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Ecologismo
Luz verde a la línea de Muy Alta Tensión Morella-La Plana: “Es pan para hoy y hambre para mañana”
El Ministerio de Transición Ecológica ha autorizado las obras de la línea de Muy Alta Tensión (MAT) Morella-La Plana, uno de los proyectos que más polémica ha generado en la provincia de Castelló en los últimos años. La MAT diseñada por Red Eléctrica Española (REE) contará con 189 torres eléctricas de una altura entre 42 y 46 metros con una tensión nominal de 400 kilovoltios. Un recorrido de 86 kilómetros para conectar la subestación de Fraiximeno, en Morella, con Almassora. La infraestructura eléctrica de doble circuito atravesará 16 términos municipales en su recorrido: Morella, Cinctorres, Castellfort, Vilafranca, Ares, Benassal, Torre d'En Besora, Culla, Atzeneta, Les Useres, Vall d'Alba, Vilafamés, Sant Joan de Moró, Borriol, Castelló y Almassora. Jesús Broch, coordinador del colectivo No a la MAT comarques de Castelló, resume su percepción del proyecto con una ilustrativa frase: “Pan para hoy y hambre para mañana”.
La línea Morella-La Plana cuenta con la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), y pese a ello ha llevado a numerosos movimientos sociales e incluso divisiones entre vecinos y alcaldes de las localidades implicadas. Paco González, portavoz del Grupo de Estudio y Conservación de Espacios Naturales (GECEN), opina que la MAT es un elemento “altamente destructivo” del paisaje. También Broch ve “una lástima” convertir en industrial el suelo rústico: “No pueden vender el patrimonio natural y el paraje milenario por cuatro perras”.
Impactos
Miguel Ángel Troncho, una de las caras más visibles de la plataforma No a la MAT de la comarca Els Ports, señala que la empresa no explica los efectos que provoca a la salud, lo cual considera el mayor problema: “La gente se queda con el impacto visual y es el menor de los daños, de hecho, cuanto más altas sean las torres, menos afectan a la salud y al medio ambiente”, explica. La ONU advierte que por cada kilovoltio debería haber un metro de distancia, por lo que para garantizar la salud pública tendría que mantenerse 400 metros por cada lado de la línea. Sin embargo, González asegura que la MAT pasa por encima de núcleos habitados. Además, el representante del GECEN añade: “Estamos ante aumentos drásticos de leucemia, especialmente infantil, cáncer de mama, de pulmón, cerebral, Alzheimer, depresión, problemas de corazón o cambios de conducta”.
El trazado atraviesa una zona de especial protección para las aves y afecta a varios parajes naturales, a trece hábitats de interés comunitario, a cinco microreservas vegetales, a una reserva de fauna, a una cueva catalogada y a dos zonas importantes para la conservación de las aves, entre otros
Más allá del impacto visual y las afecciones en la salud, los defensores del “No a la Mat” consideran que implicará una alteración en el ecosistema. El trazado atraviesa una zona de especial protección para las aves y afecta a varios parajes naturales, a trece hábitats de interés comunitario, a cinco microreservas vegetales, a una reserva de fauna, a una cueva catalogada, a dos zonas importantes para la conservación de las aves (ZICA), así como a zonas de nidificación de aves protegidas, lugares de interés comunitario (LIC) y está próximo a 110 edificaciones. Las voces más críticas del proyecto también tachan la legislación de “laxa”. “La administración ha ablandado las protecciones para facilitar los proyectos por los lobbies de presión que generan estas macroempresas. Están aprovechando la excusa de la emergencia climática y la guerra para acelerarlo sin un estudio de impacto medioambiental”, indica Troncho.
Sin embargo, desde Red Eléctrica Española (REE) afirman que el objetivo es “minimizar la afección e incrementar la distancia a los núcleos habitados”. Maite Vela, directora de REE en la Comunidad Valenciana y Murcia, asegura que “el trazado actual será desmantelado y dará paso a otro diseñado con criterios de sostenibilidad. La nueva línea tendrá un 25% menos de apoyos, las llamadas torres”. También menciona que el trazado discurre en paralelo al recorrido de la actual línea, con el objetivo de aprovechar el pasillo de infraestructuras, salvo en las zonas donde era ambiental y socialmente mejorable: “Se ha tenido en cuenta la integración paisajística de la línea, colocar apoyos en las zonas más altas para reducir la visibilidad. La línea incorporará medidas preventivas y de mejora ambiental como la instalación de dispositivos salvapájaros para evitar colisiones o la adaptación de las obras a las épocas de menor sensibilidad para especies nidificantes”, defiende Vela.
Despoblación
La generación de puestos de trabajo y con ello el control de la sangría demográfica que sufren centenares de pueblos del interior es uno de los argumentos para ver con buenos ojos la implantación de parques eólicos y con ello las líneas de evacuación. La Memoria sobre la situación Socioeconómico y Laboral de la Comunitat Valenciana del 2020 publicada por el Comité Económico y Social (CES) apunta a que el número de municipios en riesgo de despoblación en el año 2020 fue de 171, donde más de la mitad se encontraban en la provincia de Castelló. Sin embargo, quienes proclaman el lema “Renovables sí, pero no así”, aseguran que estos proyectos no van a solucionar el problema.
Fernando Navarro, concejal de transición ecológica en el Ayuntamiento de Castelló y portavoz de Podem-Esquerra Unida, no considera que los lugares de trabajo generados vayan a ser beneficiosos en el futuro: “El argumento de los puestos de trabajo obvia los impactos a largo plazo, si tiene un impacto sobre el sector primario a la larga va a ser perjudicial”. Además, Navarro añade: “Se está haciendo elegir entre el interés económico a corto plazo y el interés medioambiental y económico a la larga”.
“El argumento de los puestos de trabajo obvia los impactos a largo plazo, si tiene un impacto sobre el sector primario a la larga va a ser perjudicial”, asegura Fernando Navarro, concejal de transición ecológica en el Ayuntamiento de Castelló
Miguel Troncho, que además reside en la masía Freixemeno, a las puertas de la subestación, asegura que por mucho que se justifique la instalación por la necesidad de generar puestos de trabajo, por la mejora de comunicaciones y freno a la contaminación, “todo eso es mentira”. “En la comarca de Els Ports hace años que hay aerogeneradores y la despoblación ha sido mucho más alta”, añade. También considera que tendría repercusiones en el turismo, sector importante en la economía de localidades afectadas: “Si pones en una balanza los 70 puestos de trabajo directos que supuestamente genera con los que se pierden, los números son claros”.
De igual forma, Paco González declara que no son consolidadores ni de puestos de trabajo ni de población, y señala a una especie de abuso del poder haciendo alusión a que REE, la empresa que instala la línea de evacuación, aporta una compensación económica a ayuntamientos y propietarios de las tierras donde instalan una torre: “Medio te obligan a aceptar, porque a ver quién renuncia a esa cantidad de dinero, es abusar de pueblos pequeños, del más débil, del que está en un estado de vulnerabilidad económica”.
“Alcaldes y distintos poderes hacen la vista gorda porque genera dinero rápido. Estamos dando la espalda a nuestro patrimonio, vendiendo a precio de saldo nuestro territorio a cambio de un extractivismo que no sabemos si va a perdurar”
En la misma línea, González ve el aporte económico una medida que pierde su utilidad a la larga: “Las migajas económicas que proporcionan van muy bien, es una fuente económica caída del cielo —o del viento— pero es cortoplacista, es pensar en una economía de los próximos años a cambio de destrozar tu paisaje y tu municipio”. Jesús Broch, quien también es periodista y miembro de la Plataforma a favor de los paisajes de Teruel, observa que “alcaldes y distintos poderes hacen la vista gorda porque genera dinero rápido. Estamos dando la espalda a nuestro patrimonio, vendiendo a precio de saldo nuestro territorio a cambio de un extractivismo que no sabemos si va a perdurar”. El activista compara el boom de las energías renovables con la burbuja inmobiliaria: “La nueva burbuja de las renovables acabará en mega centrales a mitad hacer, cogerán el dinero y se irán”.
En España hay grandes diferencias en cuanto a producción de energía eólica. La comunidad que más parques eólicos alberga en su territorio es Castilla y León, seguida de Aragón y Castilla-La Mancha. Voces que luchan contra los macroproyectos eléctricos, y por ello contra la MAT, critican que estos clústeres tengan que instalarse en el medio rural, que son zonas de especial riqueza medioambiental. González explica que van donde es más sencillo instalarlas, pero no donde es óptimo: “Utilizan el interior, como siempre se ha hecho, para producir una energía que allí no se va a consumir a cambio de cuatro duros”. “También hay brisa en las costas o en Madrid. Al final todo se genera en las zonas más desfavorecidas, en la España vaciada, te cargas el pulmón verde para generar energía y con ella continuar contaminando”, declara Troncho. “En polígonos industriales se dan las condiciones, pero aquí el suelo rústico es barato y no va a tener protecciones”, añade Jesús Broch, quien también indica que el gobierno valenciano “tendría que hacer un plan de ordenación del territorio y bonificar las zonas más degradadas”.
“También hay brisa en las costas o en Madrid. Al final todo se genera en las zonas más desfavorecidas, en la España vaciada, te cargas el pulmón verde para generar energía y con ella continuar contaminando”, declara Troncho
La directora de REE en la Comunidad Valenciana lo ve desde otro punto de vista: “Constituye una actuación estratégica para el impulso del desarrollo socioeconómico e industrial de la Comunidad Valenciana. Es una infraestructura que aportará energía imprescindible para la recuperación económica de la provincia al reforzar la garantía de suministro”. Además, añade que dará cauce al avance de la transición energética: “Contribuirá a la máxima sostenibilidad, eficiencia y fiabilidad del suministro eléctrico”, asegura.
Transición ecológica
La función de las líneas de alta tensión es evitar pérdidas al transportar a una distancia más larga. Las líneas existentes que recogen la energía de los parques de Renomar tienen una potencia de 132kW, en Fraiximeno se transformará a 400kW para enviarla. De la energía renovable que se consume en el País Valencià, más del 35% se produce en el norte de la provincia de Castelló, de la cual Troncho asegura que consumen el 0% en la comarca. “No pedimos que no se hagan, sino que se hagan con criterio y de autoconsumo, que se construyan en las zonas donde se consume y lo necesario. No hay ninguna energía que no genere impacto, lo que hay que hacer es que sea el mínimo”, manifiesta.
Datos de la REE indican que en los últimos años se consume menos energía que antes, en los dos primeros meses de 2022 la demanda es un 2,7% por debajo de la de 2021. Cifras que hacen que gente como Troncho no considere necesarios más proyectos eléctricos: “Estamos generando más megavatios de los que se consumen, se tiene que generar energía limpia para reducir las energías más contaminantes como el carbón o nucleares, pero de manera ordenada”. Navarro también ve que no es una energía eterna ni renovable al 100%, pero añade que en una transición energética que se desconecten los combustibles fósiles “la eólica va a jugar un papel central”.
De igual forma, González señala que desde GECEN optan por otras opciones como localizar la energía donde se consume: “No se justifica por ninguna necesidad habiendo modelos sostenibles para la transición energética basados en proximidad y en las comunidades energéticas”. “El trazado podría ser otro con una aceptación en el territorio menor y se ha obviado por la reducción de costes. Si para la transición energética se va a dejar de lado la biodiversidad y el medio ambiente, es una contradicción que no debemos aceptar”, indica Navarro.
Troncho apunta a que parte de la aceptación social se debe a la desinformación y al pesimismo: “Están ofreciendo cantidades de dinero ridículas, pero terrenos abandonados o propietarios que no viven aquí les van bien esas cantidades, además una parte de la población está desanimada porque ve que lo van a hacer igualmente. Las empresas juegan con dividir a la población y amenazar, porque al ser de utilidad pública pueden expropiar”.
“Están ofreciendo cantidades de dinero ridículas, pero para terrenos abandonados o a propietarios que no viven aquí les van bien esas cantidades, además una parte de la población está desanimada porque ve que lo van a hacer igualmente. Las empresas juegan con dividir a la población y amenazar, porque al ser de utilidad pública pueden expropiar”
El jueves acaba el periodo de alegaciones para la ampliación de Fraiximeno, y las obras cada vez se ven más cerca. Sin embargo, muchos aún sostienen que el proyecto finalmente no se llevará a cabo. El portavoz de Podem-Esquerra Unida lo tiene claro: “A nivel medioambiental tenemos las garantías para que el proyecto tal y como está planteado no se desarrolle”. Pero Broch no lo ve así: “Caiga quien caiga, van a intentar por todos medios desarrollarlo, espero que no se vea el modelo de industrializar el mundo rural, pero será difícil pararlo, hay carta blanca hacia el modelo de colonialismo energético rural y REE y Forestalia tienen mucho poder”, asevera. Troncho también opina que la línea se va a hacer igual: “Pero en zonas más conflictivas, más pobladas y con más oposición, pagarán más. A finales de este mes van a empezar las obras, algún trazado y la ampliación de la subestación”.
La MAT tendrá importantes afecciones en la provincia, especialmente en la comarca de Els Ports porque, además de la línea de Red Eléctrica, está sobre la mesa la línea de evacuación de Forestalia que conectará el clúster Maestrazgo-Gúdar con Fraiximeno. Por eso quienes defienden el territorio perciben necesario informarse, estudiar bien las consecuencias y valorar los beneficios del sí o el no a la MAT antes de monetizar los recursos naturales existentes. Dicen que una elección no es libre si ambas opciones que se plantean son injustas: ahora los gigantes del Quijote han llegado a las comarcas del interior y debemos ir acostumbrándonos a estas siglas.