Iglesia-Estado
Recuperando lo nuestro, que es de todos y de todas

La coordinadora Recuperando convoca concentraciones en Cáceres, Badajoz y otras 14 capitales de provincia con el fin de reclamar la recuperación del patrimonio inmatriculado por la Iglesia católica.
Santiago el Mayor Cáceres
Parroquia de Santiago el Mayor (Cáceres), inmatriculada por la Iglesia.

Si el séptimo dice “No robarás”, el décimo insiste: “No codiciarás los bienes ajenos”.

Ambos mandamientos, dictados allá por la Edad del Bronce, alimentan el pasto del olvido de una Iglesia católica que no tiene reparos a la hora de ejercitar tanto el robo como la codicia, y es por ello que hoy, jueves 2 de marzo, 16 capitales de provincia presenciarán concentraciones de la Coordinadora Recuperando, con el fin de reclamar la recuperación del patrimonio inmatriculado por la Iglesia católica. En Badajoz será al mediodía, a las 12 horas, frente a la catedral, y en Cáceres a la misma hora, frente a la concatedral. Ambas concentraciones han sido organizadas por Extremadura laica, que llama al conjunto de la ciudadanía a acudir a las mismas para reclamar que la Iglesia devuelva el patrimonio público incautado.

Opinión
Iglesia Inmatriculaciones: al pueblo lo que es del pueblo
Un informe remitido por el Gobierno vasco en 2016 fijaba en 530 (442 más que un nuevo documento) las fincas captadas por la Iglesia Católica desde 1978 hasta 2015.

Resulta además no solo sorprendente, sino también sintomático, que la práctica totalidad de los medios de comunicación que se han hecho eco de lo apropiado por la Iglesia Católica en España a través del IRPF en su ejercicio fiscal del 2021 hablen de “recaudación” o “ingresos”, cuando las palabras que deberían usar son las de “sustracción” y “detracción”, en el más puro ejercicio de evasión fiscal consentido, aplaudido y organizado por el Estado español.

Hace apenas un par de días la Conferencia Episcopal daba 8,5 millones de gracias a los y las contribuyentes que marcaron en 2022 la “X” a favor de la Iglesia en su declaración de la renta, congratulándose por los más de 320 millones de euros recaudados, con un total del 31,29% de las declaraciones presentadas con dicha X y una media de 37,73 euros por cada contribuyente, un dinero que, debiendo ir a las arcas generales del Estado, acaban en el bolsillo del señor obispo y su ralea.

Hoy, jueves 2 de marzo, 16 capitales de provincia presenciarán concentraciones de la Coordinadora Recuperando, con el fin de reclamar la recuperación del patrimonio inmatriculado por la Iglesia católica

Ello significa que, por designio estatal, hay un 31,29% de declarantes que evaden sus impuestos (si lo prefieren, usen la palabra “desvían”) hacia una organización (que no organismo) que predica unas determinadas creencias religiosas que tienen mucho que ver con la privacidad de la persona y nada con las necesidades colectivas que debe amparar un estado de derecho. Hablando bien y pronto, mientras usted y yo, que no marcamos la X de la Iglesia, pagamos con nuestros impuestos las escuelas y hospitales públicos, quien marca la X no contribuye a tales fines, dándole ese mismo dinero directamente a la Iglesia para que se lo gaste en lo que más convenga, como puede ser, por ejemplo, el silencio o reparación económica de las víctimas de curas pederastas. Y para más inri, el Estado y gobierno de turno actúa como recaudador a través del IRPF, en una muestra más de vasallaje, pleitesía y sumisión ante la Santa Madre Iglesia, cuyo gusto por el dinero y los privilegios en cuanto a exenciones fiscales, inmatriculaciones y derecho de pernada sobre lo público es insaciable.

La devoción particular del contribuyente que marca la X casa, estadísticamente, con otros alarmantes signos de oscurantismo amparados por las instituciones. En el caso de Extremadura, no resulta paradójico observar que, mientras encabeza como tercera en la lista (43,4% de declarantes) la contribución al diezmo eclesiástico, también encabeza, pero por atrás, el índice de lectores. Según el Barómetro de hábitos de lectura y compra de libros en España 2022, publicado hace unos días por la Federación de Gremios de Editores de España, Extremadura es la comunidad autónoma donde menos se lee, con solo un 55,1% de lectores. Ignorancia y oscurantismo se dan la mano.

Mientras usted y yo, que no marcamos la X de la Iglesia, pagamos con nuestros impuestos las escuelas y hospitales públicos, quien marca la X no contribuye a tales fines

La Fundación Ferrer i Guàrdia, en su informe 2022 sobre laicidad, señala a la Comunidad Autónoma de Extremadura como la cuarta con mayor índice de religiosidad, un 81,8%, solo por delante de Murcia, Melilla y Ceuta. El mismo informe destaca que Extremadura es la penúltima en cuanto a número de estudiantes que cursan alternativa a la religión en primaria y la última en secundaria, con un 14,9% y un 22,3% respectivamente del alumnado. En primaria solo nos gana Ceuta, de tradición musulmana.

Visto el panorama, no es de extrañar el alto índice de abandono escolar que sigue sufriendo Extremadura, por mucho que las instituciones autonómicas, con el cacareo de los medios que viven de ellas, quieran vender la moto de que el mismo ha decrecido en los últimos 20 años.

Extremadura ha sido siempre predio dominante de la Iglesia católica. Sean del signo que sean, los gobiernos locales y autonómicos rinden pleitesía a curatos y obispos, hoy igual que ayer, privilegiando sus actuaciones y financiando sus negocios. Cofradías, parroquias, colegios de curas y demás catálogo de la clerigalla guarda excelente relación con las instituciones, que de aconfesionales tienen poco. Los peregrinajes y rogativas de nuestro Presidente de la Junta al Monasterio de Guadalupe así lo certifican, siempre alabado en su misión por medios de comunicación que han olvidado que su función es la de proteger la libertad de conciencia y denunciar los abusos, como lo es el hecho de que se permita que una organización privada se quede con dinero de los impuestos para su uso y disfrute particular. Visto lo visto, tenemos misa para rato.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Opinión
Opinión Por los derechos de la infancia, no a los sacramentos católicos (ni a lo equivalente en otras religiones)
De los siete sacramentos, nada menos que cuatro están encaminados, o se utilizan normalmente durante los primeros años de la vida de las personas, para la captación y catequización de nuevos miembros de la Iglesia.
Iglesia católica
Laicismo y ciudadanía La virgenmanía en Cáceres y los monaguillos de la pública
La ciudad de Cáceres vive su segunda bajada del año de la Virgen de la Montaña por el Centenario de su Coronación, con 38 días de visitas a espacios religiosos, colegios, residencias de mayores e incluso el centro penitenciario.
Oriente Próximo
Oriente próximo La diáspora kurda ante la caída de Bashar al-Assad
Siria enfrenta el fin de un régimen que durante décadas pareció inquebrantable. Desde la diáspora, la esperanza contenida de quien ha vivido demasiadas traiciones y promesas incumplidas.
Amazonía
Caso Chevron Pablo Fajardo: “Sacrificaron la Amazonía y la vida de la gente por racismo y por la ganancia económica”
El activista y abogado Pablo Fajardo fue elegido hace casi 20 años por la Unión de Afectados por Texaco para el juicio más importante contra la petrolera Chevron. Dos décadas después sigue luchando por la justicia ambiental y social en Ecuador.
Ley de Seguridad Ciudadana
Congreso de los diputados Reforma de la Ley Mordaza: ¿esta vez sí se puede?
Una de las mayores deudas de toda la izquierda del Estado español parece que está a punto de saldarse.
La vida y ya
La vida y ya Ya no sé quién vive en el primero
El barrio se ha transformado tanto que pueden pasar semanas sin ver por la calle una sola cara conocida porque los vecinos han sido sustituidos por turistas.
Análisis
Análisis El independentismo se reorganiza, pero ¿sigue siendo independentista?
Los partidos independentistas han sufrido la crisis del procés y el posprocés, y todavía no la han resuelto, sino, a lo sumo, la han aplazado. El PSC aparece como el ganador de una carrera con corredores agotados.
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Análisis
Análisis Rojava en peligro
Las intenciones de Turquía en Siria ponen en peligro no solo la Administración Democrática Autónoma del Norte y Este de Siria (AADNES) sino también la convivencia del resto de minorías presentes en el país.
Literatura
Gustavo Faverón Patriau “Quizá la novela sea ahora mismo más relevante que nunca”
El escritor peruano Gustavo Faverón Patriau quería narrar en su nueva novela la historia de un boxeador que no sabía boxear pero tumbaba a sus rivales recitándoles al oído versos de César Vallejo. ‘Minimosca’ acabó siendo un cuentacuentos inagotable.
Galicia
Memoria histórica Así fue como el Patronato de Protección a la Mujer transformó Galicia en un convento de clausura
Las mujeres que cayeron en las redes del Patronato iniciaron un periplo de encierro, humillaciones, abusos y explotación que es desconocido para la mayor parte de la población. Queda hoy en la impunidad de un silencio que tenemos el deber de romper.

Últimas

Opinión
Tribuna Todas las razones para decir ‘Altri non’
Aquí van unos cuantos motivos para juntarnos este domingo en Compostela y dejar clara nuestra postura frente a un expolio que nos están tratando de imponer disfrazado de progreso, pero que sólo trae beneficio económico a unos cuantos indeseables.
Relato
Relato Descubrirse las manos
Descubres tus manos: el palmar y el dorso, la posibilidad futura de la pinza atrapacosas, dos miembros que te vinculan al chimpancé y al lémur. Aprendes su mecanismo.
Música
Música Un coro para homenajear las luchas obreras: “La canción protesta del pasado es historia viva”
El coro de canción protesta de Madrid nació para rescatar del pasado las tonadas de la lucha obrera y ponerlas al servicio de distintos activismos en el presente.

Recomendadas

Palestina
Eyad Yousef “No cuentes lo que queremos ser, cuenta lo que nunca hemos dejado de ser: un pueblo que quiere la paz"
Eyad Yousef es profesor en la Universidad de Birzeit, Cisjordania, y comparte su experiencia en una universidad que “representa el pluralismo y la libertad que tanto anhela la sociedad palestina”
Pensamiento
Sarah Jaffe “En realidad tenemos que hacer menos. E impedir que algunas cosas sucedan”
La escritora y periodista Sarah Jaffe aborda el desengaño cotidiano al que nos aboca el mundo laboral e investiga cómo, a pesar de todo, las personas se organizan colectivamente en sus empleos para que “trabajar apeste menos”.
Ocupación israelí
Palestina Vivir en alerta: la resistencia palestina frente la ocupación israelí
La cruda realidad de las feministas palestinas que, ante la represión y las detenciones arbitrarias, continúan su lucha por la libertad, la justicia y los derechos humanos.
Madrid
Ciudades Fake Madrid, un paseo por los hitos del simulacro
Un recorrido por los grandes éxitos de la conversión de Madrid en una ciudad irreal.