Argentina
Postales de una rebelión estudiantil contra Milei

Con el triunfo de Javier Milei, hace un año, Argentina se transformó en laboratorio mundial de la extrema derecha. Ahora es también un laboratorio de luchas y zona de resistencias.
Asamblea en la facultad de Filosofía y Letras de la UBA. Foto: Izquierda Diario
Asamblea en la facultad de Filosofía y Letras de la UBA. Foto: Izquierda Diario
26 oct 2024 06:00

“Universidad de los trabajadores y, al que no le gusta, ¡se jode, se jode!”. El canto, coreado por miles de estudiantes, es contagioso. Desde hace diez días, resuena en facultades tomadas, reverbera en las calles, se escucha en hospitales en lucha, en las marchas de los jubilados. Llega incluso a lugares impensados, como a la gala de entrega de los premios Martín Fierro al cine argentino, cuando actores y guionistas toman la palabra en apoyo a las universidades públicas. 

Con el triunfo de Javier Milei, hace un año, Argentina se transformó en laboratorio mundial de la extrema derecha. Ahora es también un laboratorio de luchas y zona de resistencias. Con más de 70 facultades ocupadas en todo el país, asambleas y movilizaciones, la rebelión estudiantil contra Javier Milei sigue creciendo. El lunes 21 de octubre y el martes 22, hubo paro nacional docente y se realizaron más de cien clases públicas en la Plaza de Mayo. En los próximos días, están convocadas nuevas asambleas, acciones y asambleas “interfacultades” para profundizar la lucha.

Con más de 70 facultades ocupadas en todo el país, asambleas y movilizaciones, la rebelión estudiantil contra Javier Milei sigue creciendo

Decían que la juventud se había vuelto de derecha. Pero la rebeldía y la radicalidad vienen por la izquierda. “¿A favor de la moción de tomar la facultad?”, grita una estudiante por megáfono. Las manos se levantan, la asamblea decide. Estallan los aplausos. Una postal que hace mucho tiempo no se veía, hoy se multiplica. La tomas y acciones estudiantiles no solo irrumpen en facultades humanísticas y sociales, sino también en las más tradicionales como Medicina, Derecho y Ciencias Exactas.

Incluso la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA) sale a cortar la calle. Magalí Peralta, estudiante de esa facultad y militante de la agrupación En Clave Roja, cuenta que se vienen organizando “desde abajo en grupo de autoconvocados en defensa de la educación pública” donde participan docentes, estudiantes, no docentes y graduados. “En nuestra facultad el 70% de los docentes trabajan de forma gratuita y el 30% que recibe una renta perdió más de la mitad del poder adquisitivo”, explica Magalí. 

El fenómeno no se limita a las grandes universidades de la ciudad de Buenos Aires, La Plata, Córdoba y Rosario, también se ocupan universidades del interior del país. En la Universidad de La Matanza, localidad obrera y popular de la zona oeste del conurbano bonaerense, cerca de mil estudiantes votan en asamblea una ocupación con clases públicas. 

Milei despertó un gigante

Javier Milei vetó una ley aprobada por el Congreso y el Senado destinada a aumentar el financiamiento universitario. El aumento no era mucho, pero permitía actualizar los degradados salarios docentes, que han perdido un 63% de su valor desde la asunción del Gobierno ultraneoliberal. Muchos docentes, con una dedicación de 40 horas semanales, se encuentran bajo la línea de pobreza. 

La única forma de evitar el veto era que el Congreso volviera a ratificar la ley, con el voto positivo de dos tercios de la cámara. Sin embargo, gracias al apoyo de los diputados de la derecha macrista y la colaboración de algunos diputados peronistas y radicales de la “oposición”, Milei logró imponer el veto. Eso no fue todo. En un acto de provocación mayor, Milei salió por TV diciendo que “la universidad pública nacional no le sirve a nadie más que a los hijos de la clase alta y a los hijos de la clase media alta, en un país donde la gran mayoría de los niños son pobres”. Cinismo para tratar de encubrir un plan de destrucción de las universidades públicas. Sus palabras inflamaron el ambiente. Y la llama prendió. 

“¿A favor de la moción de tomar la facultad?”, grita una estudiante por megáfono. Las manos se levantan, la asamblea decide. Estallan los aplausos. Una postal que hace mucho tiempo no se veía, hoy se multiplica

La respuesta no se hizo esperar: con el hashtag #EducacionParaRicos y el lema “No sabía que soy millonario” los estudiantes salieron a responder en redes sociales, mientras se convocaban nuevas asambleas:

“Soy Fernando, Lic. en trabajo social, recibido en la #UNLaM Primera generación universitaria de mi familia. Mi vieja ama de casa y costurera y mi viejo portero. No sabía que era millonario. ¡Viva la lucha del movimiento estudiantil!” 

“Soy Yohia, hija de una trabajadora de comercio y un empleado de mantenimiento. Soy la primera universitaria en mi familia, psicóloga y docente universitaria. No sabía que era millonaria.”

Los datos desmienten los bulos que usa Milei para atacar la educación pública. En Argentina, según una publicación del Ministerio de Educación, el 70% de los ingresantes a la universidad pública son primera generación de estudiantes universitarios. Y de acuerdo con la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), el 40% provienen de los sectores de menores ingresos. Aun así, es un hecho que gran parte de los estudiantes que provienen de sectores más empobrecidos no logran terminar los estudios. Porque, si bien las universidades argentinas mantienen la gratuidad de la enseñanza de grado, es muy difícil estudiar cuando aumentan las tarifas del transporte, se encarecen los alimentos y hay que trabajar y estudiar al mismo tiempo. 

Milei salió por TV diciendo que “la universidad pública no le sirve a nadie más que a los hijos de la clase alta y a los hijos de la clase media alta”, cuando el 70% de los ingresantes son la primera generación de estudiantes universitarios

“La universidad no es una isla, a nosotros también nos afecta el aumento del transporte, el aumento de los alquileres, de los servicios. Todos tenemos alguna abuela que no puede llegar a fin de mes. Por eso queremos seguir con las clases públicas”, comenta Luca Bonfante, estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, militante de la juventud del PTS. Luca explica que “en las clases públicas y asambleas se está discutiendo mucho cómo preparar una nueva marcha federal educativa que sea masiva”. 

“Es fundamental que esa marcha nacional esté acompañada de un paro general. Nosotros pensamos que la CGT tiene que tomar cartas en el asunto, no solo por las universidades, sino por los jubilados, por los trabajadores de la salud”, asegura. 

Una tradición de asambleas y unidad obrero-estudiantil

El movimiento estudiantil en Argentina cuenta con una rica tradición de luchas combativas. En 1918, la lucha por la Reforma Universitaria irrumpe en Córdoba, quebrando el reinado de las camarillas oligárquicas y la Iglesia en las universidades. “Los dolores que nos quedan son las libertades que nos faltan. Creemos no equivocarnos, las resonancias del corazón nos lo advierten: estamos pisando sobre una revolución, estamos viviendo una hora americana”, afirmaba su Manifiesto Liminar. Los ecos de la Revolución rusa llegaban hasta el Conosur. 

Otro hito del movimiento estudiantil tiene lugar con los “azos” desde 1969 en adelante: el Cordobazo, el Rosariazo, el Tucumanazo. Los estudiantes toman universidades y se movilizan por miles. Enfrentan la represión y se radicalizan, confluyendo con los sindicatos más combativos. En Córdoba, ocupan el barrio universitario y forman barricadas junto a la clase trabajadora contra la dictadura de Onganía. En 1971, masivas asambleas aprueban el control estudiantil de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, para que el cuerpo de delegados reorganice junto a los docentes los contenidos de las asignaturas. Incluso en los años 90, en la dura década neoliberal menemista, los estudiantes salieron a luchar, ocupando universidades y coordinándose en “asambleas interfacultades”. En aquel entonces, muchos de quienes estudiábamos en la universidad pública comenzamos a organizarnos y militar en la izquierda. Hoy, una nueva generación -que presencia la decadencia de aquel orden neoliberal- se suma masivamente a esta rebelión estudiantil. 

En esta primavera de resistencias, están encontrando espacios para confluir con las trabajadoras y trabajadores de los hospitales, que se movilizan en defensa de la sanidad pública

Lo más importante es que no están solos. En esta primavera de resistencias, están encontrando espacios para confluir con las trabajadoras y trabajadores de los hospitales, que se movilizan en defensa de la sanidad pública. Con los trabajadores de Aerolíneas Argentinas, que enfrentan la privatización. Con los empleados del metro de Buenos Aires, que abrieron los molinetes para que los estudiantes pudieran ir a la manifestación sin tener que pagar el billete. 

“Venimos discutiendo de cara al presupuesto 2025 que la pelea por el presupuesto de la salud y la educación son dos peleas que van de la mano. Incluso venimos del triunfo del Hospital Bonaparte, un hospital nacional que el gobierno quiso cerrar y que los trabajadores con asambleas y organizándose desde abajo defendieron y lograron que todos sean reincorporados. Es un ejemplo enorme que tenemos que seguir. Y también la unidad con jubilados que trabajaron toda la vida y no se pueden comprar ni los medicamentos”, explica Magalí Peralta. “Tenemos que unirnos para dar todas esas peleas de conjunto y también darle fuertes mensajes al gobierno que logró pasar un veto, pero también logró despertar un movimiento estudiantil que va a enfrentarse a todo su plan de ajuste”. Luca Bonfante apunta en el mismo sentido: “Este movimiento va más allá del reclamo salarial; se trata de discutir qué modelo de país queremos y al servicio de qué ponemos nuestro conocimiento”. 

El movimiento estudiantil y sectores de trabajadores en Argentina están mostrando que es posible un camino de lucha y autoorganización para enfrentar a la extrema derecha y los planes del FMI, muy diferente a la parálisis a la que nos condena el “mal menor”, que solo lleva a un mal peor. Muchas veces en la historia, la irrupción en escena del movimiento estudiantil ha sido el prefacio de cambios profundos y nuevos ciclos de lucha de clases. Los estudiantes de Argentina hoy son ejemplo. Su lucha se suma a quienes en varios países ocuparon campus universitarios en apoyo al pueblo palestino. A los que rechazan el racismo de las extremas derechas. A los miles de jóvenes que luchan por el derecho a la vivienda y contra la precariedad. ¿Será esta rebelión estudiantil el anuncio de algo nuevo? 

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Empresas recuperadas
Natalia Bauni “En este primer año del Gobierno de Javier Milei casi no hubo empresas recuperadas”
Natalia Bauni es coordinadora del Observatorio Social sobre Empresas Recuperadas y Autogestionadas del Instituto Gino Germani de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires.
Religión
Iglesia Católica El viaje de Jorge Bergoglio, el papa que intentó reformar la Iglesia y no lo consiguió
De ser acusado de cómplice con la dictadura argentina, Jorge Bergoglio, ya ungido como papa Francisco, se convirtió en una de las principales voces de denuncia de la ultraderecha, del neoliberalismo y las violaciones de los derechos humanos.
Argentina
Huelga general El movimiento obrero retoma la iniciativa en Argentina
Este 10 de abril los sindicatos llevan a cabo la tercera huelga general contra el Gobierno de Javier Milei. Se trata del sector que más capacidad ha tenido para nuclear a quienes se oponen a la extrema derecha en el país.
Energía
Gran apagón Apagones, energías renovables y estabilidad del sistema eléctrico: tareas pendientes y visos de futuro
Es posible avanzar en la penetración de las renovables, al menos hasta cierto punto, sin perder seguridad en el sistema energético. Este debe modernizarse, descentralizarse y estar planificado por el Estado, opina un experto.
Ley Trans
Ley trans El Constitucional enfrenta el recurso del PP a la ley trans, los colectivos piden evitar la senda antiderechos
El Alto Tribunal deliberó por primera vez sobre este recurso sin llegar aún a ninguna decisión. Plataforma Trans pide que no se sume a la carrera de odio contra las personas trans y avale la norma.
There Is Alternative
There Is Alternative There Is Alternative #2: de supermercados, las cosas del comer y todo lo que no sea Juan Roig
Segundo episodio del podcast There Is Alternative de El Salto Radio sobre el lado oscuro de los supermercados, las grandes superficies y sus alternativas cooperativistas.
Laboral
1º de Mayo Inmigración y sindicatos: derechos universales o derrota colectiva
Los líderes sindicales no pueden ofrecer soluciones realistas para la situación de las personas migrantes, porque parecen asumir la vieja tesis de que la inmigración perjudica a la clase trabajadora en su conjunto.
Cómic
Fabien Toulmé “Hablar de trabajo es menos sexy que hablar de amor o de guerra”
En su libro ‘Trabajar y vivir’, el autor francés recorre distintas realidades reflejando cómo las personas se relacionan con ese mandato ineludible de hacerse con un empleo para sostenerse económicamente.
1 de mayo
1 de mayo Primero de Mayo: contra el militarismo y por la paz universal
Europa reaviva su deriva militarista. Como en 1914, el movimiento obrero se enfrenta al dilema de sumarse al consenso bélico o alzar la voz por la paz.
Empresas recuperadas
Natalia Bauni “En este primer año del Gobierno de Javier Milei casi no hubo empresas recuperadas”
Natalia Bauni es coordinadora del Observatorio Social sobre Empresas Recuperadas y Autogestionadas del Instituto Gino Germani de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires.

Últimas

Eventos
Evento Un Salto al periodismo desde el barrio: acompáñanos en un directo sobre periodismo situado
El Salto organiza un evento centrado en el potencial de los formatos sonoros para transmitir información veraz y fiable de forma cercana. Para hacer periodismo desde el barrio y barrio desde el periodismo.
Eléctricas
Oligopolio eléctrico Sánchez no admite responsabilidades en el apagón mientras sus socios piden nacionalizar la red eléctrica
El presidente del Gobierno señala a los “operadores privados”, entre ellos Red Eléctrica, cuyos últimos dos presidentes vienen del PSOE y cuyo principal accionista es el Estado, con el 20%, seguido por el 5% de Amancio Ortega.
València
València El tejido social presenta su propuesta de reconstrucción tras la dana
Los Comités Locales de Emergencia y Reconstrucción y las asociaciones de víctimas definen los presupuestos de Mazón y Vox como una declaración de guerra.
Más noticias
Galicia
Galicia La Xunta aprobó la celulosa de Altri argumentando que su chimenea de 75 metros sería “icónica”
El Informe de Patrimonio Cultural, favorable a la multinacional, se emitió en base a dos encargos externos, contratados y pagados por la empresa al ex presidente y al actual tesorero de Icomos-España.
Opinión
Opinión Provoquemos la próxima interrupción
Lo que nos resta es gobernar el apagón que habrá de venir, ser la causa colectiva de las próximas interrupciones, aquellas que lleven al fin de este mundo desbocado y sin sentido.
Energía
Energía El gran apagón de abril | El suministro de energía se recupera al 99%
Pedro Sánchez explica que se produjo una “pérdida” del 60% de la electricidad a las 12:33h: “15 gigavatios se han perdido súbitamente del sistema en apenas 5 segundos. Aproximadamente el 60% del sistema eléctrico”.

Recomendadas

Eléctricas
Sistémica eléctrico Del lobby nuclear a la burbuja de las renovables: comienza la pugna por encontrar al culpable del apagón
Un crecimiento desmedido de las renovables guiado por intereses corporativos y una red eléctrica que no ha sido actualizada a la nueva realidad energética son algunas de las causas señaladas del apagón del 28 de abril.
Empresas recuperadas
Natalia Bauni “En este primer año del Gobierno de Javier Milei casi no hubo empresas recuperadas”
Natalia Bauni es coordinadora del Observatorio Social sobre Empresas Recuperadas y Autogestionadas del Instituto Gino Germani de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires.
Senegal
Migraciones El mito de la migración ordenada: la denegación de visados por el Consulado de España en Dakar
Maltrato institucional. Estas dos palabras son las más escuchadas cuando se pregunta a personas descontentas con el Consulado de España en Dakar. Cada vez más personas denuncian denegación de visados que no consideran justificados.