Galicia
O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar a Altri
.jpg?v=63916074757 2000w)
Los ecosistemas gallegos viven una amenaza sin precedentes en las última décadas. La macrocelulosa que la multinacional portuguesa Altri y la gallega Greenalia quieren instalar en el centro geográfico del país —con la complicidad de la Xunta— necesita de una confrontación por todas las vías posibles. Necesitamos gente en las calles demostrando la gran oposición social que tiene esta industrial: ya la tenemos. Necesitamos gente en las universidades demostrando científicamente los escenarios dramáticos a los que podríamos llegar si esta papelera consigue salir adelante: ya la tenemos. Necesitamos todas las fuerzas de la sociedad civil y, por supuesto, necesitamos medios de comunicación radicalmente independientes y críticos: esto, por desgracia, escasea y por eso lanzamos un crowdfunding.
En estos últimos meses, vimos más que nunca las costuras de los grandes medios públicos y privados de este país. Los vimos comprando el argumentario del Gobierno del Partido Popular financiados, eso sí, con ingentes cantidades de dinero público. Los vimos silenciando a las voces más críticas del pueblo gallego y también las de las vecinas y vecinos más afectados por esta bomba ambiental cuyos efectos recorrerán el río Ulla desde Palas de Rei hasta la ría de Arousa. Los vimos aceptando sin escrúpulos las campañas de publicidad encubierta a cambio de miles de euros para tratar de engañar a la opinión pública. Los vimos representando los intereses de las multinacionales y de los grandes partidos políticos a cualquier precio, aunque eso signifique esconder, tapar u ocultar la inmensa ola de oposición social que hoy corre por toda Galiza.
Desde O Salto hicimos algo a lo que ningún otro medio de comunicación se atrevió: investigamos, analizamos y señalamos las redes políticas y empresariales que están detrás de este proyecto. Les pusimos caras, nombres y patrimonio. Analizamos sus vínculos con la oligarquía gallega y colocamos el foco en las personas exactas que tienen el poder de decisión en este proceso y, por supuesto, en todas sus cómplices. También le dimos prioridad a las voces de las personas afectadas, comunidad y trabajadores/as que se oponen a vender su tierra y el futuro de su vida para la riqueza de unos pocos. E hicimos un reportaje documental, “Altri, a sede insostible” que movimos por Galiza y parte del Estado español, en el que son las personas expertas y vecinas las que explican los efectos devastadores que tendría Altri desde el punto de vista ambiental y social.
Pero queremos llegar más lejos y, por eso, te necesitamos para dar un nuevo salto.
¿Qué queremos hacer?
- Queremos seguir investigando los entramados empresariales de Altri y Greenalia.
- Queremos perseguir hasta el último euro de dinero público repartido por el gobierno del Partido Popular en la Xunta.
- Queremos fiscalizar el pasado de todos los representantes públicos y los responsables privados de esta barbarie ecológica.
- Queremos registrar todas y cada una de las movilizaciones contra la celulosa que ocurran en las calles del país.
- Queremos difundir todos los informes, artículos científicos y estudios que analicen con rigor los efectos de la construcción de esta fábrica.
- Queremos dar voz a las vecinas y vecinos de A Ulloa.
- Queremos escuchar las demandas de las mariscadoras y de los marineros de la ría de Arousa.
- Queremos reivindicar el trabajo de todos los colectivos ecologistas que trabajan sin descanso y a diario para frenar esta barbarie.
- Queremos acoger a las voces críticas de la sociedad civil que tengan algo que decir.
Nuestra diferencia es nuestra virtud: el financiamiento de la cooperativa que edita O Salto es en un 75% dependiente de las más de 10.000 personas socias que nos sostienen, puedes verlo en nuestras cuentas. No aceptamos publicidad que viole nuestro código ético, una exigencia única en el contexto mediático el Estado español.
En El Salto, nunca verás publicidad de:
- Empresas con conflictos activos con sus trabajadores/as.
- Bancos o otras empresas que realicen desalojos.
- Organizaciones cuya sede esté situada en paraísos fiscales.
- Entidades que utilizando la ingeniería fiscal para evitar el pago de impuestos.
- Todas las empresas que integran el IBEX 35, o por lo menos, hasta que entre una empresa que consideremos ética. Empresas cuya sede esté situada en Israel.
- Empresas que no tienen un comportamiento ético con sus trabajadores/as.
- Empresas que que se aprovechan de la explotación de personas presas.
- Todo tipo de organizaciones cuya ética esté en cuestión o cuya actividad principal no consideremos ética, por ejemplo, casas de juego o negocios altamente contaminantes.
Estos límites éticos, los mayores de cualquier medio a nivel europeo —te invitamos a ver las cuentas de los periódicos que más leas en Galiza o fuera—, nos hacen crecer poco a poco, pero de manera sólida. Y, sobre todo, nos hacen crecer hasta donde nuestras socias y socios y nuestras lectoras y lectores quieren que crezcamos.
¿A quién va dirigida esta propuesta?
Nos dirigimos a ti, que estás harta/o de ver como los medios tradicionales y de derechas ocultan las voces que te representan.
A ti, que acudiste a la histórica manifestación contra Altri en Palas de Rei o a la que desbordó el Obradoiro con una ola de dignidad o a la que resistió la lluvia de Pobra do Caramiñal.
Nos dirigimos a ti, que sabes bien lo que supuso para los ecosistemas gallegos la implantación de la celulosa de ENCE en la ría de Pontevedra o todas las explotaciones mineras del país desde Penouta hasta San Fins.
A ti, que en los últimos años viste la radicalización de la derecha mediática gallega con portadas y reportajes infames pagados, además, con tus impuestos.
Nos dirigimos a ti, que participas en las asambleas de tu organización, sea cuál sea, con el fin último de pelear por un mundo mejor, con ríos limpios y con industrias sostenibles.
A ti, que escribes, hablas y debates con todas las personas que te cruzas y que todavía se creen la propaganda de la Xunta y de Altri.
Nos dirigimos a ti, que aún crees en la necesidad de medios de comunicación críticos que trabajen por y para el cambio social y no para enriquecerse. Que sean horizontales, sin jefes ni grandes empresas detrás que los manipulen.
La experiencia del equipo de El Salto acumula más de 20 años, desde la creación de Diagonal trabajando con la mirada puesta en los movimientos sociales, que son a quién nos debemos, y cerca de 10 años desde la fundación de este proyecto. Nos acreditan nuestras investigaciones, leídas y referenciadas en la inmensa mayoría de los periódicos; nuestra influencia en la opinión pública y en las organizaciones sociales con nuestro trabajo periodístico; y nuestro respeto y escucha mutuos por la pluralidad de los movimientos de base.
La cooperativa que edita O Salto en todo o Estado español está conformada por cerca de 60 personas, con más de 200 colaboradoras y colaboradores implicados, más una asamblea independiente de diez personas que trabaja a diario en la elaboración de contenidos gallegos propios.
Relacionadas
Economía social y solidaria
Cuando el arte se organiza: economía social y solidaria frente a la precariedad de la cultura
Psicoactivos
Psiquedélicos, patentes y trumpismos: el campo antagonista que inaugura el renacimiento psiquedélico
Región de Murcia
Torre Pacheco, explotación humana y ambiental para que Europa pueda comer lechuga los 12 meses del año
Extrema derecha
Nuria Alabao: “Frente a la lógica reaccionaria que explota el odio, una política cara a cara y apoyo mutuo”
Río Arriba
Núria Soto (Riders X Derechos): “Ver salir del juzgado con ojeras al CEO de Glovo es una victoria”
El Salto n.79
Galicia dice 'no' al capitalismo verde y en el último número de la Revista El Salto te lo contamos
Siria
Drusos: tierra, honor y armas
Siria
Wael Tarbieh
“Israel hace que tu vida sea un infierno para que huyas por tu cuenta”
Francia
Calais, lugares de vida en la frontera
Últimas
Comunidad El Salto
El Salto estrena nueva página: una web como una casa
Galicia
Todo lo que podría ser el género y cómo deshacerlo desde el escenario
Asturias
Las Seis de la Suiza consiguen el tercer grado penitenciario a la espera del indulto prometido por el Gobierno
Portugal
La derecha y la extrema derecha portuguesas acuerdan una ley antimigrantes sin precedentes
Análisis
¿Estamos dejando las maternidades en manos de la extrema derecha?
Opinión
Nunca es tarde: sobre justicia transicional y régimen colonial español en el Franquismo
Euskal Herria
La transferencia a Euskadi de los subsidios de desempleo se atasca
Incendios
El vecindario de la Cañada responsabiliza del incendio a Ayuso y denuncia la actuación de Emergencias
Grecia
Grecia muestra su peor cara ante el aumento de llegadas de personas migrantes a Creta
Recomendadas
Laboral
Legislación laboral en condiciones de calor extremo: existe pero ¿se aplica?
Pensamiento
Nuria Romo
“Los procesos de medicalización no son neutros, se hacen sobre todo hacia las mujeres”
Comunismo
Jodi Dean
“Sin organización, los movimientos surgen y desaparecen como setas”
Arte contemporáneo
Palabras contra el poder: la vigencia radical de Barbara Kruger
Para comentar en este artículo tienes que estar registrado. Si ya tienes una cuenta, inicia sesión. Si todavía no la tienes, puedes crear una aquí en dos minutos sin coste ni números de cuenta.
Si eres socio/a puedes comentar sin moderación previa y valorar comentarios. El resto de comentarios son moderados y aprobados por la Redacción de El Salto. Para comentar sin moderación, ¡suscríbete!