Precariedad laboral
Los jóvenes ni-ni necesitan el 1º de mayo

Aquellos que participan en redes de militancia y transformación pueden tomar las riendas, se sienten responsables de lo que les rodea, reciben el apoyo de sus camaradas y construyen una identidades colectivas orgullosas.
30 abr 2022 07:00

La salud mental de la población se ha colado en los últimos tiempos en la agenda política. No es para menos, la situación es preocupante y más si hablamos de los jóvenes. Estos han sufrido especialmente el paro y los efectos económicos y sociales de la pandemia. En 2020, para una investigación del Centro Reina Sofía, menos de la mitad podía afirmar no haber tenido problemas psicológicos en el último año. Eso sí, los problemas de salud mental -entendida más allá de la ausencia de enfermedades- que acosan a los jóvenes parecen ser una multitud de fenómenos y causas. Incertidumbre por el futuro económico, ansiedad por el consumo rápido de los medios virtuales, soledad por la dificultad de construir relaciones sanas de amistad y pareja en un contexto sin tiempo ni rutinas…

No obstante, existe un mecanismo central en la gestión de todas estas situaciones; el valor propio que nos damos, la autoestima, que reside principalmente en nuestras identidades. Sin minusvalorar la importancia de las condiciones materiales y digitales que afectan a nuestra mente, cuanto creemos que valemos es el factor determinante en nuestras respuestas al ambiente y en nuestra recepción emocional de los problemas. No solo tiene una función en la relación con el exterior, sino también en nuestra sensación global de bienestar. En algunos casos bienestar y amor propio pueden ser sinónimos.

Ahora bien, este valor que nos damos proviene de una autorepresentación, lo que en la psicología inglesa se llama self. Nosotros somos un hombre o una mujer, somos de una localidad a la que nos enorgullece la pertenencia, somos de una asociación o partido, nos caracterizamos –listo, guapo, reflexivo…- o hemos hecho una carrera, un prodigio o cometido una inmoralidad. Este conjunto de ideas nos dice quiénes somos y en especial cuanto valemos. Y cuanto duelen las incoherencias en este relato, o que otras personas nos perciben diferente a como lo hacemos nosotros.

Si queremos ser un rebelde como Marlon Brando en Salvaje, más vale que tengamos moto, y mejor si esta tiene una buena historia. Si optamos por aparentar ser un reputado académico hay que demostrar un vocabulario preciso y amplio. Es difícil creerse que uno mismo es algo sin el reconocimiento de los demás, esto implico desplegar una serie de objetos materiales, actuaciones, historias confirmadas y habilidades para que los demás nos lean, nos entiendan como lo que queremos ser. Salvo el Übermensch nietzschiano, un ser autodefinido, los simples mortales necesitamos la confirmación popular de nuestra identidad para sentirnos bien con nosotros mismos, incluso cuando esto no implica la opinión de los más próximos si no formatos donde se condensa la validación del mundo social en general; títulos, rituales o posesiones de estatus.

Pobre de aquel que sea etiquetado peyorativamente; racializado, feminizado, culpabilizado, criminalizado. No solo por la esperable reacción negativa del entorno y la sociedad, también asimilará esas características, aparecerá la profecía autocumplida y le será mucho más difícil construir identidades positivas. Como decía Bourdieu: “El mundo social confiere aquello que más escasea, reconocimiento, consideración, es decir, lisa y llanamente, razón de ser”. La relación directa entra la posición en la estructura social y la dificultad para construir identidades, el capital simbólico asociado y el poder que implica es también parte de la lucha de clases. Por eso uno de los objetivos de todos los movimientos sociales ha sido siempre poner en valor a los “desheredados de la tierra”. Desde el Orgullo LGTB+, con un nombre muy adecuado, hasta el movimiento por los derechos civiles norteamericano pasando por la conciencia de clase, el orgullo por la existencia es el primer paso para la acción y la transformación. Y precisamente la esperanza de este cambio, la dignidad de ser el sujeto revolucionario, se convierte en otra razón de ser, una justificación. La lucha del valor personal y simbólico y las razones para vivir es también una lucha política.

La juventud precarizada realiza una tarea en el sistema de producción español que lo sitúa dentro de un mercado laboral secundario, con escaso reconocimiento

La juventud precarizada realiza una tarea en el sistema de producción español que lo sitúa dentro de un mercado laboral secundario, con escaso reconocimiento. Los trabajos que realizan, importantes para la economía y la vida y que precisamente gracias a su explotación pueden dar beneficios, son rechazados por otras características; poco cualificados, inestables, mal remunerados y menos valorados. Además, las posibilidades de consumo atan a los jóvenes a un impasse donde no puede reclamar una posición adulta; emancipación, familia o posesión de estatus. Como resultado, la propia idea de ser joven no aparece asociada a una función laboral importante, a la que la sociedad adeuda, si no como un reclamador de derechos, un ser sobrecualificado, incapaz de entrar en el mercado laboral, dependiente de ayudas estatales y familiares.

La devaluación del valor como personas de esta generación está directamente relacionada con su posición marginal en el mercado de trabajo. Debido a esta situación subalterna valen menos socialmente. Quedan en el vacío entre la indulgencia ofrecida a la adolescencia y el respeto al adulto. Trabajadores y estudiantes que aparecen como ninis. Pobres dibujados como bohemios. La imposibilidad de desarrollar la familia y el trayecto vital como rechazo a la responsabilidad. Esto tiene un efecto directo en la autoestima. No se perciben a sí mismos como individuos legitimados, caen en la culpa, es solo en el futuro donde se pueden cifrar esperanzas, lo que genera ansiedad por su incumplimiento… En resumen, si vales poco para la sociedad, no vas a valer mucho para ti mismo. Este es el origen real del fuerte problema mental específico de la juventud que crece desde la última década, desde la crisis económica de 2007.

Necesitamos decirnos que no estamos solas, que no valemos lo que nos dice el mercado laboral, que podemos estar orgullosas de nuestra existencia

De ahí la importancia de los rituales comunitarios y del apoyo mutuo. Aquellos que participan en redes de militancia y transformación pueden tomar las riendas, se sienten responsables de lo que les rodea, reciben el apoyo de sus camaradas y construyen una identidades colectivas orgullosas. Si el problema es la valoración social, solo se puede solucionar colectivamente.

Por eso, más que nunca, las jóvenes precarizadas necesitamos el 1º de mayo. Necesitamos salir a la calle, encontrarnos, reconocernos en tanto que diversas y unidas. Necesitamos decirnos que no estamos solas, que no valemos lo que nos dice el mercado laboral, que podemos estar orgullosas de nuestra existencia y que esta tiene un sentido, una esperanza de cambio y de lucha.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Madrid
Madrid Los bomberos forestales esperan una solución tras 17 años de espera por un nuevo convenio
Denuncian salarios congelados de 1250 euros, la temporalidad y que no están protegidos ante el riesgo de agentes cancerígenos propios de los incendios.
Medios de comunicación
Precarización en Canal Extremadura Denuncian “la precarización” de Canal Extremadura en la cobertura del cónclave del Vaticano
Más de 100 trabajadores de los medios han denunciado ante la dirección del ente público la grabación del evento sin operador de cámara y con un teléfono móvil.
Sevilla
Educación Pública Las interinas e interinos de Andalucía convocan una huelga por la falta de proceso de estabilización
Más de 28.000 docentes, que componen el 20% de las plantillas educativas en Andalucía, no han estabilizado su puesto a pesar de décadas de trabajar en las aulas, el 14 de mayo inician una huelga para denunciar su situación
Baleares
Un modelo insostenible El rechazo a la turistificación se expande en Canarias, Baleares y Barcelona
Tras la masiva manifestación en las Islas Canarias del pasado mayo, Palma de Mallorca, Barcelona y San Sebastián salen este 15 de junio a la calle contra un modelo de turismo desmedido insostenible para el territorio y sus habitantes.
Oriente Medio
Oriente Medio Decenas de muertos en una noche de sirenas y misiles cruzados entre Israel e Irán
Después del ataque israelí contra la infraestructura energética y militar iraní, cientos de misiles iraníes atraviesan el cielo israelí e impactan en Tel Aviv, Bat Yam, Tamra y Haifa.
Galicia
Galicia Activistas bloquean una planta de Altri en Portugal y avisan de que frenarán su expansión en Galicia
El grupo atrancó con cadenas y soldadura las entradas de la planta de Celbi en Leirosa, en la mayor acción directa hasta el momento contra la expansión de la multinacional papelera en territorio gallego: “O povo é quem para Altri”.
Crónica
Justicia En la sala de un juicio a una madre protectora
Esta es una crónica de un juicio a una mujer que pidió medidas por sospechar de abusos sexuales a su hija en el domicilio paterno sin que ninguna institución moviera un dedo y, un mes después, cogió un vuelo a su país para intentar protegerla.
Violencia machista
El Estado que revictimiza Violencia institucional: “Si lo hubiera sabido antes, no hubiera denunciado nunca”
Rocío ha sufrido violencia psicológica, física y sexual por parte de su expareja. Y también violencia institucional en todas las puertas de la red de recursos institucionales que ha ido atravesando.
Editorial
Editorial Justicia irracional
Por acción o por omisión, las instituciones violentan a las mujeres. Se llama violencia institucional.
Relato
Relato Rendirse
A mi pesar me tocaba compartir mesa con aquellos documentos y, como estaba de los primeros (no lo habría imaginado al llegar), ya no conseguía quedar por encima, con lo que me gusta.
Madrid
Movimiento republicano Miles de personas claman en Madrid contra la monarquía y por la República
En el 11 aniversario de la proclamación de Felipe VI, una marcha unitaria reclama que este reinado sea el último de España.
Rap
Rap Los Chikos del Maíz: “La música urbana está llena de fachas y votantes de Vox”
Tras un fin de gira accidentado, Toni y Nega dan una tregua indefinida a su proyecto con dos conciertos en Madrid. Horas antes de llenar la sala en la primera cita, visitan la redacción de El Salto.
Río Arriba
Río Arriba Luis González Reyes: “Vivimos en un mundo en la que la escasez es un elemento central”
Primera entrevista del programa Río Arriba en formato podcast y vídeo donde hablamos de las nuevas guerras neocoloniales por recursos en la era de Trump y Putin, de la escasez, del decrecimiento y el colapsismo.

Últimas

Ocupación israelí
Movilizaciones Un centenar de organizaciones de 26 países denuncian a la empresa vasca CAF y su tren del apartheid
Más de 50 localidades salen a la calle este fin de semana para señalar a la empresa que construyó el tranvía que conecta Jerusalén con territorio ocupados y exigir el fin del genocidio en Gaza.
La vida y ya
La vida y ya Un rato de cada lunes
Pero, lo más coincidente ha sido, expresado de distintas maneras, su agradecimiento hacia ese lugar. Su lugar elegido.
Ocupación israelí
Ocupación Israelí La policía egipcia impide con violencia la marcha internacional a Gaza
La marcha de 4.000 personas a Gaza es reprimida por la policía del régimen de Al-Sisi. La organización pide a las embajadas que reaccionen y protejan a sus ciudadanos.
Galicia
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar a Altri
Queremos investigar a los responsables políticos y empresariales del que podría ser el mayor atentado ambiental de la historia reciente de Galicia.
Que no te lo cuenten
El Salto Radio De océanos y detenciones
VV.AA.
La acidificación del agua marina supera sus límites mientras Israel aborda la Flotilla por la Libertad.
Más noticias
Análisis
Análisis del CIS La calma antes de la tormenta: la dimisión de Santos Cerdán como punto de inflexión
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha muerto pocas horas después de nacer por la dimisión de Santos Cerdán, aunque sirve como foto fija de un escenario que favorece a la derecha.
Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.

Recomendadas

Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.
Derecho a la vivienda
Jaime Palomera “La vivienda necesita una revolución”
Investigador y uno de los fundadores del Sindicat de Llogateres, Jaime Palomera presenta ‘El secuestro de la vivienda’, un libro sobre el juego amañado en el que los propietarios son cada vez más ricos y los inquilinos cada vez más pobres.
Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Brasil
Extrema derecha Arte en tiempos de fascismo: cuando enseñar a Goya y Rubens le cuesta el puesto a un profesor
Una clase de Historia en la escuela municipal en una localidad del Estado de São Paulo desemboca en acusaciones contra el profesor y una campaña de difamaciones que encabeza el concejal de educación de la zona, de la extrema derecha bolsonarista.