Filosofía
¿Somos seres performativos?

¿Somos individuos cuyo ser se reduce a la representación de un papel concreto dentro de una sociedad marcada por las relaciones de poder?

Judith Butler
Judith Butler, una de las autoras que ha escrito sobre el concepto de performatividad (Javier Ignacio Acuña Ditzel) Wikimedia Commons
19 oct 2018 10:00

Que acción y pensamiento no sean lo mismo implica que existe una instancia de diferenciación entre ambos. Hannah Arendt se planteó las dificultades de ese límite, de esa diferenciación, a lo largo de gran parte de su obra.

En Verdad y Política (1967) estableció algunas consideraciones en referencia a esta cuestión. Arendt desarrolla tanto aquí como en su obra Eichmann en Jerusalem (1963) su idea sobre el carácter performativo de la política. En opinión de Arendt, lo performativo de la política es precisamente aquello que la hace más negativa, ya que se aleja completamente de la verdad, entendida ésta como testimonio necesario para el ser humano. El término mentira, sin embargo, lo reserva a aquellas acciones en que se pervierte la verdad de forma consciente y deliberada.

Erving Goffman, pionero de la microsociología y de la interacción humana cara-a-cara, publicó La Representación de la Persona en la Vida Cotidiana en 1959, un libro que ha sido tremendamente influyente y que ha tenido un tremendo impacto en diversos campos de las ciencias sociales. Es, aún hoy en día, uno de los títulos indispensables dentro de la criminología, por citar un solo ejemplo.

La idea central de esta obra es que las personas se comportan como actores en sus relaciones sociales (son muy habituales las metáforas relacionadas con el teatro en sus textos); actores que se esfuerzan permanentemente, a lo largo de toda su vida social, para transmitir una imagen convincente de sí mismos frente a los diversos auditorios a los que se enfrentan (la familia, los amigos, la escuela, la oficina, etc.). No importa lo que uno sea realmente, sino lo que se logra aparentar. Saber moverse hábilmente entre los decorados, tener un buen vestuario y poder diferenciarse son cuestiones indispensables y fundamentales para lograr el éxito social. Por otra parte, el que no sabe actuar constituye una amenaza para el resto del elenco y es apartado de inmediato.

En su opinión podemos actuar, y sólo actuar. Lo que no podemos ser es simplemente hombres y mujeres, ya que estamos constreñidos a actuar la tragedia o comedia de nuestra vida a tiempo completo:

“En su condición de actuantes, los individuos se preocupan por mantener la impresión de que cumplen muchas reglas que se les puede aplicar para juzgarlos, pero a un individuo, como actuante, no le preocupa el problema Moral de cumplir esas reglas sino el problema Amoral de fabricar una impresión convincente de que las está cumpliendo. Nuestra actividad se basa en gran medida en la moral pero, en realidad, como actuantes, no tenemos interés moral en ella. Como actuantes somos mercaderes de la Moralidad.”

Si asumimos la existencia de relaciones de poder, cualquier postulado esencialista en este sentido parece fuera de lugar.

Las conclusiones de Goffman guardan un gran paralelismo con autores más conocidos como Michel Foucault. Si bien el pensador francés analiza las estructuras sociales diseñadas para Vigilar y Castigar (cárcel, hospital, cuartel, fábrica, colegio, etc.), en el caso de Erving Goffman lo que se analizan son los mecanismos de que dispone el ser humano para evitar el castigo y con los que se adapta a estos distintos decorados sociales. De hecho, Goffman publica en 1961 la obra Internados, dedicada al análisis de lo que él denomina Instituciones Totales en las que estudia diversas instituciones que comparten una serie de características totalitarias. Es un clarísimo antecedente de Vigilar y Castigar (1975) de Michel Foucault.

La crítica más habitual recibida por Goffman es la presentación de un universo social amoral, en el que cada cual trata de manipular a los demás. Sin embargo, autores como Giddens consideran que Goffman no sólo describe un mundo de relaciones sociales muy moralizado, sino que, además, tiende fuertemente a generalizar su naturaleza moral. Piensa que la confianza y el tacto son rasgos más fundamentales de la interacción social que la cínica manipulación de las apariencias.

Para comprender mejor las tesis de Goffman es importante resaltar que la figura del actor que se propone como metáfora no es la de un simple performer, es decir, la del “actuante” en el sentido teatral del término. Actor en el ámbito de las ciencias sociales debe ser entendido de forma más aséptica o neutra, ya que debemos considerarlos, simplemente, como los sujetos de cualquier acción social dada.

La diferencia, por tanto, esa distancia entre acción y pensamiento, en cualquier caso, es un efecto de poder tanto como lo es la identidad.

Sin embargo, la afirmación de que somos seres performativos ha levantado una gran polvareda, si bien ha sido muy útil para analizar otras cuestiones como el género o el concepto de precariedad asociada a la performatividad desarrollado por Judith Butler, que nos indica esto en su texto de 2009, Performatividad, precariedad y políticas sexuales:

“La performatividad es un proceso que implica la configuración de nuestra actuación en maneras que no siempre comprendemos del todo, y actuando en formas políticamente consecuentes. La performatividad tiene completamente que ver con ‘quién’ puede ser producido como un sujeto reconocible, un sujeto que está viviendo, cuya vida vale la pena proteger y cuya vida, cuando se pierde, vale la pena añorar. La vida precaria caracteriza a aquellas vidas que no están cualificadas como reconocibles, legibles o dignas de despertar sentimiento. Y de esta forma la precariedad es la rúbrica que aúna a las mujeres, los queers , los transexuales, los pobres y las personas sin estado.”

Obras como Comunidades Imaginadas (1990) de Benedict Anderson o La Invención de las Tradiciones (1989) de Hobsbawm y Ranger, ponen en duda cualquier postulación de las ideas de identidad en su sentido esencialista. En cualquier caso, defensores y detractores de la perfomatividad del ser humano no cuestionan, sin embargo, la existencia de dicho fenómeno.

La diferencia, por tanto, esa distancia entre acción y pensamiento, en cualquier caso, es un efecto de poder tanto como lo es la identidad. Y tanto Arendt como Goffman como Foucault o como Butler, se plantean en realidad el concepto de identidad y performatividad del ser humano bajo el examen de las relaciones de poder. En mi opinión, dicha relación entre poder e identidad rebela la respuesta en el mismo enunciado de la pregunta. ¿Somos seres performativos? Lo que queda claro es que, si asumimos la existencia de relaciones de poder, cualquier postulado esencialista en este sentido parece fuera de lugar.

Esto no implica, sin embargo, que todos y todas vivamos en un universo de seres amorales. Ninguno de los autores anteriormente citados manifiesta esto en sus textos pese a la dureza de sus análisis en algunos momentos. Sin embargo, es importante que asumamos las características y condiciones del filtro por el que transcurren -diría que casi obligadamente- nuestras relaciones sociales.

Archivado en: Filosofía
Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Opinión
Opinión Oasis en directo y la melancolía
El anuncio de la vuelta de Oasis tiende a ser interpretado como la resurrección de un pasado heroico de la industria musical, menos algorítmico, más puro, donde los músicos tocaban de verdad y los conciertos eran de verdad.
Opinión
Opinión Razones para leer a Fredric Jameson
Gracias a las herramientas teóricas que desplegó Fredric Jameson es posible interpretar con acierto lo que sucede en las sociedades del capitalismo tardío.
Filosofía
Transmodernidad El último Dussel y el futuro de la Historia
El articulo que publicamos constituye el prólogo a la obra Al otro lado de la modernidad. Ensayos de filosofía de la Historia (Bellaterra, 2024)
#83292
22/2/2021 17:13

La verdad es que me recuerda mucho a aquella discusión de La Vida de Brian, tan aborreciblemente patriarcal, en la que cierto ser humano performa a Loretta porque desea ser madre, y le dicen que eso es absurdo ya que no puede gestar al no tener dónde. El gag avanza acordando que lucharán por su derecho a querer parir, será un símbolo. Alguien acota que es un símbolo de su lucha contra la realidad.

Bien, me parece correcto decir que toda conducta humana es "performativa", pero el sexo biológico existe de forma objetiva, no solo en los humanos, lo cual no tiene nada que ver con tener sexo o con quién o con qué se tiene sexo. La realidad es cruda y si te ha tocado un deportivo o un todoterreno en la ruleta genética podrás hacer ciertas cosas y otras no.

La realidad por desgracia no es muy performativa, y hay cierta objetividad práctica: declararse un bebé a los 65 años no tiene ninguna problemática mientras que no pretendas entrar en una guardería.

0
0
Sin mascaras
22/10/2018 8:02

El pensamiento de butler es el resultado de la rendicion academica dentro de la descomposicion intelectual general del mundo.
Se trata de rendirse y aceptar la mentira y la organizacion de las apariencias de la sociedad mercantil-espectacular, sin ni siquiera intentar entender el desarrollo historico y los mecanismos de esta espantosa y dañina alienacion.
A partir de esta trampa deshonesta empiezan los analisis de "las relaciones de poder" avaladas por dios foucault.
Este artículo se puese resumir así: "el hecho que todo sea un teatro es un poco chungo, pero si acepatamos que existe la verdad se desmoronan nuestras ideologías, nuestros popes pierden autoridad y noa tendremos que reconocer que no hemoa dejado de hacer el gilipollas.
Efectivamente, se trata de mierda posmoderna
"No se puede combatir la alienacion bajo formas alienadas"

2
4
#83289
22/2/2021 16:56

No lo he entendido muy bien pero has usado las palabras, tienes mi voto favorable.

0
0
#24832
22/10/2018 11:06

No soy una gran entendida en la materia, pero me hace gracia el tono de tú crítica, bastante performativa...
;)

1
2
#24849
22/10/2018 13:32

El tono de esta critica conjuga lo que pienso y lo que siento sobre el posmodernismo, sin "performatividad" alguna.

1
0
#24746
20/10/2018 12:25

https://marxismocritico.com/2018/03/05/reproduccion-social-del-trabajo-y-clase-obrera-global/
https://www.boltxe.eus/tithi-bhattacharya-sobre-la-relacion-entre-genero-y-clase/
https://www.traficantes.net/sites/default/files/pdfs/TDS_map49_federici_web_0.pdf

0
0
#24687
19/10/2018 11:14

Mierda posmoderna, se llama alienacion y desconexion con el medio. Este texto me parece mucho mas explicativo y mucho menos retorcido:
http://www.revistalacomuna.com/cultura/naturaleza-en-el-materialismo-historicol/

2
5
#24696
19/10/2018 13:04

Bueno el texto que propones (siempre han de estar a mano las tesis marxistas) pero me temo que temáticamente se parece a éste como un huevo a una castaña.

2
0
Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Ley de Seguridad Ciudadana
Congreso de los diputados Reforma de la Ley Mordaza: ¿esta vez sí se puede?
Una de las mayores deudas de toda la izquierda del Estado español parece que está a punto de saldarse.
Análisis
Análisis El independentismo se reorganiza, pero ¿sigue siendo independentista?
Los partidos independentistas han sufrido la crisis del procés y el posprocés, y todavía no la han resuelto, sino, a lo sumo, la han aplazado. El PSC aparece como el ganador de una carrera con corredores agotados.
Literatura
Gustavo Faverón Patriau “Quizá la novela sea ahora mismo más relevante que nunca”
El escritor peruano Gustavo Faverón Patriau quería narrar en su nueva novela la historia de un boxeador que no sabía boxear pero tumbaba a sus rivales recitándoles al oído versos de César Vallejo. ‘Minimosca’ acabó siendo un cuentacuentos inagotable.
Galicia
Memoria histórica Así fue como el Patronato de Protección a la Mujer transformó Galicia en un convento de clausura
Las mujeres que cayeron en las redes del Patronato iniciaron un periplo de encierro, humillaciones, abusos y explotación que es desconocido para la mayor parte de la población. Queda hoy en la impunidad de un silencio que tenemos el deber de romper.
Derecho a la vivienda
Vivienda El Sindicato de Vivienda de Euskal Herria propone la “expropiación de pisos turísticos”
Ponen en el punto de mira los intereses del sector inmobiliario y tachan de “falsas” a todas las medidas propuestas por los partidos políticos como la Ley de Vivienda.
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Opinión
Tribuna Todas las razones para decir ‘Altri non’
Aquí van unos cuantos motivos para juntarnos este domingo en Compostela y dejar clara nuestra postura frente a un expolio que nos están tratando de imponer disfrazado de progreso, pero que sólo trae beneficio económico a unos cuantos indeseables.
Palestina
Eyad Yousef “No cuentes lo que queremos ser, cuenta lo que nunca hemos dejado de ser: un pueblo que quiere la paz"
Eyad Yousef es profesor en la Universidad de Birzeit, Cisjordania, y comparte su experiencia en una universidad que “representa el pluralismo y la libertad que tanto anhela la sociedad palestina”
Relato
Relato Descubrirse las manos
Descubres tus manos: el palmar y el dorso, la posibilidad futura de la pinza atrapacosas, dos miembros que te vinculan al chimpancé y al lémur. Aprendes su mecanismo.

Últimas

Más noticias
Opinión
Opinión Sobrevivir pagando en el Álvaro Cunqueiro
Una de las victorias ideológicas del PP de Feijóo en Galicia ha sido hacernos creer que pagar por servicios esenciales en los hospitales durante el cuidado de nuestros enfermos es lo natural, que no hay otra manera de abordarlo, pero es mentira.
Siria
Oriente Próximo Israel impone hechos consumados sobre Siria para condicionar la transición según sus intereses
“Está escrito que el futuro de Jerusalén es expandirse hasta Damasco”, dijo este octubre el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, uno de los exponentes ultras del Ejecutivo.
Ocupación israelí
Ocupación israelí Un tercio de los asesinatos de periodistas en 2024 fueron obra del ejército de Israel
Reporteros Sin Fronteras documenta la muerte de 18 periodistas en Palestina y Líbano este año “asesinados deliberadamente por hacer su trabajo” y habla de una “masacre sin precedentes” de profesionales del periodismo.

Recomendadas

Pensamiento
Sarah Jaffe “En realidad tenemos que hacer menos. E impedir que algunas cosas sucedan”
La escritora y periodista Sarah Jaffe aborda el desengaño cotidiano al que nos aboca el mundo laboral e investiga cómo, a pesar de todo, las personas se organizan colectivamente en sus empleos para que “trabajar apeste menos”.
Ocupación israelí
Palestina Vivir en alerta: la resistencia palestina frente la ocupación israelí
La cruda realidad de las feministas palestinas que, ante la represión y las detenciones arbitrarias, continúan su lucha por la libertad, la justicia y los derechos humanos.
Madrid
Ciudades Fake Madrid, un paseo por los hitos del simulacro
Un recorrido por los grandes éxitos de la conversión de Madrid en una ciudad irreal.