Música
Narco-rumba: contar lo que ves

Nadie se va a poner a traficar por escuchar una narco-rumba ni se va a meter a sicario por escuchar un narcocorrido, pero es cierto que esta música contribuye a ensalzar la misoginia, el consumismo desaforado, la violencia contra los de abajo y la competición salvaje por el beneficio económico.
18 feb 2022 06:00

Ice Cube estaba harto, le preguntaban lo mismo una y otra vez en todas las entrevistas, aquello era un infierno. Todos los periodistas esperaban un titular escandaloso, algo que pudiesen poner en letras bien grandes en el periódico del día siguiente. Tenían la esperanza de provocarle lo suficiente como para que saltase, para que dijese algo que confirmase sus prejuicios sobre los agresivos y violentos chicos negros de los guetos. A Ice Cube le importaba una mierda lo que pensasen de él aquellos hipócritas, pero ese día no les iba a dar lo que querían. Así que cuando aquel periodista con cara de idiota le preguntó si creía que alentaba la violencia con las letras de sus canciones, suspiró, se le acercó lo suficiente para que lo oyese claro y le dijo: “Mira, contamos las cosas como las vemos. Ni más ni menos”.

El gangsta rap era violento porque hablaba de una realidad violenta, porque la violencia era el día a día de las personas que habitaban los barrios donde había surgido

Ice Cube tenía razón. El gangsta rap era violento porque hablaba de una realidad violenta, porque la violencia era el día a día de las personas que habitaban los barrios donde había surgido. Por supuesto, su visión no era neutral, ninguna lo es. Su punto de vista era el del habitante del gueto, el del chaval al que la policía le ha reventado las costillas de una patada, el del que se ha comido cinco años de cárcel por llevar un gramo encima, el del camello, el del miembro de una banda. Pero nadie lo decía en los debates que llenaban horas y horas de televisión, todo se reducía a tópicos culpabilizadores o a condescendencia paternalista: todos querían meter entre rejas a aquellos delincuentes violentos o salvar a aquellas pobres víctimas del sistema.

A pesar de su contundencia, la respuesta de Ice Cube no zanjó el debate. Treinta y cinco años después lo hemos visto resurgir decenas de veces. Aunque en esta ocasión su repercusión fue más local, una de las últimas fue con la aparición hace tres años de la canción “Contrabando”, de Bernardo Vázquez, que enseguida recibió el nombre de “narco-rumba” por el paralelismo con los narcocorridos mexicanos. La letra y el videoclip están lejos de las exhibiciones de armas y la glorificación de las gestas heroicas de los narcotraficantes que aparecen en los narcocorridos —de hecho, aquí acaban detenidos por la Guardia Civil—, pero sí comparte con ellos el uso que hacen los propios narcotraficantes de este tipo de música, que es entendida como una forma de conseguir estatus y prestigio.


Los protagonistas del videoclip son miembros de Los Titi, una de las bandas dedicadas al narcotráfico en Campo de Gibraltar, que también prestó los coches de alta gama, las lanchas y los todoterrenos que aparecen en el vídeo. No eran los primeros que lo hacían: un miembro de Los Castañas, otra banda de la zona, había protagonizado un videoclip de reguetón mientras se encontraba en busca y captura por la policía un año antes.

Es cierto que estas canciones buscan más describir a los narcotraficantes que defenderlos, pero también es verdad que, al hacerlo,  acaban magnificando esa forma de vida

Vázquez se defendió negando que su canción hiciese apología del narcotráfico. Podría haber dicho lo que dijo Ice Cube y habría sido cierto: solo contaba lo que veía. Pero tanto Cube como Vázquez saben también que eso es solo una parte de la verdad. Es cierto que estas canciones buscan más describir a los narcotraficantes que defenderlos, pero también es verdad que, al hacerlo, acaban magnificando esa forma de vida. Nadie se va a poner a traficar por escuchar una narco-rumba ni se va a meter a sicario por escuchar un narcocorrido —se hace por otras cuestiones que no por casualidad siempre quedan fuera del debate, como la falta de salidas o la pobreza—, pero es cierto que esta música contribuye a ensalzar la misoginia, el consumismo desaforado, la violencia contra los de abajo y la competición salvaje por el beneficio económico. Lo que no se dice, claro, es que estos mismos valores son los que fomenta el capitalismo continuamente en muchas otras de sus manifestaciones culturales, aunque lo haga de forma más velada, con una apariencia pensada para agradar a un gusto más contenido y menos ostentoso. Al fin y al cabo, el narcotráfico es capitalismo en su forma más pura: si al capitalismo le quitas las regulaciones legales, los derechos laborales, los sindicatos y los impuestos, lo que queda son las lógicas de funcionamiento del narcotráfico.

“¿Quién es el verdadero gansta? —se preguntaba Coolio, de los Maad Circle, en una entrevista por aquella misma época—, ¿el hermano de los pantalones caqui o el cabrón del traje?”. “Bueno —contestaba su compañero de banda W. C.—, el del traje es el que gobierna el mundo así que él es el verdadero gansta”. Unos y otros, además, no están en la misma posición. Mientras los segundos tienen todas las opciones a su alcance, los primeros solo intentan sobrevivir en unas condiciones de violencia estructural extrema. Y, como se pregunta Belén Gopegui en Existiríamos el mar, ¿se puede ser injusto cuando no se tiene elección? O, como decía Coolio, “en la tele y en la radio dicen que tienes elección, pero eso son gilipolleces”.

Archivado en: Música
Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Música
Música Un coro para homenajear las luchas obreras: “La canción protesta del pasado es historia viva”
El coro de canción protesta de Madrid nació para rescatar del pasado las tonadas de la lucha obrera y ponerlas al servicio de distintos activismos en el presente.
Entrevista La Poderío
Entrevista La Poderío “Desde fuera se romantiza la maternidad, y aunque es bonita, siempre hay millones de dudas”
Escuchar a Rita Payés (Vilassar de Mar, 1999) es verdad, belleza, elegancia y emoción; un culto a la música que trasciende a la herencia o a la tradición. La música de Rita es disfrute y amor sincero hacia el cuarto arte. Un regalo.
Música
Kaparrak “Runba abstraktua egiten dugu eta norberak interpreta dezala”
Aretxabaletako Kaparrak taldeak euskarazko abestiak egitea finkatu du bere helburuen artean eta “harriduraz” hartu du Alex Sarduiren parean jarri dituen polemikak
Oriente Próximo
Oriente próximo La diáspora kurda ante la caída de Bashar al-Assad
Siria enfrenta el fin de un régimen que durante décadas pareció inquebrantable. Desde la diáspora, la esperanza contenida de quien ha vivido demasiadas traiciones y promesas incumplidas.
Amazonía
Caso Chevron Pablo Fajardo: “Sacrificaron la Amazonía y la vida de la gente por racismo y por la ganancia económica”
El activista y abogado Pablo Fajardo fue elegido hace casi 20 años por la Unión de Afectados por Texaco para el juicio más importante contra la petrolera Chevron. Dos décadas después sigue luchando por la justicia ambiental y social en Ecuador.
Ley de Seguridad Ciudadana
Congreso de los diputados Reforma de la Ley Mordaza: ¿esta vez sí se puede?
Una de las mayores deudas de toda la izquierda del Estado español parece que está a punto de saldarse.
La vida y ya
La vida y ya Ya no sé quién vive en el primero
El barrio se ha transformado tanto que pueden pasar semanas sin ver por la calle una sola cara conocida porque los vecinos han sido sustituidos por turistas.
Análisis
Análisis El independentismo se reorganiza, pero ¿sigue siendo independentista?
Los partidos independentistas han sufrido la crisis del procés y el posprocés, y todavía no la han resuelto, sino, a lo sumo, la han aplazado. El PSC aparece como el ganador de una carrera con corredores agotados.
Que no te cuenten películas
Comunidad El Salto Suscríbete a El Salto y llévate seis meses de regalo a Filmin
Estas navidades, haz posible que El Salto llegue más lejos con sus contenidos críticos y llévate de regalo medio año de Filmin. Y si ya tienes Filmin, suscríbete a El Salto y regala el acceso a esta plataforma a quien quieras.
Análisis
Análisis Rojava en peligro
Las intenciones de Turquía en Siria ponen en peligro no solo la Administración Democrática Autónoma del Norte y Este de Siria (AADNES) sino también la convivencia del resto de minorías presentes en el país.
Literatura
Gustavo Faverón Patriau “Quizá la novela sea ahora mismo más relevante que nunca”
El escritor peruano Gustavo Faverón Patriau quería narrar en su nueva novela la historia de un boxeador que no sabía boxear pero tumbaba a sus rivales recitándoles al oído versos de César Vallejo. ‘Minimosca’ acabó siendo un cuentacuentos inagotable.
Galicia
Memoria histórica Así fue como el Patronato de Protección a la Mujer transformó Galicia en un convento de clausura
Las mujeres que cayeron en las redes del Patronato iniciaron un periplo de encierro, humillaciones, abusos y explotación que es desconocido para la mayor parte de la población. Queda hoy en la impunidad de un silencio que tenemos el deber de romper.

Últimas

Opinión
Tribuna Todas las razones para decir ‘Altri non’
Aquí van unos cuantos motivos para juntarnos este domingo en Compostela y dejar clara nuestra postura frente a un expolio que nos están tratando de imponer disfrazado de progreso, pero que sólo trae beneficio económico a unos cuantos indeseables.
Relato
Relato Descubrirse las manos
Descubres tus manos: el palmar y el dorso, la posibilidad futura de la pinza atrapacosas, dos miembros que te vinculan al chimpancé y al lémur. Aprendes su mecanismo.
Música
Música Un coro para homenajear las luchas obreras: “La canción protesta del pasado es historia viva”
El coro de canción protesta de Madrid nació para rescatar del pasado las tonadas de la lucha obrera y ponerlas al servicio de distintos activismos en el presente.

Recomendadas

Palestina
Eyad Yousef “No cuentes lo que queremos ser, cuenta lo que nunca hemos dejado de ser: un pueblo que quiere la paz"
Eyad Yousef es profesor en la Universidad de Birzeit, Cisjordania, y comparte su experiencia en una universidad que “representa el pluralismo y la libertad que tanto anhela la sociedad palestina”
Pensamiento
Sarah Jaffe “En realidad tenemos que hacer menos. E impedir que algunas cosas sucedan”
La escritora y periodista Sarah Jaffe aborda el desengaño cotidiano al que nos aboca el mundo laboral e investiga cómo, a pesar de todo, las personas se organizan colectivamente en sus empleos para que “trabajar apeste menos”.
Ocupación israelí
Palestina Vivir en alerta: la resistencia palestina frente la ocupación israelí
La cruda realidad de las feministas palestinas que, ante la represión y las detenciones arbitrarias, continúan su lucha por la libertad, la justicia y los derechos humanos.
Madrid
Ciudades Fake Madrid, un paseo por los hitos del simulacro
Un recorrido por los grandes éxitos de la conversión de Madrid en una ciudad irreal.