Criterio propio

Me doy cuenta de que no tengo criterio propio, y de que a pesar de lo que yo enarbolo esa frase a diario, no sé muy bien lo que esto significa para mí
19 abr 2020 12:52

Cada vez tengo menos certezas y este tiempo de ‘confinamiento forzoso’ solo hace más que aumentar esta impresión.

Por un lado, están las paradojas o contradicciones que percibo, que me doy cuenta, al leer de un amplio espectro de opiniones, en los diferentes medios de comunicación que leo habitualmente, y que procuro que estén documentadas y contrastadas suficientemente—no doy crédito a la primera opinión que se me cruza—pero que aun así, esas contradicciones son imposibles de evitar que se produzcan en cuanto lees de aquí de allá y de acullá—ya sé que es algo netamente humano esto de la contradicción—pero lo más interesante de todo esto son las paradojas, el balancé, que se produce de un extremo a otro, entre mis propios extremos, entre mis propios opuestos, contradictorios, que hay en mí mismo, ya de por sí.

Por otro lado está la incertidumbre que está generando esta transición hacia la ‘nueva normalidad—como lo ha dado en llamar el actual gobierno—y de la que se desprende que va a ser lenta, costosa socialmente por la gran desigualdad y desprotección que está generando ya, y económica por lo que nos va a costar a todas las personas y el endeudamiento subsiguiente que va suponer durante años, y que nos pone contra las cuerdas, porque evidencia la necesidad, largo tiempo denunciada, de una renovación del modelo productivo y del consumo general de las sociedades modernas, necesitado de encontrar una sustentabilidad, un equilibrio que respete a la naturaleza, escasa de recursos no renovables y de las poblaciones que viven a expensas de esos recursos, en este maravilloso Planeta que tenemos la suerte de habitar.

A resultas de todo este proceso, la consecuencia es que cada vez tengo menos certezas.

Y la reflexión que me propongo con este escrito es darme cuenta de que no tengo criterio propio, y de que a pesar de lo que yo enarbolo esa frase a diario, no sé muy bien lo que esto significa para mí.

Y es por esta razón por la que he decidido pausar temporalmente mis accesos a ‘Facebook’ (solo tengo esa red social y el wasap, pero podría ser cualquier otra) o minimizar mis lecturas en el amplio marco de diarios digitales del que bebo—diarios no generalistas todo hay que decirlo—(y no voy a entrar aquí en disquisiciones políticas de fondo, que las hay también) para centrarme en las respuestas a estas preguntas.

¿Cuál es mi criterio propio?

¿Bebe éste, de diversas fuentes—para enriquecerse con la diversidad de dichas fuentes—a sabiendas de que eso me va a llevar a contradicciones?

¿Cómo manejo esas contradicciones propias para conmigo mismo y mi sentido de la coherencia y la mesura?

¿Cuáles son las lecciones personales, las actitudes a revisar—que debo aplicarme yo—en este tiempo tan enrarecido que nos ha tocado vivir?

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