Feminismos
Feminismo desde la Afro-españolidad

Empoderamiento femenino comunitario desde una perspectiva afrocentrada. Así es como denomino mi ideología, que pretende ir en busca de la raíz, alejándose de las perspectivas más eurocéntricas.

Feminismo afro-español
Un momento del Black Barcelona Encuentro 2016 Deborah Ekoka
Gestora cultural. Cofundadora librería United Minds
25 mar 2020 11:00

Soy humana, soy mujer, soy hija, soy nieta, soy madre.

Soy negra, soy blanca, soy mestiza, soy mulata (pero no la hija de una yegua y un burro), soy afroespañola, soy guineanohispana, soy afrodescendiente, soy lo que yo decida ser.

Y empiezo así porque creo que es importante nombrar el lugar desde donde una actúa, desde el que una reflexiona, y por lo tanto, desde el cual una escribe.

A las personas afro o racializadas desde la opresión, la vida se nos complica a muchos niveles, sobre todo cuando no hemos nacido en el lugar que se supone debemos nacer en la mente de lxs demás, lxs que te limitan y te excluyen a la otredad, los que cuando te preguntan de dónde eres, y tú dices, “de aquí”, lo niegan con un “NO, ¿pero de dónde?, de verdad”. Aunque lo que realmente quieren saber es por qué soy del color que soy, pero no se atreven a preguntar, son atrevidxs, pero no valientes.

La identidad por sí misma es transmutable, un eje con diferentes aristas. Las más visibles son el género y la raza, casualmente dos términos inventados por el hombre, que casualmente le enaltecen a él, al hombre blanco, que es quien ha decidido desde tiempos inmemoriales en la mayoría de territorios, desde cómo debemos comportarnos estas personas no masculinas, no blancas, no euro-céntricas y no cristianas, hasta quién debe morir y quién debe vivir, como si de su mismo dios católico apostólico castigador se tratase. Para entender más sobre esto, os recomiendo leer Necropolítica de Achille Mbembe.

Cada vez hay un mayor número de mujeres dentro del feminismo que se abren a incluir otras realidades desde la escucha activa y el respeto.

Con todo esto que nos precede, gran parte de la población debería aliarse para combatir. Pero en ocasiones, en lugar de esto, las personas que están abajo de estos hombres blancos, pero encima de muchxs otrxs, deciden ocupar su escalón y aprovechar el privilegio que se les otorga, no para ayudar a los de abajo en su gran mayoría, sino para estar por encima y pisar sobre blandito. Sabemos que arriba del todo está el hombre blanco, después la mujer blanca, el hombre negro y, abajo del todo, la mujer negra, y cuanto más oscura, más oscuro su futuro. Durante décadas, desde los movimientos civiles en EEUU, mujeres como Zora Neale Hurston, Patricia Hill Collins, y más adelante Angela Davis, Bell Hooks, Assata Shakur y otras muchas han luchado no solo contra el patriarcado, sino también contra un feminismo hegemónico, con el fin de que las feministas blancas las tuvieran en cuenta. Es cierto que las mujeres negras en la lucha contra el racismo y a favor de los derechos civiles han tenido que ir de una manera comunitaria con sus hombres, al contrario que las compañeras feministas no racializadas, que no tienen en cuenta a sus compañeros, que en realidad no tienen ninguna lucha, más allá de sostener el patriarcado que les ha beneficiado casi desde el mismo día en que nació el capitalismo. Pero esta es una historia que más o menos todas conocemos.

Desde mi perspectiva y como mujer mestiza, criada por unos abuelxs blancxs, y en un cole 99,7% blanco, aunque con la suerte de tener mucho contacto con la parte negra, empecé sufriendo antifeminismo o antisororidad en el colegio. Mi “mejor amiga” (así lo entendía yo), y vecina, era muy maja conmigo hasta que se enfadaba y me llamaba “negra de mierda”. Esto, para una niña de 8 o 9, es muy doloroso, pero yo siempre volvía cuando ella ya estaba bien, alguna vez se disculpaba. Y ¿qué podía hacer yo con esa limitada conciencia y ninguna herramienta? Pues seguir siendo amiga de una niña violenta. Y, probablemente, así ha sido la vida de muchas. Y sigue siendo, no nos engañemos. España es así, al menos en un gran porcentaje de su población. Lo peor es cuando hace 2 años, esta ex compañera de cole, en mi muro de Facebook, me rebatió cierta denuncia racista. Y cuando le recordé lo que decía en el cole, qué casualidad, no se acordaba.

Creo que hay vidas repletas de experiencias similares, y peores. Tengo compañeras más mayores que se las han visto con los nazis en Barcelona o Madrid, que han sido agredidas físicamente y han tenido que correr solo por su color de piel.

Feminismos
Nuestra lucha: mujeres migrantes negras en España
¿Cómo encontró el feminismo negro migrante un espacio de encuentro asociativo desde donde tejer la diversidad desde su diferenciación?

A muchxs de nosotrxs, la sociedad nos ha hecho muy complacientes, de manera que nos callamos mucho cuando nos hacen sentir violentadas con frases, palabras o preguntas absurdas, porque preferimos sentirnos mal a hacer sentir mal a la otra persona. Yo, hace tiempo, decidí no callarme siempre que fuera posible y, aún así, sigue habiendo situaciones en las que, por no violentar el ambiente, debemos seguir callándonos, y sufrimos esa falta de libertad de expresión.

Si bien es cierto que, por lo general, las mujeres tenemos una empatía y asertividad mucho más amplia que los compañeros varones, aún queda mucho por hacer, a pesar de que cada vez hay un mayor número de mujeres dentro del feminismo que se abren a conocer e incluir otras realidades y experiencias desde la escucha activa y el respeto, incluso abriéndose a los compañeros, con los que a mi modo de ver debemos sanar esta herida ancestral que tenemos.

Mi incursión en los feminismos nació hace unos años leyendo mujeres afroamericanas. Pero me di cuenta que mi realidad no tenía nada que ver con el contexto americano, es más, en mi familia ecuatoguineana, africana, he tenido ejemplos de feminismo, de sororidad, y en lugar de subir hacia el Norte, como solemos hacer, empecé a mirar hacia abajo, hacia el Sur, miré a mis tías, a mis abuelas y a las mujeres africanas que siempre fueron lo que se denomina ahora feministas, grandes reinas y heroínas de antaño, como la reina Nzinga de Angola o las amazonas de Dahomey. Si buscamos mujeres más contemporáneas, encontramos a Winnie Mandela, y otras grandes autoras y pensadoras como Ama Ata Aidoo, Aminata Traoré, Mariama Ba, Oyeronke Oyewumi, las ecuatoguineanas de habla española Remei Sipi, Trinidad Morgades, Melibea Obono. La cultura africana es sororidad en estado puro, como cualquier cultura no occidental. Ha sufrido una gran aculturación y occidentalización, que nos ha hecho creer que África es machista, patriarcal y siempre lo fue. Es lo que ocurre cuando la historia la cuentan los ganadores, que lo hacen a su manera. Ojo, no niego que pudieran existir actitudes patriarcales, pero intento siempre ir a la raíz, y ver las cosas con perspectiva y en contexto.

En ocasiones la línea que separa aliadas de no aliadas es, simplemente, la manera de sentarse a escuchar.

A día de hoy yo puedo presumir de pertenecer a un colectivo que es la Escuelita Feminista, donde somos mujeres de todo el mundo con un enorme respeto las unas por las otras y por conocer y enriquecernos de otras culturas, tenemos representación de varios pueblos de Abya Yala, Caribe, África, y por supuesto, este territorio español, y han pasado muchas nacionalidades de mujeres que buscan apoyo y un espacio seguro. Cada una tenemos nuestra identidad y nuestra realidad, ya sean las personas migrantes o nacidas y vividas aquí. Y nuestro modelo de empatía y asertividad ha hecho que esto sea posible, las alianzas son posibles, y cada vez lo vemos más materializado, pero estas premisas son imprescindibles. Muchas no nos acercamos a espacios blancos porque no queremos sentirnos violentadas, con comentarios o preguntas que no vienen al caso y que no nos respetan, ni aportan nada al discurso. Ya llevamos demasiado sobre nuestras espaldas, y nos cuidamos. Aún así, nos encontramos con espacios o personas sin ninguna consideración en nuestro día a día, lamentablemente, y para combatir esto, lo que hacemos es crear nuestros espacios y buscar aliadas deconstruidas. En ocasiones la línea que separa aliadas de no aliadas es, simplemente, la manera de sentarse a escuchar.

No me gustaría terminar sin añadir que, dentro de los diferentes feminismos, hay cuestiones muy variadas. Yo entro dentro del comunitario y el africano. Ambos son muy similares, me gusta la manera de construir con todxs, la familia, la tribu. Veo una gran diferencia con otros feminismos que me resultan muy individualistas. Algo que veo dentro del feminismo euro-céntrico es el tema de posicionarse siempre de parte de la mujer, solo por ser mujer, y sin conciencia crítica de cada situación. A día de hoy tenemos hermanos en pro de las mujeres que tienen miedo al feminismo, nos temen, porque hay mujeres sin esta conciencia, que en ocasiones no pueden posicionarse en el lado del hombre, porque piensan que para ser feministas debemos odiarlos y luchar contra ellos, como si no fueran padres, hermanos o hijos. ¿Que debemos luchar contra el patriarcado? Sí. ¿Que debemos vivir en una lucha constante con ellos solo por haber nacido hombres? No. El mundo debe cambiar y, para ello, todas y todos debemos poner de nuestra parte. Creo muy importante apelar a una coherencia y una responsabilidad, para desarrollar un sentido crítico y valorar cada situación, enfocada a encontrar un balance, especialmente cuando hay niños y niñas, que, en ocasiones, acaban sufriendo por una mala gestión de la situación entre los progenitores.

No debemos olvidar que la base de lo femenino en términos universales es la fertilidad, la capacidad de crear vida, tal como hace la madre tierra. Pero también necesitamos al masculino más allá de la fecundación, ya que todas las personas, energéticamente hablando, tenemos estas dos polaridades, masculina y femenina, y deben ser equilibradas, aun sabiendo que, quizá por ser nosotras más fuertes que ellos mentalmente, nos toca hacer un mayor trabajo.

Crezcamos juntas y juntos, que es la base del feminismo africano. Terminaré con una palabra que viene de Sudáfrica, de las lenguas zulúes y xhosa. Os invito a que busquéis su significado, tanto literal como espiritual en vosotras:

¡Ubuntu!

Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Opinión
Opinión Sin ceder en la potencia
No es solo que nos resulte más fácil imaginar el fin del mundo que el fin del capitalismo; también nos cuesta menos imaginarnos el fin del mundo que una sociedad sencillamente mejor.
Filosofía
Laura Llevadot “En este retorno al fascismo hay una nostalgia de la ley”
Su escritura no elude el desgarro, la herida, la vida. Apuesta, en tiempos de una promesa constante de felicidad y autorrealización, por la negatividad. Su posición filosófica es la de quién piensa que “la lengua que hemos heredado nos impide pensar.
Filosofía
Brais Arribas, filósofo “Non se trata de empoderar senón de disolver o poder”
Durante a conversa, o profesor reflexiona sobre a saúde da filosofía galega, o poshumanismo, as novas masculinidades ou a experiencia da pandemia.
Sobre este blog
La filosofía se sitúa en un contexto en el que el poder ha buscado imponerse incluso en los elementos más básicos de nuestro pensamiento, de nuestras subjetividades, expulsando así de nuestro campo de visión propuestas teóricas y prácticas diversas que no son peores ni menos interesantes sino ajenas o directamente contrarias a los intereses del sistema dominante.

En este blog trataremos de entender los acontecimientos del presente surcando –en ocasiones a contracorriente– la historia de la filosofía, con el objetivo de poner al descubierto los mecanismos que utiliza el poder para evitar cualquier tipo de cambio o de alternativa en la sociedad. Pero también de producir lo que Deleuze llamó líneas de fuga, movimientos concretos tanto del presente como del pasado que, escapando del espacio de influencia del poder, trazan caminos hacia otros mundos posibles.
Ver todas las entradas
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición Sánchez resiste, los aliados se ilusionan y Feijóo se llena de barro
Se apaga el ciclo político antes del receso de verano con un líder del PSOE que ve la luz al final del túnel, a pesar del desplome en las encuestas.
Barcelona
Chatarreros El reciclaje invisible: la relación entre la chatarra y la ciudad de Barcelona
La red de reciclaje en Barcelona es de una complejidad casi hermética, más aún si hablamos de los recicladores informales, más conocidos como chatarreros. Salimos a la calle a entender una economía sumergida que está a la vista de todos.
Salud mental
Salud mental Familia y escuela son los principales factores de protección para la salud mental de adolescentes LGTBI+
Las personas con una orientación sexual divergente con la heterosexualidad muestran mayor grado de depresión e ideación suicida que las heterosexuales. Los vínculos son clave para mitigar los riesgos, según un estudio.
Medios de comunicación
Medios de comunicación El futuro del periodismo no lo está escribiendo una máquina
El periodista Pablo Mancini, estratega dentro de The Washington Post, defiende una profesión aquejada de múltiples problemas. El primero, y más crucial, la deserción de miles de personas que ya no quieren estar informadas.
Entrevista La Poderío
Andalucía Virginia Piña: “Con la Guerra Civil y su posguerra intentaron aniquilar nuestra conciencia”
Quien tiene el poder, tiene los recursos, y quien tiene los recursos también tiene la palabra. Virginia Piña (Jaén, 1988) la lleva tomando en los últimos seis años, dándole forma para hablar de figuras clave en la historia de las mujeres en Andalucía
Partidos políticos
Partidos políticos La extrema derecha se dispara en un CIS en el que el PSOE acusa el golpe del Caso Koldo
El barómetro mensual señala un empate virtual entre PSOE y Partido Popular y anticipa un crecimiento de Vox. El CIS no pregunta por el caso Koldo, pero éste se hace notar en el resultado.

Últimas

València
València Huelga de celo en el Consorcio de Bomberos de València en plena campaña de incendios
La plantilla denuncia sobrecarga, falta de efectivos y abandono institucional, mientras la Diputación oculta el conflicto y prioriza su relato de normalidad.
Genocidio
Genocidio Israel asesina a diez niños que esperaban suplementos nutricionales en un hospital
La Unión Europea sigue evitando la imposición de sanciones al régimen de Tel Aviv. Estados Unidos anuncia sanciones contra la relatora de la ONU que ha denunciado el lucro de las empresas colaboradoras de Israel.
Fronteras
Fronteras europeas Un año más, la Caravana Abriendo Fronteras denuncia las políticas antimigratorias de Europa
Desde Baiona y Girona saldrán los grupos que recorrerán puntos críticos de fronteras europeas como Irún, Calais, Dunkerque y Toulouse donde se encontrarán con otros colectivos para movilizar la solidaridad con las personas migrantes.
Migración
Migraciones Entre la incertidumbre y la esperanza
El aumento de las muertes en el último año está relacionado con las condiciones cada vez más peligrosas con que se encuentran las personas para llegar a Reino Unido.
Más noticias
Opinión
Opinión Del malismo al imbecilismo
Los patanes en traje con poder que infestan nuestro ecosistema como moscas plastas, son el reflejo de un régimen que busca la imbecilidad masiva.
Opinión
Opinión Libertad para las Seis de la Suiza
Cuando el sindicalismo entra en prisión, lo que está encerrado es mucho más que una protesta. Es el eco de todas las veces que dijimos “basta”.

Recomendadas

Laboral
Laboral Jornadas de 50 horas semanales haciendo tareas de categoría superior: así se trabaja en hostelería
Es uno de los sectores con más sanciones e intervenciones de la Inspección de Trabajo, con más de 12.000 trabajadores extranjeros aflorados en las intervenciones y que cuenta con el 21% de las sanciones emitidas por este organismo.
Derechos Humanos
Flotilla de la Libertad Yanis Mhamdi: “Israel es el Estado que mata más periodistas en todo el mundo”
Este periodista de Blast fue uno de los integrantes de la Flotilla de la Libertad. En esta entrevista cuenta cómo transcurrieron las horas en las que este grupo de defensores de derechos humanos estuvieron bajo detención ilegal en Israel.
Genocidio
Genocidio La segunda consultora más importante del mundo es señalada por su papel en el despiece de Gaza
Boston Consulting Group está considerada una de las “big three” del sector. Ahora, una serie de informaciones señalan cómo ha estado detrás de la fundación antiUnrwa encargada de la distribución de ayuda y de los planes de expansión en la costa.
Unión Europea
Unión Europea La sociedad del miedo al declive
La angustia ante el futuro acompaña a las sociedades europeas desde hace tiempo y precede a la Unión Europea. Se manifiesta con mayor claridad en los períodos de declive económico y las turbulencias políticas y sociales que los acompañan.