Reducción de jornada
A nuestras socias les parece bien que trabajemos 32 horas a la semana, nosotras dudamos

Una encuesta lanzada a las socias de El Salto refleja una alta simpatía hacia la reducción de jornada laboral a 32 horas a la semana, tanto como apuesta política en general como medida a aplicar en nuestro medio.
boletin encuesta 32horas
1 may 2024 08:27

Desde hace unos meses, un fantasma recorre la redacción de El Salto. Un fantasma que trae bajo su fantasmal sobaco esta pregunta: además de defender la reducción de la jornada laboral en nuestra línea editorial, de haber abordado múltiples veces esta cuestión en reportajes, entrevistas y análisis, ¿podríamos aplicárnosla?  Después de todo somos una cooperativa, no tenemos patronal a quien presentar esta demanda, ni medida de presión que tenga mucho sentido cuando tus jefes son tus compañeras, tú misma, y todas las personas que nos apoyan con su suscripción. Esos son los interrogantes que nos ocupan.

¿Podríamos trabajar 32 horas semanales?¿imponer una política laboral en la que creemos sin esperar a que haya un gobierno sin miedo a la transformación que imponga lo que ya sabemos que es bueno para todas? ¿Es esta pretensión, en una plantilla que ya hace horas extra por norma, realista? ¿No es de alguna forma injusto tomar la delantera cuando la mayoría del país sigue trabajando sus 40 horas a la semana? ¿Seguiremos siendo capaces de producir lo suficiente para que la gente sienta que estamos siempre ahí? ¿Es compatible el FOMO periodístico con la preciada e histórica reivindicación de trabajar menos para vivir mejor?

Lo primero que queremos destacar es que a casi todo el mundo le interesa, al menos un poco, la reducción de jornada a 32 horas semanales

Son muchas preguntas, y al no tener respuesta, decidimos compartirlas con nuestras y nuestros socias, más de 1000 respondieron, el equivalente a algo más de un 10% de nuestras suscriptoras, lo que humildemente nos parece que no está mal como muestra. Os dejamos aquí algunas pinceladas de los resultados.

Lo primero que queremos destacar es que a casi todo el mundo le interesa, al menos un poco, la reducción de jornada a 32 horas semanales. Es algo, parece, que interpela a nuestras existencias, y alguna atención prestamos al debate. Así solo el 6,9% de las personas que respondieron, calificaron la propuesta como algo que les sonaba un poco a cosa refor, el resto había leído al menos algún artículo sobre el tema (42,6%), el 21,6% ha buscado información y tiene una opinión al respecto, el 17,4% habría debatido sobre esta propuesta en sus círculos y un 11,5% controla sobre el tema.

Pero no hace falta ser un experto en la materia para estar a favor, preguntados sobre qué entusiasmo les genera la propuesta de trabajar 32 horas, el 76,4% de las socias y socios que contestaron preguntan que dónde hay que firmar. El 10%, aunque conceptualmente de acuerdo, llama a la prudencia e insta a seguir los plazos ya marcados desde el Ministerio de Trabajo. A un 7,1% le parece una propuesta meramente reformista y considera que donde hay que concentrar las fuerzas es en subir los salarios. A un 4% la idea les parece demasiado utópica, y un 2,5% la califican como una medida política poco urgente, dado que hay tantas personas haciendo aún muchas más horas que la jornada de 40.

Reducción de jornada
Jornada 4 días El piloto valenciano de la jornada laboral de cuatro días demuestra sus beneficios
El análisis del primer año del proyecto de reducción de jornada laboral arroja beneficios sobre la salud, la infancia, la cultura y la contaminación.

Ya por último pasamos a preguntar qué os parecería si nos decidiésemos por pasar a la acción, y aplicarnos la reducción de jornada. Nadie se ha manifestado en contra hasta el punto de dejar el proyecto, a seis personas les ha parecido que con trabajar donde trabajamos, ya deberíamos sentirnos suficientemente afortunadas, el 9,2 % considera más apropiada una reducción gradual y bajaría a 35h, primero, para asegurarse de que no se pierden contenidos. El 31,1% nos invita a aplicar la reducción a 32 horas si eso nos hace más felices y productivos, y casi seis de cada 10 (59%) saludaría esta decisión como un momento de tomar la iniciativa política, preguntando una vez más ¿dónde tengo que firmar?

El sondeo cuenta con una segunda parte para saber cuáles son los contenidos que os suscitan más interés, y en la práctica, cuales acabáis leyendo, viendo, etc. Lo que más os interesa no acaba de coincidir con lo que más leéis, por ejemplo, la puntuación para los reportajes de internacional, los análisis sesudos o los reportajes sosegados en términos de interés, es bastante más alta que los números que surgen cuando preguntamos qué es lo que se acaba leyendo. Quizás hay interés en lecturas más reposadas pero no parece que haya el tiempo para ello: la gente presta sobre todo atención a las últimas horas y a los artículos de actualidad. En todo caso son cuestiones que nos sirven para pensar sobre nuestro trabajo, sobre cómo se recibe lo que hacemos, y ya que estamos, sobre la sociedad acelerada en la que vivimos.

Y sobre todo esto vamos a seguir reflexionando. Y seguiremos contándoos cómo sigue este debate, y probablemente, también, volveremos a preguntaros.

Sobre este blog
El Salto es un proyecto formado por cerca de 200 personas y 10.000 socios/as que apuesta por un periodismo radicalmente diferente: sin financiación de empresas del Ibex35, democrático, descentralizado y de propiedad colectiva
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Galicia
Laboral El Supremo confirma el fraude masivo de contratación en el sector cárnico gallego
La sentencia reafirma que Servicarne funcionaba como una falsa cooperativa y que sus socios tenían una relación laboral con Novafrigsa, del Grupo Coren
fllorentearrebola
1/5/2024 11:36

Quizás las personas suscriptoras deberían saber que en El Salto hay mucha gente que trabaja voluntaria y sin remuneración alguna, y no hablo sólo de las personas que escriben sin recibir un pavo, hablo de las que editan y publican en las redacciones territoriales que en muchos casos lo hacen desinteresada y militantemente, con dosis de entrega o voluntarismo que no siempre son agradecidas. En concreto la redacción extremeña que genera un tráfico de lecturas nada desdeñable en el total de lecturas de El Salto trabaja enteramente gratis desde hace años, echando horas y horas desinteresadamente, bueno no del todo: nos interesa mucho el débil tejido asociativo crítico de una región que es de hecho una colonia intrametropolitana sometida a extractivismos y exclusiones insoportables, una región en la que El Salto es uno de los pocos espacios de resistencia comunicativa y se ha convertido en un referente de los movimientos sociales regionales alternativos. Esto es lo que nos hace resistir, porque sinceramente no nos sentimos bien tratados en el conjunto de esta empresa cooperativa que es El Salto. Nos parece excelente idea que las trabajadoras de la cooperativa reduzcan su jornada laboral a 32 horas, pero ya nos gustaría que Extremadura tuviera al menos una media jornada remunerada para pagar parte del inmenso trabajo de edición y mantenimiento del contrapoder comunicativo que después de años hemos logrado ser. Probablemente esté mensaje caerá mal y es que hasta en los entornos más alternativos y críticos se reproducen ciertos sesgos centralistas y colonialistas muy difíciles de superar. Lo tenía que decir, y lo he dicho.

6
1
Narfio
1/5/2024 21:11

Yo no tenía ni idea desde luego ...
(Pues sí, a ver si conseguís aunque sea una media jornada renumerada).

1
0
elosu09
2/5/2024 11:17

Ser personas consecuentes tiene muchas aristas y todas ellas nos van a dejar rasguños. Lo primero es teorizar porque es lo que nos va a hacer reflexionar, pero tenemos que conocer la práctica/realidad, soy socio pero no consumo tanto El Salto como el trabajo que se hace merece (solo tengo whatsapp por trabajo, vivo al margen de las demás redes sociales). Como cooperativa estaría bien poner en números de lo que estamos hablando: CUANTAS HORAS DE MILITANCIA SE HACEN EN EL PROYECTO; CUANTAS HORAS EXTRAS SE REALIZAN (siempre que se abonen -cosa que creo que no es así- porque si no se pagan NO SON HORAS EXTRAS), como somos entre todas capaces de que NUESTRO PROYECTO COMUNICATIVO siga vivo y se extienda, para ello las propuestas de nuevas contrataciones (que hay que definir AL MARGEN DE LA MILITANCIA) que reflejen las necesidades reales del proyecto estaría bien que se discutiesen en los foros adecuados (en los que tampoco participo tanto como el proyecto merece). Salud.

1
0
Sobre este blog
El Salto es un proyecto formado por cerca de 200 personas y 10.000 socios/as que apuesta por un periodismo radicalmente diferente: sin financiación de empresas del Ibex35, democrático, descentralizado y de propiedad colectiva
Ver todas las entradas
Ocupación israelí
Ocupación Israelí La policía egipcia impide con violencia la marcha internacional a Gaza
La marcha de 4.000 personas a Gaza es reprimida por la policía del régimen de Al-Sisi. La organización pide a las embajadas que reaccionen y protejan a sus ciudadanos.
Ocupación israelí
Movilizaciones Un centenar de organizaciones de 26 países denuncian a la empresa vasca CAF y su tren del apartheid
Más de 50 localidades salen a la calle este fin de semana para señalar a la empresa que construyó el tranvía que conecta Jerusalén con territorio ocupados y exigir el fin del genocidio en Gaza.
Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.
Análisis
Análisis del CIS La calma antes de la tormenta: la dimisión de Santos Cerdán como punto de inflexión
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha muerto pocas horas después de nacer por la dimisión de Santos Cerdán, aunque sirve como foto fija de un escenario que favorece a la derecha.
Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.
Estados Unidos
Estados Unidos “No Kings”: más de 2.000 manifestaciones en EEUU para protestar contra la deriva autoritaria de Trump
Con el nombre de movimiento No Kings (sin reyes), millones de personas están convocadas a manifestarse en todo el país este sábado y enfrentar el desfile militar organizado por Trump el día de su 79 cumpleaños.

Últimas

Galicia
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar a Altri
Queremos investigar a los responsables políticos y empresariales del que podría ser el mayor atentado ambiental de la historia reciente de Galicia.
Galicia
TSXG Peritos en el juicio contra la Xunta: la contaminación del embalse de As Conchas es “extremadamente peligrosa”
Siete vecinos, la Asociación de vecinos de As Conchas y la organización de consumidores CECU han demandado a varias administraciones gallegas por presunta mala gestión de una contaminación derivada del exceso de macrogranjas en la comarca de A Limia.
Palestina
Marcha a Gaza Poner el cuerpo contra el genocidio
Miles de activistas de todo el mundo participan en la Marcha a Gaza desde Egipto. Desde el movimiento solidario extremeño con Palestina, una reflexión acerca de la importancia de esta lucha y de su momento histórico.
La madeja
La Madeja Oído/lengua/vientre
El oído que deja de prestar atención a la palabra del amo y se vuelve, inclinado ligeramente hacia abajo, a las que durante siglos callaron y al fin abandonaron la mudez, no será nunca subyugado.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Un centro de salud desbordado y con cucarachas y otro pendiente de construir desde hace 22 años
Los vecinos del barrio de Comillas, en Carabanchel Bajo, se han manifestado para reclamar el nuevo centro de salud planificado desde 2003 y cuya parcela ya fue cedida por el Ayuntamiento a la CAM, que no da explicaciones por la paralización.
Centrales nucleares
Cierre de Almaraz Las empresas propietarias de Almaraz no acuerdan una propuesta conjunta para alargar la vida de la central
Solo Iberdrola y Endesa firman la propuesta de alargar la vida de Almaraz trasladada al MITECO. Naturgy se descuelga de la misma y bloquea su viabilidad, al estar la central explotada por las tres energéticas en un régimen de comunidad de bienes.
Más noticias
Israel
Oriente Próximo Israel mata al comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán, que prepara “una respuesta contundente”
Israel ha atacado Irán en la madrugada del viernes 13 de junio con bombardeos de unos 200 aviones de combate. La Guardia Revolucionaria iraní ha confirmado la muerte de su comandante, el general Hossein Salamí.

Recomendadas

Derecho a la vivienda
Jaime Palomera “La vivienda necesita una revolución”
Investigador y uno de los fundadores del Sindicat de Llogateres, Jaime Palomera presenta ‘El secuestro de la vivienda’, un libro sobre el juego amañado en el que los propietarios son cada vez más ricos y los inquilinos cada vez más pobres.
Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Brasil
Extrema derecha Arte en tiempos de fascismo: cuando enseñar a Goya y Rubens le cuesta el puesto a un profesor
Una clase de Historia en la escuela municipal en una localidad del Estado de São Paulo desemboca en acusaciones contra el profesor y una campaña de difamaciones que encabeza el concejal de educación de la zona, de la extrema derecha bolsonarista.
Literatura
María Agúndez “El trabajo de limpiadora es muy digno, pero nadie quiere hacerlo”
La escritora retrata en ‘Casas limpias’ las contradicciones de quienes considerándose personas igualitarias y progresistas delegan los cuidados y la limpieza para evitar el conflicto y sostener su comodidad.