Represión
Javitxu, desde la cárcel de Zuera: “Lo que peor llevo es estar lejos de la gente que más quiero”

Francisco Javier Aijón, Javitxu, es uno de ‘los seis de Zaragoza’. Entró en la cárcel el pasado mayo con una condena de casi cinco años basada en las declaraciones policiales durante el juicio.
Javitxu 6 zaragoza
Javitxu cumple condena en la cárcel de Zuera, desde donde contesta a esta entrevista por escrito Arte El Salto

El 17 de enero de 2019 la vida de Francisco Javier Aijón, Javitxu, cambió para siempre. Aquel día participó en una manifestación antifascista para protestar contra un acto de Vox celebrado en el Auditorio de Zaragoza, la cual acabó con cargas policiales, el disparo de pelotas de goma y el lanzamiento de objetos por parte de una minoría.

Tras ello, tuvieron lugar varias detenciones horas después de los hechos. Junto a otras personas, Javitxu fue detenido en un bar acusado de desórdenes públicos y atentado contra la autoridad. La Audiencia Provincial de Zaragoza juzgó a seis jóvenes y en enero de 2021 los cuatro mayores de edad fueron condenados con seis años de cárcel (posteriormente el Tribunal Superior de Justicia de Aragón lo elevó a siete años), además de una multa de 11.000 euros y un año de libertad vigilada para los dos menores.

Represión
Antifascismo Una manifestación exige la libertad de los seis de Zaragoza tras cumplir dos meses en prisión
La plataforma convocante de la manifestación, habla de “presos políticos” porque el único hecho probado es la participación en una manifestación ante la extrema derecha.

La pena fue rebajada en febrero de 2024 por el Tribunal Supremo a cuatro años y nueve meses, pero significaba la entrada en prisión de los cuatro jóvenes mayores de edad de los encausados conocidos como ‘los seis de Zaragoza’.

La defensa legal de Javitxu aportó grabaciones de cámaras de seguridad para demostrar su inocencia durante el proceso judicial. Sin embargo, estas pruebas no se admitieron bajo la argumentación de que carecían de la necesaria nitidez para identificar a las personas acusadas. De este modo, la condena se basó así exclusivamente en los testimonios de los policías involucrados.

Antifascismo
Represión El Supremo condena a cuatro años y nueve meses de prisión a cuatro de los seis antifascistas de Zaragoza
El Tribunal Supremo rebaja la pena impuesta por la Audiencia de Zaragoza y el Tribunal Superior de Justicia de Aragón a cuatro de los seis jóvenes antifascistas que se manifestaron contra un acto de Vox en enero de 2019.

El 21 de mayo de 2024 Javitxu ingresó en el centro penitenciario de Zuera para cumplir la condena a pesar de la falta de pruebas. El caso originó una gran movilización social en la ciudad, lo que dio pie a la creación de la plataforma Libertad 6 de Zaragoza con el fin de difundir información, concienciar sobre lo ocurrido y reivindicar el indulto de los condenados. En esta entrevista por carta con Javitxu, que milita en Anticapitalistas desde 2022, se aborda su estancia en la cárcel, sus sentimientos y consideraciones, así como su perspectiva de futuro.

Se han cumplido nueve meses desde la entrada en prisión. ¿Cómo estás y cómo está el resto de tus compañeros?
Todo lo bien que se puede estar en una situación como la nuestra. Por mi parte lo llevo con la mayor dignidad posible y como una oportunidad para formarme intelectualmente. Ocupo mi tiempo en la lectura, en el gimnasio y tocando el bajo en el coro de la cárcel. Obviamente, no todos los días tengo la fuerza para afrontar las ausencias de mi familia, mis amistades, mis gatos y mi pareja, pero lo cierto es que nos apoyamos mucho entre nosotros y el resto de presos. En cuanto a mis compañeros, veo que no terminan de creerse del todo el hecho de haber acabado aquí dentro. La represión se hace mucho más dura cuando no cuentas con una red militante detrás que te sirva de apoyo.

Aunque he crecido viendo casos como Alsasua, Alfon y Pablo Hasél, uno no se imagina viviendo esas injusticias. Parece tan surrealista que piensas que son excepciones, que han tenido mala suerte, pero son casos que representan la normalidad de la represión

¿Pensabas que acabarías en la cárcel cuando comenzó el caso?
Lo cierto es que no. Realmente pensaba que, si no podían demostrar ningún delito, todo quedaría en un desagradable malentendido. Aunque he crecido viendo cosas como Alsasua, Alfon y Pablo Hasél, uno no se imagina viviendo esas injusticias en carne propia. Parece tan surrealista que piensas que son excepciones, que han tenido mala suerte, pero no. Por desgracia, son casos que representan la normalidad de la represión.

¿Qué es lo que se siente cuando la condena se basa en la declaración policial y no se admiten pruebas como las imágenes de las grabaciones de las cámaras de seguridad?
No solamente se trata de una declaración policial. Es importante matizar que declararon hasta seis policías y cada agente que entraba contradecía las declaraciones del anterior. Ni siquiera se trabajaron una versión coherente. El propio juez Carlos Lasala reconoció que la versión policial estaba llena de agujeros y contradicciones, pero lo justificó explicando que es imposible recordar con claridad hechos sucedidos hace dos años.

Lo que sentí fue mucha impotencia y vulnerabilidad. Es preocupante que en una democracia no se cuestione la autoridad de la policía. No existen mecanismos para denunciar los abusos de poder si se toma la versión policial como prueba de culpabilidad para cualquier delito. Llega un punto en que la presunción de inocencia desaparece. El resultado fue salir del juicio con el sentimiento de que no era más que un procedimiento de legitimación de la sentencia, que venía ya prescrita de casa.

En cuanto entré por la puerta, mi mundo se desmoronó. La despersonalización y nula empatía con la que te tratan los funcionarios se unió a la incertidumbre ante lo que sería mi mundo

¿Cómo recuerdas el primer día en la cárcel y cuáles fueron tus sentimientos?
Fue muy duro. Recuerdo cómo momentos antes de entrar recogía mis cosas y las metía en la mochila deteniéndome a llorar a cada rato. Despedirme de mi familia y compañeres también fue muy difícil. Estábamos con lágrimas en los ojos e intentando convencernos mutuamente de que todo acabaría pronto. En cuanto entré por la puerta, mi mundo se desmoronó. La despersonalización y nula empatía con la que te tratan los funcionarios se unió a la incertidumbre ante lo que sería mi mundo durante casi cinco años.

Pasó un tiempo hasta que pude recomponerme y adaptarme a mi nueva normalidad. Me presenté en el módulo y conocí al que iba a ser mi compañero de celda. Me sorprendí al descubrir que la cárcel no es un entorno tan hostil como lo pintan, ya que encontré mucho apoyo entre mis compañeros. Algunos hasta ya sabían quién era y por qué estaba encerrado.

La rutina en el presidio

¿De qué manera transcurre tu actividad diaria?
Aprovecho el tiempo con mis lecturas y en el gimnasio. Continúo con la carrera de Filosofía que dejé a medias cuando estaba fuera y también toco el bajo en el coro de la cárcel. Intento echar una mano en todo lo que puedo escribiendo instancias y algunos recursos para mis compañeros.

Una anécdota graciosa es que, como vieron que se me daba bien escribir cartas y poemas, muchos presos empezaron a pedirme que les redactase cartas de amor para el módulo de mujeres. Todo iba perfecto en mi labor de celestino hasta que ellas se dieron cuenta de que todas las cartas estaban escritas con la misma letra (risas). Por lo demás, seguir con una rutina saludable es lo que más me está ayudando a mantener una buena salud mental.

Lo que peor llevo es estar lejos de la gente que más quiero. Es muy duro tener que estar economizando el tiempo con tus seres queridos

¿Qué es lo que más echas de menos respecto a tus seres queridos?
Echo mucho de menos dormir abrazado a mi pareja, las cenas en casa de mi madre hasta las tantas, pasar una semana entera con mi padre y su pareja en Madrid riendo hasta que me duela el pecho, bajar a comer con mi yaya y que me cuente sus aventuras de jubilada fiestera, las juergas con mis colegas en las que de repente aparecía Fran con su guitarra y tocaba canciones a las que les cambiábamos la letra…

Lo que peor llevo es estar lejos de la gente que más quiero. El tiempo que me dejan estar con elles siempre está limitado. Por teléfono solamente podemos hablar ocho minutos como máximo. Adiós a las largas conversaciones en las que podíamos divagar de tema en tema. En las comunicaciones por cristal se limita el tiempo a cuarenta y cinco minutos a la semana. Los vis a vis duran únicamente dos horas. Es muy duro tener que estar economizando el tiempo con tus seres queridos.

Javitxu Carta
Carta manuscrita por Javitxu desde la cárcel de Zuera Arte El Salto

¿Tienes el temor de que la situación se alargue o la esperanza de que se resuelva pronto?
La esperanza es lo último que se pierde, pero intento no ser demasiado optimista. En prisión es muy importante ser cauteloso con las expectativas. De momento lo único que tengo claro es que me quedan cuatro años de condena. No me cierro a una buena noticia que consiga sacarnos antes de tiempo y todos nuestros esfuerzos van dirigidos en esa dirección.

No obstante, soy precavido. Como dice Byung-Chul Han, la esperanza nace de la catástrofe, pero se diferencia del optimismo en que las cosas pueden salir mal. Esa es mi actitud: esperar lo mejor sin dejar de pensar en lo peor.

El indulto, una posibilidad en el aire

En abril del pasado año se registraron 10.000 firmas ante el Ministerio del Interior solicitando vuestro indulto. Aún no ha habido respuesta sobre ello. ¿Confías en que os concedan el indulto?
Tiene que pasar. Si desde un gobierno que se dice progresista se gira la mirada ante este tipo de cosas, estamos abriendo la puerta y dando alas a los discursos de odio que circulan peligrosamente. Con la amnistía ya se perdió una buenísima oportunidad para acoger todos los casos de represión existentes que estamos viviendo las consecuencias de la criminalización de la protesta.

También duele el silencio de los mass media y de algunos partidos políticos que se suponen progresistas

¿Cuál es tu valoración de la actuación del arco de partidos y medios en relación con vuestro caso?
La actitud de Vox, en concreto de Alejandro Nolasco, de llegar a convocar una rueda de prensa en el centro penitenciario de Zuera para decir que se alegraba de nuestro encarcelamiento me parece lamentable. No me alegraría de ver encarcelado ni a mi mayor enemigo. Es una experiencia denigrante y me parece de muy mal gusto ese alarde de bravuconería.

También duele el silencio de los mass media y de algunos partidos políticos que se suponen progresistas. Ha habido compromisos, sobre todo por parte de Podemos y Sumar. Sin embargo, envidio el compromiso que tienen los partidos catalanes. Realmente, pienso que debería ser una prioridad.

Creo que hay intereses muy poderosos a favor de la ley mordaza. Por una parte, es falta de voluntad política, pero por otra hay presiones de asociaciones de policías

Tanto el PSOE como Sumar habían prometido la derogación de la denominada ley mordaza, aprobada por el PP. A pesar de ello, de momento solamente se concibe una reforma parcial. ¿Por qué consideras que se sigue sin suprimir?
Creo que hay intereses muy poderosos a favor de la ley mordaza. Por una parte, es falta de voluntad política, pero por otra hay presiones de asociaciones de policías que saben que se les dificultaría mucho la creación de nuevos montajes y la persecución de la protesta.

Me parece también importante reseñar que durante esta legislatura han salido a la luz las infiltraciones de agentes policiales en los movimientos sociales. Este ataque a las libertades cívicas revela la naturaleza del PSOE como un partido de Estado comprometido con la represión de los movimientos sociales.

Hay un auge del autoritarismo y los discursos de odio. No es baladí la coincidencia entre una mayor represión y el ascenso de partidos como Vox en toda Europa

Vuestra detención tiene lugar horas después de una manifestación antifascista contra la extrema derecha debido a las protestas contra un acto de Vox. ¿Cómo describirías lo sucedido y qué nivel alcanza la dimensión de los discursos de odio actualmente?
Hay un auge del autoritarismo y los discursos de odio. No es baladí la coincidencia entre una mayor represión y el ascenso de partidos como Vox en toda Europa. Considero especialmente preocupante la victoria de Trump, que muestra que ya no hay escrúpulos en hacer un saludo nazi en la investidura de un presidente.

Se les lleva allanando el camino demasiados años. Ya no sirve el mantra tantas veces repetido de que lo que pasó en Europa hace un siglo no puede volver a suceder. Está pasando. Cada vez tienen más influencia y necesitamos estrategias efectivas para contrarrestar este auge. Desde la cárcel he vivido todos estos eventos con mucha ansiedad. Las nuevas extremas derechas disfrutan de una gran impunidad y respaldo mediático.

Desde la web de la plataforma Libertad 6 de Zaragoza se informa de la posibilidad de escribiros. ¿Qué valor tienen para ti las cartas que recibes?
Nos ayudan a poder asomar la cabeza fuera de los muros el rato que estamos leyéndolas y respondiendo. Mucha gente quizás piensa que tan solo es un acto simbólico, pero tienen una gran capacidad reconfortante en los momentos de bajón.

“No nos habéis dejado solos". Esto era lo que se leyó en la parte final de tu carta cuando concluyó la manifestación en Zaragoza del pasado 26 de octubre de 2024 reclamando vuestra libertad. ¿Qué es lo que te da fuerza para seguir adelante?
Cuando la condena se hizo firme tras la ratificación del Supremo, algo que me preocupaba era la posibilidad de que el miedo a movilizarse se extendiera, que nuestra condena sirviera como efecto disuasorio para otras causas.

No solamente es ver la cantidad de gente que sigue saliendo a reclamar nuestro indulto; también están todas las activistas y militantes que siguen poniendo el cuerpo para frenar desahucios, combatir a los responsables del cambio climático o parar el genocidio en Gaza. Casos como el de la Casa Orsola en Barcelona son victorias de la movilización del pueblo que ayudan a mantener la esperanza y, sobre todo, a pensar que merece la pena salir a la calle pese a la represión.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Ley de Extranjería
Ley de Extranjería Regularización Ya señala que ya advirtió de todos los errores del nuevo Reglamento de extranjería
Con fallos como el silencio administrativo negativo o la irregularidad sobrevenida y que no cuente el tiempo de espera como arraigo si deniegan una solicitud de asilo, entra en vigor el nuevo Reglamento de la ley de extranjería.
Madrid
Acción directa Activistas de Futuro Vegetal imputadas por “organización criminal” lanzan pintura al juzgado antes de declarar
El colectivo se reafirma así en su derecho a protestar mediante la acción directa. “La acusación de conformar una organización criminal tiene el objetivo de justificar las infiltraciones policiales”, opina una de las imputadas.
Catalunya
Catalunya El juzgado rechaza investigar el caso de la infiltrada policial en Girona
La jueza ha tardado año y medio en rechazar la querella y lo hace en un auto de solo cuatro páginas, en donde concluye que la infiltrada no se extralimitó.
teodoro.hdez
27/2/2025 17:01

Vergüenza de tener una policía y una judicatura fascistas. Y el PSOE complice de ellos con su cobardía y pusilanimidad, haciéndole el juego a la derecha extrema (PP y VOX9 que sufrimos en este país

0
0
Baleares
Un modelo insostenible El rechazo a la turistificación se expande en Canarias, Baleares y Barcelona
Tras la masiva manifestación en las Islas Canarias del pasado mayo, Palma de Mallorca, Barcelona y San Sebastián salen este 15 de junio a la calle contra un modelo de turismo desmedido insostenible para el territorio y sus habitantes.
Ocupación israelí
Ocupación Israelí La policía egipcia impide con violencia la marcha internacional a Gaza
La marcha de 4.000 personas a Gaza es reprimida por la policía del régimen de Al-Sisi. La organización pide a las embajadas que reaccionen y protejan a sus ciudadanos.
Crónica
Justicia En la sala de un juicio a una madre protectora
Esta es una crónica de un juicio a una mujer que pidió medidas por sospechar de abusos sexuales a su hija en el domicilio paterno sin que ninguna institución moviera un dedo y, un mes después, cogió un vuelo a su país para intentar protegerla.
La vida y ya
La vida y ya Un rato de cada lunes
Pero, lo más coincidente ha sido, expresado de distintas maneras, su agradecimiento hacia ese lugar. Su lugar elegido.
Ocupación israelí
Movilizaciones Un centenar de organizaciones de 26 países denuncian a la empresa vasca CAF y su tren del apartheid
Más de 50 localidades salen a la calle este fin de semana para señalar a la empresa que construyó el tranvía que conecta Jerusalén con territorio ocupados y exigir el fin del genocidio en Gaza.
Río Arriba
Río Arriba Luis González Reyes: “Vivimos en un mundo en la que la escasez es un elemento central”
Primera entrevista del programa Río Arriba en formato podcast y vídeo donde hablamos de las nuevas guerras neocoloniales por recursos en la era de Trump y Putin, de la escasez, del decrecimiento y el colapsismo.
Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.

Últimas

Galicia
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar a Altri
Queremos investigar a los responsables políticos y empresariales del que podría ser el mayor atentado ambiental de la historia reciente de Galicia.
Editorial
Editorial Justicia irracional
Por acción o por omisión, las instituciones pueden violentar a las mujeres. Se llama violencia institucional.
Análisis
Análisis del CIS La calma antes de la tormenta: la dimisión de Santos Cerdán como punto de inflexión
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha muerto pocas horas después de nacer por la dimisión de Santos Cerdán, aunque sirve como foto fija de un escenario que favorece a la derecha.
Que no te lo cuenten
El Salto Radio De océanos y detenciones
VV.AA.
La acidificación del agua marina supera sus límites mientras Israel aborda la Flotilla por la Libertad.
Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.
Más noticias
Estados Unidos
Estados Unidos “No Kings”: más de 2.000 manifestaciones en EEUU para protestar contra la deriva autoritaria de Trump
Con el nombre de movimiento No Kings (sin reyes), millones de personas están convocadas a manifestarse en todo el país este sábado y enfrentar el desfile militar organizado por Trump el día de su 79 cumpleaños.
Galicia
TSXG Peritos en el juicio contra la Xunta: la contaminación del embalse de As Conchas es “extremadamente peligrosa”
Siete vecinos, la Asociación de vecinos de As Conchas y la organización de consumidores CECU han demandado a varias administraciones gallegas por presunta mala gestión de una contaminación derivada del exceso de macrogranjas en la comarca de A Limia.

Recomendadas

Derecho a la vivienda
Jaime Palomera “La vivienda necesita una revolución”
Investigador y uno de los fundadores del Sindicat de Llogateres, Jaime Palomera presenta ‘El secuestro de la vivienda’, un libro sobre el juego amañado en el que los propietarios son cada vez más ricos y los inquilinos cada vez más pobres.
Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Brasil
Extrema derecha Arte en tiempos de fascismo: cuando enseñar a Goya y Rubens le cuesta el puesto a un profesor
Una clase de Historia en la escuela municipal en una localidad del Estado de São Paulo desemboca en acusaciones contra el profesor y una campaña de difamaciones que encabeza el concejal de educación de la zona, de la extrema derecha bolsonarista.
Literatura
María Agúndez “El trabajo de limpiadora es muy digno, pero nadie quiere hacerlo”
La escritora retrata en ‘Casas limpias’ las contradicciones de quienes considerándose personas igualitarias y progresistas delegan los cuidados y la limpieza para evitar el conflicto y sostener su comodidad.