Tecnología
El imperio de los datos

Escándalos como la venta por parte de Facebook de datos que sirvieron a la victoria de Donald Trump o la de Grindr sobre sus usuarios, incluidos los datos sobre si sufrían el virus VIH.  ¿Qué papel juega la minería de datos en todo esto?

Facebook
Mark Zuckerberg frente al logo de la red social Facebook. Imagen de Alessio Jacona.
9 may 2018 06:05

El escándalo de Facebook y Cambridge Analytica se ha convertido, por méritos propios, en el gran hito-fiasco tecnológico de 2018. El robo masivo de datos a 87 millones de usuarios de la red social ha destapado una realidad incontestable: la información que compartimos en internet se ha convertido en moneda de cambio habitual de aplicaciones y empresas tecnológicas. Es su modelo de negocio, sus condiciones de uso implícitas en un contrato que el usuario contrae en el momento en el que completa un formulario de registro.

Cambridge Analytica, la empresa dedicada a la minería de datos que utilizó información robada para influir en el voto de los usuarios durante la campaña presidencial de Donald Trump en 2016, ya ha anunciado su cierre. Su actividad, sin embargo, continuará a través de una extensa red de empresas y afiliados. En el caso de Facebook, tras el vacuo papel de Mark Zuckerberg en forma de carta de disculpa y excursión al Congreso de Estados Unidos, se han puesto en marcha medidas para impedir que terceros puedan volver a acceder de forma masiva a datos de los usuarios.

Estando aún envueltos bajo el manto de la resaca post Facebook, salía a la luz que Grindr, la aplicación de citas gays, había estado compartiendo datos de sus usuarios con terceros, también si eran portadores del VIH. Pasado el ruido que sacudió a Grindr durante unos días, silencio. Hasta el siguiente golpe. Llegados a este punto, en el que el volumen de información con el que se nos bombardea tiende a la desproporción, cabe preguntarse para qué quieren nuestros datos las empresas y qué valor tiene nuestra información personal. Pero, sobre todo, ¿qué papel juega la minería de datos en todo esto?

Francisco Herrera, catedrático de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial en la Universidad de Granada, es uno de los científicos españoles más influyentes de nuestro tiempo en el ámbito de la informática. “La minería de datos o ciencia de datos —el nombre actualmente popularizado para estos algoritmos— se dedica a convertir los datos en conocimiento”, explica. Para ello, se diseñan “algoritmos de aprendizaje que extraen dicho conocimiento desde los datos”. En el caso de Facebook, dice Herrera, se diseñó “un algoritmo que predecía la personalidad de una persona que navega por Facebook con el análisis de solo 70 likes”. Estos algoritmos pueden llegar a conseguir “aprender” la orientación política de los usuarios y que esta sea utilizada para “programar propaganda política capaz de influir en la opinión de los usuarios”.

“Era factible que ocurriese o que esté ocurriendo sin enterarnos con datos de otras redes sociales”, dice Herrera. Nuestro uso continuado de internet y aplicaciones móviles “deja muchísima información que las empresas intentan recolectar para su negocio. Cuando nos bajamos aplicaciones móviles gratis, hemos de pensar que debe existir alguna forma de negocio, no se regalan altruistamente”. El negocio está, explica, “en los datos y rastro que dejamos en su uso”. Ocurre lo mismo cuando usamos otras herramientas, como los buscadores, donde aportamos “información sobre nuestro comportamiento, gustos, compras... Habitualmente para publicidad en la red, pero que igualmente podrían utilizarse con otros objetivos, véase el caso actual de debate”.

Con la llegada del Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) de la Unión Europea, Twitter —que también ha sido recientemente señalada por vender datos a Cambridge Analytica, en este caso públicos—, Instagram o la propia Facebook, han estrenado nuevas políticas de protección de datos. Facebook, además, ha aprovechado la ley europea para lanzar una herramienta que permite al usuario, de manera más intuitiva, elegir qué quiere compartir y qué no en aspectos como política, religión o relaciones personales. Un pequeño paso en la dirección de salida al despiporre en el que la plataforma se ha ido convirtiendo con el paso de los años: una deriva existencial en la que ha olvidado el componente social de sus usuarios para abrazar una cómoda posición política mundial.

Historiales de llamadas, mensajes, geolocalización del usuario incluso cuando está desactivada... La ristra de datos que, poco a poco, hemos ido constatando que Google y compañía almacenan sobre nosotros es inmensa. Gigas de información con los que ellos hacen millones en publicidad y lo que surja, y que nosotros, en última instancia, permitimos que se almacenen a golpe de click. “Siempre que instalamos una aplicación en nuestro móvil o en un ordenador estamos aceptando las condiciones —letra pequeña de los contratos que no solemos leer— y con ello estamos permitiendo el almacenamiento y procesamiento de nuestros datos”, apunta Herrera.

Y, entonces, ¿qué? Pese a la comentada pérdida de confianza en Facebook, la realidad —según datos de SimilarWeb, empresa dedicada a medir audiencias globales— es que el uso de la red social por parte de sus usuarios no se ha movido un ápice. En declaraciones de Gitit Greenberg, responsable de la firma, “es importante separar la frustración generada del impacto real en el uso de Facebook”. Palabras que contrastan con el hecho de que, asumido o no por la generación actual, el acceso a redes sociales es un privilegio. Lo que nos aporta socialmente es, al menos perceptiblemente, demasiado valioso. En el fondo lo sabemos, no nos importa demasiado que nuestros datos estén expuestos. “Yo no me preocupo por ello, soy consciente de que es el precio que pago por el uso de herramientas gratuitas de internet: buscadores, acceso a prensa, redes sociales...”, dice Herrera.

Aunque en los últimos días se está hablando de un futuro en el que las redes sociales puedan ofrecer versiones de pago libres de anuncios, la idea suena descabellada si tenemos en cuenta la férrea competencia entre servicios y el modelo de negocio bajo el que se sustentan. El propio Mark Zuckerberg se refería a ello en una reciente entrevista paraThe New York Times: “Nuestra misión es construir una comunidad para todo el mundo. Y una parte muy importante de eso es crear un servicio que las personas puedan pagar. Mucha gente, una vez que superados los primeros mil millones de personas [usuarios potenciales de la red social], no puede permitirse pagar mucho. Por tanto, ofrecerlo de forma gratuita y tener un modelo comercial respaldado por publicidad es algo clave”.

A pesar de los movimientos en aras de la privacidad, es inevitable pensar en el debate que se cierne hoy sobre Facebook y otras aplicaciones como el inicio de una carrera que enfrentará a gobiernos, empresas tecnológicas y usuarios. Y, mientras los mea culpa se convierten, cada vez más, en simples efectos colaterales, conviene empezar a hablar de la (re)educación de unos usuarios que deben ser conscientes del uso, no siempre bajo unas connotaciones negativas, que se hace de sus datos en internet. “El futuro nos deparará más y más algoritmos que permitirán conocer mejor nuestro comportamiento, gustos, y que se adelantarán a ellos”, vaticina Herrera, que abre la puerta a nuevos casos como el de Cambridge Analytica: “Ya ha pasado una vez, ¿por qué no puede volver a pasar?”.

Informar de un error
Es necesario tener cuenta y acceder a ella para poder hacer envíos. Regístrate. Entra en tu cuenta.

Relacionadas

Instituciones culturales
Real Decreto Ley El BOE nombra varios “acontecimientos de excepcional interés público” y los patrocinadores se frotan las manos
El nombramiento como acontecimientos de excepcional interés público concede beneficios fiscales a patrocinadores, donantes y mecenas de eventos como el BBK Live o el Barcelona Mobile World Capital.
Tecnología
Tecnología ¿A qué se le puede llamar tecnología para el bien común?
Entre promesas de progreso y riesgos en su gobernanza se plantea una pregunta crucial: ¿qué hace que una tecnología sea realmente para el bien común?
Opinión
Nuevas tecnologías Inteligencia artificial: cómo educar para los retos del futuro
Cualquier tecnología que llegue al ámbito educativo se despliega inexorablemente sobre las desigualdades que el propio sistema genera, aumentándolas. Si lo que se produce es una revolución tecnológica, como por ejemplo la IA (Inteligencia artificial)
#15779
9/5/2018 10:42

CIA Corp.

5
1
LGTBIAQ+
Mana Muscarsel “La amistad da más juego para salir de la lógica de la familia porque tiene menos reglas"
La autora y psicóloga argentina pone en valor la amistad frente a los modelos relacionales centrados en la pareja y la familia. Tampoco le interesa la familia elegida: “Marca una línea muy clara entre lo que pertenece y lo que no”.
Río Arriba
Río Arriba Javier Guzmán: “Desde la izquierda falta la visión de que el derecho a la alimentación es un tema básico”
Nueva entrevista de Río Arriba en formato podcast donde hablamos de soberanía alimentaria, políticas públicas relacionadas con la alimentación, tratados de libre comercio y sus efectos sobre la agricultura, ganadería y alimentación.
Análisis
Análisis La propuesta abolicionista de Igualdad, un intento más de regular el cuerpo de las trabajadoras sexu
La figura de la prostituta no es solo una categoría laboral o una práctica sexual, sino que es uno de los dispositivos más antiguos y eficaces del patriarcado para disciplinar a todas las mujeres.
La vida y ya
La vida y ya La manera natural
Si te alejas un poco y miras a todo ese grupo desde fuera, podrías llegar a pensar que esa forma de construir vidas en común es un modo de resistir.
Gobierno de coalición
Gobierno de coalición Sánchez resiste, los aliados se ilusionan y Feijóo se llena de barro
Se apaga el ciclo político antes del receso de verano con un líder del PSOE que ve la luz al final del túnel, a pesar del desplome en las encuestas.

Últimas

Pesca
Pesca ¿Sostenible para quién? Detrás de las bambalinas del acuerdo de pesca sostenible entre la UE y Madagascar
Gracias a un acuerdo pesquero con la Unión Europea, en 2023 Madagascar autorizó el acceso a sus aguas territoriales a 65 barcos europeos. Aunque el acuerdo promueve una pesca “sostenible”, las técnicas empleadas agravan la crisis ecológica.
Salud mental
Salud mental Familia y escuela son los principales factores de protección para la salud mental de adolescentes LGTBI+
Las personas con una orientación sexual divergente con la heterosexualidad muestran mayor grado de depresión e ideación suicida que las heterosexuales. Los vínculos son clave para mitigar los riesgos, según un estudio.
Río Arriba
Río Arriba Javier Guzmán: “Desde la izquierda falta la visión de que el derecho a la alimentación es un tema básico”
Nueva entrevista de Río Arriba en formato podcast donde hablamos de soberanía alimentaria, políticas públicas relacionadas con la alimentación, tratados de libre comercio y sus efectos sobre la agricultura, ganadería y alimentación.
Países emergentes
Cumbre de Brasil BRICS en la encrucijada: la cumbre que expuso su poder (y sus grietas)
Los próximos cinco años constituyen una ventana crítica para los BRICS, donde su hoja de ruta post-Río despliega ambiciones transformadoras cargadas de fragilidad.
Partidos políticos
Partidos políticos La extrema derecha se dispara en un CIS en el que el PSOE acusa el golpe del Caso Koldo
El barómetro mensual señala un empate virtual entre PSOE y Partido Popular y anticipa un crecimiento de Vox. El CIS no pregunta por el caso Koldo, pero éste se hace notar en el resultado.
Justicia
Juana rivas La defensa de Juana Rivas pide a España escuchar al menor ante la contradicción de la justicia italiana
La defensa de Juana Rivas alerta sobre una “grave contradicción” en el proceso judicial italiano y pide a los tribunales españoles que escuchen al hijo menor para evitar contravenir los principios fundamentales de protección a la infancia.

Recomendadas

Barcelona
Chatarreros El reciclaje invisible: la relación entre la chatarra y la ciudad de Barcelona
La red de reciclaje en Barcelona es de una complejidad casi hermética, más aún si hablamos de los recicladores informales, más conocidos como chatarreros. Salimos a la calle a entender una economía sumergida que está a la vista de todos.
Medios de comunicación
Medios de comunicación El futuro del periodismo no lo está escribiendo una máquina
El periodista Pablo Mancini, estratega dentro de The Washington Post, defiende una profesión aquejada de múltiples problemas. El primero, y más crucial, la deserción de miles de personas que ya no quieren estar informadas.
Entrevista La Poderío
Andalucía Virginia Piña: “Con la Guerra Civil y su posguerra intentaron aniquilar nuestra conciencia”
Quien tiene el poder, tiene los recursos, y quien tiene los recursos también tiene la palabra. Virginia Piña (Jaén, 1988) la lleva tomando en los últimos seis años, dándole forma para hablar de figuras clave en la historia de las mujeres en Andalucía
Laboral
Laboral Jornadas de 50 horas semanales haciendo tareas de categoría superior: así se trabaja en hostelería
Es uno de los sectores con más sanciones e intervenciones de la Inspección de Trabajo, con más de 12.000 trabajadores extranjeros aflorados en las intervenciones y que cuenta con el 21% de las sanciones emitidas por este organismo.