Música
Tino Casal y el hedonismo festivo

Las canciones de Tino Casal no tenían contenido político si entendemos este en un sentido limitado y estricto, pero él mismo era una declaración política, un manifiesto.
20 nov 2021 06:00

A finales de los años 70, el pacto social de posguerra se desmoronaba. Durante toda esa década, Reino Unido había vivido un aumento de la inflación, la deuda y el desempleo. El Gobierno británico había intentado atajarlo cargando el peso sobre la clase trabajadora. Las medidas habían sido muy polémicas: una congelación de los salarios tanto en el sector público como en el privado y la introducción de la semana de tres días, que suponía que la industria solo podía funcionar tres días a la semana para ahorrar electricidad, con la consecuente reducción de los sueldos. La respuesta de la clase trabajadora fue contundente, pero no bastó.

Pocos años después de su estreno sangriento en Chile, el neoliberalismo subía al poder en Reino Unido de la mano de Margaret Thatcher, que promovió una exitosa contrarrevolución conservadora frente al empuje de una izquierda que se había radicalizado en todo el mundo y había formado movimientos guerrilleros y grupos armados. La atmósfera de derrota en los primeros años del Gobierno de Thatcher impregnaba a la mayor parte de la sociedad. Lo único que quedaba era la huida.

En España, el fin de la dictadura hizo que la atmósfera fuese más optimista y el ‘new romantic’ no llegó tanto como una estética de huida, decadente, sino más bien de celebración, exultante

El movimiento new romantic surgió precisamente así, como un intento de huida frente a una realidad angustiosa. La mayoría de las bandas que lo conformaban procedían de la clase trabajadora: Spandau Ballet, Culture Club, Duran Duran. El desbordamiento, la exageración y la exuberancia estética aparecen como únicas salidas frente a la sensación de desaliento que se extiende por toda la sociedad. En el Estado español, en cambio, la recepción del movimiento fue diferente. El fin de la dictadura hizo que la atmósfera fuese más optimista y el new romantic no llegó tanto como una estética de huida, decadente, sino más bien de celebración, exultante. No se extendió tampoco primero entre la clase trabajadora, sino en sectores sociales más acomodados que viajaban a Londres, conocían allí el movimiento y se hacían con ropa y discos. Este fue el caso de la mayoría de los integrantes de lo que más tarde se conocerá como la Movida; también de Tino Casal, aunque sus orígenes fueran diferentes.


El estilo de Tino Casal bebía del new romantic pero también del glam, del techno, del pop de David Bowie. Su música era puro hedonismo festivo, cuerpos sudorosos en la pista de baile, cardados imposibles, licra y lentejuelas. Exceso, desborde, ruptura. Sus letras no tenían contenido político si entendemos este en un sentido limitado y estricto, pero él mismo era una declaración política, un manifiesto.

Sus ropas exageradas, su maquillaje, sus gestos teatrales, sus falsetes agudos y su cabello teñido hablaban de una masculinidad y de una sexualidad muy diferente a las que dominaban en la España de la época. Sus vídeos con escenas homoeróticas y estética BDSM sacudían a golpes el olor a rancio acumulado durante décadas. Por supuesto no era el único, y otres lo hacían desde lugares mucho más complejos que el de un —por lo que sabemos— hombre cishetero, pero sí fue el que consiguió llegar a los primeros puestos de las listas de ventas y llevar ese cuestionamiento a un público masivo.


A medida que transcurría la década de los 80 y el optimismo del final de la dictadura se ahogaba en el terrorismo de Estado, la corrupción y el paro, el hedonismo festivo desaparecía. La necesidad de escapar llegaba algo más tarde, como el propio neoliberalismo, pero llegaba. La muerte de Casal en un accidente en 1991 parecía señalar el fin de una época. De ahora en adelante, la huida se buscaría en el aparcamiento de una discoteca de bakalao.

Archivado en: Música
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Rap
Rap Los Chikos del Maíz: “La música urbana está llena de fachas y votantes de Vox”
Tras un fin de gira accidentado, Toni y Nega dan una tregua indefinida a su proyecto con dos conciertos en Madrid. Horas antes de llenar la sala en la primera cita, visitan la redacción de El Salto.
Culturas
Cultura Máis de 30 artistas esixen aos catro festivais galegos de KKR que cumpran coas demandas do pobo palestino
Bandas como Bala, Highpaw, O Leo de Matamá, Dakidarria, Zénit, Hugo Guezeta ou Teresa Ferreiro apoian publicamente as demandas da maior coalición da sociedade palestina contra o fondo proisraelí.
Baleares
Un modelo insostenible El rechazo a la turistificación se expande en Canarias, Baleares y Barcelona
Tras la masiva manifestación en las Islas Canarias del pasado mayo, Palma de Mallorca, Barcelona y San Sebastián salen este 15 de junio a la calle contra un modelo de turismo desmedido insostenible para el territorio y sus habitantes.
Oriente Medio
Oriente Medio Decenas de muertos en una noche de sirenas y misiles cruzados entre Israel e Irán
Después del ataque israelí contra la infraestructura energética y militar iraní, cientos de misiles iraníes atraviesan el cielo israelí e impactan en Tel Aviv, Bat Yam, Tamra y Haifa.
Madrid
Movimiento republicano Miles de personas claman en Madrid contra la monarquía y por la República
En el 11 aniversario de la proclamación de Felipe VI, una marcha unitaria reclama que este reinado sea el último de España.
Violencia machista
El Estado que revictimiza Violencia institucional: “Si lo hubiera sabido antes, no hubiera denunciado nunca”
Rocío ha sufrido violencia psicológica, física y sexual por parte de su expareja. Y también violencia institucional en todas las puertas de la red de recursos institucionales que ha ido atravesando.
Crónica
Justicia En la sala de un juicio a una madre protectora
Esta es una crónica de un juicio a una mujer que pidió medidas por sospechar de abusos sexuales a su hija en el domicilio paterno sin que ninguna institución moviera un dedo y, un mes después, cogió un vuelo a su país para intentar protegerla.
Editorial
Editorial Justicia irracional
Por acción o por omisión, las instituciones violentan a las mujeres. Se llama violencia institucional.
Relato
Relato Rendirse
A mi pesar me tocaba compartir mesa con aquellos documentos y, como estaba de los primeros (no lo habría imaginado al llegar), ya no conseguía quedar por encima, con lo que me gusta.
Rap
Rap Los Chikos del Maíz: “La música urbana está llena de fachas y votantes de Vox”
Tras un fin de gira accidentado, Toni y Nega dan una tregua indefinida a su proyecto con dos conciertos en Madrid. Horas antes de llenar la sala en la primera cita, visitan la redacción de El Salto.
Río Arriba
Río Arriba Luis González Reyes: “Vivimos en un mundo en la que la escasez es un elemento central”
Primera entrevista del programa Río Arriba en formato podcast y vídeo donde hablamos de las nuevas guerras neocoloniales por recursos en la era de Trump y Putin, de la escasez, del decrecimiento y el colapsismo.
La vida y ya
La vida y ya Un rato de cada lunes
Pero, lo más coincidente ha sido, expresado de distintas maneras, su agradecimiento hacia ese lugar. Su lugar elegido.

Últimas

Ocupación israelí
Movilizaciones Un centenar de organizaciones de 26 países denuncian a la empresa vasca CAF y su tren del apartheid
Más de 50 localidades salen a la calle este fin de semana para señalar a la empresa que construyó el tranvía que conecta Jerusalén con territorio ocupados y exigir el fin del genocidio en Gaza.
Ocupación israelí
Ocupación Israelí La policía egipcia impide con violencia la marcha internacional a Gaza
La marcha de 4.000 personas a Gaza es reprimida por la policía del régimen de Al-Sisi. La organización pide a las embajadas que reaccionen y protejan a sus ciudadanos.
Galicia
Crowdfunding O Salto Galiza abre un crowdfunding para empapelar a Altri
Queremos investigar a los responsables políticos y empresariales del que podría ser el mayor atentado ambiental de la historia reciente de Galicia.
Que no te lo cuenten
El Salto Radio De océanos y detenciones
VV.AA.
La acidificación del agua marina supera sus límites mientras Israel aborda la Flotilla por la Libertad.
Relato
Relato Rendirse
A mi pesar me tocaba compartir mesa con aquellos documentos y, como estaba de los primeros (no lo habría imaginado al llegar), ya no conseguía quedar por encima, con lo que me gusta.
Más noticias
Análisis
Análisis del CIS La calma antes de la tormenta: la dimisión de Santos Cerdán como punto de inflexión
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha muerto pocas horas después de nacer por la dimisión de Santos Cerdán, aunque sirve como foto fija de un escenario que favorece a la derecha.
Argentina
Extrema derecha La motosierra de Milei se ceba con los hospitales públicos y las personas con discapacidad
Los recortes del Gobierno afectan al Hospital Garrahan, un centro de alta complejidad, referente pediátrico nacional y latinoamericano, y también a los recursos de las personas con discapacidad, a los que el ejecutivo califica de “idiotas”.

Recomendadas

Pensamiento
Economista Clara Mattei: “El liberalismo y el fascismo están unidos en su protección del orden del capital”
El ambicioso ensayo 'El orden del capital' nos traslada al Reino Unido y la Italia de la I Guerra Mundial, que se contemplan como un momento bisagra: el auge de socializaciones y cooperativizaciones que tuvo lugar durante la contienda y la inmediata posguerra fue abortado a través de un 'shock' austericida destinado a restaurar la centralidad de los grandes capitales.
Derecho a la vivienda
Jaime Palomera “La vivienda necesita una revolución”
Investigador y uno de los fundadores del Sindicat de Llogateres, Jaime Palomera presenta ‘El secuestro de la vivienda’, un libro sobre el juego amañado en el que los propietarios son cada vez más ricos y los inquilinos cada vez más pobres.
Redes sociales
Industria editorial Escritores fantasma: así trabajan los auténticos autores de los libros de éxito que publican los ‘influencers’
Detrás de cada libro firmado por un ‘influencer’ hay otra persona que ha trabajado a destajo para entregar a tiempo un texto en el que su nombre no aparece por ninguna parte y que, además, ha tenido que renunciar a sus derechos como autor.
Brasil
Extrema derecha Arte en tiempos de fascismo: cuando enseñar a Goya y Rubens le cuesta el puesto a un profesor
Una clase de Historia en la escuela municipal en una localidad del Estado de São Paulo desemboca en acusaciones contra el profesor y una campaña de difamaciones que encabeza el concejal de educación de la zona, de la extrema derecha bolsonarista.