Laboral
CGT se moviliza contra la prórroga del convenio de Primark para tres años

Quien acudiera el sábado a comprar a una de las tiendas más concurridas de la Gran Vía madrileña, Primark, se encontró con una concentración de sus trabajadores convocada por el sindicato CGT. Se reunían precisamente en este comercio al ser el que cuenta con más plantilla y que es una de las tiendas que más factura en el mundo de la cadena irlandesa. En la concentración reclamaban un convenio estatal con mejores condiciones al considerar que la prórroga firmada en el mes de noviembre no cubre las mejoras reclamadas por este sindicato.

Para CGT, CCOO y Fiteco, los sindicatos que han firmado el nuevo acuerdo para los próximos tres años “se han vendido”. “Han contado a medias lo firmado”, se queja Sheila Chinchón, delegada sindical de CGT Primark de Gran Vía, ya que considera que un 3% de subida salarial es muy insuficiente, sobre todo para las personas que tienen jornadas parciales inferiores a 25 horas, que es un porcentaje alto de la plantilla. “Nos han encerrado en ese 3% para los próximos tres años, sin tener en cuenta lo que puede llegar a subir el coste de la vida”, considera Chinchón, que asegura que ni la empresa ni los sindicatos firmantes “han escuchado a su plantilla, no han tenido interacciones con los trabajadores y se sienten vendidos”.

CGT considera insuficiente para los trabajadores de la tienda de Gran Vía, unas mil personas de las 7.000 aproximadamente que trabajan para Primark en España

Esta subida salarial se traduce en 40 euros mensuales más para quien trabaja 40 horas semanales, pero resulta insuficiente para quien trabaje 30 o 20 horas. Una mejora insuficiente sobre todo, considera CGT, para los trabajadores de la tienda de Gran Vía, unas mil personas que suponen un porcentaje muy alto de las 7.000 aproximadamente que trabajan para Primark en España. “Los dos últimos años, durante todo el año, hemos tenido una afluencia tremenda”, explican y solicitan un plus por el esfuerzo que conlleva trabajar en esa tienda, que no ha sido recogido en la nueva prórroga.

Por su parte, CCOO asegura a El Salto que consideran que ha sido “un buen acuerdo”. “Los puntos que han mejorado bastante la situación de la plantilla han sido reducir la jornada anual a 1.755 horas; pocos convenios en el sector del comercio han llegado a tal reducción”, defiende Rosario Carmona, secretaria general de CCOO de Primark. “Nos hemos puesto en un salario de 22.057 euros al año”, explica la representante sindical e indica que la reducción de jornada ya repercute en la antigüedad y en el salario hora. “Una de las cosas que más se resistía la empresa y que era una línea roja para nosotros fue la jornada irregular: ya en el convenio anterior teníamos el 5%, pero la empresa quería incrementarlo, y hemos logrado mantenerlo”.

“Hemos logrado 12 fines de semana al año, cuando en otros convenios hay seis como mucho”, explica la delegada sindical de CCOO

Carmona destaca el incremento en los precios de los domingos en un 38% y que han logrado aumentar los descansos cualificados, que es descansar los sábados y domingos. “Hemos logrado 12 fines de semana al año, cuando en otros convenios hay seis como mucho”, explica la delegada sindical. Para CGT “una subida entre cinco y 15 euros en tres años” por trabajar un festivo no es suficiente. “Han negociado por debajo de lo anterior, porque para quien trabaje más de seis horas supone cobrar unos 40 €; para quien trabaje ese día cinco horas son 33,33 €, y con cuatro horas son 26,66 €, totalmente insuficientes”, explica Chinchón.

Otro punto que pone sobre la mesa CGT es la antigüedad, ya que en una plantilla con unas jornadas muy parciales supone muy poco importe para ellos: sería un plus de 16,19 euros al mes por una antigüedad de cuatro años para una jornada de 30 horas; de 30,48 € para quien lleve ocho años; o 43,26 € si lleva 12 años o más. Para CCOO, explican, “es cierto que las cantidades no se incrementan, pero sí que lo hace la jornada laboral, porque cuanto menor sea la jornada anual, el salario hora aumenta, al igual que el precio hora nocturna y la antigüedad”. Como la antigüedad se paga por precio hora, que no es una cantidad fija, entienden que ya mejora.

La situación de las personas mayores de 50 años también estuvo presente en la concentración que piden adecuación de su puesto por el peso, por tener que agacharse o estar en pie muchas horas

La situación de las personas mayores de 50 años también estuvo presente en la concentración del pasado sábado, donde acudieron trabajadores y trabajadoras de otros centros de Primark, incluidas otras ciudades como Castellón. “Yo tengo 35 años y tengo la espalda mal de recoger peso, arrastrar productos… no me puedo imaginar cómo estará una persona de 50 años”, comenta la delegada sindical de CGT, que pone como ejemplo lo que supone recoger todo el calzado que se prueba la gente en una tienda como la de Gran Vía. “Implica estar agachándose todo el tiempo, llevar mucho peso en los raíles para repartir los productos por todos los departamentos o estar en caja tres o cuatro horas sin poder sentarte en ningún momento”, detalla, ya que “los volúmenes de ropa que entran son diferentes a los de cualquier otra tienda; es muy diferente, también lo que hay que colocar”. Por eso piden una adaptación del puesto que no ha entrado en la prórroga del convenio.

“Indudablemente nos preocupan todos los colectivos, pero se tiene que intentar favorecer al mayor número de plantilla posible”, explican desde CCOO al no haber podido tratar el punto de la adaptación de los puestos en la negociación con la empresa, y aclaran que “hemos tratado que a la gente no se le bajen las horas trabajadas, sino que su precio hora aumente”. “Es un buen convenio porque nos ponemos en unos salarios que pasan de 22.000 euros solo en salario base a los tres años; dentro del sector, está muy bien”, dice, y compara con el convenio provincial de Madrid.

Respecto a la duración de la prórroga, CCOO asegura que “la duración de un convenio va en función de las condiciones que puedes conseguir; nosotros vimos que podía ser y por eso firmamos tres años”. “Si lo que había no nos hubiera gustado, hubiéramos recortado la duración”, asegura Carmona.