para evitar presiones y proteger el proceso, explican. Los números del material que han utilizado parecen inabarcables: casi mil horas de material de archivo, 600 horas de entrevistas, 50 horas de material rodado por ellos, 14 meses de montaje. El resultado es un largo de una hora y 42 minutos que describen como un mosaico. También dicen que es una película luminosa, como los colores con los que la han marcado —blanco y rojo— y como la respuesta ante la violencia sexual que tomó las calles y las redes.

No estás sola es una película producida por Netflix, una experiencia nueva para vosotros. ¿Cómo entra Netflix en vuestra ecuación y qué implicaciones tiene hacer una película con esta plataforma?
Robert Bahar: Después de El silencio de otros, Netflix adquirió los derechos por tres años y fue muy bonito porque llevaron la película a América Latina. Nosotros estábamos pensando en hacer algo sobre estos temas y ya estábamos en contacto con ellos. Y la verdad es que ha sido una colaboración que ha funcionado muy bien. La visión creativa que planteamos fue la de hacer una película con muchas capas y entrelazando tres historias, para llegar al universo de historias que supuso el #Cuéntalo. Y la verdad es que hemos hecho exactamente la película que propusimos. 

Podría pensarse que Netflix hubiera querido imponer alguna condición como, por ejemplo, hacer una película que fuera digerible para el gran público o una promoción basada en el mensaje de que es “la película sobre el caso de La Manada”.
Almudena Carracedo: Nada, cero, en absoluto. El título es No estás sola. Los mensajes son los que queríamos. Incluso la difusión que están haciendo está totalmente alineada con la visión de la película.

R. B.: Ha funcionado muy bien. Obviamente había miedo en cómo se iba a contar esta historia, algo que hubiera pasado con cualquier propuesta sobre esto. En cada conversación compartíamos la idea de que iba a ser algo riguroso, sin sensacionalismo, desde el respeto, y que estábamos intentando hacer algo más grande que solo contar lo que había pasado en un caso. 

Habéis entrevistado a algunas personas que tuvieron contacto directo con la superviviente de la vilación de los sanfermines de 2016, como el personal que la atendió o uno de los policías responsables de la investigación, algunas de ellas fuentes que no habían hablado hasta ahora. ¿Os avalaba vuestra trayectoria con El silencio de otros
A. C.: Nos ayudó, aunque no todo el mundo la conocía. Pero sí ha ayudado poder decir que hemos tratado un tema complejo con mucha sensibilidad, y que queríamos hacer lo mismo con este tema. La investigación fue un proceso muy largo. Las personas que participan entraron poco a poco, porque necesitaban sus tiempos también. Es un tema traumático para la ciudad de Pamplona y para muchas de las personas que han estado involucradas. Algunas ni siquiera habían contado nada a sus familias, por la intensidad de lo que ocurrió. Hay entrevistas muy largas, de entre tres y seis horas seguidas, son entrevistas que hemos hecho muy despacito, con tiempo, parando. En muchas entrevistas teníamos que parar porque el equipo estaba llorando, por ejemplo, o estábamos todos llorando. 

¿Cuándo y cómo empieza a tomar forma la idea de hacer esta película?
A. C.: Estábamos en plena difusión de El silencio de otros, llevábamos dos años dedicados a tiempo completo a la difusión de la peli. Entonces llegó la pandemia y paró todo. Y empezamos a pensar en historias que habían ocurrido en el pasado y que tuvieran un componente social, que es lo que a nosotros nos gusta hacer. Lo primero que hicimos fue preguntarnos si hacía falta contar esta historia, no queríamos añadir más ruido. Y nos dimos cuenta de que, a pesar de toda la repercusión mediática tan brutal que tuvo, lo que había quedado era realmente una versión muy difuminada, con dudas. Hay muchísimas partes de este puzle que se han perdido precisamente por el ruido. El relato de esos días fue tomado por los abogados de la defensa. Pensamos que lo que queríamos hacer era retomar el relato y contar la historia de manera completa y rigurosa desde el punto de vista de las víctimas supervivientes y desde el punto de vista de las personas que las habían acompañado. 

Queríamos que las espectadoras pudieran ponerse en la piel de las víctimas y atravesar ese proceso con ellas. Este es el poder que tiene el cine: el poder sumergirte y, tras esa inmersión, poder mirar de otra manera (Almudena Carracedo)

Es una película, decís, con varias capas y que no quiere ser la película de un solo caso. Pero siento deciros que todo el mundo va a hablar de ella como la película de La Manada. ¿Cómo evitar que no se encasille así?
A. C.: Netflix añadió un subtítulo que es La lucha contra La Manada que, a pesar de que tiene esas palabras, continúa con nuestro posicionamiento. Realmente no es la película de La Manada. Es la peli de las víctimas de La Manada. Queríamos poner el foco en las víctimas y que el espectador, las espectadoras, pudieran ponerse en su piel y atravesar ese proceso con ellas. Este es el poder que tiene el cine: el poder sumergirte y vivirlo todo a través de otra experiencia. Y, cuando sales de ese túnel, de esa inmersión que es una película, poder mirar de otra manera. Por eso era muy importante que el título fuera nuestro y que fuera de las mujeres. Las violencias sexuales nos han ocurrido a todas las mujeres en diferentes intensidades a lo largo de toda nuestra vida. El título No estás sola hace referencia a que existe acompañamiento, que además es por ley gratuito, y a que somos miles y millones junto a ti en la calle. El título alude a ellas y a la luminosidad que transmite la película. 

R. B.: Era muy importante al final poder comunicar que no es una película sobre un caso, sino sobre la universalidad de la violencia sexual contra las mujeres. 

A. C.: A mí me gusta utilizar la palabra deconstrucción. No es una reconstrucción, es una deconstrucción de lo que ocurrió, de la repercusión mediática, la repercusión judicial y la repercusión en las calles. Porque lo que distingue a este caso de otros miles de casos diarios de violencia sexual contra las mujeres es la repercusión que tuvo y cómo las mujeres se movilizaron. Y esto llevó a aprobar una ley, pero llevó sobre todo a un punto de inflexión a nivel social, de concienciación, de lo que es la violencia sexual y de la necesidad de hablar de ella y de contarnos, como mínimo, entre nosotras. Esto son violencias silenciadas, todas hemos vivido violencias que no hemos contado. Yo para esta peli me hice mi lista de violencias, cosas que había olvidado, cosas que por supuesto no le había contado a nadie. A pesar de ser una persona activista, feminista, no las había contado, eran parte de de esta lista de heridas que vas guardando. Y el visibilizarlas nos parecía que era, como decía Robert, una manera de subir de los tres casos que se entrelazan a algo mucho más universal.

Almudena Carracedo y Robert Bahar - 1
'No estás sola' pone el foco en las víctimas de la violencia sexual. Álvaro Minguito

Habéis dicho una palabra clave que es rigurosidad. En este trabajo riguroso se utiliza como recurso narrativo la voz de dos actrices, Natalia de Molina y Carolina Yuste, que ponen voz a las palabras textuales de las dos víctimas supervivientes.  ¿Os preocupaba que este recurso rompiera con el tono documental de la película?
A. C:
El motor del cine realmente es la emoción, es la empatía, el poder ponerte en la piel de las personas y atravesar la historia a través de la gente que está en la peli. 

R. B.: Al principio de la película, queríamos incluir las declaraciones o los testimonios de ambas víctimas supervivientes, y sabíamos... Y esto va un poco a lo de las familias...

A. C.: Claro, es que lo primero que hicimos a la hora de pensar en hacer esto fue contactar con la familia de la víctima sobreviviente de sanfermines para pedir permiso. Teníamos clarísimo que nuestra premisa era no hacer más daño y, si nos hubieran dicho que no, no habríamos seguido adelante. Después, con su visto bueno, contactamos con la víctima superviviente de Pozoblanco y luego contactamos también con la madre de Nagore, que obviamente está en la película. Sabíamos que la víctima de la agresión en sanfermines no iba a participar de manera directa, pero sus palabras están recogidas textualmente de las declaraciones judiciales y en las dos cartas que envió a la prensa. Luego, la víctima sobreviviente de Pozoblanco quiso contar la historia en primera persona y nos reunimos con ella para una entrevista de voz. Entonces aquí es donde vienen las actrices, porque era importante humanizar a estas dos mujeres sin entrar en revictimizarlas. Queríamos demostrar que se puede tratar estos temas sin entrar en detalles superfluos, que no ayudan a entender el por qué de lo que ocurrió. Queríamos mostrar que se puede hacer una cobertura respetuosa en imagen, sin revictimizar y sin mostrar imágenes que son terribles. Y no queríamos hablar de ellas con iniciales, ni con un borrón, sino que fueran personas y que tuvieran un nombre ficticio para que pudieran cobrar vida. Y ahí es donde las dos fueron dobladas, interpretadas por dos actrices supercomprometidas y superfeministas, que ayudan a entender que son seres humanos.

Es una película rigurosa, pero también es una película situada. ¿Es compatible estar situada con ser rigurosa?
A. C.: Sí, aceptamos la subjetividad y la abrazamos como parte de contar nuestra historia.

R. B.: En cada película documental se ve el punto de vista de sus autores. Entonces, se ve que nuestros objetivos implican intentar hacer un tipo de justicia, utilizando una película documental como herramienta. Pero crear una obra que viene de una perspectiva, que en este caso es la perspectiva de las víctimas sobrevivientes y sus acompañantes, eso no significa que no estemos incluyendo la perspectiva de los abogados de la defensa, que tienen sus ruedas de prensa, que está dentro del material de archivo, y que hemos incluido sus argumentos principales en la película. Entonces, aunque la película tiene su planteamiento, también era importante pensar qué teníamos que incluir para dar una perspectiva de 360 grados, y teníamos que incluir todo lo suficiente para que una persona en Australia que no sabe nada de esto tenga toda la información para para hacer su propia valoración. 

A. C.: Una cosa que también es importante destacar es que aunque en la película se muestra la perspectiva de las víctimas supervivientes, cómo lo vivieron ellas, y de las personas que las acompañaron y que vieron el proceso muy de cerca, esta perspectiva no es una de dos versiones. Esto es literalmente los hechos probados en todos los fallos judiciales hasta llegar al Tribunal Supremo. Queríamos esa base de rigor para que fuera desde el punto de vista periodístico irrefutable, pero también tener la libertad creativa como cineastas para incluir estos elementos artísticos. 

Era importante crear algo que podría llegar a cambiar el relato popular. Al final, una película puede entrar en ámbitos donde quizás un medio escrito no llegue (Robert Bahar)

El caso de La Manada y el de Pozoblanco —no así el asesinato de Nagore Laffage— se han dado en un contexto en el que hay muchas periodistas especializadas en violencias machistas que sí han estado escribiendo desde un enfoque de comprensión de cómo opera la violencia sexual, entre ellas Ana Requena, periodista de eldiario.es que participa en la película. En ese sentido, ¿qué puede aportar vuestra película que no haya hecho ya el periodismo?
A. C.: Es verdad que se ha hecho, lo decimos en todos los coloquios. Ana mencionó esto [en una de las proyecciones con coloquio que ya ha habido en cines] y nosotros siempre mencionamos que, aparte del ruido televisivo fundamentalmente de tertulias y de la mayoría de los programas de televisión, hubo también muchísimos medios escritos que hacían un periodismo feminista, desde otro prisma. 

R. B.: Cuando estábamos pensando teníamos la idea de que, aunque existan herramientas para entender lo que pasó, seguía habiendo un relato popular, una memoria colectiva, que no tenía este enfoque. Por eso era importante crear algo que podría llegar a cambiar el relato popular. Al final, una película puede entrar en ámbitos donde quizás un medio escrito no llegue. Y no es para minusvalorar todo el trabajo que ya existía, sino que es algo que suma. 

A. C.: La peli es un mosaico que junta todos esos elementos. Nosotros hemos leído muchísimo también y hemos leído cosas que habéis escrito para poder instruirnos y poder aprender cuáles eran los temas que atravesaban estos casos. Y la otra cosa que nos parece superimportante es pensar en los públicos a los que podemos llegar. Es decir, hay un público ya convencido para el que es muy bonito ver esta película y hacer memoria de lo que se consiguió en las calles y a nivel legislativo. Pero hay otro público que no participó de esas marchas, que también es un público en el que nosotros pensamos a la hora de crear, porque queremos llegar a ese público que no lo tenía claro, que no se lo ha planteado de esta manera.

Diría que se puede añadir además un impacto internacional, porque el estar en Netflix va a suponer que pueda verse en 190 países y en 21 idiomas. ¿Creéis que va a generar interés como para que se vea en otros países? ¿Qué países creéis que puede ser posible que se interesen por esta película?
A. C.: Que una película con este mensaje pueda llegar a tantísimos millones de personas para mí es brutal y es emocionante también. No sé cuándo más voy a poder hacer eso. Pero estos números no son solo un anuncio de Netflix, para nosotros significa esa capacidad, ese impacto potencial. 

R. B.: Y yo creo que la película va a llegar a los sitios donde han hablado del caso, ya hemos visto artículos sobre ella en Argentina o en Chile. En México o en Colombia se está hablando de la película, estamos también recibiendo peticiones de entrevistas desde Inglaterra o Francia, Reuters fue a una proyección. 

La receptividad a una película que habla de violencia sexual es grande. Sin embargo, también estamos en un contexto de ascenso del negacionismo de la violencia machista, de empoderamiento de la extrema derecha. ¿Este contexto de negacionismo puede de alguna forma impactar en la película?
A.C.: Existe una hegemonía mediática y estos relatos siempre van a existir. Nosotros tenemos que seguir hablando, contando nuestro relato. 

¿Hasta que sea hegemónico?
A. C.: Si llegamos a un momento en que la igualdad es algo absolutamente normal y no tenemos que plantear estos relatos, pues qué bien. Pero sí, esto lo dice Ana Requena en la peli: hay una reacción, pero es una semilla potente. Queremos pensar que la peli es también una semilla y es una herramienta para poder hablarlo a todos los niveles. Que se hable en el curro, que se hable en las familias, que podamos hablar de estas cosas que pasan en los grupos de WhatsApp de amigos o de primos donde se comparten chistes machistas.

R. B.: Dentro de la película se ve este negacionismo, en los mensajes de redes sociales. Siempre hay que decir que se ve un porcentaje mucho más alto de apoyo que de negacionismo. Entonces, ¿las mismas personas van a mandar los mismos mensajes? Quizás sí. Tal como están las redes sociales ahora, es parte de la realidad. Pero para una gran parte del público que quizás haya recibido mensajes negacionistas o dudas planteadas por los abogados de la defensa, espero que pueda ayudar a cambiar el relato con todas las pruebas. Porque en la película está la policía que estaba allí en el banco en los primeros minutos, la trabajadora social, después podemos entender lo que pasó en el momento en el hospital y en la preparación del caso desde Fiscalía, vemos también la investigación por ambos cuerpos de Policía —municipal y foral—. Yo creo que si puedes ver paso por paso todos los elementos del caso, la película puede ayudar a cerrar muchas de las conversaciones negacionistas sobre el caso concreto y además ir más allá. Pero obviamente no es un problema que una película o un artículo o una columna puede responder. 

Almudena Carracedo y Robert Bahar - 2
Almudena Carracedo y Robert Bahar en la redacción de El Salto. Álvaro Minguito

En la película hay entrevistas exclusivas, mucho material de archivo, elementos narrativos... ¿Hay algo que os haga sentir especialmente orgullosos?
A. C. A mí lo que me hace sentir más orgullosa es la recepción que está teniendo la película. La manera en que la gente vive la película y sale transformada. Que todo ese dolor de las entrevistas, que todo el esfuerzo y la generosidad de las personas que han participado... que hayamos conseguido que todo esto funcione y que se generen estas conversaciones, esto es para mí siempre lo más bonito. 

R. B.: A mí trabajar en esta película me ha cambiado. Siempre había trabajado en temas sociales, en la justicia social, entonces pensaba that i had a social consciousness and that i was a ally, y todo. Pero al final y especialmente cuando estamos trabajando en la primera fase, observaba que también es un privilegio bajar con el perro a las 23:00 de la noche y no pensar en nada. Y poco a poco entras a pensar qué cosas nunca me contaba mi madre, qué cosas ha vivido mi hermana que nunca hemos hablado. Y entiendes el mundo de otra manera. Y yo creo que la película puede ser una experiencia que ofrece la posibilidad de entrar y vivir todo y salir y entender el mundo de otra manera. Y este es el objetivo. 

A pesar de que son películas sobre el dolor y sobre el trauma, ‘No estás sola’ y ‘El silencio de otros’ tienen un punto de esperanza que nos ayuda también a entendernos desde la esperanza activa (Almudena Carracedo)

¿Qué tiene en común con vuestro anterior trabajo?
A. C.: Las dos son pelis sobre la dignidad. Las dos son pelis sobre el silencio, los silencios que nos rodean y que tratamos de romper, que rompen las personas que se embarcan en estos procesos. Nosotros documentamos esa ruptura de silencio, lo acompañamos con nuestro trabajo. Es curioso porque con El silencio de otros siempre nos preguntaban si no creíamos que estábamos abriendo heridas, y nosotros decíamos no, es que justamente están abiertas y para cerrarlas hay que hablarlas. Y estas mismas palabras salen ahora en los coloquios. Las dos, además, a pesar de que son películas sobre el dolor y sobre el trauma, tienen un punto de esperanza que nos ayuda también a entendernos desde lo que se llama la esperanza activa, esta idea de que no solo están las cosas mal, sino que también podemos cambiar las cosas.

¿La han visto las dos víctimas supervivientes que salen en la película?
A. C.: Le hemos enseñado la película a todas las personas participantes porque nos parece respetuoso que la pudieran ver. La hemos visto individualmente con cada una de cada uno de ellos. La respuesta ha sido muy bonita y muy positiva. También antes de terminar le enseñamos la película a la familia de la víctimas superviviente de sanfermines y le pareció bien. Y le enseñamos la película a la víctima superviviente de Pozoblanco y fue una experiencia muy bonita. Lo que ella dijo que quería que transmitiéramos es que es respetuosa, justa y necesaria. Y, lo más importante, cero morbo. Y la madre de Nagore también la ha visto, obviamente. Con esto nos queda una sensación de satisfacción. Si a ellas les parece bien, entonces hemos cumplido parte del objetivo.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Opinión
Madres protectoras Cuando la mayoría de medios decían que Juana Rivas había secuestrado a sus propios hijos
Los niños y niñas que están siendo arrancados de sus madres un día hablarán. Es entonces cuando el poder mediático y el poder judicial se darán de bruces con la realidad.
Violencia machista
Violencia Machista ¿Es útil el #YesAllMen? Dilemas de la posición masculina frente a las violencias machistas
Lo que hacemos los hombres para politizar y desindividualizar nuestro compromiso no tiene mucho efecto: depende de una viralización que nunca llega y se da en términos moralizantes.
Justicia
Juana Rivas La Fiscalía italiana acusa al exmarido de Juana Rivas de violencia física, vejaciones y amenazas a sus hijos
La Fiscalía italiana ha presentado un escrito de procesamiento ante el Tribunal de Apelación de Cagliari contra Arcuri por “haber maltratado a sus hijos menores, sometiéndoles habitualmente a violencia física, vejaciones, injurias y amenazas”
Galicia
Memoria histórica Así fue como el Patronato de Protección a la Mujer transformó Galicia en un convento de clausura
Las mujeres que cayeron en las redes del Patronato iniciaron un periplo de encierro, humillaciones, abusos y explotación que es desconocido para la mayor parte de la población. Queda hoy en la impunidad de un silencio que tenemos el deber de romper.
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Pensamiento
Sarah Jaffe “En realidad tenemos que hacer menos. E impedir que algunas cosas sucedan”
La escritora y periodista Sarah Jaffe aborda el desengaño cotidiano al que nos aboca el mundo laboral e investiga cómo, a pesar de todo, las personas se organizan colectivamente en sus empleos para que “trabajar apeste menos”.
Opinión
Tribuna Todas las razones para decir ‘Altri non’
Aquí van unos cuantos motivos para juntarnos este domingo en Compostela y dejar clara nuestra postura frente a un expolio que nos están tratando de imponer disfrazado de progreso, pero que sólo trae beneficio económico a unos cuantos indeseables.
Ocupación israelí
Palestina Vivir en alerta: la resistencia palestina frente la ocupación israelí
La cruda realidad de las feministas palestinas que, ante la represión y las detenciones arbitrarias, continúan su lucha por la libertad, la justicia y los derechos humanos.

Últimas

Palestina
Eyad Yousef “No cuentes lo que queremos ser, cuenta lo que nunca hemos dejado de ser: un pueblo que quiere la paz"
Eyad Yousef es profesor en la Universidad de Birzeit, Cisjordania, y comparte su experiencia en una universidad que “representa el pluralismo y la libertad que tanto anhela la sociedad palestina”
Análisis
Análisis El independentismo se reorganiza, pero ¿sigue siendo independentista?
Los partidos independentistas han sufrido la crisis del procés y el posprocés, y todavía no la han resuelto, sino, a lo sumo, la han aplazado. El PSC aparece como el ganador de una carrera con corredores agotados.
Opinión
Opinión Sobrevivir pagando en el Álvaro Cunqueiro
Una de las victorias ideológicas del PP de Feijóo en Galicia ha sido hacernos creer que pagar por servicios esenciales en los hospitales durante el cuidado de nuestros enfermos es lo natural, que no hay otra manera de abordarlo, pero es mentira.
Siria
Oriente Próximo Israel impone hechos consumados sobre Siria para condicionar la transición según sus intereses
“Está escrito que el futuro de Jerusalén es expandirse hasta Damasco”, dijo este octubre el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, uno de los exponentes ultras del Ejecutivo.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Un tercio de los asesinatos de periodistas en 2024 fueron obra del ejército de Israel
Reporteros Sin Fronteras documenta la muerte de 18 periodistas en Palestina y Líbano este año “asesinados deliberadamente por hacer su trabajo” y habla de una “masacre sin precedentes” de profesionales del periodismo.
Más noticias
Crisis energética
Análisis Los aerogeneradores no son molinos, son gigantes
El megaproyecto eólico del Clúster Maestrazgo, punta de lanza del capitalismo verde, destruirá un área natural de alrededor de 1325 campos de fútbol.
Ecofeminismo
COP29 La brecha de género en las Cumbres del Clima
VV.AA.
Las cumbres del clima no están aisladas del resto de espacios políticos y también están atravesados por las dinámicas patriarcales, pero ¿en qué lo notamos? ¿cómo abordan las negociaciones climáticas las políticas de género?
Galicia
Galicia Activistas de Greenpeace instalan ‘una celulosa’ en la sede de la Xunta en protesta contra Altri
Los ecologistas han realizado una acción en la sede del Gobierno gallego de Alfonso Rueda para animar a gallegos y gallegas a asistir a la manifestación de este domingo en la Praza do Obradoiro, en Santiago de Compostela.

Recomendadas

Madrid
Ciudades Fake Madrid, un paseo por los hitos del simulacro
Un recorrido por los grandes éxitos de la conversión de Madrid en una ciudad irreal.
Fronteras
Túnez Túnez endurece la represión contra las ONG de ayuda a las personas migrantes
Mientras el presidente Kaïs Saied se prodiga en discursos racistas, el estado persigue a las entidades solidarias con quienes llegan al país, bajo el silencio cómplice de la Unión Europea.
Galicia
Economía ¿Quién lidera el negocio del eucalipto en Galicia al que Altri quiere sumarse?
El estallido social que ha producido el intento de la multinacional Altri y la Xunta de instalar una nueva celulosa en Galicia abre la necesidad de poner el foco en el sector forestal, donde se encuentran algunas de las mayores fortunas del Estado.