Filosofía
Karl Marx, cazador de fantasmas

Los actuales planteamientos filosóficos realizados desde una perspectiva sociosimbólica son herederos de una filosofía idealista reaccionaria que, en su forma lacaniana, se ha limitado a cambiar el concepto de “espíritu” por el de “fantasma”.

Reverso del billete de un dólar
Reverso del billete de un dólar Wikimedia Commons
Profesor de Filosofía, Universidad de Zaragoza
2 nov 2018 10:00

En las últimas décadas se ha producido un incremento sin parangón de trabajos académicos realizados desde una perspectiva “sociosimbólica”. Cada año una cantidad ingente de libros, artículos, y comunicaciones de una calidad metodológicamente más que cuestionable son continuamente vertidos al mercado editorial y los medios de comunicación de masas con la excusa de que las investigaciones por ellos realizadas no requieren ningún tipo de análisis cuantitativo porque su aproximación al problema es “sociosimbólico”. De este modo, podemos ver tesis doctorales explicando la situación de los subalternos en las sociedades postcoloniales basándose exclusivamente en la literatura decimonónica occidental sobre “Oriente” o fundamentando la opresión de la mujer en las sociedades neoliberales a partir del análisis exclusivo de series televisivas como Girls pero sin consultar siquiera las estadísticas laborales de género disponibles online en el Instituto Nacional de Estadística.

Por su parte, los grandes gurús de “lo sociosimbólico” insisten en que la Revolución es ante todo “sociosimbólica”, es decir, realizable exclusivamente a nivel socio–lingüístico–libidinal (Žižek), que el Estado es definible como el monopolio del capital simbólico (Bourdieu) y ya no como el monopolio de la violencia material (Marx–Weber), o que toda estrategia política debe olvidarse de la lucha por el control efectivo de los medios de producción para centrarse exclusivamente en la apropiación de “significantes vacíos” con los que construir cadenas de asociaciones significantes que unifiquen la ideología, una vez más, “sociosimbólica” (Laclau).

EL FANTASMA Y LO SOCIOSIMBÓLICO

Uno de los puntos clave de las teorías sociosimbólicas es el concepto psicoanalítico de “fantasma” en tanto que categoría mental generada por los individuos en su proceso de interacción social mediante la circulación de significantes, esto es, de palabras y signos cuyo significado no está determinado a priori y frente a los cuales el individuo que los genera siempre toma una posición determinada. Mientras que el término “social” se refiere al acto de interacción entre individuos, lo “simbólico” se refiere al acto de dar un significado a una determinada cosa material. Las filosofías sociosimbólicas priman hasta el extremo la importancia del significado que una cosa adquiere por el simple acto de nombrarlo. Simbolizar algo es, básicamente, “transustanciarlo” en lenguaje. Incluso cuando dichas filosofías hablan de praxis sociosimbólicas y no de conceptos teóricos, dichas praxis únicamente pueden ser consideradas simbólicas en el caso de que funcionen como una relación lingüística en el que cada acto es asociado a un determinado significado.

Al igual que las teorías económicas burguesas criticadas por Marx, las nuevas filosofías sociosimbólicas conciben la circulación como un ámbito autónomo, independiente y no determinado por el modo de producción material.

Claramente influenciado por Kant y Hegel, el gran gurú de lo sociosimbólico al que todos se remiten –Jacques Lacan– afirma que todo lo que no es lenguaje es noúmeno, esto es, algo radicalmente imposible de ser conocido. Algo irracional e incognoscible, denominado por todos los psicoanalistas y filósofos lacanianos como “lo Real” y que se diferencia de “la realidad” en tanto que el mundo de los significados sociosimbólicos. Se establece así una identificación de la realidad con el significado de los signos y símbolos lingüísticos paralela a la que criticó Marx como propia de la filosofía idealista hegeliana. A este respecto, comentaba Marx cómo para filósofos como Stirner, “los pensamientos objetivados, corporeizados –los fantasmas– han dominado y dominan el mundo […] Para san Sancho [Max Stirner] el nombre es la cosa misma”.

Derivado directamente de esta primacía del lenguaje sobre las relaciones sociales de producción material, las filosofías sociosimbólicas repiten la toma de postura mantenida por las teorías económicas burguesas criticadas por Marx, y conciben la circulación –el proceso de interacción sociosimbólica– como un ámbito autónomo, independiente y no determinado por el modo de producción de las cosas materiales, llegando a afirmar que tanto el valor económico como los valores culturales surgen única y exclusivamente del proceso de circulación social de signos lingüísticos entre los cuales el dinero sería únicamente uno más.

DINERO Y VALOR DE CAMBIO

Según Marx, la teoría económica burguesa siempre ha concebido que el dinero en tanto que forma social del valor de cambio surge simplemente del proceso de circulación de mercancías al modo de “una fantasmagoría pura”, esto es, como creencia social (fantasma) en que el valor de cambio depende únicamente de las relaciones sociosimbólicas. Es decir, de la creencia de los demás en que un trozo de papel o unos números en una cuenta bancaria poseen realmente un valor de cambio susceptible de ser convertido –a través de la compra– en el disfrute del valor de uso de la mercancía adquirida.

El punto crucial aquí es que para Marx el valor de cambio del dinero no surge de una creencia social o una circulación sociosimbólica. El valor de cambio es distinto del dinero, y surge por la producción de un valor de uso. Para explicarlo, Marx comenta un caso histórico extremo. Ilusionados por el descubrimiento de unas minas de oro, cuenta Marx que “en el año 760 los pobres, en grandes cantidades, se dedicaron a lavar oro en las arenas fluviales al sur de Praga y tan grande fue la consiguiente corrida a los ‘yacimientos’ que el año próximo el hambre asoló el país”, de modo que todo el dinero perdió instantáneamente su valor de cambio. Lo importante aquí no es que el dinero perdiera su valor de cambio porque la gente dejara de creer que lo tenía, sino que dejó de creer que lo tenía porque efectivamente, en la práctica material, no era capaz de hacer nada porque no había nada disponible –ningún valor de uso– por el que poder cambiarlo. Tanto el valor de uso como el valor de cambio del dinero dependen de la producción de mercancías en las que poder realizarse. Ningún valor surge de la simple circulación de símbolos por sí sola. De ahí únicamente surgen fantasmas. Es necesario un proceso de producción material que produzca algún tipo de valor.

El valor de cambio del dinero no surge de una creencia social o una circulación sociosimbólica. El valor de cambio es distinto del dinero como fantasma, y surge por la producción de un valor de uso.

Por otra parte, el hecho de que toda producción sea social de un modo u otro tampoco quiere decir que el proceso de valorización sea exclusivamente simbólico. Se simboliza algo socialmente como valor porque se ha producido algo con valor que poder simbolizar. Las filosofías sociosimbólicas olvidan que no todo lo social es simbólico, pues no toda acción, proceso o producto es simbolizable como lenguaje ni consistente en un proceso de comunicación de significados. Aunque todo puede ser nombrado, ello no quiere decir que el nombre sea lo mismo que una cosa, una fuerza o una determinada relación social. Asimismo, el ser humano está mucho más determinado por cosas, fuerzas y relaciones –con o sin nombre– que por los significados que atribuye a aquellas que logra simbolizar.

Del mismo modo que lo único que se produce en el proceso de circulación económica es el fantasma por excelencia –el dinero– lo único que produce el proceso de interacción sociosimbólica por sí mismo son fantasmas. A este respecto Marx es meridianamente claro: “Si se considera la forma misma de la circulación, lo que en ella deviene, surge, se produce, es el dinero mismo, y nada más […]. La circulación no genera el valor de cambio, ni tampoco su magnitud”. A este respecto, las filosofías sociosimbólicas contemporáneas mantienen el mismo problema de fondo que las sociedades mercantiles y capitalistas liberales: presentan el valor de cambio medido en dinero –el valor social medido en creencias– “como supuesto al que la circulación pone [pues] es menester que la circulación misma se presente como un momento de la producción de los valores de cambio”. Ello es así porque si se cree que el valor de cambio de las cosas surge por el simple intercambio de mercancías, entonces el beneficio parece provenir de dicha relación de intercambio, ocultándose por tanto que en realidad proviene de la apropiación de la plusvalía extraída del trabajador durante el proceso de producción.

La filosofía sociosimbólica contemporánea es un “idealismo social”, y al igual que todos los idealistas criticados por Marx, cree “en inspiraciones, en revelaciones, en redentores y en taumaturgos, y solo depende del grado de su cultura el que esta fe sea una fe tosca, religiosa, o revista una forma culta, filosófica”.

Archivado en: Marxismo Filosofía
Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Música
Música Aprendiendo filosofía con el punk patatero de La Polla Records
Los cáusticos esputos lanzados por Evaristo en las canciones de La Polla Records contenían materia adecuada para hablar de filosofía política en el instituto. Así lo entiende el profesor Tomás García Azkonobieta, autor de ‘La filosofía es La Polla’.
Antiespecismo
Formación para docentes La Ética Animal llega a las aulas
Formación y recursos prácticos sobre ética animal para docentes y educadoras, promoviendo el respeto hacia los animales.
Filosofía
Alicia Puleo “El ecofeminismo nos recuerda la ayuda mutua de la naturaleza, que la vida buena es solidaridad”
La filósofa Alicia H. Puleo cuenta su historial personal con la filosofía y aborda, desde claves ecofeministas, temas como la sensibilidad de los animales no humanos, la desmesura neoliberal o la crítica de la Ilustración.
#25531
5/11/2018 17:26

Zizek (o como se escriba), ese filósofo pop, que huye hacia delante después de ver cada serie televisiva, en la que basará su próximo libro, donde creará otra serie de conceptos-fantasma, para enterrar cualquier relación con la realidad que nos toca: el próximo colapso que aspiran a gestionar los aulladores de la Reacción Fascista Internacional.

0
0
#25443
3/11/2018 13:19

Muy interesante.

5
0
Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Palestina
Flotilla de la Libertad Los cargos públicos integrantes de la Flotilla a Gaza regresan a España
Mientras la flota que llevará ayuda a Gaza permanece en Estambul por los impedimentos de Israel para que zarpe, las políticas españolas deciden retornar a España, ante el anuncio de Pedro Sánchez.
Cine
Estíbaliz Urresola “El cine no debe quedar impasible ante las atrocidades que suceden”
La directora de ‘20.000 especies de abejas’ sigue recibiendo reconocimientos por su película, pero pide que se transformen en aplicación de mejoras concretas para el colectivo trans.
Galicia
Redes clientelares Todas las veces que la Xunta de Feijóo contrató a sus familiares y a los de otros altos cargos
Mientras Sánchez reflexiona sobre su dimisión tras el ‘lawfare’ contra su mujer, el líder del PP ha prometido que no consentiría a su pareja contratar con un Gobierno del que él formase parte, pero sí lo permitió con su hermana, su prima y su cuñado.
Sanidad pública
Sanidad a la madrileña Vecinas y vecinos de Madrid acampan frente al Hospital Doce de Octubre de Madrid
El colectivo prevé permanecer frente al gran hospital madrileño para mostrar su rechazo al deterioro de la sanidad pública y programa actividades para los próximos tres días.
Ley de Memoria Histórica
Niños y niñas de la polio Víctimas de la polio y postpolio, desesperadas ante la nula respuesta de las administraciones a sus demandas
Claman por un apoyo inmediato o “van a acabar extinguiéndonos después de años de sufrimiento y abandono”, afirman desde la Plataforma niños y niñas de la polio que este viernes se concentran frente a Sanidad.

Últimas

Justicia
Juana Rivas El Tribunal Supremo italiano anula el juicio civil que separó a los hijos de Juana Rivas y obliga a repetirlo
La corte de Casación ha respondido al recurso de apelación de la madre reconociendo la violación del principio básico de no separar a los hermanos y la carencia de un informe que analice en profundidad el interés superior de los menores.
El Salto n.74
Revista 74 Cuando los algoritmos te explotan: no te pierdas el número de primavera de la revista de El Salto
De cómo los algoritmos y la IA gestionan el trabajo de cientos de millones de personas con ritmos y condiciones del siglo XIX, y de mucho más, hablamos en nuestro número de primavera. Ya disponible para socias y en los puntos de venta habituales.
Eventos
Evento Un Salto al periodismo del futuro: súmate a nuestro primer evento para estudiantes y jóvenes profesionales
El viernes 10 de mayo, El Salto organiza una jornada de periodismo joven para profundizar en temas clave, nuevos lenguajes y formatos, desde un enfoque eminentemente práctico.
Palestina
Genocidio en Gaza La Flotilla de la Libertad acusa a Israel de parar su salida con una nueva maniobra de presión
Los esfuerzos de Israel para impedir la partida del barco Adkeniz con destino a Gaza ponen otra traba que puede ser definitiva para el destino de una misión que pretende romper el bloqueo marítimo sobre Gaza.
Migración
Migración València suprime el Consejo municipal donde se abordaban las problemáticas migrantes
La supresión de este órgano consultivo pone en riesgo las iniciativas realizadas para facilitar la relación de la administración con el 22% de la población local.
Más noticias
Madres protectoras
Madres protectoras Escúchalas
Si un niño o niña le cuenta a su madre que su padre le toca, lo más probable es que al cabo de unos años ella acabe perdiendo a su hijo. Mira a tu alrededor, porque es posible que alguna de tus conocidas esté a punto de vivir algo como esto.
Crisis climática
Crisis climática ¿Cómo sería una transición ecosocial en la industria española?
El sector industrial es el segundo consumidor de energía, solo por detrás del de transporte. La transición ecosocial debe pasar obligatoriamente por la transformación de este sector de la economía.
Lawfare
Justicia a la derecha Pedro Sánchez no está solo: estos son los precedentes a su caso de ‘lawfare’
El presidente del Gobierno aseguraba en su carta que el suyo era un caso de lawfare “sin precedentes”. Lo cierto es que esta estrategia de judicializar la vida política se ha enraizado durante los últimos años.
Opinión
Opinión Cuando la mierda nos come
El panorama mediático se ha convertido en una amalgama de espacios a cada cual más insano. Basura fabricada por gabinetes ultras, aceptada por jueces afines y amplificada por pseudomedios de propaganda regados con dinero público. Hay que pararlo.
Medios de comunicación
Opinión ¿Y qué esperabas, Pedro?
Los gobiernos de derechas llevan años alimentando con dinero público a sus medios afines que esparcen bulos y manipulan sin que el Gobierno haya hecho nada para evitarlo.

Recomendadas

Derechos reproductivos
Luciana Peker y Cristina Fallarás “El aborto se ha apartado del relato feminista porque genera consenso”
Las periodistas Cristina Fallarás y Luciana Peker forman parte del grupo motor de una campaña europea que quiere blindar el derecho al aborto mediante una iniciativa ciudadana que necesita un millón de firmas para llegar a ser debatida.
Música
Música Aprendiendo filosofía con el punk patatero de La Polla Records
Los cáusticos esputos lanzados por Evaristo en las canciones de La Polla Records contenían materia adecuada para hablar de filosofía política en el instituto. Así lo entiende el profesor Tomás García Azkonobieta, autor de ‘La filosofía es La Polla’.