Camareras de piso
Las kellys de Benidorm exigen un convenio que acabe con la externalización y trabajan en la creación de un sindicato

Para el nuevo convenio de hostelería de la Costa Blanca, que se comenzará a negociar en el mes de octubre, las camareras de piso exigen dos cosas: el fin de la externalización y una prevención de riesgos laborales real. No se muestran optimistas con la mesa de negociación pero tienen un plan: montar su propio sindicato.
27 sep 2021 13:20

Las camareras de piso de Benidorm han amanecido en un nuevo Día Internacional del Turismo en el que sus demandas siguen sin cumplirse. También en el que deciden mostrar que continúan del mismo modo, sobre todo teniendo en cuenta que próximamente arrancará la negociación del convenio colectivo de hostelería en la Costa Blanca, que regirá sus derechos laborales los próximos cuatro años. El anterior caducó en 2020, aunque por la pandemia quedó congelado. Sus exigencias se resumen en dos puntos: que cese la externalización y que se cumpla la ley de prevención de riesgos laborales. Es lo que pedirán esta tarde en una nueva concentración contra la sobrecarga de trabajo: “No se puede pretender abanderar o hablar de códigos éticos del turismo sin ponerle freno a la precariedad de miles de sus trabajadoras y trabajadores”, exponen Las Kellys en su comunicado.

El problema es que vienen repitiendo estos puntos, lamentan, desde hace años, mucho antes de la pandemia. Por eso no se muestran optimistas con la negociación del nuevo convenio, en cuya mesa han pedido participar de alguna forma aunque sepan que legalmente no pueden hacerlo: la ley sindical enuncia que solo los representantes de los trabajadores votados legalmente pueden formar parte de esta mesa; en este caso UGT, con un 60%, y CC OO, con un 40%, señala Yolanda García, portavoz de Las Kellys Benidorm-Marina Baixa. “Sabemos que esto es así, pero sí exigíamos que pudiéramos participar de alguna forma en las mesas por el diálogo social sobre el turismo en la Comunitat Valenciana por nuestra labor representativa”, expone.

Silencio sindical y administrativo

En verano, detalla Yolanda García, la asociación mantuvo una reunión con Elvira Ródenas, directora general de Trabajo, Bienestar y Seguridad Laboral de la Generalitat Valenciana, para explicarle que querían participar en las mesas de diálogo social, conformadas por gobierno autonómico, sindicatos mayoritarios y patronal. “Nos dijo que lo tenía en cuenta aunque remitió a las limitaciones de la ley, y nos pidió que se lo recordáramos en septiembre para ver cómo podríamos participar. Le escribimos el 3 de septiembre pero aún no nos ha contestado, así que lo damos un poco por perdido”. 

Quienes sí han respondido finalmente, continúa la portavoz de la asociación, son los sindicatos mayoritarios. “Vamos a poner encima de la mesa que no nos pueden volver a firmar cuatro años más [la duración del convenio] y exigimos dos puntos básicos, dos líneas rojas que tienen que ser sí o sí: ponerle fin a la externalización por convenio y que se cumpla la ley de prevención de riesgos laborales”. Sobre el primer punto, las camareras de piso citan los convenios de Tenerife y de las Islas Baleares como ejemplo, pues prohíben la externalización al especificar que las actividades principales de los hoteles —como es el departamento de pisos— deben estar contratadas directamente por el establecimiento. “Si en estos convenios es posible, ¿por qué nos dicen que aquí no? Hay una forma de poner fin a la externalización y es a través del convenio, pero a ellos empresarialmente les viene bien seguir teniendo esa opción”.

Para la vinculada al cumplimiento de la ley de prevención de riesgos laborales, exigen estudios ergonómicos y psicosociales que aborde la sobrecarga de trabajo. “Hasta ahora, en el convenio pone de una manera muy general que se debe cumplir la legislación, pero lo que nosotras exigimos es que especifique claramente la obligatoriedad de hacer estudios”, matiza García. Vuelve a remitirse al convenio de las islas, donde “pone que a los comités de salud laboral se les debe proporcionar cada tres meses los partes de trabajo de camareras para ver si se ha incrementado número de habitaciones, etcétera; aquí no especifica nada de eso, más que una disposición que invita ‘a negociar con el hotel’ el número de habitaciones”. Quieren, por tanto, un texto “en el que esa ley quede mascada para que nosotras tengamos algo a lo que aferrarnos y para que el empresario sepa lo que implica una ley de prevención de relaciones laborales”.

Como las demandas no son nuevas, no se muestran muy optimistas con respecto a que queden reflejadas en el nuevo convenio. “Ellos han cogido el tema de la pandemia y del cierre de los hoteles para que vaya por delante de todo: que si la falta de empleo, que si el IMSERSO llega o no llega, que si se van a cerrar hoteles... Sabemos que van a usar ese discurso a la hora de las negociaciones, y que, como los sindicatos no hagan mucha presión, va a hacer que la balanza de las negociaciones vaya hacia la patronal”, apunta García.

Sindicato propio

Ante esta situación, la asociación retoma una idea a la que, en realidad, llevan mucho tiempo dándole vueltas: montar su propio sindicato, como ya hicieron antes sus compañeras de Barcelona. “Creemos que es el siguiente paso, porque como asociación tenemos diferentes límites: no podemos ir a hablar a elecciones sindicales dentro de los hoteles, tenemos limitaciones legales para nuestras exigencias...”, explica García, que añade que han hecho llamamientos públicos a abogados laboralistas de la provincia que quieran colaborar con la asociación para que la idea siga adelante, pues “el delegado de salud laboral dentro del hotel es el que, en última instancia, puede hacer cumplir la ley de prevención de riesgos laborales”. 

“Nosotras estamos haciendo labor de sindicato sin ser un sindicato, así que, ¿por qué no hacer un sindicato de verdad?”, comenta Yolanda García, portavoz de Las Kellys Benidorm-Marina Baixa

El deseo de las kellys es que el sindicato empiece a rodar el año que viene, y tener así un “arma más” en los ámbitos en los que se pueden exigir cambios, como por ejemplo este tipo de mesas de negociación. “Nosotras podemos hablar con los sindicatos mayoritarios, pero tenemos que confiar en que van a intentar cumplir nuestras demandas, y hace cuatro años ya estuvimos en ese proceso: siempre nos dicen que pueden llegar hasta aquí”, lamenta la portavoz de la asociación de camareras de piso. “Nosotras estamos haciendo labor de sindicato sin ser un sindicato, así que, ¿por qué no hacer un sindicato de verdad?”.

Yolanda García advierte de que en la concentración que se celebrará hoy en Benidorm para exigir un convenio de hostelería justo —que, recuerda, afecta a todos los trabajadores de hostelería, como cocineros, camareros y recepcionistas, con lo que invita a que expongan sus demandas— habrá carteles referidos a la huelga que lleva también tiempo rondando por el colectivo, pero para la que, de nuevo, requieren del apoyo de sindicatos. “Yo sé que si nosotras pudiéramos entrar en los hoteles para explicarnos quizás fuera posible la huelga, pero cuando hemos hablado de huelga con los sindicatos mayoritarios siempre nos han retorcido el morro, tienen miedo a un fracaso”.

“En este tiempo que queda de negociaciones, vamos a ser muy insistentes y vamos a estar donde haga falta con el tema del convenio, porque es lo que nos va a regir cuatro años más”, comenta García sobre la negociación del convenio de hostelería en la Costa Blanca

El problema es que el tiempo pasa “y las cosas siguen igual”. “¿Para qué hemos ido a la mesa por la reconstrucción y a la Generalitat? No es que no haya mejorado nada, es que encima el discurso se ha enfocado en el ‘pobrecitos, la hostelería no encuentra trabajadores’, y por eso somos escépticas con la negociación”. Los vientos, lamenta García, soplan en una dirección, sobre todo en un contexto en el que se cierne la amenaza de la pérdida de empleo. Y si no hay un sindicato en esos espacios que cambie el enfoque del discurso, argumenta la portavoz, no se conseguirá nada. “Por eso nosotras, en este tiempo que queda de negociaciones, vamos a ser muy insistentes y vamos a estar donde haga falta con el tema del convenio, porque es lo que nos va a regir cuatro años más”.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Laboral
Camareras de piso Las kellys exigen la tramitación de la Ley de Turismo de Catalunya
Las camareras de piso catalanas aseguran “estar cansadas del incumplimiento de las resoluciones del Parlamento” e insisten en la necesidad e una nueva ley que incluya medidas para la mejora de sus condiciones laborales.
Camareras de piso
Camareras de piso Cuando no puedes seguir trabajando pero los tribunales lo niegan
En 2017, una camarera de piso tuvo un accidente de trabajo del que todavía arrastra secuelas. Ella asegura que no puede desempeñar las labores que exige su puesto, pero los tribunales no le conceden la incapacidad permanente solicitada. En menos de 24 horas las kellys han logrado el dinero necesario para hacer un recurso de casación, la última carta que pueden jugar.
Camareras de piso
Camareras de piso Las kellys de Asturias promueven un sello hostelero para el fin de la externalización
Las camareras de piso ven en esta medida una manera de acabar con la externalización, que se ha incrementado en el territorio desde el inicio de la pandemia. El sello Fairtur se suma a otras iniciativas como el portal de reservas impulsado por las kellys de Barcelona.
Baleares
Un modelo insostenible El rechazo a la turistificación se expande en Canarias, Baleares y Barcelona
Tras la masiva manifestación en las Islas Canarias del pasado mayo, Palma de Mallorca, Barcelona y San Sebastián salen este 15 de junio a la calle contra un modelo de turismo desmedido insostenible para el territorio y sus habitantes.
Oriente Medio
Oriente Medio Decenas de muertos en una noche de sirenas e intercambio de misiles entre Israel e Irán
Después del ataque israelí contra la infraestructura energética y militar iraní, cientos de misiles iraníes atraviesan el cielo israelí e impactan en Tel Aviv, Bat Yam, Tamra y Haifa.
Rap
Rap Los Chikos del Maíz: “La música urbana está llena de fachas y votantes de Vox”
Tras un fin de gira accidentado, Toni y Nega dan una tregua indefinida a su proyecto con dos conciertos en Madrid. Horas antes de llenar la sala en la primera cita, visitan la redacción de El Salto.
Violencia machista
El Estado que revictimiza Violencia institucional: “Si lo hubiera sabido antes, no hubiera denunciado nunca”
Rocío ha sufrido violencia psicológica, física y sexual por parte de su expareja. Y también violencia institucional en todas las puertas de la red de recursos institucionales que ha ido atravesando.
Crónica
Justicia En la sala de un juicio a una madre protectora
Esta es una crónica de un juicio a una mujer que pidió medidas por sospechar de abusos sexuales a su hija en el domicilio paterno sin que ninguna institución moviera un dedo y, un mes después, cogió un vuelo a su país para intentar protegerla.
Editorial
Editorial Justicia irracional
Por acción o por omisión, las instituciones violentan a las mujeres. Se llama violencia institucional.
Río Arriba
Río Arriba Luis González Reyes: “Vivimos en un mundo en la que la escasez es un elemento central”
Primera entrevista del programa Río Arriba en formato podcast y vídeo donde hablamos de las nuevas guerras neocoloniales por recursos en la era de Trump y Putin, de la escasez, del decrecimiento y el colapsismo.
La vida y ya
La vida y ya Un rato de cada lunes
Pero, lo más coincidente ha sido, expresado de distintas maneras, su agradecimiento hacia ese lugar. Su lugar elegido.
Ocupación israelí
Movilizaciones Un centenar de organizaciones de 26 países denuncian a la empresa vasca CAF y su tren del apartheid
Más de 50 localidades salen a la calle este fin de semana para señalar a la empresa que construyó el tranvía que conecta Jerusalén con territorio ocupados y exigir el fin del genocidio en Gaza.

Últimas

Que no te lo cuenten
El Salto Radio De océanos y detenciones
VV.AA.
La acidificación del agua marina supera sus límites mientras Israel aborda la Flotilla por la Libertad.
Relato
Relato Rendirse
A mi pesar me tocaba compartir mesa con aquellos documentos y, como estaba de los primeros (no lo habría imaginado al llegar), ya no conseguía quedar por encima, con lo que me gusta.
Análisis
Análisis del CIS La calma antes de la tormenta: la dimisión de Santos Cerdán como punto de inflexión
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha muerto pocas horas después de nacer por la dimisión de Santos Cerdán, aunque sirve como foto fija de un escenario que favorece a la derecha.
Más noticias
Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.
Estados Unidos
Estados Unidos “No Kings”: más de 2.000 manifestaciones en EEUU para protestar contra la deriva autoritaria de Trump
Con el nombre de movimiento No Kings (sin reyes), millones de personas están convocadas a manifestarse en todo el país este sábado y enfrentar el desfile militar organizado por Trump el día de su 79 cumpleaños.

Recomendadas

Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.
Derecho a la vivienda
Jaime Palomera “La vivienda necesita una revolución”
Investigador y uno de los fundadores del Sindicat de Llogateres, Jaime Palomera presenta ‘El secuestro de la vivienda’, un libro sobre el juego amañado en el que los propietarios son cada vez más ricos y los inquilinos cada vez más pobres.
Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Brasil
Extrema derecha Arte en tiempos de fascismo: cuando enseñar a Goya y Rubens le cuesta el puesto a un profesor
Una clase de Historia en la escuela municipal en una localidad del Estado de São Paulo desemboca en acusaciones contra el profesor y una campaña de difamaciones que encabeza el concejal de educación de la zona, de la extrema derecha bolsonarista.