montaje web lanzamiento 5 años de El Salto

Comunidad El Salto
Cinco años de El Salto, tres décadas saltando

Este septiembre cumplimos cinco años. El Salto, sin embargo, lleva estando ahí, con distintos nombres, más de tres décadas. De salto en salto, de Molotov a Diagonal y de Diagonal a El Salto, siempre con la misma idea: construir un gran medio de comunicación que funcione con otras reglas.
15 sep 2022 11:31

El 13 de septiembre de 2017, El Salto lanzaba su página web y daba por concluida su etapa de lanzamiento. Un proceso que había comenzado casi un año antes con la salida del último número del periódico Diagonal, la presentación del proyecto en el blog Saltamos.net y la publicación de las primeras revistas de El Salto. 

Al igual que con el nacimiento de sus predecesores, El Salto no contó con más capital inicial que el de los suscriptores y suscriptoras y pulverizó todas las expectativas. 

Cinco años han pasado desde entonces, muchos proyectos, decenas de periodistas y miles de suscriptores se sumaron a la propuesta de construir “un gran medio financiado por la gente”. 

Ese fue el lema que dio vida a El Salto, pero que también estaba detrás de los sucesivos saltos que definen los 36 años de historia larga del proyecto. Muchas cosas han cambiado, pero muchas otras se mantienen intactas a pesar de que apenas quedan en el colectivo personas de la primera época del Molotov. El funcionamiento asambleario, la cercanía con los movimientos y colectivos sociales y un método de financiación que garantiza a largo plazo la independencia editorial es una constante de la historia larga del proyecto. En los sucesivos parones para repensar el proyecto y los saltos que marcan estas décadas, siempre hubo una idea por detrás: juntarse con más gente para llegar más lejos y mejor, eso sí, sin renunciar nunca a nuestros principios. 

Primeros años del Molotov
El Molotov, nacido en 1986, recogió las luchas contra la OTAN y los incipientes movimientos por los centros sociales okupados, por la insumisión, el antifascismo, el ecologismo y contra la represión. En 1994 se fusionó con la agencia de noticias UPA.

La historia larga

La historia larga de El Salto empieza en 1986 en la Facultad de Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid, donde un grupo de estudiantes creó el fanzine Molotov.

Dos años después nacía la agencia UPA, un colectivo dedicado a recibir y difundir información sobre movimientos sociales, redactar noticias y transmitirlas a través de un contestador automático y de un boletín, del que sacaron 202 números. En 1994, tras un periodo de debate y reflexión, ambos proyectos decidieron fusionarse para crear el colectivo UPA-Molotov.

Aunque mantuvieron el contestador en funcionamiento, fue el boletín Molotov, con 4.000 ejemplares distribuidos en todo el Estado, el que se convirtió en el principal difusor de las noticias del nuevo colectivo. 

En 1998, el colectivo paró las máquinas durante un año para preparar un nuevo salto: la transformación del Molotov en un tabloide mensual con un diseño mucho más evolucionado, con más tirada y mejor distribución. Durante toda la historia del Molo, como era conocido cariñosamente, el periódico difundió las luchas y el trabajo del movimiento antimilitarista, ecologista, vecinal, feminista, internacionalista, antifascista, antirracista, antirrepresivo o de los centros sociales okupados, de finales de los 80, los 90 y los primeros años del nuevo milenio.

Molotov última época
En la última época del Molo, a partir de 1998, el periódico se convirtió en un tabloide con miles de ejemplares distribuidos en todo el Estado español. En 2003 lanzó un proceso llamado “El Salto Adelante” o “El Salto” a secas que daría como resultado el periódico Diagonal.

En 2003, en medio de las movilizaciones del Prestige y la guerra de Iraq, el colectivo inició un periodo de reflexión y debate llamado internamente “El Salto Adelante” o “El Salto” a secas, una iniciativa para crear un medio mucho más potente y capaz de trascender los círculos militantes de los “ya convencidos”.

Aquel “Salto Adelante” de 2003 se concretó en un llamamiento abierto a otros proyectos comunicativos y periodistas afines. Además de gran parte de la antigua redacción del Molotov se unió un gran grupo proveniente de la Asamblea de la Facultad de Periodismo de la Complutense y del fanzine Camisa de Fuerza.

El periódico quincenal Diagonal fue el resultado de este proceso. Sin capital inicial ni inversores, un concierto permitió pagar la impresión de dos números de prueba, el primero de ellos a mediados de 2004. El objetivo de conseguir suficientes suscripciones para montar una redacción con esos dos números era más que arriesgado, pero funcionó.

El 3 de marzo de 2005 salía el número 1 y, durante 11 años, Diagonal abrió brecha y demostró que era posible hacer periodismo a la izquierda de El País. Y no solo era posible ofrecer contenidos críticos rigurosos y bien presentados, sino que se podía hacer con un funcionamiento asambleario y una financiación ética. Fue de los primeros medios en hablar de “huelga feminista”, de estallido de la burbuja inmobiliaria, de desahucios, de deuda ecológica y de muchas otras luchas y discursos que parecían marginales entonces y son ahora asumidos por un amplio arco ideológico.

Tras la gran crisis iniciada en 2008 y la explosión del 15M, muchos de los temas que antes tocaba casi en exclusiva Diagonal pasaron a la agenda mainstream. Un abanico de nuevos medios surgieron en ese espacio a la izquierda de El País.

En 2016, ante una situación de estancamiento, Diagonal impulsó un nuevo salto, con parecido espíritu al anterior, pero con décadas acumuladas de experiencia. Cinco años después, el proyecto ha duplicado los suscriptores y el alcance que tenía Diagonal. Con 8.300 socias y con dos millones de visitas a la web mensuales, con 25 personas empleadas y proyectos paralelos de radio y televisión, nunca habíamos llegado a tanta gente y nunca los contenidos habían sido de tanta calidad. 

Del Diagonal a El Salto Kokoparrilla
En 2016, Diagonal lanzó un nuevo proceso para construir “el primer gran medio financiado por la gente”. El resultado fue El Salto. / Ilustración: Elkokoparrilla

Sin embargo, nos sigue pareciendo poco. Estos cinco años nos sirven para constatar todo lo que hemos conseguido y todo lo que nos queda por hacer, especialmente para romper con el monopolio de la información que tienen el poder económico y los discursos de la extrema derecha. Antes y ahora, sabemos que solas no podemos conseguirlo. Al igual que en estas tres décadas de historia, volveremos a saltar con quienes quieran hacer periodismo con otras reglas. 

Cumplimos cinco años, pero tres décadas nos preceden. Muy poca gente queda de los inicios del Molo, muchísima del Diago, pero perviven unas cuantas ideas: las transformaciones más importantes son las que vienen de abajo y solo se puede hacer un periodismo diferente si se funciona de forma diferente. Para que estas ideas puedan sobrevivir 30 años más, te necesitamos. Si todavía no lo has hecho, ¡suscríbete!

El Salto saltamos Ecoo 2
Sobre este blog
El Salto es un proyecto formado por cerca de 200 personas y 10.000 socios/as que apuesta por un periodismo radicalmente diferente: sin financiación de empresas del Ibex35, democrático, descentralizado y de propiedad colectiva
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

5 años de El Salto
Cinco años de El Salto Así fueron las jornadas 'Comunicar en tiempos de ruido' organizadas por El Salto
Este sábado 8 de octubre se celebró en La Maliciosa (Madrid) la jornada “Comunicar en tiempos de ruido”, en la que conversamos sobre cómo hacer un periodismo transformador ante las narrativas que eclipsan todo horizonte de cambio. Puedes ve el 'streaming' de los debates en este artículo.
Zona socias
Relato ¿Dónde está tu vena marinera?
Una socia de El Salto publica este texto de su marido fallecido hace algunos meses, a manera de homenaje.
Solo para socias
Sorteo 10 ejemplares de ‘Contigo empezó todo’, nuestro primer libro
Si aún no lo tienes, aprovecha nuestro sorteo entre el 9 y el 22 de diciembre para llevarte gratis este volumen con el que inauguramos El Salto Libros.
jfdelariega
3/10/2022 12:01

Hola, Antes de que saliera Molotov, salió una pequeña revistilla en la facultad de C.C.Políticas y Sociología, se llamaba KOZ y tuvo muy pocos números. Surgió a raíz de un acto simbólico de okupar la Facultad, para dar a conocer la situación educativa, social, etc que teníamos en dicha universidad. La sacamos 4 ó 6 personas, era en tinta verde y creo que a los dos o tres años salió Molotov, ya me había ido y terminado la carrera de sociología, pero seguí la trayectoria y soy socio desde el inicio del proyecto. Suerte y nos vemos un día. Juan.

0
0
fllorentearrebola
20/9/2022 9:48

El primer número de Molotov se publicó a finales de 1984 o principios de 1985. Lo sé, porque estaba en el grupo editor. Salud y larga vida

1
0
Bea
16/9/2022 9:54

Enhorabuena. Vengaaa

1
0
Asanuma
15/9/2022 22:26

Enhorabuena.

1
0
Xam
Xam
15/9/2022 20:29

Algunos socios llevamos mas de 25 años siguiéndoos de proyecto en proyecto. ¡Y que sean muchos mas!

3
0
Hodei Alcantara
Hodei Alcantara
15/9/2022 15:53

Felicidades a todo el equipo de El Salto! Hacéis un trabajo magnífico y estoy muy orgulloso de formar parte de este proyecto alternativo

1
0
Sobre este blog
El Salto es un proyecto formado por cerca de 200 personas y 10.000 socios/as que apuesta por un periodismo radicalmente diferente: sin financiación de empresas del Ibex35, democrático, descentralizado y de propiedad colectiva
Ver todas las entradas
Siria
Oriente Próximo Israel impone hechos consumados sobre Siria para condicionar la transición según sus intereses
“Está escrito que el futuro de Jerusalén es expandirse hasta Damasco”, dijo este octubre el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, uno de los exponentes ultras del Ejecutivo.
Ibex 35
Ibex 35 Las retribuciones de los grandes empresarios multiplican por 118 lo que ganan sus trabajadores
Los directores y ejecutivos de Inditex, Banco Santander, Iberdrola, Indra, CIE Automotive y otras empresas del Ibex 35 multiplican por cientos de veces los sueldos medios de sus empleados.
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Catalunya
Derecho a la vivienda La “revuelta de las llaves” echa a andar con tres huelgas de alquileres en Catalunya
Tres promociones de vivienda deciden ir a la huelga de inquilinos, una de las medidas defendidas por las manifestaciones del 13 de octubre y el 23 de noviembre en Madrid y Barcelona para hacer frente a los alquileres impagables.
Galicia
Economía ¿Quién lidera el negocio del eucalipto en Galicia al que Altri quiere sumarse?
El estallido social que ha producido el intento de la multinacional Altri y la Xunta de instalar una nueva celulosa en Galicia abre la necesidad de poner el foco en el sector forestal, donde se encuentran algunas de las mayores fortunas del Estado.
Inteligencia artificial
Inteligencia artificial Los creadores rechazan las licencias ampliadas para el uso de sus obras en la IA: “Es un genocidio cultural”
El Real Decreto para regular la concesión de licencias colectivas ampliadas para la explotación masiva de obras protegidas por derechos de propiedad intelectual para el desarrollo de modelos de Inteligencia Artificial recibe un rechazo generalizado.

Últimas

Personas sin hogar
Personas sin hogar Encierro en el Ayuntamiento de Granada para reclamar albergues para las personas sin hogar
Decenas de activistas exigen tratar, en el Día Internacional de los Derechos Humanos, con la alcaldesa de la ciudad sobre la necesidad de medidas urgentes ante la gravísima situación de las personas sin hogar en plena ola de frío.
Opinión
Tratados UE-Mercosur, el acuerdo que acabará con el modelo de agricultura europeo
Toda la producción agroalimentaria familiar, de pequeña escala y que desarrollan la economía local va a salir perdiendo, sea en Europa o los cuatro países latinoamericanos.
Siria
Siria Israel bombardea la transición siria
Mientras el nuevo gobierno del país intenta proyectar legitimidad dentro y fuera de sus fronteras, el ejército sionista expande su control del territorio en los Altos del Golán, y Europa congela miles de solicitudes de asilo de personas sirias.
Derecho a la vivienda
Derecho a la vivienda La moratoria del ‘escudo social’ no ha servido para impedir tres de cada cuatro desahucios
Un redactado poco claro, que deja libertad a los jueces para saltarse la moratoria, limita su alcance. A pocas semanas de su fin, organizaciones de vivienda piden que sea mejorada, ampliada y convertida en permanente.
Más noticias
Baleares
Memoria histórica Acuerdo en Baleares entre la izquierda y el PP para no derogar la ley de memoria histórica
El Govern ya no buscará los apoyos de la ultraderecha en los presupuestos ni cumplirá con uno de los puntos más calientes del programa, como era la derogación de la ley de memoria democrática.
Tribuna
Tribuna El día después del derrocamiento de Al Asad en Siria
El pueblo sirio ha sufrido lo indecible en los últimos años en sus aspiraciones de soberanía y de liberación. La pregunta ahora es ¿cómo se va a reconfigurar el reparto de poder en Siria y en la región?
Tren de alta velocidad
Explotación laboral Huelga en Iryo para los días clave de Navidad: “Solo queremos que respeten el Estatuto de los Trabajadores”
CGT convoca paros los días fuertes de estas vacaciones para, antes de comenzar a negociar un convenio propio, conseguir el abono de dietas a la plantilla de tripulación y el cobro del plus de nocturnidad.

Recomendadas

Siria
Rojava El rompecabezas sirio que estalló en Alepo
El nuevo escenario sirio se ha gestado bajo la intervención implacable de Turquía, patrocinadora del Ejercito Nacional Sirio y otros grupos yihadistas que libran la guerra de Erdogan contra el pueblo kurdo.
Cine
Ramón Lluis Bande “Asturies tiene sin construir el relato de su tiempo revolucionario”
El cineasta Ramón Lluis Bande entiende la memoria histórica como un “camino de exploración formal infinito” y de reflexión sobre el propio lenguaje cinematográfico “en relación con la realidad, la historia, el arte y la política”.
Fondos buitre
Madrid Ecosol, la cooperativa agroecológica que lucha por sobrevivir al desalojo del fondo buitre Élix Rent
Este gigante inmobiliario, que ya ha logrado hacerse con la práctica totalidad del edificio que alberga el proyecto, se niega a renovar su contrato de alquiler ya que busca rehabilitar el inmueble y alquilarlo a precios desorbitados.
Siria
Siria Cuando el miedo a la deportación es real: obligados a volver a Siria
Turquía lleva mucho tiempo deportando a los refugiados sirios. Aunque intenta justificar sus prácticas ante la comunidad mundial, estas vulneran el derecho internacional.