20 nov 2022
13:40
En la candente arena, los veloces atacantes,
los hábiles mediocampistas y rudos defensas,
se juntan con ministros, representantes
y periodistas ciegos al dolor de la gente.
Todos ricos que usan su rapidez para esconder
millones de verdes esperanzas tornadas rojas
en el ardiente y árido Oriente con sus estadios,
carreteras, hoteles y aeropuertos de un emir
que importa obreros y devuelve ataúdes.
Desde millones de pantallas, las cabezas,
como el alma y un valioso Tiempo de vidas,
serán lavadas y vueltas a llenar de pelotas,
jugadas repetidas una y otra vez, para olvidar
aquellos hombres y mujeres muertos de calor,
asesinados por la megalomanía y los billones
de dólares tirados para levantar estadios,
vaya ironía, con aire acondicionado…
(La hambruna aumenta y alguien hace dieta)
Otros seres miserables envían hombres
a matar o morir y juegan con otra esfera,
ya intoxicada de gas de Oriente, Oeste, Norte
y Sur, para envenenar el agua y el aliento
del “Goool…” Mientras en el exclusivo palco
trepadores ejecutivos beben cerveza, champaña
o el ron prohibido a la plebe, como vedado está
a las mujeres guiar un coche, su vida o destino
sustraído también a quien ama a su semejante.
Sin embargo, no todo es feo, oscuro y corrupto,
como la FIFA dando lecciones de moral, y ya
a nadie se le ocurre ayudar a los pueblos del sur,
que no contaminaron pero se inundan o se secan.
Y al próximo mundial irán 48 y no 32 países...
¡Viva el fútbol que juegan los amigos!
¡LOS DOMINGOS EN EL PARQUE!
Ramón Haniotis.
Cargando valoraciones...
Comentar
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos.
Regístrate.
Entra en tu cuenta.
Relacionadas
Cargando relacionadas...
Cargando portadilla...
Comentarios
Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.
Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!
Cargando comentarios...