Internet
La nube no está en el cielo

Cada clic, cada búsqueda en internet, cada archivo guardado en la nube requiere energía, agua y espacio físico.
https://ecotopias.net/ https://tunubesecamirio.com/
14 feb 2025 07:00

Efectivamente, nube no está en el cielo, sino en la tierra, en nuestras tierras concretamente. Cada clic, cada búsqueda en internet, cada archivo guardado en la nube requiere energía, agua y espacio físico. Los centros de datos son las tripas de internet: imaginemos una enorme nave de hormigón llena de equipos informáticos. Allí se almacenan y procesan los enormes volúmenes de datos que requieren la nube, redes sociales, inteligencia artificial y plataformas de streaming.

En la era de la hiperconectividad, la digitalización se ha convertido en sinónimo de progreso. Sin embargo, detrás de “la nube”, se esconde un modelo basado en el extractivismo de recursos: territorios drenados de agua y energía, comunidades desplazadas y una acumulación de poder tecnológico en manos de pocas corporaciones. El avance de las llamadas macrogranjas de datos o centros de datos, no son sino enormes infraestructuras dedicadas al almacenamiento y procesamiento de información.

En nuestro país, la instalación de estas mega infraestructuras está creciendo exponencialmente, de forma sibilina con empresas como Amazon, Meta y Microsoft anunciando inversiones realmente tremendas. Las razones son claras: suelo barato, fiscalidad ventajosa y un acceso asegurado a nuestros recursos: energía y agua principalmente. Lo que se presenta como innovación y progreso oculta impactos descomunales al punto que comprometen nuestro futuro.

Energía, agua y otras afecciones

Uno de los problemas más alarmantes de estos centros es su insaciable demanda de energía. Se estima que, a nivel global, internet ya consume entre el 6% y el 10% de la electricidad mundial, y se prevé que esta cifra aumente en un 21% anual hasta 2030. La producción de electricidad sigue dependiendo en gran parte de fuentes contaminantes y de megaproyectos que desplazan comunidades en nombre de la “transición energética”.

El agua, recurso que cada vez va a ser más escaso, también es víctima del avance de estas infraestructuras. Los servidores requieren potentísimos sistemas de refrigeración constante, lo que implica extraer miles de litros diarios en zonas que ya sufren estrés hídrico. Solo en Aragón, donde el agua ya es un recurso escaso bajo la amenaza de que la situación empeore por el cambio climático, ya se ha comprometido 755,7 millones de litros al año, equivalente a una pequeña ciudad (fuente). Cuando el agua escasee y toque sequía extrema, algo prácticamente asegurado en las próximas décadas, el grifo que refrigera estas macrogranjas va a ser muy difícil de cerrar.

Recientemente también hemos tenido constancia de que los centros de datos impactan la salud de los vecinos. Esa contaminación del aire es generada por los gases tóxicos, como óxido nítrico o partículas PM2,5, expulsados durante el proceso de generación de la electricidad que alimenta los centros de datos. Dicha afectación para la salud ha sido reconocida incluso por el gobierno de Estados Unidos en sus normativas, llegando a relacionar los centros de datos con una mayor prevalencia de cáncer entre la población afectada.

¿Cuál es el coste-beneficio para la sociedad?

Y, como en tantos otros proyectos, la generación de empleo se usa como argumento para legitimar su expansión. Sin embargo, las experiencias en otros países demuestran que el número de puestos de trabajo directos son muy magros una vez terminada su construcción, los beneficios económicos, que los hay, encontrarán la vía -quizá pasando por Luxemburgo- para llegar a las opulentas élites tecnofeudales. A pesar de las cifras de miles de millones de euros que se manejan, casi nada de esa lluvia de dinero llegará a las arcas públicas; nuestros gobernantes regionales les han concedido importantes ventajas fiscales.

Otro de los problemas asociados a los centros de datos es que exigen grandes infraestructuras públicas previas para poder funcionar. Hay serias dudas de que la infraestructura pública pueda asumir esta demanda, por eso, la patronal de los centros de datos ya está presionando para que la REE (Red Eléctrica Española) aumente su inversión en infraestructuras públicas, pagadas con el erario público.

En otras partes ya no los quieren

La opacidad que atraviesa los centros de datos ha sido denunciada por las académicas que lo investigan (Mython), periodistas que preguntan por los datos de consumo (Gabott) y la ciudadanía, que tiene que recurrir a tribunales para saber los gastos de consumo de agua.

Muchos otros países, lejos de pelearse por estas mega infraestructuras, las han despedido con alivio. Veamos algunos pocos ejemplos.

En Países Bajos, la construcción de nuevos centros de datos ha generado un intenso debate que han llevado a las autoridades a implantar una moratoria.

En Irlanda, donde el sector tecnológico tiene una fuerte presencia, la expansión de los centros de datos ha provocado. La Plataforma Irlandesa contra los centros de datos ha exigido una moratoria que ha llevado al gobierno a restringir su implantación.

En Estados Unidos, diversas comunidades han mostrado su rechazo a la instalación de centros de datos en sus territorios, argumentando que su aprobación no contó con un debate público (¿les suena?).

Mucho más cerca, el Ayuntamiento de Lleida ha rechazado recientemente la instalación de un megacentro de datos en su territorio.

Conclusión

A pesar del esfuerzo de las narrativas crecentistas oficiales por convencernos de sus bondades, la industria digital no es mejor que otras. El sistema que devora energía y agua para alimentar a su voraz “mega máquina” es el mismo que, históricamente, ha forzado a las mujeres, a las comunidades campesinas e indígenas a doblegarse ante su lógica de rentabilidad. 

El intenso proceso de digitalización acentúa los patrones que destruyen las condiciones que sustentan la vida en la Tierra. Lo terrible es que apenas podemos elegir no participar de él para funcionar en la sociedad de hoy. Cuestionarnos este modelo desde abajo es tan importante como cuestionarnos el modelo de transporte, el alimentario u otros.

Y más concretamente, nos hemos de plantear si la producción de energías renovables debe dedicarse a alimentar los centros de datos en lugar de cubrir las necesidades energéticas de la población y de otros sectores económicos más prioritarios. En el horizonte hay nubarrones y regalarle los paraguas a estas megacorporaciones no parece lo más sensato.

Archivado en: Internet
Sobre este blog
Saltamontes es un espacio ecofeminista para la difusión y el diálogo en torno al buen vivir. Que vivamos bien todas y todos y en cualquier lugar del mundo, se entiende. También es un espacio para reflexionar acerca de la naturaleza, sus límites y el modo en que nos relacionamos con nuestro entorno. Aquí encontrarás textos sobre economía, extractivismo, consumo, ciencia y hasta cine. Artículos sobre lugares desde donde se fortalece cada día el capitalismo, que son muchos, y sobre lugares desde donde se construyen alternativas, que cada vez son más. Queremos dialogar desde el ecofeminismo, porque pensamos que es necesario anteponer el cuidado de lo vivo a la lógica ecocida que nos coloniza cada día.
Ver todas las entradas
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.
Sobre este blog
Saltamontes es un espacio ecofeminista para la difusión y el diálogo en torno al buen vivir. Que vivamos bien todas y todos y en cualquier lugar del mundo, se entiende. También es un espacio para reflexionar acerca de la naturaleza, sus límites y el modo en que nos relacionamos con nuestro entorno. Aquí encontrarás textos sobre economía, extractivismo, consumo, ciencia y hasta cine. Artículos sobre lugares desde donde se fortalece cada día el capitalismo, que son muchos, y sobre lugares desde donde se construyen alternativas, que cada vez son más. Queremos dialogar desde el ecofeminismo, porque pensamos que es necesario anteponer el cuidado de lo vivo a la lógica ecocida que nos coloniza cada día.
Ver todas las entradas
Ocupación israelí
Ocupación Israelí La policía egipcia impide con violencia la marcha internacional a Gaza
La marcha de 4.000 personas a Gaza es reprimida por la policía del régimen de Al-Sisi. La organización pide a las embajadas que reaccionen y protejan a sus ciudadanos.
Ocupación israelí
Movilizaciones Un centenar de organizaciones de 26 países denuncian a la empresa vasca CAF y su tren del apartheid
Más de 50 localidades salen a la calle este fin de semana para señalar a la empresa que construyó el tranvía que conecta Jerusalén con territorio ocupados y exigir el fin del genocidio en Gaza.
Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.
Análisis
Análisis del CIS La calma antes de la tormenta: la dimisión de Santos Cerdán como punto de inflexión
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha muerto pocas horas después de nacer por la dimisión de Santos Cerdán, aunque sirve como foto fija de un escenario que favorece a la derecha.
Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.
Estados Unidos
Estados Unidos “No Kings”: más de 2.000 manifestaciones en EEUU para protestar contra la deriva autoritaria de Trump
Con el nombre de movimiento No Kings (sin reyes), millones de personas están convocadas a manifestarse en todo el país este sábado y enfrentar el desfile militar organizado por Trump el día de su 79 cumpleaños.

Últimas

Galicia
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar a Altri
Queremos investigar a los responsables políticos y empresariales del que podría ser el mayor atentado ambiental de la historia reciente de Galicia.
Galicia
TSXG Peritos en el juicio contra la Xunta: la contaminación del embalse de As Conchas es “extremadamente peligrosa”
Siete vecinos, la Asociación de vecinos de As Conchas y la organización de consumidores CECU han demandado a varias administraciones gallegas por presunta mala gestión de una contaminación derivada del exceso de macrogranjas en la comarca de A Limia.
Palestina
Marcha a Gaza Poner el cuerpo contra el genocidio
Miles de activistas de todo el mundo participan en la Marcha a Gaza desde Egipto. Desde el movimiento solidario extremeño con Palestina, una reflexión acerca de la importancia de esta lucha y de su momento histórico.
La madeja
La Madeja Oído/lengua/vientre
El oído que deja de prestar atención a la palabra del amo y se vuelve, inclinado ligeramente hacia abajo, a las que durante siglos callaron y al fin abandonaron la mudez, no será nunca subyugado.
Comunidad de Madrid
Comunidad de Madrid Un centro de salud desbordado y con cucarachas y otro pendiente de construir desde hace 22 años
Los vecinos del barrio de Comillas, en Carabanchel Bajo, se han manifestado para reclamar el nuevo centro de salud planificado desde 2003 y cuya parcela ya fue cedida por el Ayuntamiento a la CAM, que no da explicaciones por la paralización.
Centrales nucleares
Cierre de Almaraz Las empresas propietarias de Almaraz no acuerdan una propuesta conjunta para alargar la vida de la central
Solo Iberdrola y Endesa firman la propuesta de alargar la vida de Almaraz trasladada al MITECO. Naturgy se descuelga de la misma y bloquea su viabilidad, al estar la central explotada por las tres energéticas en un régimen de comunidad de bienes.
Más noticias
Israel
Oriente Próximo Israel mata al comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán, que prepara “una respuesta contundente”
Israel ha atacado Irán en la madrugada del viernes 13 de junio con bombardeos de unos 200 aviones de combate. La Guardia Revolucionaria iraní ha confirmado la muerte de su comandante, el general Hossein Salamí.

Recomendadas

Derecho a la vivienda
Jaime Palomera “La vivienda necesita una revolución”
Investigador y uno de los fundadores del Sindicat de Llogateres, Jaime Palomera presenta ‘El secuestro de la vivienda’, un libro sobre el juego amañado en el que los propietarios son cada vez más ricos y los inquilinos cada vez más pobres.
Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Brasil
Extrema derecha Arte en tiempos de fascismo: cuando enseñar a Goya y Rubens le cuesta el puesto a un profesor
Una clase de Historia en la escuela municipal en una localidad del Estado de São Paulo desemboca en acusaciones contra el profesor y una campaña de difamaciones que encabeza el concejal de educación de la zona, de la extrema derecha bolsonarista.
Literatura
María Agúndez “El trabajo de limpiadora es muy digno, pero nadie quiere hacerlo”
La escritora retrata en ‘Casas limpias’ las contradicciones de quienes considerándose personas igualitarias y progresistas delegan los cuidados y la limpieza para evitar el conflicto y sostener su comodidad.