Guerra en Ucrania
“Lidero un grupo en Rusia que apoya a personas que se niegan a ir al Ejército, podría ir a la cárcel”

Vilen Demin coordina desde 2016 un grupo que da apoyo a personas que deciden hacer objeción de conciencia al servicio militar en Rusia, un activismo que le ha llevado a pedir asilo en España.
14 ene 2023 06:25

Vilen Demin llegó a Madrid hace siete meses huyendo de las posibles represalias que el Gobierno ruso puede tomar contra él por su activismo. Coordina un grupo que da asesoramiento para hacer objeción de conciencia y evitar cumplir el servicio militar en Rusia. Hablamos con él en una terraza en el barrio de Lavapiés. Una conversación a varios idiomas en la que Dmitry Volovikov, también refugiado ruso en Madrid, hace de traductor.

¿Cuando llegaste a España?

En junio, hace ahora siete meses.

¿Por qué te fuiste de Rusia?

Administro un grupo de objetores de conciencia en Rusia y tenía miedo de que tomaran represalias porque en la pasada primavera el Parlamento aprobó una ley por la que te pueden meter en la cárcel si expresas una opinión en contra de la guerra o en contra de la llamada “operación especial”. Creo que liderar un grupo de gente que da apoyo a personas que se niegan a ir al ejército podría llevarme a la cárcel.

Y, ¿por qué España?
Primero, porque está muy lejos de Rusia, y segundo, porque hay menos agentes del KGB que en Georgia o Armenia, por ejemplo. Y también porque España es el país más amistoso con la comunidad LGTBI.

¿Es popular en Rusia el movimiento de objetores de conciencia? ¿Actualmente es obligatorio hacer la mili en Rusia?
El problema es que la gente no está segura de lo que dicen las leyes. Y este es el trabajo que hacemos. Si haces las cosas bien, consultas a un abogado y sigues el proceso de forma correcta, puedes negarte a alistarte en el Ejército sin sufrir consecuencias. Pero la mayoría de gente tiene miedo de negarse. Y el mayor problema es que, cuando la gente se da cuenta de que no quiere ir a la guerra, ya está en la guerra. 

Respecto a cuánta gente se niega a ir a la guerra, hay una comunidad en Telegram que, cuando comenzaron los alistamientos, a finales de septiembre, contaba con mil suscriptores y ahora, medio año después, tiene 55.000. Este grupo va en contra del servicio militar y también contra la guerra en Ucrania. Hay otros movimientos en Rusia, como por ejemplo, Vesna [Primavera], que es un movimiento prodemocracia muy conocido allí. También han aumentado mucho en seguidores en redes sociales, y otros colectivos de este tipo también.
La gente [en Rusia] está demandando información sobre los movimientos en contra de la guerra, y también que la gente se está dando cuenta de que no hay motivos para ir a la guerra

Lo que vemos es que la gente está demandando información sobre los movimientos en contra de la guerra, y también que la gente se está dando cuenta de que no hay motivos para ir a la guerra. Y ese es el motivo por el que se está haciendo tan popular el movimiento antiguerra, porque el único motivo para ir a la guerra es ganar dinero, porque es verdad que pagan mucho dinero si te alistas. Así que la gente va a la guerra primero por dinero y, segundo, porque tienen miedo de las leyes que se aprobaron hace unos meses. Pero estas leyes son muy tramposas, y justo a lo que me dedico es a traducirlas. Las leyes que se aprobaron en Rusia hace unos meses van en contra de la Constitución rusa, que garantiza que toda persona pueda negarse a hacer el servicio militar haciendo servicios alternativos, como cuidar ancianos, trabajar en la construcción o cualquier trabajo voluntario, y la gente no sabe sobre esto, solo tienen en la cabeza estas leyes tramposas y tienen miedo, así que prefieren alistarse en el Ejército antes que ir a la cárcel. Pero es una falsa disyuntiva, no hay por qué elegir entre Ejército y cárcel. Y en Rusia la gente tiene mucho  miedo de ir a la cárcel porque hay una larga historia de encarcelamientos en masa, ya sabes, sobre los gulags y todo eso. A la gente le da miedo simplemente la idea de tener que ir a prisión hasta el punto de que prefieren morir. Es un miedo genético. Por eso yo y mis compañeros trabajamos en explicar las leyes, cómo funcionan y sobre el derecho a no ir a la guerra.

En el marco de esta ley, un activista ha sido encarcelado por ocho años por decir consignas como que la guerra es mala o que no estamos salvando a los rusos de Ucrania ni estamos luchando contra el fascismo

En los primeros meses de la guerra había manifestaciones en Rusia casi cada día en contra, con centenares de personas detenidas. ¿Se ha mantenido este nivel de rechazo a la guerra en las calles?
Sigue habiendo movilizaciones en contra de la guerra, pero no en el formato de manifestaciones. Se dan muchas acciones del tipo “manifestación de una persona”, en las que sale una persona a la calle sola, con un cartel, y es detenida. La nueva ley que castiga difundir información falsa sobre el Ejército ha influenciado. En el marco de esta ley, un activista ha sido encarcelado por ocho años por decir consignas como que la guerra es mala o que no estamos salvando a los rusos de Ucrania ni estamos luchando contra el fascismo. A la gente le da miedo ir a manifestaciones o protestar porque también las multas ahora son de sumas increíbles. En Krasnodar pagas 500 euros al mes de alquiler, si te multan por llevar un cartel contra la guerra, la multa es de 700 u 800 euros como mínimo. A una chica le pusieron una multa por llevar un cartel en el que había una línea de tres estrellas y, debajo, otra de cinco. Esto significa “net voyne”, “no a la guerra”. En el cartel no había ninguna palabra, solo las estrellas, y recibió una multa de 600 euros o así, es un mes de salario.

Antes comentabas que una de las razones por las que decidiste venir a España es que es un sitio más amigable con las personas homosexuales. ¿Has tenido problemas en Rusia a raíz de tu homosexualidad?
Sí. En la escuela, por ejemplo, fui víctima de bullying, había algún chico que me amenazaba con pegarme y con decir a todo el mundo que yo era gay. Me vi forzado a ocultar que era gay. Cuando fui a la universidad, la historia se repitió. Y en cuanto al Gobierno ruso, cuando tuve que ir a reconocimiento médico, cuando me quisieron alistar al servicio militar, me intentaron mandar a psicología porque era gay, me negué y fui a los juzgados, y se inventaron enfermedades que ni existen para intentar obligarme a ir al psicólogo. Seguí negándome hasta que me dejaron en paz.

Vilen objetor ruso - 3
¿Cómo fue salir de Rusia? ¿Fue muy difícil?

La primera parte fue bastante difícil. Mi novio y yo decidimos abandonar Rusia cuando empezó la guerra. Lo primero que necesitábamos conseguir era un pasaporte para mi novio, y después conseguir los visados. Y para eso, para poder ir al sitio donde pedir los visados, teníamos que estar vacunados conforme a la normativa europea. El problema era que las vacunas en Rusia no están aprobadas por parte de Europa, y al revés. Así que para conseguir la vacuna tuvimos que hacer lo que se llama “turismo de vacunas”, ir a Armenia, por ejemplo, donde te ponen la vacuna gratis. Krasnodar está cerca de la frontera con Ucrania y es zona de exclusión aérea, así que no podíamos volar directamente. Fuimos en tren a Sochi, otra ciudad del sur de Rusia, y de ahí cogimos un vuelo directo a Armenia. Fue mucho dinero para nosotros. Cuando conseguimos la vacuna, volvimos a casa para recopilar todos los documentos, que nos costó mucho tiempo averiguar cuáles eran porque en ese momento el Consulado español estaba prácticamente sin funcionamiento. Cuando al final nos aprobaron la visa, fuimos a Moscú, al Consulado. A la semana nos dieron las visas y viajamos de Moscú a España.

Un proceso complicado y supongo que caro.

Entre los dos, todo este proceso, el viaje a Armenia, la vuelta, ir a Moscú para ya viajar a España, nos costó unos 3.000 euros.

Mucha gente quiere irse y el primer problema es el dinero. Pero el segundo problema es que irte y dejar todo atrás, sin saber hablar el idioma del país de destino, sin trabajo, sin saber qué te vas a encontrar... Es una decisión difícil y que da miedo

No es poco. ¿Crees que hay mucha gente que quiere abandonar Rusia pero no puede permitirse cantidades como esa?
Sí, mucha gente quiere irse y el primer problema es el dinero. Pero el segundo problema es que irte y dejar todo atrás, sin saber hablar el idioma del país de destino, sin trabajo, sin saber qué te vas a encontrar... Es una decisión difícil y que da miedo. El salario medio en Krasnodar es de 400 o 500 euros, es muy difícil conseguir el dinero para irte.

¿Qué edad tienes?

25 años.

Eres muy joven para haber tenido que tomar una decisión como esa. ¿Cómo era tu vida en Krasnodar? ¿Estabas estudiando? ¿trabajabas?

Vivía con mi novio, pagábamos un alquiler normal, de entorno a 500 euros. Los dos trabajábamos como dependientes en una tienda de electrónica. Mis padres viven en otra ciudad.

Rusia es una trampa ahora si eres hombre, pero no tanto como si eres activista o gay, y yo soy ambas cosas

¿Y tus amigos? ¿siguen viviendo allí o también han abandonado Rusia?
La mayoría sigue allí, ellos viven una situación diferente. Primero, porque no son activistas. Rusia es una trampa ahora si eres hombre, pero no tanto como si eres activista o gay, y yo soy ambas cosas. Ellos ya se han acostumbrado a vivir así, y tienen allí a su familia, así que no quieren irse.

¿Cómo fue tu llegada a España? ¿Habéis recibido apoyo? 

Hemos recibido apoyo desde antes incluso de llegar a España. Conocí a una periodista española, Irene, y a través de ella conocí la organización Mujeres de Negro [la rama española]. Ellas me ayudaron a conseguir la invitación para poder venir a España, una de las cosas que me pedían a la hora de solicitar un visado. Nos conocimos en persona en el aeropuerto, vinieron a recogernos a mi novio y a mi. Fueron nuestras superheroínas. Sobre todo nos ayudaron con papeleos: conseguir el padrón, abrirnos una cuenta bancaria, nos tradujeron cosas para CEAR y Cruz Roja, con la Administración.

Entiendo que has pedido el estatuto de refugiado, ¿cómo va el proceso?

El mayor problema cuando pides el estatuto de refugiado es conseguir cita en la Policía. Lo intentamos a través de la web durante varios meses y después acudimos la abogada de CEAR, que mandó nuestra solicitud de cita a la Policía. Seis meses después de llegar, en noviembre, conseguimos tener esa cita en la Policía para pedir el estatuto de refugiado.

Mientras supongo que estarás sin permiso de trabajo, ¿cómo os las apañais para vivir?

En mayo tendré mi permiso de trabajo. Mientras, sigo sin poder trabajar, y vivir así es bastante difícil. Seguimos adelante con la ayuda de amigos, de Mujeres de Negro. Es muy frustrante cuando no puedes afrontar el pago del alquiler de una casa, pero tenemos suerte de tener gente que nos apoya.

¿Piensas volver a Rusia en un futuro?

Me gustaría, supongo que como a la mayoría de la gente que ha venido de Rusia por la guerra, pero no voy a volver mientras viva Putin o mientras no cambie el gobierno ruso a algo mejor. Volveré cuando no me sienta amenazado. Hasta entonces mi plan es conseguir el permiso de trabajo, encontrar trabajo... ya sabes, poner en orden mi vida, alquilar un piso y tener una vida normal.

Cada vez hay más gente que ha llegado a España, y en concreto a Madrid, huyendo de la guerra de Putin. ¿Tenéis canales de comunicación entre vosotros? ¿os ayudáis?

Claro, intentamos estar en contacto. Por ejemplo, hemos creado una organización llamada Rusos viviendo en Madrid contra la guerra. Somos algo más de un centenar de personas ahora mismo y dentro de unas semanas convocaremos una manifestación por la libertad de los presos políticos en Rusia. Por ahora no somos una comunidad muy grande, pero de vez en cuando nos encontramos con otros refugiados rusos e intentamos mantener el contacto, o a veces no, porque cada vez somos más rusos aquí.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Análisis
Guerras Cómo se terminó con el sueño europeo de una solución cooperativa a los conflictos
Los países europeos teníamos mucho que aportar sobre cómo podemos solucionar conflictos de intereses integrando la heterogeneidad, pero todo se torció en 2008.
Opinión
Elecciones rusas ¿Camarada Putin?
El triunfo de Vladimir Putin en las elecciones rusas estaba tan cantado que hasta el cuestionado CIS español, que no suele dar en el clavo muy a menudo con sus predicciones, lo podría haber acertado.
Unión Europea
Escalada belicista Alemania acusa a Rusia de “guerra de desinformación” tras un audio sobre el posible envío de misiles a Ucrania
Crisis política en Alemania tras la publicación de un audio en el que oficiales de las Fuerzas Armadas discuten sobre un posible ataque con misiles “made in Germany” a un objetivo estratégico en la guerra de Ucrania.
Laboral
Laboral CC OO, UGT y USO rechazan firmar el convenio de Decathlon al no incluir la cláusula de garantía salarial
Decathlon ha firmado el acuerdo con el sindicato mayoritario, SGICD, auspiciado por la propia empresa. El convenio para 2024-26 incluye un incremento salarial del 15%, que recupera la pérdida del 12% de los dos anteriores.
Italia
Italia El gobierno Meloni allana el camino a los antiabortistas
La Cámara de Diputados italiana ha aprobado por amplia mayoría una ley que permite a las organizaciones anti-elección entrar a los centros de asesoramiento público donde acuden mujeres que están pensando en interrumpir su embarazo.
Especulación urbanística
Turistificación Canarias dice basta: activistas organizan una movilización histórica en las islas frente a la turistificación
Precarización, pobreza, desigualdad y dificultad de acceso a la vivienda, así como la enorme contaminación de los espacios naturales causada por el modelo turístico, son algunas de las problemáticas por las que Canarias sale a la calle el próximo 20 de abril.
Ley de Memoria Histórica
Memoria democrática La ofensiva legislativa de PP y Vox contra la verdad, justicia y reparación
Las asociaciones memorialistas del estado hacen frente común en la Unión Europea y no descartan acudir a los tribunales para defender los derechos de las víctimas del franquismo.

Últimas

País Vasco
Los audios del PNV Las presiones de Unai Rementeria a un alcalde: “Le tienes que exigir que se pringue"
Hordago destapa nuevos audios sobre una operación del PNV para torcer el brazo de un funcionario de la administración local y un técnico de la Diputación Foral de Bizkaia y revestir de legalidad contrataciones públicas.
El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
EH Bildu
Elecciones vascas EH Bildu se abre a un pacto abertzale en campaña electoral que no convence al PNV
Los ofrecimientos de la izquierda abertzale han sido constantes estas dos semanas y, frente a ello, los jeltzales han mantenido una postura beligerante. En la práctica, ambos partidos se han entendido en distintas materias.
Personas sin hogar
Personas sin hogar “Una noche por todas sus noches” en protesta por las personas sin hogar en Granada
El cierre de un centro de acogida nocturno en el centro de la ciudad, que acogía a más de 50 personas, ha agravado la ya precaria situación de acogida de las personas sin hogar
Formación El Salto
Formación El Salto Las Otras Economías: hay vida más allá del capitalismo
Entre el 14 de mayo y el 4 de junio, nuestra sección de economía El Salmón Contracorriente desarrolla un curso para aprender y practicar economías alternativas a la dominante.
Más noticias
Cine
Cine RTLM, la radio del odio que alentó el genocidio en Ruanda
Cuando se cumple el 30º aniversario de la tragedia en Ruanda, llega a las pantallas ‘Hate Songs’, que se estrena el viernes 19 de abril, una metaficción que transcurre en los estudios de la emisora controlada por los hutus.
Ciencia
Ciencia Ideología en la ciencia, y en su divulgación
La formación de una ciudadanía crítica también involucra aprender a identificar y cuestionar los componentes ideológicos enraizados en la práctica científica, y en la comunicación de la ciencia hacia los públicos no expertos.
País Vasco
Los audios del PNV El modus operandi del PNV en Mundaka: “Invita a tres personas, el resultado va a ser uno”
Hordago revela grabaciones exclusivas en las que el presidente de la Junta Municipal de la localidad de Busturialdea pide al entonces alcalde, Mikel Bilbao, que favorezca la contratación como asesor externo de un barón del partido.
Galicia
Altri Vecinos, ecologistas y científicos saltan a Bruselas para frenar la celulosa que amenaza el corazón de Galicia
Las plataformas de vecinas afectadas y ambientalistas han podido reunirse con altos funcionarios de la Comisión Europea especializados en normativa medioambiental aupados por la eurodiputada del BNG Ana Miranda para seguir defendiéndose de Altri.

Recomendadas

Ocupación israelí
Palestina El Salto te ofrece una camiseta para apoyar económicamente a la UNRWA
No cesamos de buscar nuevas vías para visibilizar un mayoritario clamor social que pide un alto el fuego al que apenas se da cabida en el discurso mediático convencional. Todos los beneficios de esta campaña irán destinados a la UNRWA.
País Vasco
País Vasco “En Osakidetza nos la van a dejar morir, vámonos a la privada”
Las listas de espera que reconoce el Departamento de Salud en respuesta parlamentaria no se corresponde con las citas que ofrece. Tampoco hay coincidencia con el dato público del número de médicos que compatibiliza la sanidad pública con la privada.
Cárceles
Carabanchel Tele Prisión, memoria audiovisual de una cárcel
Además de varias películas que se han acercado a la cárcel de Carabanchel, Tele Prisión fue un canal de televisión interno en el que participaron numerosos reclusos y algunos educadores de esa prisión madrileña. Emitió de 1985 a 1987.
Historia
Historia Rubén Buren: “La memoria debe ser aquello que nos construye y nos une como ciudadanía”
El historiador y polifacético Rubén Buren coordina el libro 'La Segunda República', una oportunidad para dar a conocer este periodo a un público no especializado.